Octubre 3, el cumpleaños de estrellita, hoy. Y por supuesto que eso fue lo primero que pensé al despertarme.

Tomé mi celular, a pesar de que eran las 4:00 de la mañana, busqué el teléfono de Amber y escribí.

<<¿Sabías qué? Un día como hoy, hace diecisiete años nació una hermosa estrellita de ojos verdes>>, <<Feliz cumpleaños, enana roja>>.

Estaba muy seguro de que ella no iba a contestar, así que me dispuse a bañarme, el agua cayó congelada haciéndome soltar un quejido, la temperatura ambiente era de -8 grados con el agua me daría hipotermia.

Ignore el frío de mi cuerpo para pensar en los que le haría a Amber, una fiesta, no porque a ella no le gustaban, un pastel sería muy simple al igual que ropa y un libro le encantaría aunque sería poco original, igual le daría uno.

La idea perfecta vino a mi mente, sería por así decirlo una cita sin que ella sepa que es una cita, la llevaría al patio de mi casa, es un lugar muy lindo, le regalaría un libro y ella me lo leería a la luz de la luna.

Tiempo después terminé de arreglarme para ir a Harrow en mi skateboard, siempre que estaba en mi patineta me gustaba escuchar música, la música siempre suena mejor así, a través de mis audífonos sonó Yellow de Coldplay, siempre ha sido mi canción preferida, de alguna forma me recordaba a estrellita. Quizá hoy se la dedicase.

Me quedé en la entrada de Harrow, quería ser el primero que la viese entrar.

Vi a su pequeño cuerpo llegar a la entrada, se veía hermosa como siempre.

-Estrellita! - le canturreé al ella acercarse - Happy birthday to you, happy birthday to you, happy birthday, happy birthday ... Happy birthday to you - empece a cantarle.

-Hola Charles - me saludó con su tierna sonrisa.

-Feliz cumpleaños, enana roja.

-Gracias, colmillos.

Era obvio que no olvidaría el apodo, me había expuesto un poco, pero me he dado cuenta de que podía confiar en ella, pronto le diría mi secreto.

-¿Qué tienes planeado hacer en tu cumpleaños? - le pregunté mientras caminábamos.

-Tendré un maratón de lectura de 5 horas seguidas.

-No puedes pasar tu cumpleaños tan aburrido, ¿Puedes venir a mi casa?

-Sí, ¿Cuál es el plan?

-En mi familia, cuando es un día especial, vemos constelaciones.

-Suena muy romántico.

-Es tu culpa, Ambie, me has vuelto demasiado cursi - rodó los ojos como si no hubiera caso.

-Sabes que es irónico? - preguntó ella de pronto -, Que nunca te he pedido la luna, y aun así tú me das todo el sistema solar.

Lo ha dicho, mis mejillas están sonrojadas al igual que las de ella, es tan hermosa.

-Estrellita, si es por ti te doy toda la galaxia - le dije sin pensarlo -.

El resto de las clases transcurren normalmente.

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Espero a Estrellita para que guarde sus cosas y nos dirijamos a mi casa, pasa por mi lado y yo aprovecho para tomar su mano, es tan pequeña comparada a la mía, sus mejillas se sonrojan como era de esperarse.

-Tus manos son lindas - le murmuró.

-Pero me sudan - me he dado cuenta.

-Las mías igual, así que seremos un perfecto manojo de manos sudorosas - le digo mientras caminamos.

Tras unos minutos de caminata encontramos el parque en donde le dije por primera vez que me gustaba.

-¿Lo recuerdas? - me pregunta al notar que mi vista se pierde en un punto exacto del parque.

-En serio crees que no lo haría, fue la primera vez que dije que te quería, además ese día fue el primer "Estrellita" que te dije.

-¿Desde hace cuánto te gusto? - me pregunto con su mano entrelazada a la mía.

-Siendo sincero... Desde la primera vez que te vi - sus mejillas se pusieron rojas -, y a ti, ¿Desde hace cuánto te gusto?

-Cómo puedes asumir que me gustas, puede gustarme alguien más o puedo estar saliendo con alguien.

-Entonces porque entrelazas tu mano a la mía, y sabes, creo que le eres infiel a Jack Ross conmigo - mueve su mano como si fuera a retirarla, pero la sostengo y le doy un pequeño beso en la muñeca.

-De acuerdo, me gustas, no sé desde hace cuánto exactamente, pero también me gustan los Cash.

-Tengo una competencia dura.

-Y ni siquiera te he hablado de Rhys Baker, Christopher Morgan, Félix Frederick, Luke Howland, Harry Jefferson, los Hidalgo, Jared Garber, Damián Fox o Poe Verne.

-La tengo difícil, pero luchare.

Llegamos a mi casa, mierda, no había caído en cuenta de que mi tío estaba aquí.

Saludo a mi madre.

-Hola señora Spooner - la saluda cordialmente Amber.

-Oh, hola, tú debes ser Amber, Charles habla muy bien de ti - mi madre me da una mirada insinuante.

Guio a Amber al patio a esperar a que anochezca, para lo cual falta mucho.

-Tú dijiste que habías planeado un maratón de lectura, pues haremos tu maratón de lectura, en ese columpio - lo señalo colgando de un gran árbol.

-Pero solo hay uno.

-Esa es la parte interesante, te sentarás sobre mí.

-¿Y si se cae?

-No lo hará, mi tío lo ha probado, es bastante pesado, si el columpio lo resistió a él nos soportara a nosotros - hago una pausa recordando que le he comprado algo - Te compre un regalo, iré a buscarlo.

Me dirijo hacia mi habitación, buscando el libro y vuelvo rápidamente donde estrellita.

Se lo doy y una hermosa sonrisa aparece en su rostro.

-Gracias, me encanta.

Ella huele las hojas del libro, mientras se dirige hacia mí, sentándose sobre mi regazo.

-En una noche fría de abril, decidí terminar con mi existencia.

>>Muchos iban a juzgarme por lo que iba a hacer ... - comenzó a leerme emocionada.

Continuó la lectura hasta el atardecer, justo cuando las primeras estrellas comenzaban a asomarse en el colorido cielo.

-Mira, estrellita, la primera estrella.

-Debe ser venus, es muy brillante.

-Es muy linda, aunque no tan linda como tú - le dije haciéndola sonrojar -. Sentémonos en el césped.

Ella se levantó y se acostó en frente del árbol, la seguí recostándome a su lado, busqué música y nos acomodamos para ver el cielo estrellado. Comenzamos a ver constelaciones, Amber identificó muchas, mientras que yo no pasaba de lo básico.

Tiempo después empezó a sonar yellow, es impresionante lo mucho que me recuerda a Amber.

-Te la dedico - le dije a Amber cuando empezaron a sonar los primeros acordes de la guitarra -. Look at the stars, Look how they shine for you - commence a tararear.

-Es muy linda.

-Tú eres la linda, estrellita.

-Elsker deg - me dijo en un noruego mal pronunciado, pero igual logro que me sonrojara al igual que ella.

Ambie apoyó su cabeza en mi hombro, mientras yo acariciaba su espalda.

-"Estoy convencido que cuando crees tener todas las respuestas, la noche te cambia todas las preguntas" - dijo un rato después citando a Charlie Brown.

-¿Qué preguntas te ha generado esta vez?

-¿Cuál es tu secreto? - claro que no se rendiría fácilmente.

-Quizá la noche te deba cambiar la pregunta.

-No si me das la respuesta - insistió.

-Quizá te lo diga el día que te bese por primera vez.

Quise molestarla un poco, así que me acerque a ella hasta que nuestras narices se chocaron y nuestra respiración se revolvió, ella entreabrió los labios y cerró los ojos, era demasiado tentador tenerla tan cerca de mí, pero bese su mejilla muy cerca a su labio y me separe rápidamente o terminaría besándola.

-Charles, eres un tramposo - dijo al darse cuenta de que no la besaría.

-Entonces, ¿Querías besarme? - le pregunté lobuno haciendo que sus mejillas se enrojecieran.

-No.

-¿No?

-Solo quería saber tu secreto.

-Pues, yo si quiero besarte - ella evidentemente se puso como un tomate.

Su teléfono comenzó a sonar, era su madre pidiéndole que volviera a casa.

-Charles, debo irme - me dijo besando mi mejilla -. Gracias.

-Adiós, estrellita.

Cuando oí la puerta cerrarse, recogí mi teléfono para ir a mi habitación, pero antes de que pudiera hacerlo mi tío apareció furioso.

-¿Quién era ella? - preguntó enojado.

-Una amiga - le respondí frío.

-No andes trayendo a personas a la casa, pueden descubrir nuestro secreto.

-Era su cumpleaños.

-¿Estás enamorado de ella? - pregunto negando con la cabeza.

-No - traté de sonar lo más convincente posible.

-No me mientas, casi la besas y estaba encima de ti - eso era un buen punto -. Controla tus hormonas o tendrás que alejarte de ella. Recuerda que lo más importante es...

-La familia - respondí monótonamente.

-Exacto - dijo mientras se alejaba.

Quien se creía que era yo no me iba a alejar de Amber y lo que sentía por ella no eran solo hormonas, era amor, y la seguiría amando aun así a él no le gustara la idea.

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