~Opción elegida: Renuncia~

Observar los gestos y lamentos de ambos countrys deformados son suficientes para que, tanto México como tu puedan comprender la razón de que Canadá no quiera que lo toquen. La misma explicación de las criaturas monstruosas que los han estado persiguiendo

Tocarlos, significara unirse a ellos, fusionarse y volverse uno en una masa amorfa que siempre se lamenta y suplica por la muerte. Mientras tú te mantienes pensando lo que esto podría conllevar y una forma de ayudar a los countrys fusionados que parecían sufrir, México, sin previo aviso, se pone en pie de un modo lento y calmo que capta tu atención al ser diferente a su manera de actuar en todo este rato

—Le preguntas a México ¿Qué es lo que piensas hacer? —

Por desgracia, no hay respuesta de su parte, solo silencios, solo una mirada apenada hacia los countrys y entonces, un avanzar despacio, tranquilo, gentil. Volviendo a colocar una rodilla en el suelo y sonriendo con amabilidad a los countrys delante suyo que se lamentan. Canadá, quien parecía ser el único lo suficiente consciente para saber lo que ocurría a su alrededor, mira con su único ojo a México quien, cada vez, se iba acercando mas a ellos

—No —jadeo preocupado el canadiense— nosotros... dañar! —trata de hablar apresurado pero, entre sus propios gemidos de dolor y gruñidos, apenas podía articular las palabras sin tartamudeos o arrastrar letras

—No... vengas —repite también Rusia con un gesto preocupado, sin embargo, aunque tú también le adviertes al mexicano que no se acerque más o podría pasarle lo mismo, el latino, gira a ver hacia la pantalla con una sonrisa

Y sientes que, lo que sea que esté pensando ese latino... no va a acabar bien para nadie...

Le pides otra vez, que reconsidere lo que sea que quiera hacer, que tenían que salir de este infierno juntos. Pero México no dice nada, solo te sonríe con amabilidad, luego, negando simplemente con la cabeza

—Tu puedes volver sobre tus pasos —te dice— "reiniciar" esta historia tantas veces desees —continua con un gesto serio— pero yo no los puedo abandonar

—Le dices a México que es absurdo... ellos no podrían ser los countrys reales, debían de ser también clones blancos que han conseguido imitar las banderas de sus amigos—

Pero México solo suspira, volviendo la mirada hacia la quimera que entre sollozos, ha llegado a una esquina sin escapatoria

—Jugador —te interrumpe— les prometí que no los abandonaría

—... Le preguntas a México por sus siguientes plantes—

México solo sonríe suavemente, estirando sus brazos a la criatura que continua intentando escapar del latino

—Renuncio —susurra, alcanzando el cuello de ambos countrys y abrazando a ambos con cariño. Canadá intenta luchar para alejar a México, pero contrario a ello. Rusia solo lo aferra entre lágrimas y quejidos de dolor. Canadá grita que se aleje, que no debe acabar así... pero México no responde— ya no importa —susurra mientras da palmadas gentiles a las cabezas de ambos countrys— no los abandonare, así que ya no importa lo demás

Finaliza, mientras, entre quejidos de dolor, Canadá, quien había tratado de alejar a México, se frena, las lagrimas aumentan en su mirada, sus gemidos de dolor se vuelven llantos descontrolados, Rusia también aferra a México con más fuerza, llamándolo suavemente y, mientras el dolor se vuelve calma para Canadá y Rusia, México, aun con sus ojos cerrados con tranquilidad, lentamente es absorbido por la carne de ambos countrys

A ti, solo te toca observar jugador, como el cuerpo ahora amorfo de tres countrys se deforma aun más, más allá de lo que las palabras puedan expresar, mas allá de tus peores pesadillas, una criatura llena de dolor y culpas, pero aliviada por un acto desinteresado y sin ápice de esperanza. Solo el calmo sentimiento de resignación para aquellos que han perdido la esperanza y la fe

Una criatura de tres cabezas, con dos brazos que sobresalen del centro del pecho que ahora comparten como uno solo, las palmas (una verde y otra roja) palmean suavemente las cabezas y mejillas de los countrys a sus lados, la cabeza del centro, la de México, yace con sus ojos cerrados en un gesto tranquilo, susurrando suaves murmullos de calma y pequeñas canciones de cuna para mantener calmados a las otras dos cabezas que ahora, entre lagrimas, su gesto se estabiliza y lentamente, queda "dormido"

Al parecer... es hora de volver al inicio ¿cierto?

Final 17 "Resignación"

Aun dentro de la mansión, en una zona que parece más un laboratorio científico, atrapado dentro de una capsula y flotando en medio de líquidos, se encuentra la criatura quimérica que posee el rostro de Canadá, México y Rusia, con sus ojos cerrados y sin vida, flotando mientras otra persona le observa con un par de pasos de distancia

—Es increíble que haya acabado de ese modo —se escucha una voz y la persona que miraba la capsula gira su vista hacia quien apenas va entrando

—Sabíamos como era su personalidad— vuelve la mirada aquel que antes veía la capsula— de hecho —susurra con una media sonrisa divertida— no me sorprenden sus acciones

FIN