
Si tan solo yo...
"Hey...
Se que no nos hemos visto el uno al otro...
O hablado entre sí en un tiempo... Pero quiero que sepas que he estado pensando mucho últimamente y quiero que sepas que te extraño.
No que me arrepiento de lo que pasó y que quiero verte otra vez. Solo te extraño.
Solo te extraño.
Es tan extraño pensar que alguien que yo conocía tan bien es ahora un completo desconocido para mi. Que a veces me lleva días enteros pensar en vos. La mayoría de las veces me obligo a olvidar, porque, es fácil, pero entonces encuentro algo... Una foto... Un regalo... Cartas de amor estupidas que solíamos darnos el uno al otro.
Todo el peso de lo que está perdido se derrumba debajo de mi.
Una parte de mi quiere verte de nuevo... Abrazarte de nuevo... Besarte de nuevo.
Pero todos esos sentimientos se convierten en sentimientos vacios.
Ahora cuando miro hacia atrás recuerdo que el amor no es siempre lo que parece. Es solo tan fácil de olvidar.
Pero este no es un arrepentimiento. Tenemos nuestras razones para haberlo terminado y eran tan válidas como siempre. Pero volviendo al inicio, no necesitábamos ninguna razón para enamorarnos, solo lo hicimos.
Las razones llegaron al final... Y desde entonces todo ha necesitado de razones y creo que esta bien. Supongo que quiere decir que algún día encontraré a alguien al que no tendré que decirle adiós.
Pero, una parte de mi simplemente extraña amar a alguien y tener a alguien que te ame de vuelta. Eso es todo.
Supongo que lo que estoy diciendo es que... Espero que las cosas vayan bien con vos.
Espero que todo este bien...
Espero que todo este bien. Espero que hayas encontrado un amor, que sea todo lo que el nuestro no pudo ser. Pero, una pequeña parte de mi espera que aun recuerdes como era todo antes de todas las razones... Y que... Me extrañes también.
M.S"
Metí la carta en el sobre y la metí en uno de los bolsillos de mi chaqueta.
Respiré profundo y me fui en dirección a tu casa. Planeaba meter la carta en tu buzón y luego desaparecer definitivamente de tu vida.
Creo que son cerca de las 7:30 de la mañana. Es extraño que me encuentre despierto a esta hora pero desde que nos separamos siempre despierto temprano y me siento en el pasillo de mi apartamento a esperar a ver si regresas.
Se que nunca lo harás pero una pequeña chispa de esperanza sigue viva en mi alma y me dice que regresaras.
Estoy a metros de tu hogar. Cada paso que doy me hace sentirme débil y los pies me pesan, como si en cada uno tuviera amarrada una gran bolsa de rocas que no me deja caminar a un ritmo normal.
Casi llego. ¿A cuanto estoy? Tal vez dos o tres metros.
Diviso la puerta de entrada. Mis pulmones juntan todo el aire que pueden y mis pies vuelven a ser livianos.
Meto la mano en mi bolsillo y saco aquella carta, la aprieto muy fuerte y me decido mas que nunca a avanzar.
Listo. Estoy frente a tu puerta. Voy a dejar esta carta deslizandola por ella pero escucho que las llaves se mueven en la cerradura.
¡Carajo! ¡No puedo dejar que me veas ni puedo permitirme verte! Eso me desestabilizaría de una manera increíble y no podría jamás dejarte atrás.
Tan rápido como llegue, me voy. Aún tengo ese papel conmigo. El dudar tanto me impidió que te la entregara a tiempo.
Me escondo detrás de unos arbustos en la vereda de enfrente.
Pero no eres tu quien sale, si no que es ese pelirrojo imbécil y bueno para nada que ahora vive contigo.
Tu dices que es solo tu amigo y que estas viviendo con él porque no tenías a donde ir cuando nos separamos.
Desearía creerte pero no puedo. Se que debe haber algo mas.
Si no tenías a donde ir ¿Porqué no me pediste a mi que me fuera? Que yo si tenía un lugar donde marcharme y tu te quedabas en ese apartamento que tantos años compartimos.
Me gusta creer que fuiste tu quien se marcho, por que no soportas la idea de que viva con Kanon, que por eso me dejaste a mi vivir solo allí.
Pero tu te fuiste a vivir con Surt y ahora soy yo quien no acepta y le duele verte vivir con alguien mas.
Demonios. Esto es un enredo y eso lo hace una puta mierda.
Me extraña esta situación. Él sale solo. Ni rastros de ti. Su mirada es triste y baja. Tal vez las cosas contigo van mal y eso me da alegría. ¿Volverás a mi lado si con él se termina? Siempre te estaré esperando para que lo sepas.
Se queda mirándose al reflejó en la ventanilla de su coche. Se seca algunas lágrimas y se sube. Segundos después enciende el motor y se marcha.
No se porque lo hice... No lo pensé pero creo que lo volvería a hacer.
Corrí hacia la entrada y empecé a tocar como loco el timbre. También golpee la puerta pero no me respondías.
¿Acaso sabes que soy yo y por eso no quieres atenderme?
Insisto e insisto. Nadie sale a recibirme.
Listo. Me rindo. Te entiendo.
Entiendo que no quieras verme ni escucharme. Solo me marcharé para dejarte tranquilo. Ni siquiera te dejaré estas palabras que te he dedicado.
-Si buscas a los muchachos que viven aquí, no se encuentran.
La voz suave de una chica, que parece no tener mas de 20 años interrumpe mis pensamientos.
-Me doy cuenta. ¿Sabes cuando volverán?
¿Porque pregunto eso? Si tu no vas a querer reencontrarte conmigo y además en unas horas, ya estaré en camino de regreso a las Islas Milo.
-Pues Surt, el pelirrojo, no vuelve sino hasta bien entrada la noche y hasta algunas veces no regresa en uno o dos días.
¿Qué? ¿Porque te deja solo tanto tiempo? Tu detestas sentirte solo aunque no lo demuestres y digas que te da igual, te conozco lo suficiente como para saber que no te gusta pasar tanto tiempo solo.
-¿Y Camus?- Necesito saber de ti. Aunque sea de alguien desconocido, pero necesito saber algo.
-¿El chico francés? Él esta en el hospital.
Me falta el aire. El cuerpo me tiembla y siento como mi pulso se acelera por la velocidad increíble que tomó mi corazón en apenas segundos.
¿Estás en el hospital? ¿Pero cómo? ¿Cuándo paso?
-¿Qué le sucedió?- Trató de sonar tranquilo pero mi voz me delata.
Esa muchacha me mira extraño. Supongo que cree que soy un loco acosador.
Para que lo sepas niña, no soy ningún demente. Soy el mejor amigo y quien fue su gran amor alguna vez.
-Camus es mi mejor amigo. Hace unos meses no nos veiamos porque yo estaba en Grecia.- Gran mentira, siempre he estado aquí pero debo saber que te paso. -Volví ayer y quería venir a verlo ya que hace bastante no sabia de él.
Al parecer me creyó, suavizó su mirada y me sonrió.
-Desde hace unos dos meses. Una tarde una ambulancia se lo llevó y nadie sabe que fue lo que paso. Lo sacaron inconsciente de aqui.
No recuerdo que fue lo que pasó luego, solo se que le agradecí y me fui corriendo por donde vine pero en dirección al hospital de la ciudad.
Corrí como jamás lo había hecho, estaba totalmente fuera de mi mismo, la gente me miraba de forma extraña en la calle pero no les prestaba atención. No me interesaba lo que unos cuantos imbéciles tenían para decir de mi. Lo único que siempre me importo fue tu opinión.
Cuando llegue, desesperado me dirigí a la recepción, la mujer que estaba allí no quería decirme nada ya que supuestamente solo daban información de pacientes en tu estado solo a familares.
-¡Soy su novio maldita sea!
-Señor calmese o llamaré a seguridad.
-¡No me calmare hasta que me digan donde esta Camus Aquaris!
Estaba al borde del llanto, no podía creer que me negaran información acerca de ti. ¿Tan malo es tu estado?
Iba a protestar nuevamente cuando siento que alguien me toma bruscamente del brazo y me voltea, lo próximo que siento es un fuerte dolor en mi nariz al momento en que caigo al suelo.
Levanto la mirada y tenía al idiota de Surt con su puño levantado llenó de mi sangre.
-¡Es tu culpa! ¡Que descaro el tuyo de venir aquí cuando Camus esta como esta por tu culpa!
Me puse de pie y tuve unas inmensas ganas de devolverle el golpe pero me contuve, ya que si lo hacia iban a sacarnos a ambos y yo no podía permitirlo. Tenía que verte y saber como estabas.
-¿¡Porque mierda dices esas cosas!?? Hace mas de 6 meses que no se nada de él.
-Tu tal vez no pero él si.
Me dejó desconcertado tales palabras. ¿A que demonios se refería? ¿Acaso Camus me buscó, no me encontró y eso lo deprimió?
-El cumpleaños de los Gemini...- Solo me dijo eso y no pude evitar sentirme una gran mierda.
La noche que Saga y Kanon cumplieron 26, hicieron una fiesta en un local exclusivo y el menor de los gemelos me invito, yo accedí sin problemas ya que necesitaba despejar mi mente de la reciente ruptura con Camus, que había pasado solo 3 semanas atrás.
Lo que yo no supe, si no hasta que llegue, era que Saga había invitado a Camus y él llevó a Surt.
La envidia y el dolor me invadió al verlos bailar muy juntos y divertidos. Parecía que de verdad era feliz sin mi, por lo que para mitigar un poco el dolor que me dio esa imagen comencé a beber sin parar, me junte con Kanon y pase toda la noche a su lado... Tan juntos estábamos que termine a los besos con el menor de los Gemini.
Fueron solo besos debo aclarar. Nada mas.
-Cuando Camus te vio ya entrada la madrugada quiso acercarse y tratar de arreglar todo contigo porque de verdad te extrañaba mucho. Estuvo toda la noche persiguiendote y buscando el momento indicado para abordarte. Por un momento dudo ya que le dolía mucho verte tan borracho y estaba seguro que se debía a su presencia allí, pero tenía determinación pura de rescatarte e irse de la fiesta contigo, tomado de tu mano. Cuando te desapareciste de su vista se desesperó, le preguntó a Saga si te había visto y le dijo que te había visto fuera del local con Kanon, fue hasta donde le habían indicado... Pero te vio besándote con él y se destrozó absolutamente todo en su interior.
No podía creerlo... Camus me vio... ¡Pero todo era un error! Yo no tenía ni tengo nada con Kanon Gemini. Es solo un amigo.
-¿Qué le pasó?
-Estuvo mucho tiempo encerrado, no quería ni salir de su habitación para comer. Un día me canse y force su puerta pero ya lo había hecho. Lo encontré en un charco de su sangre y con dos frascos de pastillas para dormir, completamente vacios.
-¿Y esta aquí desde entonces?
-Si y aún no ha reaccionado. Dice tu nombre dormido pero no despierta.
-Necesito verlo.
-¿Que te hace pensar que te permitiré?
-Surt por favor.- Me arrodillé frente a él, si debía rogarle lo haría, pero necesitaba ver a mi amado francés. -Necesito verlo, necesito pedirle perdón aunque no me escuche. Necesito decirle que lo amo y que lo siento.
El odio y la pena se mezclaban en sus ojos. Me miró largo rato para luego ponerse de pie y comenzar a caminar. Me llevó hasta el final del pasillo y abrió la última puerta del lado izquierdo.
-Escucha Milo... Todos los médicos que lo vieron coinciden en que, aunque sacaron toda la droga de su organismo, no hay mucho mas por hacer. Todo depende de él pero no se ve nada favorable en el horizonte. Solo un milagro podrá sacarlo de aqui así que no te pido sino que te exijo que hagas dicho milagro.
Solo le asentí y entre a la habitación, él cerró detrás de mi y nos dejó a solas.
Solo pude llorar cuando te vi.
Tus brazos estaban totalmente vendados. Tenías intravenosas en cada mano pero una de ellas te daba dos sueros distintos y la otra te alimentaba.
A tu pecho estaban conectados varios electrodos que marcaban los latidos de tu corazón a la máquina a un lado.
Tenías un tubo metido en tu boca que te ayudaba a respirar.
-Camie...- Me acerque a tu lado y tome con mucho cuidado tu mano. -Perdóname... Si yo tan solo... Si tan solo hubiese sabido que querías arreglar todo conmigo yo no hubiese hecho ninguna de las idioteces que esa noche lleve adelante. Te hubiese tomado de la mano y hubiese corrido contigo lejos de allí. Te hubiese secuestrado y te hubiese llevado a las Islas Milo conmigo como siempre te prometí y jamás te cumplí.
Las lágrimas caían sin control por mi rostro y chocaban con la piel de tus manos que estaban blancas y frías.
Me levante y bese tu frente. Me arroje a llorar sin control en tu pecho.
-¡Perdóname! ¡Soy un idiota! ¡Te amo mas que a mi vida misma y mira lo que te he hecho!- Levante el rostro y mire tu boca, levemente separada por ese respirador. -Tus labios mon amour, están morados y sin vida... Debí haberte besado mas y con mucho mas amor mientras estaban rojos... No mueras Camus... Por favor te lo pido... No te mueras y te vayas por siempre de mi.
Seguí llorando largo rato sobre ti... Hasta que sentí como levemente mi cabello era acariciado.
La esperanza y la alegría se apoderaron de mi un momento.
Levante mi vista y estabas allí... Con tus ojos levemente abiertos, como si te doliera tenerlos abiertos.
Me levante lentamente y tu, de esa misma forma, quitaste tu mano de mi cabeza y la llevaste a tu boca.
Totalmente fuera de ti mismo arrancaste el respirador de tu boca, yo me espante al ver como escupias sangre por esa idiotez que hiciste.
-Cam ¿Porque? ¿Que hiciste?- Te lo preguntaba no solo por esta última acción si no también por todo.
-Milo... Besame... No tengo mas tiempo... Besame mon ange.
No tenía porque pensarlo. Lo bese con amor y ternura pero sus labios estaban fríos y agrietados.
-Mi amor, tus labios están helados.
Me sonreíste y una lágrima se te cayo solitaria.
-Te amo.
Lo próximo que se escucho fue como la máquina a la que estabas conectado mostraba una línea recta y tu cerrabas tus hermosos zafiros.
-¡No! ¡No Camus! ¡Camie despierta! ¡No me dejes!
Enseguida varios medicos y enfermeras me sacaron a rastras de la habitación. Surt también quiso entrar pero también lo sacaron.
Ambos veiamos como trataban de revivir a mi principe pero parecía que todo era en vano.
-Por favor... Si algún Dios me oye... No me lo quiten... Prometo amarlo, cuidarlo y respetarlo para siempre pero por favor no me lo quiten... Prometo besar siempre esos labios mientras estén rojos, así le demuestro amor eterno... Pero no me lo quiten.
Recuerdo que rogaba a todos los dioses existentes que lo dejaran conmigo... Pero me desalentaba el escuchar a los medicos decir "no responde"
Yo lloraba y Surt se contenía... No sabíamos si sobrevivirias.
Las enfermeras iban saliendo una a una hasta que solo quedaron dos médicos y una enfermera.
Iban a declararte muerto... Pero una línea en el monitor se movió...
-Milo...- Te escuche susurrar.
•
•
•
•
•
No me acordaba de que iba... Hasta que lo comencé a editar y yo me quise suicidar.
Camus si sobrevivió. Reaccionó y Milo lo cuido desde entonces.
Imaginen una vida feliz desde el momento en que Camus reacciona luego de que se le parara el corazón y los médicos lo revivieran.
¡Lloremos juntas mis hermosas!
¡Besos! ¡Las quiero!
PD: la carta la saque de un video Frerard (shipp de Gerard Way y Frank Iero de My Chemical Romance). No se de donde es el texto original, por esa razón doy creditos al video frerard "Just I miss you" de KilljoysMake SomeNoise.
Bạn đang đọc truyện trên: Truyen247.Pro