Gakupo despertó poco a poco, giró la vista y se encontró con algo que la despertó de golpe
-Tala! Alika!
-Tia Gakupo?!
Respondieron ambos asombrados
-Si! Soy yo! Mis niños! Están bien?
Alika se adelanto a responder
-No claro que no como vamos a sentirnos bien cuando un loco nos tiene presos y planea matar a nuestros padres?!
-Alika cálmate! No tienes porque hablarle así
-Tienes razón Tala lo siento
-Descuida no pasa nada
Gakupo miro su herida y para su sorpresa había desaparecido por completo
-Que sucedió?! Cuando llegué aquí?
Pregunto totalmente confundida
-Ayer, Ku vino a verte
-Que?!
-Asi es el te curo y se quedo un rato aquí observándote
Exclamó Alika
-Pero porque haría algo así?
-Quiza le gustas
Dijo Tala riendo
-No digan tonterías, Donde están sus armas? Y mi lanza?
-Estan al otro lado de la cortina de conchas y barbas de crustáceo
Gakupo corrió la cortina y miro aquellos bellos objetos colgados sobre un coral, sin embargo algo llamó su atención, la lanza brillaba como cuando había una pareja cerca sin embargo el color era morado! Ese color solo le correspondía a ella
-No puede ser!
-Que sucede?
-Escucha Tala creo que tenías razón! Ku está enamorado de mi! Y ni siquiera sé porqué
-Valla eso es muy extraño no crei que ese maniaco tuviera sentimientos
-Por lo visto aún le quedan algunos Alika, escuchame con atención podemos aprovechar esto, yo lo convencerte de que lo amo y lo voy a apoyar, seguramente el va a pedirme una prueba de que digo la verdad, ahí es donde entran ustedes
-Que tenemos que hacer?
Preguntaron ambos con ojos curiosos, Gakupo respiro nerviosa
-Tendrán que fingir que soy su enemiga, se supone que yo voy a matarlos, le pediré a Ku qué me entregué las armas de ustedes para destruirlas, después los liberaré y se irán de aquí, su padre y yo nos encargaremos de Ku
-Esta bien es un buen plan
-Silencio Alika! Lo oigo venir!
Exclamó Tala, ella y su hermano se acurrucaron en un rincón mientras que Gakupo se puso en una pose un tanto coqueta, Ku entro a la habitación con una sonrisa burlona y triunfal 
-Valla hasta que decides unirte a los vivos Gakupo
Exclamó Ku con un tono sarcástico
-Si estoy viva es gracias a ti
Sonrió ella, lentamente se incorporó acercándose al Dios con la intención de ponerlo nervioso
-Ellos me dijeron que tú me curaste
-Es la verdad
Dijo el aunque un poco titubeante
-Porque? No se supone que me odias?
Pregunto Gakupo con un tono bastante sincero, Ku no pudo ocultar sus nervios sin embargo se le ocurrió una manera astuta de salvar la situación
-Por ahora me sirves más viva que muerta
-Oh......
La decepción en la voz de la semidiosa parecía auténtica sumada a su mirada triste, Ku la miro de reojo notando su cambio repentino de ánimo al escuchar sus palabras
-Que te sucede Semidiosa del amor y la muerte? Acaso estás así porque sabes que la humanidad será mi esclava muy pronto?
Río el burlón
-No, lo único que pasa es que estoy celosa de Moana
El dios abrió los ojos sorprendido
-Acaso estás enamorada de Maui? Valla esto si que es irónico porque......
Súbitamente ella lo interrumpió
-No tonto! A quién amo es a ti
-Estas bromeando cierto?
-No es encerio, te amo desde hace tiempo, solo que no encontraba una manera de acercarme a ti, por eso acepte venir con Moana y Maui! Porque quería estar contigo
La mirada de Ku cambió repentinamente de la burla a un asombro sumamente grande, se agachó a la altura de Gakupo
-De verdad me amas?
Ella levantó su mirada
-Si, pero ahora Moana será tu reina para la eternidad y seguramente me mataras
-De verdad crees que siento algo por ella?
El comenzó a reír
-Solo hubiera sido mi trofeo, pero con tu confesión cambian las cosas
-A si? Yo soy acaso un mejor trofeo?
Gakupo se giró dándole la espalda a Ku sin embargo el la tomo de los hombros girándola hacia el, las miradas de ambos se cruzaron, los penetrantes ojos verdes de Ku reflejaba un sentimiento que ni Gakupo ni nadie jamás habría esperado ver en ellos; Amor
-No eres un trofeo y créeme es la única vez que te diré esto; serás mi reina Gakupo no por ser un trofeo sino porque te amo
E inesperadamente la beso con pasión, aquel beso despertó en Gakupo sensaciones desconocidas pero a la vez hermosas, se asusto puesto que apesar de no haberlas experimentado si las había visto en inumerables ocasiones, el amor acababa de capturarla como el pescador captura en su red a un pez; un dilema se desató en el interior de Gakupo, tenía que elegir entre su familia y el único amor que había conocido........ Y ella sabía que cuando un Dios se enamora es para siempre