Es una agradable tarde, o eso supone Todoroki dado que le da igual ese tipo de cosas solo se deja guiar por lo que dicen los de la calle.

Había ido de visita a su casa por lo que en esos momentos estaba yendo a la U.A antes de que le evitarán el paso. Llega a los dormitorios y ve a algunos compañeros preocupados, otros se notaban celosos y las chicas soltando chillidos mientras murmuran algo entre ellas, todos en la sala común; le hubiera gustado ver aunque sea un momento al de melena verde, ya que gracias a su madre sabía que le gustaba el chico, pero no lo veía por ningún lado en ese instante, piensa que se encuentra en su cuarto.

Tiene la curiosidad picando en su cuerpo por saber que le pasaba a sus compañeros pero el cansancio de haber convivido con su padre pudo más con él, agarra la cinta de su bolso y se fue sigilosamente a su cuarto.

Ya en la cena sabría que pasó.

Lunes 5 de Julio por la mañana.

Se había saltado la cena ese día porque se había quedado dormido.

Siempre se encuentra con Midoriya en el camino a la escuela, ya era rutina, así que este le contaría lo sucedido el día anterior, fue raro no verlo en ningún lado, eso le extrañó que decide esperar un poco más por él caminando algo lento para que lo alcance.

Esperaba ver a Midoriya correr hacia él disculpándose por llegar tarde pero no sé esperaba ver a un niño de mínimo cinco años, que se parecía a su amigo, que se dirigía a él corriendo con trabajo con su mochila amarilla.

—¡Todoroki-kun!—chilló con todas sus fuerzas aquél infante.

—¡Deku-kun! ¡Espera!—detrás de esa melena verde corría Ochako junto a Tenya.

Él sólo se quedó quieto en su lugar, el niño se acercó a él y apoyó sus pequeñas manos en sus rodillas recuperando aliento, seguido de él, Uraraka e Iida llegaron disculpándose con él mientras regañaban al pequeño niño que solo hacia un gracioso puchero.

¿Por qué ese niño se parecía a Midoriya y por qué lo llaman por su apodo?

—Todoroki-kun,—llamó la chica levemente—supongo que quieres saber que pasó—dijo la castaña con una sonrisa un poco nerviosa.

—¿Por qué está ese niño aquí?—pregunta mientras mira al niño curioso.

—Soy yo Todoroki-kun, Midoriya—habló el pequeño con los ojos llorosos.

—¿Midoriya?—pregunta nuevamente y ve a los amigos de este con confusión.

—Podemos explicártelo en la hora del almuerzo Todoroki-kun si es que puedes—habló Iida mientras hacía esas raras maniobras con las manos.

Sólo asiente levemente mientras comienza a caminar a la escuela, de reojo alcanza a ver cómo ese pequeño solo agachó la cabeza y comenzaba a caminar igual.

Siente una pequeña presión en su corazón.

Después de las primeras clases y ver cómo el niño estaba sentado en la silla de Midoriya, llegó la hora del almuerzo. Fue a la cafetería y entre todos esos estudiantes logra divisar aquél grupo inusual que lo llamaba a sentarse con ellos, se dirige ahí y se sienta a lado del chico con lentes, justo enfrente del niño pequeño que lo miraba algo triste.

—Te vamos a contar que ocurrió ayer—comenzó Uraraka mientras le acercaba al niño la comida.

—Ayer en la tarde salimos Uraraka-kun, Midoriya-kun y yo al centro comercial—tomó la palabra Iida.—Íbamos de regreso a la escuela y resulta que nos topamos con un villano que estaba haciendo un escándalo en las calles—relató el chico mientras paraba de vez en cuando para comer.

—Y ya sabes cómo es Deku-kun, se acercó para ver al villano y ver qué quirk tenía.—continuó la chica con un largo suspiro—Le dije que era peligroso porque no sabíamos que tan peligroso era el quirk del sujeto y pues el villano pasó por donde estábamos, Deku-kun por querer protegerme el villano lo tocó y lo convirtió en... pues...—la chica comenzó a reír de manera nerviosa mientras miraba al niño. Que solo le hizo un puchero.

—Si ya sé, me convertí en un niño—dijo aquella voz infantil después de permanecer en silencio un buen rato.

En lo que Uraraka y Midoriya discutían por la necedad del otro e Iida los reprendían a ambos por pelear entre ellos, Shotō se había quedado en completo silencio analizando toda la información que había recibido. Ahora la persona que ama es un niño pequeño.

—¿Por cuánto tiempo estará así?—pregunta con su característica monotonía en su voz y rostro, pero por dentro muere de la preocupación.

Sólo recibió rostros dudosos y preocupados por parte de los dos chicos mientras Midoriya niño se notaba asustado de lo que pasaría.

—N-no sabemos cuánto tiempo esté...—tartamudeó la chica un poco vacilante.

—Como un niño...—murmuró el infante mientras dejaba de lado su comida. Simplemente había perdido el apetito.

—Aizawa-sensei no sabe cuánto dure el efecto del quirk, aunque Midoriya-kun no fue el único afectado, hubo algunos civiles que también fueron afectados con esto—mencionó el chico mientras se acomodaba los lentes.

Shotō sólo observa atento al desanimado Izuku.

—Midoriya—llamó con calma y ve como el chico lo volteaba a ver atento.—Eres inteligente, podrás volver a tu forma original—dice viendo fijamente a los grandes ojos del otro.

—Todoroki-kun—sólo musitó el mencionado con un rostro motivado y esperanzado.

—Tiene razón Todoroki-kun, ya verás que vuelves a la normalidad Deku-kun—intervino la chica sonriente.

—Midoriya-kun, tu puedes con esto y más—dijo Tenya también buscando motivar a su ahora pequeño amigo.

Izuku sólo sonrió motivado gracias a las palabras de sus amigos. Principalmente por las de Todoroki pero era algo que nunca admitiría.

Al menos no en voz alta.

Este es uno de los proyectos que estuve alistando y casi lo tengo listo, todo los lunes estaré actualizando la historia.

Espero les agrade ;)

—BorreWinther249