ᑕᕼᗩᑭTᗴᖇ 09 ;;

•𝐿𝑙𝑢𝑣𝑖𝑎 𝑦 𝑣𝑒𝑛𝑑𝑎𝑣𝑎𝑙•

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☾︎ᵖᵘᵇˡⁱᶜᵃᵈᵒ:24/08/2020☽︎

NOCHE 3

—Eso si que fue intenso —Cálico se dejó caer en el suelo agotado.

El clan del agua regresó a su base, campamento o como se quisiera llamar. Llegaron con una extraña calma imperturbable, incluso Damian llegó como si nada y eso que hacía una hora escasa que acababa de matar a una persona.

—¿Te has cortado? —le preguntó Aqua al castaño al ver que tenía un leve corte en su dedo pulgar.

—¿Eh? Ah, debió ser por mover el cuchillo de forma tan brusca al atacar a Deimos.

—Ven voy a curarte.

—Eso no cuenta como herida para quitar puntos, ¿no? —cuestionó Adé— Sería una putada que después de que al fin obtengamos puntos nos los quitaran por un simple corte en un dedo.

Davy rió ante la ocurrencia de su compañero y se levantó del suelo para ir hacia el lugar donde guardaban la comida.

—No creo que eso cuente como "herida de gravedad" —reconoció— ¿Alguien tiene hambre?

—¿Te responde a tu pregunta el hecho de que ahora mismo me comería un caballo yo solo?

Las palabras de Corsair hicieron reír a los demás. Mientras que el pelirrojo se encargó de la herida de Langgerfeld, Davy se encargó de preparar algo rápido, ¿que por qué Kébé y Corsair no lo ayudaban? Sencillo, por el simple hecho de que tenían prohibido acercarse a la comida. La última vez que ellos se encargaron de prepararla casi quemaron todo el campamento ¡y estaban literalmente rodeados de agua en aquella zona!

Una comida rápida compuesta por algo de carne de conejo y zumo casero hecho con frutos rojos aplastados fue lo que compuso la cena de esa noche. Era ya tarde y tendrían que empezar pronto las rondas de vigilancia, pues a pesar de que en esos tres días que llevaban allí ningún clan los había atacado por la noche, eso no significaba que no pudieran hacerlo en cualquier momento.

Debían estar atentos.

—Reporte del tercer día del Midnight War: El clan de la bosque pierde 5 puntos por las heridas de gravedad de Rina Ibara y 10 puntos por la muerte de Aum Nirvana haciendo ganar así 15 puntos al clan del hielo. El clan de las bestias pierde 5 puntos por las heridas de gravedad de Zack Avalon y 10 por la muerte de Frank Foreman y por tanto ganando así 15 puntos el clan del trueno. El clan del sol pierde 10 puntos por la muerte de Mars Deimos. mientras que el clan del agua gana 15 puntos. En cuanto a la clasificación de popularidad de hoy queda así: En primer puesto y obteniendo 10 puntos el clan de la hielo, en segundo puesto obteniendo 5 puntos el clan del trueno, en tercer puesto obteniendo otros 5 puntos el clan del agua, en orden del cuarto al undécimo puesto y sin obtener puntos, clan del cristal, clan de la luna, clan del fuego, clan del viento, el clan de la niebla, clan del sol, clan del bosque y clan de la montaña. En último puesto, y perdiendo así 5 puntos el clan de las bestias. Eso es todo por el reporte de hoy.

—Por la diosa, si que han pasado hoy cosas —mencionó Adé.

—Creo que los clanes ya están centrándose —explicó Jones—. Ya estarán todos asentados, y tras acabar las provisiones iniciales habrán empezado a buscar por la isla encontrándose con otros clanes, la paz no iba a durar mucho.

—Me ha llamado la atención que en esta ocasión el top 3 de popularidad estaba compuesto por los tres clanes que han participados en los asesinatos de hoy, pero en otras ocasiones no fue así —mencionó Tet.

—Es cierto, la primera muerte la hizo el clan del hielo, pero no fueron los primeros, fue el clan del fuego, incluso el clan del bosque estaba por delante —coincidió Damian.

—Bueno cabe decir que los del clan del hielo son bastante... Bueno, a su estilo... —no supo explicarse bien Corsair.

—Son muy sospechosos, no me jodas —insistió Tet—. Están todos fatal de la cabeza.

—Si, pero esa psicopatía puede llevarlos a la victoria, así que andad con cuidado —advirtió Davy.

—Ya, bueno, no es como si mi meta en la vida fuera morir a manos de esos pirados —suspiró Corsair.

—Hoy Laggerfeld y yo nos ocuparemos de la primera guardia, los demás id a descansar.

Como Davy dijo a excepción de él mismo y el castaño los demás se fueron a dormir a las tiendas, bueno Tet y Calico fueron a la tienda, Adé prefería dormir al aire libre fuera.

—Yo me ocuparé de la zona norte y este, tu vigila la norte y oeste —le dijo el de pelo azulado y Damian asintió.

Lo primero que ambos hicieron fue meterse en el agua, pues moverse bajo esta era mucho más simple para cualquiera de ese clan y tenían muchísima ventaja en caso de ataque sorpresa

La noche estaba tranquila, al menos por la parte que Damian vigilaba. Se respiraba tranquilidad aquella noche, solo se podía escuchar el ulular de algún búho y el grillar de los grillos. La luna, esa noche en su cúspide, iluminaba todo el lugar acompañada del brillo de las estrellas, era realmente hermoso a cualquier ojos, pero Damian estaba tan inmerso en sus pensamientos que ni notaba ese hermosos paisaje.

Aunque había que decir que sus pensamientos también incluían un paisaje similar, concretamente el del arrollo que encontró días antes. Aquel chico de pelo rosa seguía rondando su mente, en cierto modo le daba curiosidad saber si al final se reunió con sus compañeros o tuvo problemas en el camino.

Sabía que no estaba en posición de preocuparse por alguien de otro clan, después de todo era extremadamente posible que la próxima vez que se encontraran fuera como enemigos, incluso podría ser que uno de ellos fuera quien diera fin a la vida del otro, pero no podía evitarlo. Damian no era de la clase de persona que se preocupaba por los demás, cada uno que haga lo que quiera, eso solía decir.

Pero su... curiosidad por aquel chico era algo nuevo para él, por fin su faceta de indiferencia hacia el resto de existencia del planeta había cambiado. Algo, o alguien mas bien, al fin le había provocado otro sentimiento más allá de la repugnancia o pasotismo. Era cuanto menos curioso para él.

Un sonido de hojas y un extraño movimiento entre los arbustos fue lo que lo sacó de sus pensamientos. Desenfundó un cuchillo y regresó al río para estar preparado por si lo atacaban, aunque también podría ser Davy que venía a avisarlo de algo o algún compañero desvelado, debía tener mucho cuidado con a quien atacaba en esos casos.

El sonido cesó, y no vio más movimiento, estaba casi metido entero dentro del agua, solo su cuello y cabeza estaban fuera observando, pero cuando una figura humana salió de entre los árboles se vio obligado a meterse aún más haciendo que el agua casi le cubriera los ojos. Por suerte debido a la oscuridad del lugar y que él no hacía ni un solo ruido aquella persona no lo descubrió.

Pudo distinguir que el individuo era Lynx Rigel, uno de los chicos del clan de la luna ¿qué haría por allí...? Vale, había sido una pregunta estúpida, era del clan de la luna, clan cuyas habilidades se veían potenciadas por la noche, claramente buscaban atacar a alguien cuando era de noche.

El albino no se estuvo mucho tiempo allí, rápidamente siguió su camino, que milagrosamente no era en dirección al campamento del clan del agua. Damian dudó si seguirlo o no, después de todo mientras que no se dirigiera hacia sus compañeros todo estaría bien... O quizás...

Finalmente antes de darse cuenta ya lo estaba siguiendo desde una distancia prudencial para que no sintiera su presencia. Aunque no se dirigiera hacia sus compañeros podría ser que se reuniera con otros miembros del clan de la luna, y en ese caso quizás pudiera descubrir la ubicación de su campamento. La base del clan de la luna, junto a la del clan de la montaña y el hielo eran las más misteriosas, pues ni un solo clan hasta el momento logró encontrarlas.

En cuestión de minutos llegaron a aquella cascada en la que Laggerfeld estuvo pensando, vaya, eso si que eran casualidades de la vida ¿cómo podía saber Rigel donde estaba ese lugar si jamás estuvo allí?

Su respuesta tuvo que esperar cuando vio como segundos después de que el albino llegara lo hizo también Jones. Podía ser perfectamente un encuentro por casualidad, que en ese momento se pusieran a pelear, pero algo en la mente de Damian le dijo que no iba a ser así, no pensó eso en ningún momento.

Irónicamente el castaño estuvo en lo correcto, nada más verse en lugar de engancharse a puñetazos se abrazaron, esto le pareció extraño al chico escondido, y simplemente se quedó oculto entre los árboles observando lo que pasaba.

—¿En serio habéis matado a Deimos del clan del sol? —escuchó que preguntaba Lynx, Davy solo asintió.

—No estoy orgullosos de acabar con una vida, pero como ya dije pienso llevar a mi clan a la victoria.

Lynx no se veía muy feliz con la respuesta, pero no dijo nada, aunque esta inconformidad fue captada en seguida por el peliazul.

—Oh venga, Lyn-Lin no me digas que estás enfadado...

—No, no lo estoy, es solo... —el albino suspiró— Solo han pasado tres días y esto ya es un caos ¡el clan de la luna es un caos!

A pasar de que elevó un poco la voz no fue mucho para que nadie ajeno lo escuchara, no quería llamar la atención.

—He escuchado el rumor de una alianza con el clan del hielo ¿es en serio? Pensaba que queríais aliaros con nosotros.

El albino bajó la mirada mientras se cruzaba de brazos.

—Es una mierda, pero es la verdad, y Tezcat, Víctor y Vladimir están de acuerdo en aceptar los riesgos —admitió—. Solo Raven se niega, aunque teniendo la mayoría del otro lado y entre esa mayoría a Vlad que es nuestro líder y su novio no hay mucho que hacer.

Ajá, así que el líder del clan de la luna era Vladimir Blade. Era de esperar, pero no estaba de mas confirmarlo de las propias palabras de alguien de ese clan.

—Aliarse con el clan del hielo es casi un suicidio, pasaréis a ser automáticamente prioridades a eliminar para el resto de clanes.

—Supongo que es el riesgo que correremos.

—Lynx... —Davy cogió de los hombros al albino y lo sacudió un poco— El clan del viento y el del bosque buscan venganza contra ellos por las muertes de sus compañeros, y ahora a demás el clan del sol está aliado con el del bosque y dicen que buscan aliarse con los de la montaña también.

—¿Cómo haces para enterarte de todos los rumores?

—Eso no es importante ahora —soltó sus hombros—. Intento decirte que os estáis metiendo directamente en las fauces del lobo como sumisas ovejas que se dejan comer e incluso se emplatan ellas solistas ¡Solo un idiota haría eso!

—¡¿Y qué quieres que haga?!

Esta vez el tono de Rigel fue alto de más y ambos lo notaron. El albino suspiró para calmarse, a ese paso los pillarían de verdad y eso no sería bueno para ninguno. Aunque claramente el chico ignoraba que ya los habían pillados, al menos una persona.

—Solo quiero que tengas cuidado ¿si? Ya sabes que me preocupo por ti.

El peliazul no pudo evitar acariciar la mejilla del otro. Para Damian aquello era una escena que le provocaría diabetes a largo plazo.

—Tengo que volver, se supone que estaba de exploración con Víctor y Raven —dijo Lynx—. Si dejo a esos dos solos por mucho tiempo se acabaran matando entre ellos.

Davy rió ante esto.

—Esos dos para ser cuñados se llevan bastante mal.

—Nos vemos —se despidió Lynx con un movimiento de mano que Davy imitó.

El albino se adentró en el bosque y se mimetizó con las sombras haciendo imposible que Laggerfeld lo siguiera de nuevo. Mala suerte, encontrar a Blade y Dreamblack hubiera sido un plus importante.

Davy ya se iba a retirar cuando el sonido de algo cayendo desde un árbol lo alertó y se giró tan rápido que su cuello tronó, su gesto pasó a ser de horror a ver a Damian con los brazos cruzados y apoyado en el tronco del árbol del que previamente había bajado. El castaño le dedicaba una mirada indescifrable, no sabía si de reproche, de curiosidad, de confusión o de enfado, o quizás todo eso junto.

—Creo que me debes una explicación. Una muy muy buena explicación —exigió el castaño.

Davy suspiró y bajó la cabeza rascándose la nuca, después de un par de suspiros más y unos segundos en silencio para pensar colocó sus brazos en jarra sobre su cintura y miró fijamente a su compañero.

—Te lo contaré todo, tu solo no abras la boca, ni se te ocurra decirle nada a los demás —exigió.

Ambos sabían que Jones no estaba en posición de exigir nada, pero aún así Damian asintió accediendo a su "petición".

—Siéntate, esto será largo de contar —señaló Davy una roca mientras él mismo tomaba asiento en otra al lado.

DÍA 4

—¡Venga, arriba, arriba! —Es resto de compañeros se removían en sus sitios sin aparente intención de levantarse— Venga chicos, no seáis vagos...

—Dulce dejamos dormir... —se quejó Doug.

—Es de día y tenemos que ser productivos ¡Todos los clanes están moviendo ficha y nosotros seguimos aquí estancados!

—Dulce, no es por ser quisquilloso, pero ayer nos persiguieron unas avispas gigantes y encima tuvimos que huir del desbordamiento del río, por no hablar del ataque del clan de las bestias —suspiró Arion.

—¿Por qué sois así? Yo no he escuchado a Sera quejarse todavía.

—Eso es porque sigue durmiendo —señaló Doug—. Recuerda que ella no escucha tus berrido mañaneros.

Loamy infló las mejillas enfadada por las palabras de McArthur, ella no daba berridos, solo los levantaba tempranito para comenzar el día de una forma suave y amable. Si quisiera despertarlos de malas maneras los tiraría al río.

Dándose por vencida con los chicos decidió intentar despertar a Aura. La pelimorada dormía plácidamente y a pierna suelta, incluso podía ver como caía por la comisura de sus labios un hilo de saliva, pues si que estaba agusto la condenada.

—Sera, cariño, despierta —decía lo más delicadamente posible aún sabiendo que no la escucharía mientras la agitaba hacia los lados.

Aura abrió los ojos y parpadeó varias veces hasta comprender lo que pasaba, Dulce pudo distinguir en su cara esos segundos al despertar en los que no recuerdas quien eres, donde estás o en qué día vives. Le resultó una cara ciertamente graciosa debía admitir.

—¿Qu... E a asa?

Como la pobre estaba recién levantada no acertaba a vocalizar, así que Dulce no supo muy bien que decía.

—Arion y Doug no quieren venir conmigo a dar una vuelta por la zona, ¿me acompañas tu? —dijo moviendo a su vez las manos tratando de hablar en la legua de gestos que la chica le enseñó levemente.

—Bah... —Y se acostó el doble de rápido de lo que se levantó dejando indignada a la pelirosada.

—Ríndete, todos tenemos sueño —rió Doug.

—¡Pues me voy sola!

Y sin esperar una respuesta creó una fuerte corriente de aire y se fue literalmente volando del lugar.

A diferencia de Serafina que usaba las corrientes de aire para moverse, Dulce podía generar viento desde su propio cuerpo, era realmente útil. Sobrevoló el prado hasta llegar de nuevo el bosque, con suerte encontraría algunas vayas para comer pues en el campamento tan solo quedaba pescado, y como que eso de desayunar pescado no iba con ella.

Encontrar las vayas de la última vez no estaría nada mal, a pesar de la desconfianza de sus compañeros, quienes no quisieron comerlas, esas frutillas estaban deliciosas hasta el punto de que recogieron más y comieron todos. No, no se murió de una intoxicación alimenticia como decía Doug.

Al parecer ese día la suerte estaba de su lado, no tardó mucho en encontrar las famosas vayas. Se comió unas cuantas saciando su hambre mañanera y el resto las guardó en un pañuelo para llevárselas a sus compañeros, serían unos bastardos que la dejaron sola, pero eran compañeros después de todo.

Se giró dispuesta para regresar, pues ya había pasado una buena media hora y seguro que los demás finalmente se habría levantado, pero un fuerte golpe en la cabeza hizo que todo se volviera negro.

Unos murmullos lejanos se escuchaban, parecían discutir, ¿qué había pasado?

Los murmullos lejanos se hicieron más y más nítidos hasta el punto de poder escuchar medianamente claro lo que decían.

—¿Qué hacemos con ella?

—¿Cómo que qué hacemos con ella?¡Está claro! La matamos y obtenemos los puntos.

—¿No es mejor llevarla a la base y retenerla para sacarle la localización de sus compañeros?

—Ya, pero si se escapa sabría la ubicación de nuestro escondite y nos saldría el tiro por la culata.

—De todas formando no podemos simplemente matarla y ya.

—¿Por qué? —se notaba que esa voz comenzaba a perder la paciencia.

—Por que tendríamos que decidir quien la mata, si tu o yo, recuerda que dependiendo de quien la mate un clan diferente obtendrá los puntos.

Dulce por fin comenzó a abrir los ojos encontrándose frente a ella a dos chicos con el ceño fruncido. Ambos dejaron su discusión en cuanto notaron que la chica había despertado.

—¡Hola linda, al fin despiertas! Siento mucho el golpe en la cabeza, pero ya que te había encontrado no podía dejarte suelta —el chico que habló formó una increíblemente falsa cara de tristeza.

—Ya, déjala —suspiró el otro.

Los conocía, eran Bailong y Maxim, de los clanes del sol y el bosque respectivamente ¿desde cuando trabajaban juntos?¿Sus clanes se había aliado?¡Maldita sea ya le había dicho a los idiotas de sus compañeros que el resto de clanes se estaban adelantando!

—Bueno, no podemos llevarla a la base, pero tampoco quieres matarla, entonces ¿qué hacemos? —bufó Maxim.

—Iremos a buscar a los demás y los traeremos aquí, aquí mismo decidiremos lo que hacer con Loamy.

Vaya, que considerado de su parte, si hasta se sabía su apellido.

Maxim miró al albino y después a la chica, se quedó pensativo unos segundos para después reír.

—Está bien señor correcto, yo iré a por los demás, tu vigila a la chica.

Bailong asintió y el chico de moños se adentró en el bosque dejándolos solos, no era el sueño de Dulce, pero al menos con solo una persona vigilándola sería más fácil escapar.

Se trató de mover, pero a penas tenía margen, las cuerdas estaban bien atadas... Espera... ¿Cuerdas, seguro? Se centró mejor y vio que eran raíces. Gracias Millennium, fue muy considerado de tu parte.

—Ni lo intentes, esas raíces se ajustan más cuanto más forcejéas, y creeme, duele como el infierno cuando te empiezan a cortar la circulación de las muñecas y te aprietan las costillas.

Vale, plan B, cortar las raíces, tenía que haber algo afilado cerca, o quizás por el propio roce con el tronco del árbol podría romperlas.

—Hemos quitado cualquier cosa afilada que hubiera cerca tuya, y hemos metido algo de tela entre el tronco y las raíces para que no las desgastaras a base de moverlas.

¡¿Pero ese tipo esa vidente o qué?!¿Cómo podía saber cada cosa que pensaba? La estaba poniendo realmente nerviosa.

—Mis compañeros nos acabaran encontrando —dijo la chica.

—¿Los mismos compañeros que no quisieron acompañarte porque prefirieron quedarse durmiendo?

—¿Cómo...?

—Encontramos anoche vuestro campamento por casualidad, solo te seguimos cuando te fuiste sola —Dulce gruñó.

—Touché.

Miró de nuevo para todos los lados, pero no se le ocurrió nada para escapar le habían quitado sus sais y su viento no era lo suficientemente fuerte como para arrancar aquel árbol de cuajo. Finalmente decidió ganar algo de tiempo para ver si sus compañeros notaban su ausencia.

—¿Os habéis aliado con el clan del bosque?

—¿Te interesa?

—Bueno, de algo hay que hablar mientras llegan tus amiguitos a matarme.

Bailong arqueó una ceja, pero cedió.

—Nos une un mismo odio hacia el clan del hielo y unas mismas ansias por ganar y placer por llevar la gloria a nuestros respectivos clanes.

—Sois muy listos, una alianza para acabar con otra alianza.

—¿Lo dices por el clan del hielo y la luna? —la pelirosada asintió— Bueno, solo queremos estar preparados para lo que pase.

—¿Y por qué no me habéis matado ya?

—Como te he dicho hay una alianza de por medio y tu solo eres una y nosotros dos clanes, no hay puntos para ambos.

—Y seguirá sin haberlos por muchos de vosotros que vengáis.

El albino suspiró y miró con severidad a la fémina, pero negó y volvió a mirar al bosque.

—Seguramente vayamos a atacar tu base ahora que sabemos donde está y atrapemos al resto de los tuyos. Descontando al que mató el clan del hielo deberíais de ser cuatro, dos para cada clan.

—¿Y qué haréis con el líder? —Bailong la miró curioso— Digo, solo hay un líder, y por su muerte dan más puntos, ¿cómo decidireis quien lo mata?

—Como no sabemos quien es simplemente mataremos a dos cada uno y pues quien más suerte tenga se llevará los puntos.

—¿Y si yo lo dijera? —ahora Bailong si que estaba totalmente confundido— Si cuando vinieran tus amigos yo les dijera quien es el líder, se crearía un conflicto de intereses que acabaría en una fuerte pelea entre ambos clanes, e incluso en el peor de los casos en la destrucción de la alianza —la chica se echó un poco para adelante, todo lo que las raíces le permitieron—. Seríais un bufé libre de puntos para los clanes de la luna y el hielo.

Bailong se agachó para estar a la altura de Loamy y mirarla fijamente a la cara estando a pocos centímetros.

—No te atreverías...

—Ponme a prueba.

Las miradas de ambos chocaron por algunos segundos en lo que luchaban por encontrar alguna grieta en la defensa psicológica del otro, pero al no obtener nada Bailong simplemente se alejó y se recostó de nuevo en un tronco.

—Haz lo que quieras, si haces eso simplemente buscaremos al líder de otro clan y lo mataremos también para estar igualados.

Dulce tensó la mandíbula al no conseguir su objetivo de molestar al otro, pero al menos ganó el tiempo que necesitaba y lo distrajo lo suficiente.

—¿Sabes? El clan del viento tiene una... llamémoslo habilidad, para detectar la presencia de otros gracias al viento. No noté la vuestra porque en ese momento no corría nada de brisa.

—¿A dónde quieres llegar?

—Cuando pasas mucho tiempo con esa "presencia" eres capaz de distinguirla, de saber quien es, como ahora por ejemplo —Dulce sonrió

Bailong pilló de inmediato a lo que se refería, esa charla solo sirvió para distraerlo, para que no estuviera atento a su entorno. Una fuerte ráfaga de aire lo lanzó hacia un árbol y él no tuvo tiempo de esquivarla.

—Mis compañeros serán unos perezosos, pero jamás me dejarían tirada —dijo por último Dulce—. Debísteis matarme cuando pudisteis.

Bailong se recompuso y trató de acercarse a ella, pero Arion se lo impidió con una nueva ráfaga, ahora más fuerte que la anterior. McArthur y Storm llegaron por detrás para tratar de acorralarlo.

—Esto no quedará así —dijo Bailong a la chica de pelo rosa.

—Chico pero invitame a un café o algo primero, que eres muy lanzado —rió Dulce.

Bailong bufó, aunque en su cara se podía ver como reprimía levemente una sonrisa. Creó un destello cegador que hizo que los demás apartaran la mirada, cuando quisieron darse cuenta el albino ya no estaba.

—Mierda, se nos escapó, teníamos una oportunidad de oro —suspiró Doug.

—White ¿estás bien? —preguntó Arion corriendo hacia la chica y usando la propia arma de esta para romper las raíces y liberarla al fin.

—Gracias, ya me empezaba a doler todo por culpa de eso.

—Si, creo que está bien —rió el chico pelimorado.

—¡No estoy bien!¡Habéis tardado mucho! Casi me matan por vuestra culpa.

—¿Por la nuestra? Tu fuiste la que quisiste ir a recoger fruta sola —le recordó Doug indignado.

—¡Si me hubierais acompañado nada de esto hubiera pasado!

—¡Ah claro, ahora la culpa es nuestra!

—¡Chicos ya! —los cortó Sherwind metiéndose entre los dos— No es el momento para pelear.

Ambos bufaron exactamente al mismo tiempo.

—¿Aura pasa algo? Te ves muy feliz —mencionó Dulce tratando de cambiar de tema.

Como Loamy mencionó Storm se veía extrañamente feliz para acabar de salva a su compañera de que le cortaran el cuello, no era precisamente algo como para estar feliz, quizás orgullosa por haber salvado a alguien, pero ya.

—Era guapo, eh —dijo la chica desconcertandolos a todos.

Serafina miró a Dulce con una sonrisa pícara que la chica descifró al instante y comprendió por donde su amiga de ojos rojos iba y negó rápidamente.

—¡Que ha intentado matarme!

—Bah —hizo un gesto quitándole importancia—. Todos aquí intentan matarse entre ellos, no es nada nuevo. Además eso no le quita lo guapo.

—Es de otro clan...

—¿Y no crees que eso le da un toque muy emocionante de amor prohibido?

—¿A lo Romeo y Julieta? —preguntó Arion.

—¡El chico si que entiende! —rió Sera— Habrá que buscarte un amor prohibido a ti también.

—Dejadme al niño, él aún es puro e inocente, no me lo corrompáis.

Las chicas rieron cuando Doug abrazó al castaño de forma protectora, como un padre o un hermano mayor.

—Por cierto habría que cambiar nuestra ubicación, ahora no solo el clan del hielo sabe donde estamos —el gesto de Dulce se puso más serio—. Los clanes del sol y el bosque también lo saben.

—¿Una alianza? —cuestionó Doug y Dulce asintió.

—Pues nos cambiaremos, hay varios sitios mas igual de aptos y escondidos —afirmó Arion.

—¿No pensáis que las cosas se están complicando? —cuestionó Aura.

—Bua, y lo que se tienen que complicar todavía —rió Dulce—. Disfruta de la tranquilidad mientras puedas.

𝗟𝗶𝘀𝘁𝗮 𝗱𝗲 𝗙𝗮𝗹𝗹𝗲𝗰𝗶𝗱𝗼𝘀:

– Zaphod Riker

– Aum Nirvana

– Frank Foreman

– Mars Deimos

𝗖𝗹𝗮𝘀𝗶𝗳𝗶𝗰𝗮𝗰𝗶𝗼́𝗻:

• 𝙲𝚕𝚊𝚗 𝚍𝚎𝚕 𝙷𝚒𝚎𝚕𝚘: 45 p

• 𝙲𝚕𝚊𝚗 𝚍𝚎𝚕 𝚃𝚛𝚞𝚎𝚗𝚘: 25 p

• 𝙲𝚕𝚊𝚗 𝚍𝚎𝚕 𝙰𝚐𝚞𝚊: 20 p

• 𝙲𝚕𝚊𝚗 𝚍𝚎𝚕 𝙵𝚞𝚎𝚐𝚘: 15 p

• 𝙲𝚕𝚊𝚗 𝚍𝚎 𝚕𝚊 𝙽𝚒𝚎𝚋𝚕𝚊: 5 p

• 𝙲𝚕𝚊𝚗 𝚍𝚎𝚕 𝙲𝚛𝚒𝚜𝚝𝚊𝚕: -5 p

• 𝙲𝚕𝚊𝚗 𝚍𝚎 𝚕𝚊 𝙻𝚞𝚗𝚊: -5 p

• 𝙲𝚕𝚊𝚗 𝚍𝚎 𝚕𝚊 𝙼𝚘𝚗𝚝𝚊𝚗̃𝚊: -5 p

• 𝙲𝚕𝚊𝚗 𝚍𝚎𝚕 𝙱𝚘𝚜𝚚𝚞𝚎: -10 p

• 𝙲𝚕𝚊𝚗 𝚍𝚎𝚕 𝚅𝚒𝚎𝚗𝚝𝚘: -10 p

• 𝙲𝚕𝚊𝚗 𝚍𝚎𝚕 𝚂𝚘𝚕: -10 p

• 𝙲𝚕𝚊𝚗 𝚍𝚎 𝚕𝚊𝚜 𝙱𝚎𝚜𝚝𝚒𝚊𝚜: -20 p

¡Tachán! Aquí está el capítulo 9 y milagrosamente no se a muerto nadie XD ¿Pensásteis que Dulce moriría o algún otro personaje en este capítulo? Si no habéis tenido vuestra ración de muerte y destrucción no os preocupéis, que la tranquilidad no durará mucho, bueno, "tranquilidad".

Hablando de la clasificación, el clan de las bestias va a ganar en cuanto a puntos negativos a este paso, no creo que se queden de brazos cruzados, presiento que no estarán quietos mucho tiempo más u.u

Además vengo a decir que pronto se añadirá algo... especial a los capítulo, no digo nada pues es sorpresa U.U

Pues eso es todo por el momento, nos vemos el lunes que viene.

~Ciao ♥