Depequeña, tenía uno de esos reproductores de cintas de videoantiquísimos donde veía mis películas de dibujos animados. Unanoche, (evidentemente, mi familia y yo apagamos la tele y el videoantes de irnos a dormir), estaba yo media dormida (tenía unos 9 o 10años) y me despertó el sonido de la tele. Me levanté toda valientea ver si mi papá o mi mamá estaban despiertos, pero no era así. Elvideo estaba reproduciendo solo la cinta de la película de los 101Dálmatas (me acuerdo perfectamente). Al no ver a nadie, me cagué demiedo y volví a mi cama sin apagar nada. Lo que me resultó másinexplicable fue cómo se había metido sola la cinta de video porqueno había ninguna película dentro. No solo eso, sino: ¿cómo sehabía encendido la tele y el reproductor solos? No podía dormir,estaba tapada hasta arriba con la manta. Al rato, se despertó mipadre; lo escuché apagar la tele y venir a mi cuarto a regañarme.Pues, evidentemente, creía que había sido yo. ¿Cómo le iba aexplicar que se había puesto la cinta sola?

Las cosas que pasaban en mi casa no eran normales de verdad... Ya os contaré más...

¿A ti no te ha pasado nunca algo que no puedas explicar? :O ¡¡Cuéntame por fi!!