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⚠️PRECAUCIÓN⚠️
Capítulo con escenas R+18
Palabras explícitas
Contenido vulgar
Si eres menor de edad, es bajo tu responsabilidad el que leas ésto o si eres sensible pasa a la siguiente parte.
En fin, están advertidas/os.
Disfruten.
"Vive como nunca,
sueña con el corazón,
quiere como si no hubiera
mañana y ama por la
eternidad"
°§°§°§°
Besos y más besos, acompañados de jadeos en busca de aire, Sesshomaru no sabía el porqué de su actuar, no sabía a dónde se había ido su desprecio por los humanos, que él creía criaturas inferiores y débiles, ahora estaba ahí, con una humana a punto de marcarla.
—S-señor Se-Sesshomaru —
Llamó Rin algo avergonzada de su comportamiento, el Daiyoukai la había cargado de forma nupcial y empezaba a caminar con rapidez hacia la cabaña, el poder controlar su sangre demoníaca no duraría mucho, el roce del trasero de Rin sobre su hombría al caminar hacía que lo excitara más.
El balde quedó abandonado junto a la orilla del río, la pareja ahora disfrutaría de unirse en cuerpo y alma, Sesshomaru con más fuerza de la necesaria abrió y cerró la puerta corrediza, caminando directamente al futon, que parecía estar esperandolos, tumbó a la chica en él mientras otra vez se apoderaba de sus labios.
Tocando su cuerpo por sobre la tela del kimono mojado, haciendo estremecer a Rin, con cuidado de no rasguñarla con sus garras, fue despojandola de sus ropajes, quedando únicamente con su yukata.
Rin no se quedó atrás, después de que Sesshomaru apartó su armadura a un lado de ellos, ella con movimientos algo nerviosos le fue quitando el Haori, desatando el nudo del Obi para dejar suelto el Hakama, pasó sus manos por el marcado torso y abdomen del apuesto Daiyoukai, sonriendo por sentir la piel erizarce a su contacto.
Sesshomaru chupo y besó cada centímetro de piel con el que se topaba al bajar, estimulando un poco los pezones de la chica en el proceso, bajó más al percibir un cambio de olor en el cuerpo de Rin, que diera un paso más con ella, que aceptaba gustosa su unión.
Hundió un dedo en su intimidad, escuchando el gemido ahogado de la humana, tanteo la zona y metió un segundo dedo, preparando el lugar para él y no hacerle daño. Aunque por dentro se desbordaba de pasión, bebía pensar en ella, por alguna razón no quería lastimarla, los gemidos de Rin fueron en aumento hasta ver cómo arqueaba su espalda producto de su primer orgasmo.
Ahora era el momento justo, estaba lista para recibirlo, bajó el Hakama ya anteriormente desatado, liberando su miembro ya despierto y palpitante. Rozó la entrada de la chica con la punta, adentrándose poco a poco, se colocó encima de ella y acarició su rostro sonrojado, llegó a una pequeña barrera, símbolo de su pureza, viéndole directamente a los ojos, como si se tratara de estar pidiendo su consentimiento.
Rin con la respiración agitada, asintió freneticamente, esperando por más.
—H-hazlo... Por favor —
Jadeó suplicante, al instante Sesshomaru acato su petición, embistiendola y llevándose de por medio su virginidad, besó las mejillas empapadas por las lágrimas a causa del dolor, enterneciendo al Daiyoukai.
La besó hambrienta mente, apaciguando la molestia en la joven y empezando a moverse, disfrutando de los gemidos que empezaban a brotar de la garganta de Rin.
Embestidas más fuertes y certeras hacían que la mente de Rin estuviera en las nubes, sólo se concentraba en las nuevas sensaciones que experimentaba su cuerpo, jadeando por más, se impulsaba contra el cuerpo del hombre al que se entregaba en cuerpo y alma.
Los cuerpos perlados de sudor, los gemidos ahogados de ambos se mezclaban en uno sólo, y el olor a cópula llenaba la nariz de Sesshomaru, increíblemente le volvía loco ese olor, le encanta la esencia de Rin, sólo ella podía sacar a flote esa faceta en él.
Los dos estaban por llegar al clímax, aumentando las arremetidas hasta parecer bestiales.
—¡Sessh...! —
—Sí, yo también —
Gruñó en su cuello a la vez que inhalaba su olor, le era imposible dejar de hacerlo, un afrodisíaco que lo embriagaba hasta perder los sentidos, dio varias lamidas en el hombro izquierdo, cerca de la curvatura del cuello, el lugar ansiado para marcar.
Increíblemente había pasado los últimos 600 años rechazando a Kagura, una Youkai que lo quería reclamar, pero después de 100 años, que fue cuando Inuyasha nació, Inu No le prohibió acercarse al palacio, en parte le agradecía al Hanyou, pero ahora le agradecía a Kami por haberle puesto a Rin en su camino.
Sus colmillos crecieron y se enterraron en la zona preparada, Rin se retorcía de placer, esa sensación de dolor más el orgasmo que recorría su cuerpo la volvía loca, haciendo que enterrara sus uñas en la fuerte espalda de Sesshomaru, éste culminó en su interior, perdiéndose en el delicioso placer de sentir las paredes de Rin succionar su miembro.
Saliendo de su interior, se tumbó a su lado, los dos cansados, jadeando intentando calmar sus respiraciones, Rin se acurrucó cansada en el pecho del Daiyoukai, sin embargo permaneció despierta, había una pregunta que destrozaba su corazón de sólo pensarlo.
—Señor Sesshomaru — llamó.
—Sí ¿que pasa Rin? — acarició el cabello azabache de la joven.
—Usted... ¿Va a dejarme? —
Sesshomaru se tenso al oír eso, era cierto, debía dejarla pero no por su cuenta, sino por la de su padre, que estaría peor que histérico si llegara a desaparecer.
—Escuchame bien, Rin ¿Sabes lo que soy, verdad? —
—Eres un Daiyoukai... Es todo lo que sé de tí —
—Así es, pero no soy cualquier Daiyoukai, soy el siguiente Lord del Oeste, mi padre es el General Inu No Taisho que es el rey del Oeste y de todos lo demonios—
—Eres como un príncipe... —
—Sí, por lo tanto, tengo que acatar mis deberes cómo tal y... Aunque no quiera irme y dejarte... Tendré que hacerlo, pero ten presente siempre que yo... Te amo y volveré por ti, así que esperame—
—Lo haré, lo esperaré Señor Sesshomaru, yo lo amo también—
El demonio besa dulcemente a la chica que ha logrado llegar a su corazón, una débil humana es ahora la compañera de el más poderoso Daiyoukai.
—Toma ésto, tómalo cómo una promesa de que volveré por ti, pase lo que pase —
La joven toma entre sus manos el adorno lunar que es también un emblema del demonio, Sesshomaru aparta unos mechones de la cara de Rin y los prensa con el adorno, las cadenas de éste se complementan con el cabello oscuro.
—Gracias, Señor Sesshomaru —
Los dos se abrazan con amor, al mismo tiempo que se vuelven a besar, pasan la noche juntos, disfrutando de la calidez del otro, y sin quererlo realmente, se duermen acompañados de los latidos de sus corazones, que laten al mismo compás.
°§°§°§°
Bueno, perdón por no haber podido actualizar antes, estoy a un tanto ocupada, por así decirlo, lo que hace que la inspiración se valla.
Creo que ésto👆🏼pasa mucho 😆😂
¡Ahh cierto! Se me olvidaba, el adorno que Sesshomaru le dio a Rin es algo como ésto👇🏼
Espero les haya gustado el cap o por lo menos les agrade.
Bye Bye
Besos y abrazos 😘
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