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Capítulo 16

Es una pacífica noche en la ciudad de Nueva York, algunos locales acaban de cerrar y otros siguen abiertos al ser 24/7. Pero dejando esa parte de la ciudad vayamos a otro lugar que todos conocemos.

En la nueva casa Loud vemos a Linka junto a Loni y sus hijos, quienes estaban viendo una película, puesto que hoy es noche de películas, y como tal todos escogieron una para verla, siempre y cuando sea para toda la familia y no una que contenga mucha violencia o escenas explícitas.

Todos estaban atentos mirando la televisión, tenían palomitas y refrescos para así disfrutarlo mejor. Pasado un rato la película había terminado, a lo que Linka toma el control remoto y apaga la tele.

_ Me gustó mucho esa película, ya ni recuerdo cuando vi una película así.- dijo Linka sobre la peli.

_ Debo decirlo, el viaje que hace esa familia a Europa para descubrir que son parte de la realeza en otro país es algo asombroso.- decía Lary sobre la película.

_ Sin contar los momentos donde hay canciones. Me gustaron algunas, las buscaré y las tendré en mi lista de reproducciones.- añadía Lind.

_ Aunque no fueran canciones rock si fueron buenas. La canción que cantó la villana fue algo oscura, si hubiera sido estilo heavy metal sería épico.- comentó Lita.

_ Lo que más me gustó es donde la chica de lentes de sol se hace novia del chico al que conoce. En los créditos se puede ver que mantienen una comunicación constante.- comentaba Laine.

_ Nada mal, pero no dejo de pensar que la escena donde aparece ese dragón le quita seriedad a la cosa. Es decir, un ser mitológico que siga vivo luego de muchos años y que se creía extinto es poco creíble.- opinaba Luka.

_ ¡Dragón, dragón!- exclamó emocionado Lion.

Por su lado Lele al oír lo que dijo su hermano Lion, y que comenzara a saltar de la emoción, el pequeño infante comenzó a sacar unas alas en su espalda parecidas a las de un dragón de verdad y comenzó a volar por toda la sala.

Los chicos trataba de parar a su mutante hermano pero sin éxito. Hasta que Linka pudo atraparlo y hacer que detenga su vuelo. Para ella es la primera vez que hace eso, por lo que deberá de tener más cuidado.

_ Veamos otra película. Me quedé con ganas de ver otra.- pedía Lenn ver otra peli.

_ S-s-si veamos la n-n-nueva película de L-L-Lightyear que se e-e-estrenó hace unos días.- daba una recomendación Loyd.

_ Ya no niños, ya es un poco tarde y ya es hora de ir a dormir. Otro día seguiremos viendo otra película.- dijo Linka a sus hijos.

_ Vamos mamá, queremos ver otra película. Por favor.- pedía Lacy seguir viendo más pelis.

_ Niños, obedezcan a su madre, ya es hora que vayamos a la cama. Si quieren este sábado podremos ver más películas de las que quieren ver, incluso compraré pizza para todos nosotros.- decía Loni a los chicos.

Por su lado los chicos debían de hacerle caso a su madre de ir a la cama, pero también les alegraba de que este sábado que viene podrían ver otras películas, y más aún de que su tío/padre dijera que comprará pizza para todos.

Sin más recogieron todo de la sala hasta dejarla limpia, luego cada quien fueron a sus respectivas habitaciones. Por su lado los dos adultos fueron a la habitación para así dormir. Linka se puso su ropa para dormir, al igual que Loni, luego de cepillarse los dientes ahora si fueron a la cama y así dormir.

_ Buenas noches Linky, que descanses.- dijo Loni a su hermana.

_ Buenas noches a ti también Loni, que descanses.- dijo ahora la albina.

Antes de cerrar los ojos Loni le dio un beso de buenas noches a Linka, así ambos adultos se durmieron. Pasado las horas vemos como Linka movía su cabeza de un lado a otro, dejando entrever que estaba teniendo un mal sueño, o incluso una pesadilla.

En la mente de Linka.

Entrando al subconsciente de Linka, vemos a la ya mencionada Linka. En su sueño vemos que estaba en un momento de su vida. Más en específico, de cuando ella tenía 23 años, se puede ver a Linka, quien se le veía muy molesta y estaba siguiendo a  alguien.

_ ¡Responde cuando te estoy hablando, no trates de evadirme!

Linka seguía a esa persona, la cual se encontraba de espaldas e ignorando lo que la albina le decía. Esto hacía enfurecer a Linka, por lo que nuevamente se dirige a esa persona.

_ ¡Te estoy hablando Lane! ¿Por qué no me has ayudado en cuidar a Lind?

Exactamente, Linka le estaba hablando a su hermano mayor y padre de su cuarto hijo. Lane seguía ignorando a su hermana, mientras que el castaño se encontraba acomodando algunas cosas.

_ ¿Acaso no piensas responder? ¿Te parece gracioso que esté hablándote y que no me respondas?— volvió a decir Linka.

_ Siendo honesto, si me parece algo gracioso por el modo en que te enojas. Pareces un personaje de alguna caricatura.— respondía Lane a su hermana.

Esto Linka por supuesto que no le parecía gracioso, ya que ella le estaba reclamando a su hermano de que se hiciera responsable con la manutención alimentaria de su hijo. Desde hace meses que Lane dejó de enviarle dinero para los gastos de su hijo, sin contar que Lane no respondía sus llamadas y mensajes.

No supo nada de su hermano, hasta que se enteró de que a la ciudad vendría un acto de circo y que Lane estaría ahí como uno de los payasos. Por lo que sin pensarlo fue al lugar donde se daría el show para así buscar a Lane. Lo que nos deja a nosotros en donde estamos en estos momentos.

_ ¡Ya no juegues conmigo y dime de una maldita vez! ¡¿Por qué ya no me envías dinero para nuestro hijo?!— exclamó molesta Linka.

_ ¿Quieres que te lo diga? Bien. No te enviaba dinero porque lo estaba invirtiendo en algo que me dará más ganancias a futuro.— respondió Lane sin más.

_ ¿Invertir? ¿Y qué cual fue esa inversión que hiciste?— volvió a preguntar Linka.

_ Lo invertí en este circo, ¿Estás contenta?— volvió a responder el comediante.

Linka estaba estupefacta al oír en que invirtió Lane el dinero que supuestamente era para enviarle al hijo de ambos. Para Linka esto era una jodida broma, ya que el ser dueño de un circo no es una tarea fácil, y mantenerlo a flote no es algo que cualquiera pueda hacer, ni siquiera ella podría hacerse cargo de algo así.

_ ¿En este circo invertiste el dinero? ¿Acaso se te zafó un tornillo? Tienes idea de lo difícil y costoso es mantener un circo. Tener que pagarle a varios trabajadores, mantener a varios animales, y la utileria. Es exageradamente costoso.— decía Linka a su hermano.

_ Yo veré como me las arreglo. Esto del circo es mejor que trabajar en fiestas infantiles o hacer Stand Up. Hacer giras por todo el país o todo el mundo, es algo del cual no pienso echarme atrás.— dijo el comediante.

_ Pero no te olvides de que tienes un hijo aquí. Y no pienso que te vayas sin que me ayudes con la manutención de nuestro hijo. Ya tengo suficiente de que Loki y Luke me hayan dejando sola con sus respectivos hijos, y no pienso dejar que te vayas así como si nada.— le recordaba Linka a su hermano.

_ Aún tienes a Loni, él te manda dinero para su hijo y para ti. ¿Cuál es el problema?— dijo sin importancia Lane.

_ Ese no es el punto. Tienes que hacerte responsable con tu hijo, tú fuiste quien me embarazó con esa estúpida broma. No pienso dejar que te vayas, a menos que las cosas se pongan feas para así obligarte a que me ayudes con Lind.— amenazó Linka a su hermano.

_ ¿Y que piensas hacer, ponerme una demanda? ¿Sabes que si lo haces te preguntarán sobre el nombre del padre? No me imagino a ti poniéndome una demanda sobre negligencia alimenticia en contra de tu hermano, y más aún sabiendo que las relaciones incestuosas están prohibidas en el estado de Michigan.— dijo Lane a su hermana menor.

La albina se había quedado sin palabras al oír lo que dijo Lane. Si lo demanda por negligencia alimentaria de su hijo es claro que los abogados querrán saber el nombre del padre, todos estarían confundidos y a la vez con más preguntas del por qué Linka quiere ponerle una demanda a su propio hermano.

Ahí no podía hacer nada Linka, pero aunque no pueda ponerle una demanda no se daría el lujo de que Lane la deje con la carga de cuidar a Lind. Ya con que Loki y Luke la dejaran era más que suficiente, y no permitirá que otro de sus hermanos se salga con la suya e irse así sin más.

_ Puede que tengas razón, pero aún así no voy a dejar que te vayas. Te quedarás aquí y me ayudarás a cuidar y mantener a nuestro hijo.— exigía Linka a Lane.

_ Pues pobre de ti, porque ya tengo una agenda llena. Dentro de unos días estaremos de camino a Las Vegas para dar una función. Luego habrá más show en varias ciudades mas.— respondió Lane sin interés.

Linka ya había perdido la paciencia con Lane, se le veía que no le interesaba para nada hacerse responsable con su hijo, más sabiendo de que él tuvo la culpa de dejarla embarazada por esa broma del día de los inocentes. Es como si no sintiera nada de culpa o tan siquiera, lastima hacia ella por el hecho de que tiene que cuidar de 4 hijos ella sola.

Por lo que simplemente se dirige a Lane y acto seguido le dio una tremenda cachetada que lo mandó al suelo. Lane se tomó la cara en donde su hermana le había golpeado.

_ Si tanto te importa esta mierda de circo pues.... ¡Vete y no vuelvas a buscarme, no quiero verte nunca más!

Luego de haberle gritado Linka se fue del lugar, molesta y con ganas de llorar. Le duele que sus hermanos sean unos mal agradecidos de dejarla sola a ella con sus hijos. Tanto ella, como ellos tienen la culpa de que cometer actos incestuosos.

Cuando llegó a su apartamento lo primero que hizo fue desahogarse un poco. Con Lane son tres de sus 4 hermanos que se han rehusado en ayudarla con la manutención de sus hijos. Solo Loni es el único que le ayuda y de vez en cuando la suele visitar y estar con su hijo y sobrinos.

Segundo sueño.

Ahora Linka tenía otro sueño, en donde se le ve a ella en su trabajo. Aquí Linka tiene 24 años, meses antes había dado a luz a su quinto hijo junto a su hermano Lynn.

La albina estaba en lo suyo realizando alguna que otra venta. Puesto que para este momento Linka ya había sido contratada para trabajar en la empresa Avon, y su trabajo es realizar ventas y también atraer algunos inversionistas.

Cuando su hora de trabajo terminó Linka recogió sus cosas y salió del edificio donde labora. Al salir vio que su hermano Lynn estaba afuera.

_ ¿Lynn? ¿Que haces aquí?— preguntaba Linka.

_ Salí un rato para hacer ejercicios. Y tranquila, dejé a los niños con tu vecina. Descansaba un poco y viendo que es un poco tarde y que estaba cerca de donde trabajas, me quedé aquí a esperar a que salieras.— respondía el castaño.

_ Agradezco que me hayas esperado, aunque no es necesario que me esperes afuera en el trabajo.— dijo la albina.

_ No tengo problemas con ello, lo que sea para mi linda hermana y madre de nuestro hijo.— comentaba el deportista.

Así Linka y Lynn caminaron para ir al apartamento. Lynn tomaba de la mano a Linka, puesto que ahora es su pareja, no por nada son padres de un hermoso bebé, al que Lynn espera que sea un gran y reconocido atleta así como él.

Mientras caminaba ambos hermanos pasaron al lado de unos tipos, quienes al ver a Linka le lanzaron algunos piropos a ella.

_ Oye lindura, ¿No quisieras pasar la noche con nosotros?— dijo uno de los tipos.

_ Deja al imbecil que está contigo y ven con nosotros, te vas a divertir mucho más.— comentó el otro sujeto.

Linka no dijo nada y siguió caminando, Lynn por su lado no le gustó para nada que esos tipos le dijeran esas cosas a su amada novia. Por lo que fue directamente con ellos para así se arrepientan de lo que dijeron.

_ ¿Que fue lo que dijeron bolas de ineptos? Quiero que se disculpe con mi novia o sino las cosas se pondrán feas.— dijo Lynn a los tipos.

Linka se dio cuenta de lo que estaba haciendo Lynn y sabía que nada bueno iba a pasar. Por lo que fue a detenerlo para evitar que cometa una locura.

_ Lynn ya déjalos, no vale la pena discutir con esos hombres. Ya vámonos.— le dijo Linka a su hermano.

_ ¿Lynn? Jajajaja, vaya nombre de niña te dieron Jajajaja.— se reía el primer tipo.

_ ¿No quieres ponerte un vestido lindo? ¿Quieres hacerte una manicura o una pedicura? ¿O arreglarte las pestañas?— decía el segundo tipo.

Los dos sujetos se reían por el nombre del deportista, este último sentía que su sangre estaba hirviendo, sacaba vapor de sus oídos de la ira que sentía. Por lo que sin mediar palabras el deportista se abalanzó sobre los dos sujetos y comenzó a darles la paliza de sus vidas.

Ambos sujetos trataban de defenderse, pero para su mala suerte es que Lynn es experto en combate cuerpo a cuerpo y maestro en varias técnicas de pelea, por lo que la ventaja era ampliamente a favor para Lynn.

Linka sólo veía a su hermano golpear a esos tipos, aunque no estaba a favor de usar la violencia en este tipo de situaciones, sabía y de sobra que Lynn no es la clase de personas que lidia sus problemas con el diálogo. Además de que esos tipos se veía de lejos que no se iban a disculpar de las cosas que le dijeron a ella y a Lynn.

Minutos después Lynn había ya acabado de darle una buena dosis de puños a esos tipos, los cuales yacían en el suelo con sus rostros todo molidos y con algunos dientes caídos. El Loud atleta se acercó a ambos para decirles algo.

_ Si vuelven a burlarse de mi nombre y de tratar de ligar a mi novia, créanme que no seré gentil para la próxima. Esto que acabo de hacerle es lo más leve que puedo ser.— advirtió Lynn a los tipos.

Ya con eso Lynn volvió con Linka y siguieron su camino hacia el apartamento. Linka se dirige a su hermano para decirle algo.

_ Lynn, no toda la vida tendrás que solucionar las cosas a golpes. Suficiente era llamar a la policía y decirles que pasó.— dijo Linka a su hermano.

_ Puede que si, pero siempre hay personas que no entienden con palabras y solo aprenden a los golpes. Aparte les dejé un mensaje de no volver a dirigirte la palabra o que te lancen piropos.— respondía orgulloso el castaño.

La albina sólo suspiró, aunque en parte su hermano tenía razón, de que algunas personas solo aprenden a los golpes, y también no le gustó para nada que esos tipos piensen que ella es de esas mujeres que venden sus cuerpos a desconocidos.

Ambos llegaron al apartamento, en donde Linka fue a recoger a sus hijos, cargó a su bebé Lacy y entró al apartamento junto al resto de sus hijos. Lynn tomó a su hijo y comenzó a jugar con él.

_ Me iré a tomar una ducha y luego preparo la cena.— avisó la albina.

_ Descuida, yo cuido a los niños, tú descansa un poco, te lo mereces.— respondió el castaño.

Sin más la albina hace caso a lo dicho por su hermano, fue a su cuarto en donde se quitó la ropa y procedió a ir al baño y darse una ducha.

Varios días pasaron en donde todo parecía ir bien, Lynn se quedaba en casa cuidando de los niños mientras Linka iba a trabajar, en la mente de Linka pensaba que quizás Lynn es igual que Loni, en el sentido de que él quiere tener algo serio con ella y mantener a su familia.

Tan equivocada no pudo estar de su hermano amante del deporte. Esto debido al comportamiento que ha tenido Lynn en los últimos días. Puesto que se le veía muy sobreproctetor con ella, en el sentido de que no permite que ningún hombre se le acerque, solo a mujeres y niñas, ya lo que son adolescentes mayores de 17 años y adultos no permite que le hable a ella.

Esto claro que a Linka no le gustaba esa actitud que si se le puede decir de algún modo "tóxica" de su hermano. Si, está bien que se preocupe por ella, pero el alejarla de algunos conocidos, como sus compañeros de trabajo y algunas personas que apenas ha tenido una breve platica ya se le puede considerar enfermizo, pero lo peor estaba por venir.

Un día mientras Linka estaba en su hora de descanso fue a servirse una taza con café. Mientras le echaba azúcar unos compañeros de ella aparecieron y uno de ellos se dirige a ella.

_ Oye Linka, ¿Tienes planes para esta noche?— preguntaba el hombre a Linka.

_ Más que estar en casa con mis hijos, no, no tengo nada mas que hacer. ¿Por qué la pregunta Keith?— preguntaba ahora Linka.

_ Te preguntaba porque en la noche le haremos una fiesta de cumpleaños para el señor Nosborn, y queríamos invitarte.— respondía Keith a Linka.

_ ¿Una fiesta de cumpleaños? Podría ir, si es para el señor Nosborn entonces no tengo problema. Solo denme la dirección en donde será y ahí estaré.— aceptaba la albina ir.

Así Keith le dio la dirección a Linka en donde se llevaría a cabo la fiesta. Más tarde Linka sale de su trabajo y como en días anteriores, Lynn le estaba esperando. No dijo nada y se fue de ahí junto a su hermano.

_ ¿Que quieres hacer para mas tarde, Linka? Podemos realizar algún tipo de ejercicios para ambos y que puede ser divertido.— decía Lynn a su hermana.

_ Sabes que el ejercicio no es lo mío. Y sobre eso, me invitaron a ir a la fiesta de cumpleaños de mi jefe y quisiera ir.— dijo Linka a Lynn.

_ Si vas a ir entonces yo también voy.— respondía sin pensar el castaño.

_ Eso si que no, de ninguna manera pienso dejarte ir conmigo. Si lo haces apuesto que harás alguna escena que podría arruinarlo todo.— se negaba la albina.

_ No voy a hacer nada de eso. Solo iré contigo y disfrutar de la fiesta. Por favor, te prometo que no haré nada malo.— prometía el atleta.

Por su lado Linka dudaba en dejar que Lynn la acompañe en ir a la fiesta de cumpleaños de su jefe, más sabiendo el como su hermano se ha comportado en los últimos días. Además de que debía de quedarse en casa cuidando de sus hijos. Vio a su hermano y como este le ponía esa cara que sus hermanos suelen poner, una que odia y que es su debilidad.

_ Está bien, dejaré que me acompañes, siempre y cuando no hagas alguna tontería.— decía Linka aceptando.

_ Como dije, no haré nada de eso.— juró el atleta.

Ambos hermanos llegaron al apartamento, en donde Linka se alistó para ir a la fiesta de su jefe. Fue a dejar a sus hijos con su vecina, donde le dejó un dinero por si ocurre algo. Lynn se había preparado también para acompañar a su pareja.

_ Ya estoy listo, ¿Lista para ir a la fiesta?— preguntaba el castaño.

_ Estoy más que lista, será mejor irnos pronto y venir muy tarde.— respondió la peliblanca.

Salieron del apartamento y fueron con rumbo al lugar en donde sería la fiesta. Linka tenía anotado la dirección del lugar, tomaron un taxi y fueron a dicho sitio. Mientras estaban dentro del taxi Lynn aprovechó en poner su mano sobre la pierna de Linka, dando un claro recordatorio de que él es su pareja ahora.

Llegaron al lugar el cual es una discoteca, bajaron del taxi y entraron al lugar. Dentro se encontraban algunos de los compañeros de trabajo de Linka. La albina fue a buscar a su jefe para felicitarlo.

_ Felicidades señor Nosborn. Espero disfrute de su fiesta de cumpleaños.— dijo Linka a su jefe.

_ Muchas gracias señorita Loud. También espero se la pase bien en esta fiesta.— respondía el señor Nosborn.

Con eso Linka y Lynn fueron a la pista de baile en donde bailaron un poco, Linka charló con sus compañeras, mientras Lynn fue a la barra de comida y se sirvió algo de comer.

Fue así hasta que Linka volvió a la pista de baile junto a sus compañeras, mientras bailaban otro compañero de Linka apareció y se acercó a la albina.

_ Hola Linka. ¿Gustas bailar conmigo?— preguntaba el tipo a Linka.

Antes de responder Linka vio que si Lynn no estuviera viendo, lo vio que estaba en la barra de comida, distraído comiendo de lo que había ahí. La albina vio a su compañero y le dice.

_ Porque no, vamos a mover el esqueleto.— respondía la albina.

Así la albina fue a la pista de baile y comenzó a bailar un poco acompañada de su compañero, quien se movía al ritmo de la música. Las canciones pasaban y llegó un momento en donde todos bailaban muy juntos, a lo que Linka y su compañero bailaron muy pegados.

Lynn por su lado se había dado el gusto de comer lo que había en la barra, estaba por volver con su amada novia. Veía por todos lados para encontrarla, no era nada difícil, más aún que es la única persona en el lugar con el cabello blanco.

Pudo localizarla y al hacerlo se llevó una desagradable sorpresa, y es que otro hombre estaba bailando junto con ella. Y peor aún, veía como ese tipo tenía una de sus manos en la cintura de su hermana, esto claro no le gustó en lo absoluto. Fue a donde estaba Linka y alejarlo de ese tipo.

_ ¿Se puede saber que está pasando aquí?— dijo Lynn muy serio.

_ Nada, solo estaba bailando con Linka. ¿Algún problema?— respondía el compañero de Linka.

_ Si que lo hay, yo vine junto con ella y es conmigo con quien debe de bailar. Así que hazme le favor y vete.— respondía el castaño.

_ Tranquilo amigo, ni que me la fuera a robar. Solo pasábamos un rato divirtiéndonos.— respondía el tipo.

_ Lynn por favor, no hagas una tontería. Solo estábamos bailando nada más.— calmaba Linka a su hermano.

_ Pues para mí no lo parecía. Vi como este tipo de tocaba, sin contar la forma en cómo te veía. No dejaré que te aleje de mi lado.— dijo Lynn ya un poco molesto.

_ ¿Y que vas hacer? ¿Golpearme? Dudo que tú puedas.....

El tipo no terminó de hablar ya que fue callado de un puñetazo de parte de Lynn. El castaño estaba furioso, no sólo por que este sujeto estaba por burlarse de él, sino de que dejaba entender que sí quería ligar con Linka y llevársela lejos de él y posiblemente de sus hijos.

Por su lado el compañero de la albina no se quedó atrás y se lanzó a pelear. Los invitados al darse cuenta de lo que ocurría se alejaron para no ser víctimas inocentes. Lynn no dejaría que ese tipo se ría en su cara y le quite el amor de su vida, le propinó varios golpes que capaz lo deje con marcas que le durará meses.

Linka trataba de separar a su hermano y evitar que cometa una estupidez. Pero lamentablemente no podía, no es tan fuerte como su hermano, aparte que estaba en modo desenfreno, por lo que era casi imposible detenerlo. A lo que Linka pensó en algún plan para detenerlo.

Fue ahí que una idea cruzó por su cabeza, no era la mejor pero no tenía nada más. Sin previo aviso le dio una patada en los bajos a Lynn, acción que claramente hizo que se detuviera. Su compañero estaba en el suelo muy adolorido producto de los golpes. Linka al ver lo que hizo su hermano la llenó de rabia, Lynn había llegado muy lejos con esto de los celos, sin más se fue del lugar muy molesta por el alboroto que su hermano hizo.

_ L-L-Linka.... espera.... n-n-no quería hacerlo.— dijo Lynn muy adolorido.

Con las pocas fuerzas te tenía debido a ese golpe bajo se levantó y fue tras de su hermana. Linka estaba muy molesta, ya con esto dejaba claro que Lynn es alguien posesivo y muy dramático. El castaño se acercó a su hermana y tratar de arreglar las cosas.

_ Perdón Linka no quería hacerlo, es que vi como ese tipo te veía y te tocaba y eso me.....— fue interrumpido.

_ ¡Solo cállate! ¡¿Tienes idea del show que acabas de hacer?! Y solo eso, desde que me dijiste que me amabas y posteriormente a eso quedara embarazada de ti te has vuelto muy paranoico y muy posesivo conmigo.

_ Cada vez que estoy cerca de algún hombre, sea quien sea tú siempre llegabas a separarme y alejarme de ellos. ¡Yo no soy un objeto al que tengas que cuidar! ¡Ya no tolero esa actitud tóxica que tienes! Si sigues así posiblemente me tendrás aislada del mundo, y no pienso que eso pase.

_ Pero Linka.... esto lo hago porque te quiero mucho, eres la mujer que siempre he deseado tener a mi lado.— dijo el castaño a su hermana.

_ La forma de como me muestras tu amor no es la correcta, si quieres seguir con ese comportamiento será mejor que te vayas. Quiero que te alejes de mí, recoge tus cosas y largate, y ni pienses que te llevarás a Lacy, él se quedará conmigo quieras o no.— dijo Linka muy contundente.

Sin más Linka se fue dejando a su hermano, el cual se quedó estático por lo que le dijo su hermana. Unos días después Lynn se fue del apartamento luego de tratar de convencer a su hermana de que cambiaría, pero sin éxito alguno. Tomó sus cosas y se fue para ya nunca más volver, dejando al amor de su vida y a su hijo.

Fuera del sueño.

Linka se levantó luego de haber tenido ese sueño, no importa cuánto tiempo pase, o que tanto intenta enterrar esos recuerdos amargos que ha pasado. Estos siempre vuelven para atormentarla y hacerle recordar de que sus hermanos la dejaron con sus hijos.

_ Por más que trato de reprimir esos recuerdos no puedo, me perseguirán hasta el día que muera.— dijo Linka sobre sus sueños.

En eso Loni se levantó al sentir que Linka se había levantado, al verla se le veía con una mirada seria, además de ver a la nada misma.

_ ¿Linky, ocurre algo? ¿Tuviste una pesadilla?— preguntaba Loni.

_ Algo parecido. Sabes, siempre me he preguntando como hubieran sido las cosas si los chicos no me hubieran abandonado. Si ellos no se hubieran comportado de manera egoísta y que fueran como tú, tú me has ayudado en todo y no te fuiste a seguir con tu sueño de ser diseñador de moda.

_ Y no sólo eso, también me entristece ver a mis hijos sin sus padres. Ellos deben de pensar que sus padres no los quieren y que para ellos son un error que no debió ocurrir.— contaba Linka a su hermano.

_ No tienes porque pensar en eso, los chicos son unos tontos al dejarte sola con los niños y no seguir ayudándote. Puede que yo haya sido un poco despistado años atrás. Ahora mírame, si aun fuera un despistado no tendría todo lo que tengo actualmente.

_ Tampoco olvidemos que los chicos solían decir que yo era un tonto, cuando la realidad es que ellos son los tontos al dejarte. Más allá de que seamos padres de un hijo y también siendo hermanos, tú me importas mucho Linky, eres y serás la persona que amaré y ayudaré en todo, también a los niños no pienso dejarlos solos, ellos también son muy importantes para mí.— dijo Loni a su hermana.

_ Realmente te agradezco mucho que sigas estando aquí conmigo y ayudarme con los niños. Para ellos eres su única figura paterna, y ellos son felices al verte cuando vienes a visitarnos. También te agradezco por todo lo que has hecho por nosotros.

Tanto Loni como Linka se acercaron y se besaron en los labios, Linka estaba agradecida de que Loni no fuera como el resto de sus hermanos, quienes por su estupidez y su egoísmo la dejaran sola con sus hijos y no hacerse responsable. Loni en cambio siguió con su responsabilidad como padre, y también él le ha dado todo lo que tienes para ella y sus hijos.

_ ¿Ya te sientes mejor?— preguntaba Loni.

_ Si, ya me siento mejor ahora. Gracias Loni.— respondía la albina.

_ De nada Linky. Que duermas bien mi linda hermanita.— dijo el rubio a su hermana.

Ya con eso Linka y Loni volvieron a dormir en donde el rubio abrazó a su hermana desde atrás para así se sienta segura y que no volviera a tener un mal sueño. Linka sentía los brazos protectores de su hermano y padre de su segundo hijo, esto es algo del cual deseaba que nunca acabe y que siga así hasta el día que deje este mundo.

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Hola amigos míos. ¿Cómo están? Espero que bien.

Bueno, como les había dicho en este capítulo se nos contaría el como Lane y Lynn dejaron a Linka y a sus hijos. Donde cada uno la dejaron de maneras distintas pero que a la vez fue por pura estupidez de ambos hermanos.

Más adelante habrá capítulos así, en donde se contarán como los demás hermanos dejaron a Linka y lo haré de este modo, en contar dos casos en un solo capítulo y no tener que dedicarle un solo capítulo para un hermano.

En el siguiente capítulo será un momento familiar, en donde Linka, Loni y los niños pasarán un día en familia, y también habrá algo del cual algunos quizás se estén preguntando cuando ocurrirá y que desde hace unos capítulo atrás se ha hablado mucho. Eso ya lo sabrán.

Sin nada más que decir los dejo con mis angelitos para despedir este capítulo.

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