-Bella querida mira cómo te lastimaste- susurro la abuela de Marco.

-Tranquila bu, estoy bien- le dije para tranquilizarla.

-¿Y tú como se te ocurre asustarla?- regaño a su nieto.

*Flashback*

-Marco tengo miedo- dije subiendo a la que iba a ser mi bici- ¿Y si me caigo?

-Princesa tranquila, ya lo hiciste sola varias veces- me recordó mirando a mis ojos- Todo va a estar bien ¿De acuerdo?- asentí y comencé a pedalear.

-Okey, aquí voy- dije para mí- Solo respira Bella- suspire y acelere un poco.

Estaba yendo muy concentrada por una calle de la casona, cuando escuche que me asustaron.

-¡¡TE ALCANCE PEQUEÑA!!

-MIERDA- grite asustada, eso hizo que perdiera el equilibrio en la bicicleta y ¡PUM!

*Fin del Flashback*

-Tranquila bu, no se rompió nada- murmuro el causante de que me raspara el codo.

-Cállate si no quieres que te de unas nalgadas- solté una carcajada por lo que había dicho Fátima.

-Me parece perfecto bu- dije aun riendo.

- Ya vuelvo, voy a buscarte algo para tomar- me dijo.

Vi que se fue hacia la cocina, estaba por hablar cuando siento la respiración de Marco en mi oreja.

-¿Así que te parce bien que mi abuela me de unas nalgadas por asustarte?- me seguía riendo- ¿Qué te parece si mejor te las doy yo a ti?- me puse seria, lo mire con los ojos bien abiertos. Él ya había vuelto a su lugar y me miraba con una sonrisa pícara en sus labios.

-Toma cariño- agarre el vaso de limonada que me daba Fátima.

-Bien, ya es hora de irnos pequeña- confeso Marcos.

-Aun no, ven- dije agarrando su mano y llevándolo conmigo.

-Princesa la última vez que me dijiste ven, terminaste haciéndome una mamada en el baño de la escuela- frene de golpe y gire para verlo

-Cállate- dije tratando de no hacer contacto visual con él.

-¿Te dije que me gustas mucho cuando te sonrojas?- soltó.

-N-no- respondí para seguir caminando un rato más- Llegamos- dije.

-¿Y qué haremos?

-Acostarnos a mirar un rato las estrellas- confesé mientras señalaba el cielo con la cabeza- Siempre lo hacíamos con Sara en el patio de mi casa y desde lo que paso no lo volví a hacer- conté.

-Ven- susurro agarrando mi mano y haciendo que mi cabeza quedara recostada en su pecho.

-¿Te cuento algo?- pregunte mientras que con mi dedo acariciaba uno de los tatuajes que tenía en su brazo.

-Claro, cuéntame- me respondió acariciando mi espalda.

-Con Sara decíamos que ella iba a estar en la estrella más brillante- trague el nudo que se estaba formando en mi garganta- y yo en la segunda a la derecha, como dicen en las películas de Disney- le conté señalando una estrella- Y que así íbamos a estar siempre juntas- sentí como mis ojos ya se iban humedeciendo- Éramos muy fans de ellas.

-¿Eran muy unidas no?- pregunto Marco, mientras seguía acariciándome.

-Muy- susurre- La extraño tanto- confesé sorbiendo mi nariz.

-Lose pequeña, lose- respondió- Pero ahora me tienes a mí ¿Lo sabes verdad?- me susurro apretándome más a él.

-Ajam- confesé en un suspiro- Te quiero piojoso.

-Y yo a ti princesa mía- respondió depositando un beso en mi cabeza.

Y en ese lugar, abrazados, entre besos, riendo, llorando justo en ese momento bajo las estrellas nos olvidamos del tiempo, de los problemas, del resto del mundo, solo importábamos nosotros.

30 de abril del 2019.

Bella

Si, ya nos encontrábamos a fines de abril, faltaba poco más de un mes para la graduación.

¿Qué voy a hacer con mi vida? Todavía no lo sé.

¿Voy a seguir con lo que tengo pensado? Sí, eso lo tenía claro.

Nos encontramos con Chiara en las gradas de la cancha de futbol. ¿Cuál era la razón? Simple los chicos. Nos dijeron que los esperemos luego de clase y que nos llevarían a un lugar.

-¿Bella como que todavía no mandaste tu solicitud a la universidad?- pregunto mi amiga mientras nos sentábamos en las gradas.

-Pu-pues- no sabía que decirle- Todavía no encontré adonde quiero ir- mentí.

-Ve a la de Madrid conmigo- dijo.

-Sí, puede ser- susurre.

-O a la que vaya Marco- al ver que no respondía nada me pregunto- ¿Sabes a cual va ir el verdad?

-No lo sé- conteste girando para verla- Todavía no hablamos de eso- lo cual era cierto, de lo único que hablamos fue de que queríamos estudiar.

-Entonces tendrían que hablarlo, ya están por cerrar las inscripciones- murmuro volviendo a mirar el entrenamiento.

-Como tú digas jefa- respondí de forma graciosa, volvió a mirarme entrecerrando los ojos, odiaba que la llamara así.

Un rato después nosotras empezamos a babear porque Marco y Leo se habían quitado las camisetas. Así dejándonos ver sus torsos y abdómenes (que estaban muy bien trabajados).

También note que las animadoras estaban entrenando a un costado de la cancha. Si, ahí estaba Ana con su uniforme más corto que mis ganas de vivir queriendo llamar la atención de nuestros chicos. Ella vio que nosotras nos encontrábamos allí sentadas.

-Víbora- susurro Chiara al ver que Ana se acercaba a los chicos.

No le conteste, estaba con la mirada fija en ellos. En ella mejor dicho. Se estaba riendo a carcajadas mientras manoseaba a Marco. La vena de mi cuello iba a explotar de furia, Ana veía como los miraba y se acercaba cada vez más.

-Oye Be, no le des importancia- dijo mi amiga poniendo su mano en mi hombro- Solo quiere llamar la atención y hacerte enojar.

Yo no le contestaba, no podía sacar la mirada de ambos.

Marco giro la cabeza para ver donde estaba yo, a lo cual baje la cabeza haciéndome la tonta, no quería que me viera en ese momento, estaba muy enojada, no con el sino con ella. Cuál era la necesidad de que fuera así.

-Levanta la cabeza, no dejes que vea que eres débil- me susurro Chiara.

La mire y le hice caso, justo en ese instante observe como Marco se soltaba del agarre de Ana, le decía algo a su amigo el cual estaba terminando de agarrar sus cosas e ir al vestuario.

-TE ESPERO EN EL VESTUARIO- le grito cuando Marco comenzó a correr hacia la dirección donde nos encontrábamos nosotras.

Este le levanto el pulgar, se giró para seguir corriendo, desvié la mirada unos centímetros para ver la cara de enojo que tenía Ana.

-Ey pequeña- dijo agitado.

-Hola- murmure secamente.

-Mírame- susurro agarrando mi cara para que lo mirara a los ojos- Solo quiere hacerte enojar ¿de acuerdo?- dijo mientras acariciaba mis mejillas.

-Pues lo logro- le respondí.

-Princesa- soltó- No tienes nada de lo que preocuparte- repitió- Lo digo en serio.

-Lo sé- dije débilmente.

-Bien, entonces ahora dame un beso- susurro sonriendo y acercándose a mis labios.

Nos separe, mire donde estaba ella, le sonreí haciéndole "fuck you". Marco vio la escena, volvió a mírame levantando una ceja y con una sonrisa pícara.

-Así se hace amiga- dijo Chiara felizmente- Marca territorio- repitió.

-Guau- eso fue lo único que dijo el chico que tenía delante.

-¿Qué?- pregunte elevando los hombros.

-Nada- me respondió reprimiendo una sonrisa.

-Eso me parecía- solté- Ahora bésame- le susurre juntando nuestros labios.

-Oigan- nos llamó mi amiga moviendo sus manos- Sigo aquí, por si no sabían.

-¿Pasa algo?- le pregunte.

-Si.

-¿Qué?- pregunto Marco.

-QUE TE DEJES DE COMER A MI AMIGA DELANTE MIO- grito.

-Oye, yo no digo nada cuando Leo te besa delante mío- reproche.

-Oigan, escuchen, espérennos en el estacionamiento- soltó mi piojoso.

-Bien- dijimos al unísono.

-Bien- afirmo el, se estaba por ir cuando le grite.

-Oye- me miro haciendo una seña para que siga- Si se te vuelve a acercar juro que le voy a arrancar esas extensiones de rubia tonta que tiene.

Nos encontrábamos los 4 de camino a un restaurante de comida rápida.

-Amor tendrías que haberla visto a Bella- le contaba Chiara a su novio.

-Sí, algo me entere- dijo Leo.

-Necesito que Ana se vuelva a acercar a Marco- deje de reírme y la mire elevando una ceja.

-¿Qué? ¿Por qué?- le contesto su novio.

-Le dijo a Marco que si se le volvía a cercar le iba a arrancar las extensiones que tenía, Y ESO NECESITO VERLO- conto mi amiga.

-¿De verdad dijiste eso Bella?- me pregunto Leo.

-S-si- confesé tímidamente.

Gire mi cabeza para mirar al chico que estaba manejando y lo encontré con la mirada en mí.

-La mirada en la carretera- le dije sonriendo, moviendo su cara.

15 minutos después ya nos encontrábamos en McDonald. Estábamos esperando a nuestros amigos, los cuales se habían ofrecido a ir a buscar la comida.

-Sabes- levante mi mirada para verlo- Me gusto verte en plan celosa- hizo que me sonrojara.

-No estaba celosa- mentí.

-Si claro, como tú digas princesa- soltó pasando su brazo por encima de mis hombros a la vez que reía.

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Nota de la Autora.

Perdón por lo tarde que subí el capitulo, peo tuve un problema con Word y no podía abrirlo ni usarlo y recién lo puede solucionar. Se que es tarde y todo pero no lxs quería dejar sin capitulo.

¿Quién mas necesita ver como Bella le arranca las extensiones de rubia tonta a Ana? Porque yo si.

Moress si les gusto el capitulo no olviden votar y seguirme para que se enteren cuando subo nuevo capitulo.

También quería agradecerles las 663 lecturas que tiene en este precisó momento y encima esta numero 95 en el #depresionadolescente. MUCHISIMAS GRACIAS. No tengo otras palabras.

Igualmente saben que los días de actualización son los Lunes y Viernes a las 22:10 (HORA ARGENTINA). Síganme en mi Instagram "maruchabooks" donde subo cosas del libro y que tengo pensado una sorpresa cuando lleguemos a las 1000 lectores.

Nos vemos el viernes con el próximo capitulo.