Había vivido toda su vida sin rumbo, sin encontrar un compañero con quien compartirla y ahora sentía que al fin esa búsqueda había terminado.

* * *

POV MAGNUS

Entramos a mi antigua habitación riendo, las manos de Alexander una en mi vientre y la otra en mi espalda, sus labios, su lengua acariciando con una mezcla de necesidad y ternura.

No puedo evitar pensar en que si no tuviera medio embarazo, tiraría a Alexander sobre esa cama, mezclando su olor y el mío, y lo haría completamente...

Un medio gemido, medio gruñido se me escapa cuando él muerde mi labio inferior con una sola palabra: "Tuyo".

Se separa de mí, después de lamer con cuidado donde ha mordido. Abro mis ojos entonces y me encuentro con los suyos tan azules: -Ya soy tuyo, Magnus.

Debe ver el "¿Por qué lo dices ahora?" reflejado en mi rostro porque me responde con una imagen mental de mí empujándolo a la cama y después...

-Oh -una risita se me escapa, mis manos van a sus caderas. No me arrepiento de ser de los afortunados en lograr un embarazo, pero justo ahora quisiera poder pegarlo a mi cuerpo.

-Me estás matando con esas imágenes, Magnus -Alexander gruñé, y se pone al lado mió, una de sus manos nunca deja mi vientre, la otra aferra un lado de mi cadera como hice yo antes. Sus labios van a mi cuello, siento su lengua recorrer mi piel.

"Pronto -él habla, sin despegar sus labios y sus manos de mi cuerpo-, sólo un par de meses más y podrás hacer conmigo eso y más, todo lo que quieras. Soy tuyo".

Un gemido se me escapa, por sus palabras, por sus manos colándose bajo mi ropa, acariciando y encendiendo mi piel.

"Mientras tanto, déjame amarte y hacerte disfrutar"

Entonces lo hace, sus manos comienzan a quitar mis prendas, una tras otra caen, sus manos y su boca no dejan de arrastrarse por mi piel conforme ésta queda descubierta.

Se arrodilla frente a mí, siento el borde de la cama tras mis rodillas pero él me sostiene fuertemente mientras su boca encuentra mi duro miembro. Su boca y su lengua recorren cada centímetro de mi piel latiente, mi abultado vientre no me deja verlo, así que sólo cierro los ojos y disfruto del inmenso placer que me da, y de las olas de amor que me manda en nuestro enlace mental, sin palabras, sólo sensaciones, una tras otra, hasta que mi orgasmo llega y es él quien me sostiene. Como siempre.

Cuando regreso al mundo real, estoy en la cama, ambos desnudos, él junto a mí, sus manos dejando suaves caricias en mi vientre.

-Hola -me dice con una sonrisa presumida.

-Hola -sale como un suspiro y eso lo hace reír más.

-¿Todavía aguantas otra, mi hermoso y embarazado Único?

-Uumm... ¿Qué tienes en mente?

-Me gustaría probar algo, creo que sería cómodo para ti...

Entonces una imagen mental de él acostado, y yo montándolo, aparece. Y eso basta para hacerme gemir y cuando veo sus piernas ligeramente abiertas y su mano acariciando su miembro ya duro, es suficiente.

-Está bien, sólo...ayúdame.

-¿Estás seguro? -su mano en mi vientre y la otra en su hermosa erección se detienen-. No quiero lastimarte.

"Nunca me lastimarías, Alexander".

Y no lo hace, él me ayuda a bajar sobre su miembro duro, llenándome, siendo uno nuevamente, sus manos en mi cadera, sus dedos sobre mi vientre mientras me muevo sobre él a un ritmo perfecto para ambos...

Mis ojos se cierran e hilos de colores aparecen tras mis párpados, brillantes, azules, verdes, dorados, y siento cada uno de ellos envolverme, acariciarme, unirme a él, a mi Único.

Sigo subiendo y bajando sobre él. Quiero preguntar qué es eso, si lo está mandando él, pero entonces él toca ese punto dentro de mí que hace explotar esos hilos de colores a la par que su voz suena en mi mente, "Te amo, Magnus, te amo", y sé que eso, esos lazos uniéndonos son nuestro amor.

Un lazo único.

CONTINUARÁ...

Creo que este capítulo quedó medio loco 😂