capítulo 9
- lo que yo haga o deje de hacer, a ti no te tiene que importar.- respondió serio y cortadamente.- vete de una vez, quiero estar solo.
- te lo vuelvo a preguntar... ¿están saliendo?
- ¡maldita sea! Que te importa lo que yo haga, tendrías que estar pendiente de tu esposa, no de mi.- lo miró con odio y dolor.- no puedo creer que me estés preguntando algo así. Tan sólo mirame.- se señaló a sí mismo.- crees que tendría esta apariencia si estaría saliendo con ella. Estoy así por ti, maldita sea.... Tan sólo déjame seguir adelante. Ya no me confundas más.- llevó sus manos a su cara tapandola para que no vea lo devastado que se siente.- yo ya quiero ser feliz ¿porque no lo entiendes? Quiero seguir adelante, cambiar de página. Ya no seas egoísta y déjame ser feliz.
- y-yo Baek...- se fue acercando al castaño.- lo s-sie...
- no te acerques más, ya me cansé. Ya estoy cansado de todo, de mi vida, de mis sentimientos hacia ti que se rehusan a irse, ya no lo soporto. Tan sólo desaparece de mi vida. Forma una familia con la mujer que amas.- estaba reteniendo las lágrimas que amenazaban con salir.
- vete de una vez ChanYeol.- la voz de LuHan retumbo en los tímpanos de Baek.- déjalo ya en paz.- escucho sus pasos acercarse al escritorio.
- tu no te metas, no sabes de que estamos hablando.- ambos se desafiaron con la mirada.
- lo sé todo.- lo fulmino con sus ojos de color miel.- así que será mejor que te largues, antes de que te parta la maldita cara.
Apretando la mandíbula, ChanYeol se fue dando un fuerte portazo.
- muchas gracias Lu.- destapó su cara y miro a su amigo.
- ¿estas bien? Te ves pálido...
- me duele un poco la cabeza, pero estaré bien.- llevó su cabeza al respaldo del asiento. Soltó un suspiro.- renuncie...
- ¿qué? - preguntó confundido el rubio.
- le di mi renuncia al presidente. Quiero desaparecer de la vida de los Park. Es lo mejor.
- entonces... te irás conmigo para dejar todo atrás.- el castaño sólo asintió.- me parece lo correcto.
- aunque tú hayas pedido que me vaya contigo a China, veo que hiciste lo mejor. Necesito este cambio.- lo tomó de la mano.- muchas gracias LuHan.
El rubio sólo sonrió.
- nos iremos este viernes ¿quieres que le avise a los chicos?
- no, no quiero que ellos sepan que me voy contigo. Sólo celebremos nosotros cuatro.
- de acuerdo.- asintió con la cabeza.- le avisaré a Kyung.- hubo un pequeño rubor en sus mejillas.
~☆~
La jornada de ese día se vio finalizada. Hyuna esperaba en la puerta del ascensor al castaño, mientras se abrochaba su gran abrigo marrón.
- tardas peor que una adolescente en su primera cita.- la peli negra se burló de él.
- que dices... tarde porque tenía que guardar algunos papeles.
- si como no...- rodó los ojos.
Baek se carcajeo suavemente.- vamos a comer, muero de hambre.
Ambos esperaron a que el ascensor llegará a su planta.
De tanto estar riéndose, no se dieron cuenta que el ascensor ya había llegado, abriendo sus puertas y dejando ver al futuro presidente y a su radiante esposa, parados mirandolos.
- ¡BaekHyun! - chillo feliz Joy.- hace mucho que no te veo.- lo abrazó estando ya adentro del ascensor.
A BaekHyun le empezó a dar mareos. Pero no se debía a Joy, sino que empezó a sentir que el lugar se hacía cada vez más pequeño y eso lo empezaba a alterar.
- Joy ¿cómo estas?
- ¡oh, muy bien! Vine a visitar al padre de ChanYeol. Le quería dar una buena noticia.
- cariño, creo que no tendrías que decirle.
- por supuesto que si, se que quieres que sea una sorpresa pero no puedo seguir esperando.- llevó sus manos a su vientre.- tendremos un bebé.
<< un bebé. >>
- vamos a hacer una fiesta para celebrar que muy pronto habrá un nuevo miembro.- Joy sonrió muy alegremente.- estoy de un mes, pero tendrán que guardar el secreto.- enredo su brazo al del alto.- estamos muy felices ¿verdad Chan?
- por supuesto que si.- llevó su mirada a su esposa y le dio un beso en la frente.
- Felicidades a ambos. Espero que su pequeño nazca saludable y fuerte.- felicitó Hyuna.- nos tenemos que ir.
- ¿son pareja? - preguntó Joy.
- n...- la interrumpió Baek.
- si somos novios, tenemos que celebrar nuestro aniversario ¿verdad Hyuna?
- s-si.- sus mejillas estaban muy calientes.
- Felicidades a ambos.- agarró la muñeca de Hyuna y se fueron rápido de ahí.
<< tendrán un bebé, un bebé, un bebé, un bebé. >>
<< serán felices, al igual que yo. >>
<< serán felices, serán felices, serán felices... >>
- Baek, detente.- Hyuna, lo frenó de golpe.- ¿quiénes serán felices?
- que... Yo no dije nada.- la miro confundido.
- no estoy loca, estabas susurrando "serán felices" - hizo comillas en las dos últimas palabras.- tanto tiempo encerrado en tu oficina te está volviendo loco.
- ah si...- sonrió forzosamente.- ¿que quieres comer? - cambio de tema.
- que te parece...- llevó su dedo a sus labios pensando.- ¡ah ya se! Spaghetti ¿que dices?
- me parece bien. Conozco un restaurante que hacen los mejores spaghetti de toda Corea.- ya podía saborear la salsa en su boca y el rico aroma que desprendía las albóndigas. Su estómago empezó a gruñir.
- desde acá puedo escuchar el ruido que hace tu estómago.-
- vámonos ya, antes de que se nos haga tarde.
Después de una rica y graciosa cena, BaekHyun llevó a la contraria a su casa, despidiéndose de ella y agradeciendo por la buena cena que habían compartido.
Una ves en su auto, tomó rumbo a su hogar. Al abrir la puerta, prendió la luz dejando ver su humilde hogar. No duró tanto en estar parado, ya que ahora estaba corriendo tapándose la boca, para después devolver todo lo que había cenado.
- que asco...- se froto el cuello para calmar un poco su garganta.
Tiró de la cadena y se levantó. Mirándose en el espejo, vio su propio reflejo todo demacrado, pálido, con ojeras un tanto notables y su rostro un poco más delgado de lo que solía estar.
- que patético me veo.- sonrió de lado.- ¿quién va a querer a alguien como yo? - río tristemente, haciendo que sus pómulos se noten más.- nadie... quiere a alguien como yo, estoy destinado a estar solo.- golpeó el cristal con su puño. Haciéndo caer algunos fragmentos al suelo.- así esta mi corazón, completamente fragmentado, clavandose fuertemente en mi pecho.
<< estoy completamente roto. ¿habrá alguien que sea mi salvación? >>
Él sólo anhela tener un pequeño rayo de luz que ilumine su triste corazón.
Que lo haga querer vivir de nuevo...
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