Con cada paso que daba, el tumulto de empleados se abrían lugar, dejándole espacio para pasar. Su semblante duro, sin emoción alguna le proporcionaba una mejor determinación a la hora de trabajar.

Ya pasaron dos meses desde la partida de LuHan y del 'hasta luego' que le susurró a BaekHyun en el aeropuerto antes de verlos desaparecer, por tiempo indefinido, a través de aquella puerta en la cuál minutos después despegaron con rumbo a China.

¿qué si alguien lo vio llorar? Por supuesto que no.

Bueno... tal vez algún empleado del aeropuerto. Pero desde ese día su semblante cambio a uno frío.

¿sus amigos preguntaban por Baek? Por supuesto que si y ya se estaba casando de responder: 'esta de viaje y no sé de él'

Pero trataba de estar lo más calmado posible.

Al entrar a su oficina, no se sorprendió por ver a ChanYeol sentado, esperándolo.

Desde ese día, siempre era lo mismo.

Soltó un suspiro y se sentó, quedando frente a frente.

- si no es por trabajo, te voy a pedir que te retires.- prendió su portátil.- tengo muchos asuntos que arreglar.

- ¿no sabes nada de él? - siempre era la misma pregunta.

- cuánta veces tengo que decirte... No sé donde se encuentra...- paso una mano por su cabello.- sabes, es algo irónico que estés preguntando por él, estando casado. Entiendo que sea tu amigo, pero esto ya está pasando los límites y me está cansando... - se froto sus sienes.- deja que BaekHyun haga su vida ¿es que el único que puede ser feliz eres tu?

- es que me preocupo por mi mejor amigo.- sacudió sus cabellos negros.

- no lo puedo creer...- río sarcasticamente.- ¿me quieres ver la cara de estúpido? ¿piensas que no se porque estas así? - contempló la expresión de ChanYeol cambiar rápidamente.- eres un maldito cobarde e imbécil ChanYeol.

- ¿lo sabes todo? Hasta lo...

- todo.- directo y frío, mirándolo a los ojos.- no sabes cuanto me hierve la sangre por querer matarte, pero sólo me detiene nuestra amistad de no hacerlo.- se levantó de su asiento y con determinación se dirigió a la puerta.- vete, antes de que tire todo a la mierda y acabe contigo.- agarró con fuerza el picaporte y la abrió.

ChanYeol en silencio, se dirigió a la salida, pero antes de estar completamente afuera escucho lo último que KyungSoo le susurró.

- sólo soportó esto porque él me lo pidió.- y la puerta se cerró, dejando a ChanYeol petrificado.

                         ~♡~

El agua tibia, la espuma de aquel objeto cuadrado esponjoso por el cuál desprendía un aroma a limón, mientras lavaba los platos después de disfrutar de la deliciosa comida de la madre de LuHan, la observaba desde la ventana como plantaba algunas flores en el jardín.

La señora Xiao no queria que BaekHyun lave los platos, pero el se opuso aunque su vientre creció durante estos cuatro meses, él seguía yendo a trabajar pero trataba de terminar su hora laboral lo antes posible. Hoy le tocaba el horario de la tarde.

Terminó de lavar, enjuaguar y secar los platos y se fue a su habitación a cambiarse para ir al trabajo.

                        ~♡~

En la entrada de la alta edificación, LuHan esperaba a su amigo, aunque el ahora en China trabajaba en una de las empresas de la familia Park y BaekHyun gracias al señor Park había conseguido un puesto de trabajo en la empresa de un socio durante años, la familia Oh.

Mientras bebía del café que tenía sostenido entre sus manos, esperaba sentado en el último escalón a que BaekHyun salga y vayan juntos a casa.

Escuchó la típica risa del castaño, miró por encima de sus hombros y lo vio acercarse hablando con el raro de su nuevo amigo Wu Yifan.

- ¡oh, Hannie! - BaekHyun se acerco trotando.

- oye, ya sabes que no puedes andar corriendo de ese modo.- se levantó del lugar donde estaba sentado, observando como Baek sólo sonreía rascándose la nuca.

- lo siento~ - canturreo pidiendo disculpas.- mientras estaba saliendo las náusea hicieron acto de presencia y este buen hombre...- palmeo el hombro del rubio alto.- fue de buena ayuda.

- verte vomitar, fue de lo peor...- hizo una cara asqueada.- y ni hablemos del olor... le tuve que dar una de mis pastillas de menta.

- como puedes ser así.- se llevó una mano al pecho, fingiendo que le dolió.- me hieres... LuHan dile algo.- formó con sus labios un puchero.

- ¿qué quieres que le diga? - alzó los hombros.- si comes de todo y después no lo puedes retener.

- con estos amigos, para que quiero enemigos.- BaekHyun refunfuño enojado.- ¡oh! Ese no es...

- ¡Tao! - gritó muy alto Kris, sin dejar que Baek termine de hablar.

Si Tao se encontraba en ese preciso momento entrando a la empresa, eso significaba que el hijo único heredero de las empresas Oh estaba rondando por aquel lugar.

Aquel joven de piel bronceada, de mirada que te llegaba a intimidar, de ojeras pronunciadas pero de una radiente y bonita sonrisa, se fue acercando a ellos.

- Hola chicos.- sonrió con aquella sonrisa que hacia derretir el corazón del alto rubio.- ¿ya se estaban yendo?

- si, ya terminamos nuestra hora de trabajo.- tomó la palabra BaekHyun, ya que Yifan se habia quedado mudo y embelesado con la presencia de Tao.

- que suerte tienen...- suspiro.- tal parece que hoy me quedaré hasta tarde, ser secretario de Sehun conlleva algunos sacrificios.- río entre dientes.

- ser secretario de alguien sin expresión alguna, de por si es algo molesto.- rodó los ojos LuHan.

- en eso tienes razón, pero Sehun no es alguien sin sentimientos. Ahora, es otra cosa si ambos no tratan de llevarse bien.- Tao lo miro de reojo aguantando una carcajada.- deberías darle una oportunidad.- aconsejo.

- jamás.- negó varias veces con la cabeza.- me mira fijamente y eso ya me espanta.

- tal vez esta interesado en ti.- aclaró Yifan.

- cierra la boca jirafa, el lo que quiere es molestarme. Además, se que esta interesado en Baek.- señaló a su amigo embarazado.

- como digas...- BaekHyun rodó los ojos y le resto importancia.- ¿no crees LuHan que es momento de irnos? - codeo en las costillas de LuHan, enviandole con una señal con la mirada para que dejen a solas a los futuros tortolos.

- ah si, bueno Yifan cuida bien de Tao.- le golpeó la espalda, alentando a su amigo.- y Tao, procura descansar algo.- el mencionado le asintió con la cabeza.

- bien, nos vamos yendo Lu o sino la rica cena de tu madre se va a enfriar.- ambos se despidieron y tomaron un taxi rumbo a casa.

- ¿podrás acompañarme a la cita?- preguntó BaekHyun mirando por la ventana.

- por supuesto que si, como siempre.- le agarró la mano y la apretó.- falta poco para saber si será un apuesto niño, igual al tío o una adorable niña.

- no importa si es un niño o una niña, este pequeñín será el más grande y maravilloso tesoro que la vida me pudo dar.

- y va a ser el consentido del tío.- LuHan acarició la panza de BaekHyun.

- y también serás el que se encargue de cambiar los pañales.
Ambos comenzaron a reír.