¿Alguna vez sentiste tanto miedo, que pensaste en abandonar todo? Fue lo último que escribió ella en su cuaderno esa mañana. Akira, temía no poder con las nuevas reglas que les habían pedido. Cuando bailaba con sus compañeras se sentía segura, pero cuando se trataba de presentarse sola frente a otras personas, no era algo que pudiera dominar.

Hwa se trepó a la cama e intentó animarla, el pequeño animalito sabía que su dueña estaba pasando por un momento difícil. Akira lo acarició y le agradeció su compañía. Respiró hondo y se levantó. Mientras, esperaba que su café estuviera listo, se puso a responder unos mensajes que le habían llegado.

Terminaba de hablar con su amiga al mismo tiempo que le daba el último sorbo a su café. Tomó su mochila y salió para el trabajo.

-Muy bien novela del demonio, tengo que terminarte de corregir hoy -dijo mientras tomaba el manuscrito de Lee Yunjo.

Mientras tanto, Misaky terminaba de pagar su café. Salió de la confitería y comenzó a caminar escuchando la canción que haría en su presentación individual, iba tan concentrada que no se percató por donde caminaba.

-¡Eres idiota! -le dijo el hombre al que había chocado y al que le había tirado todo el café encima.

-¡Oh! Lo siento tanto, no lo vi, lo siento tanto -respondió mientras buscaba un pañuelo en su riñonera e intentaba limpiarlo.

-¡No me toques! -exclamó el hombre, quién de un empujón la alejó de él.

-De verdad lo siento, yo solo... -dijo ella agachando la cabeza a modo de arrepentimiento.

El hombre sonrió con malicia.

-Arrodíllate ante mí -le pidió.

-¿Qué? -preguntó ella sorprendida ante ese pedido tan particular.

-Arrodíllate o tendrás que pagarme de otra forma -agregó en el instante justo que iba a tomarla del brazo.

Pero antes que eso sucediera, alguien lo detuvo a él.

-¿Cómo se atreve a pedirle esas cosas a una señorita? -le dijo enfadado.

-¿Quién eres tú? No te metas -exclamó el hombre.

Akira observó al joven que la había defendido, pero no lograba distinguir de quien se trataba ya que la capucha de su buso no le dejaba ver quien era.

-Lo haré -dijo ella -me arrodillaré.

-¡No! -exclamó el joven -qué ni se te ocurra.

-No me voy a poner a discutir con dos idiotas como ustedes, tengo cosas más importantes que hacer, mejor me voy - dijo el hombre -tuviste suerte esta vez, preciosa -agregó mientras le guiñaba un ojo y se marchaba de ahí.

-Viejo cochino - susurró Misaky -gracias por tu ayuda -dijo después dirigiéndose al muchacho.

Iba a comenzar a caminar cuando el joven la tomó del brazo y la llevó al pequeño pasadizo que había en ese lugar, de dónde él había aparecido. Allí se quitó la capucha, lentes y barbijo, revelando su identidad.

-¡San! -exclamó Misaky sorprendida -¿Qué haces aquí?

-Shh... -le dijo él tapándole la boca -no quiero que sepan que estoy aquí.

-Lo siento -expresó en voz bajita -es que me sorprendí. Pero... ¿Qué haces aquí, sin seguridad?

-No me lo crearías si te lo dijera.

-Te escapaste... como hace Seonghwa para ver a Akira.

-Algo así, quería ir a la chocolatería, mi jefe no nos deja comer, nos han puesto a dieta y entonces me escapé por unos chocolates, pero me descubrieron y tuve que huir.

Ella dio una carcajada de ternura.

-Pues... la chocolatería no esta muy lejos de aquí.

-Sí, pero no podré llegar, me vienen persiguiendo, tuve suerte de distraerlos y esconderme aquí, cuando vi lo que ese hombre te quería hacer, por eso salté. No me gusta que les falten el respeto a las mujeres.

-Eres el mejor de todos... me defendiste, aun cuando me odias.

-No te odio, solo creo que eres una persona muy especial.

-Quien sabe y esta persona tan especial que nombras termina enamorándote.

-Ya te hablé de eso Misaky.

-Esta bien... lo siento... no te molestaré más con eso. Haz roto mi pobre corazón ¿sabes? -dijo haciendo puchero -¿quieres que te lleve a la chocolatería?

-¿Qué? ¿Tú tienes auto?

-No, no tengo auto, pero si una moto, de hecho, iba camino a ella cuando me choqué con ese hombre. Puedo llevarte, como agradecimiento por salvarme.

-Tengo miedo de salir y ser descubierto.

-¿Piensas quedarte toda la vida aquí escondido? -el idol se encogió de hombros -iré a buscar mi moto, la traeré hasta esta ubicación y tú te subes ¿te parece?

San asintió.

-¡Espera! -exclamó antes que ella se fuera -¿Qué moto tienes?

-Una Hyosung GT 250 i, color azul.

-¿Qué? ¿Cómo es que tienes ese tipo de motos?

-Fue uno de los regalos que mi padre dejó para mí antes de morir. Iré a buscarla y te llevaré a la chocolatería -respondió ella y caminó a buscar su vehículo.

"Vaya... que mujer tan extraña. Es como una caja de sorpresas" pensó San mientras volvía a cubrirse el rostro.

Pasaron unos tres minutos y Misaky tocó bocina para que él supiera que ya estaba allí. El idol se acercó a ella y admiró esa moto tan fantástica.

-¡Ten! -dijo Misaky extendiéndole el casco.

El idol lo tomó en sus manos, observando el color rosa del mismo.

-Es de mi hermana, a ella le gusta mucho el rosa- le comentó -pero vamos, sube o sino te van a reconocer.

San no tuvo otra alternativa, se colocó el casco y subió a la moto. Misaky sujetó las manos del idol y las colocó en su cintura.

-Te puedes caer si no te agarras bien -le dijo.

Ella puso en marcha el vehículo y comenzó a manejar. Se detuvieron en un semáforo, cuando el idol le preguntó:

-¿Hace mucho que conduces esta moto?

-Hace poco saqué mi licencia, no me la querían dar antes porque decían que excedía el límite de velocidad. Me gusta la adrenalina.

-¡¿Y me lo dices ahora?! -exclamó el idol preocupado.

Misaky puso en marcha nuevamente la motocicleta mientras el idol se sostenía con fuerza de su cintura, temeroso de que ella aumentara la velocidad. Pasaron unos minutos y finalmente llegaron a la chocolatería.

-Bueno, ya estamos aquí, ve por tus chocolates -le dijo Misaky.

El idol se bajó de la misma, levantó la visera protectora del casco y le dijo:

-¿Quieres venir conmigo?

Ella sonrió emocionada y aceptó su invitación, estacionó su vehículo y ató ambos cascos con la cerradura para motos, a la rueda de la misma. De esta manera, los dos caminaron hasta el ingreso de la chocolatería.

-¿Cómo haremos para que no te reconozcan aquí? -le preguntó su fan antes de entrar.

-Llamé por teléfono para que cerraran una hora al público y poder elegir con tranquilidad mis chocolates -respondió el idol.

-Que ingenioso -dijo ella sonriente.

Una vez dentro del establecimiento, le dieron la bienvenida, sorprendidos por la visita que lo acompañaba.

-Ella es mi asistente -inventó el idol -le pedí que me acompañara.

Ella hizo una pequeña reverencia a modo de saludo.

-Bueno tienen todo el lugar para ustedes solos, pueden escoger con tranquilidad los chocolates que quieran. -les dijo uno de los empleados -cualquier cosa que necesiten, voy a estar aquí.

Los dos caminaron por el lugar, recorriendo los pasillos y descubriendo la variedad de chocolates que había.

-Siento que estoy en el paraíso -le comentaba San mientras iba colocando los que quería en una cesta.

-¿A quién no le gustaría estar aquí solo en medio de tanto chocolate? Las veces que hemos venido con Akira, no podíamos caminar de la cantidad de gente que había.

-¿Tú no quieres ningún chocolate? -preguntó el idol curioso.

-No, estoy bien. He venido con poco dinero.

-Escoge los que quieras, yo te los regalaré -comentó el idol.

-No, de verdad estoy bien.

-¿Vas a despreciar el regalo de tu bias?

Misaky dio una carcajada.

-Esta bien, escogeré uno -respondió tomando de un estante una cajita roja alargada.

-¿Y esos? Nunca me he llevado esa caja.

-Mi hermana me contó que estos eran los chocolates favoritos de mi madre y desde ese momento, cada vez que vengo aquí compro estos. Es como un pequeño mimo a mi corazón.

-¿No conociste a tu madre?

-No, no tengo recuerdo de mis padres, era muy pequeña cuando ellos murieron -dijo con una sonrisa nostálgica.

-Lo siento tanto.

-Esta bien, ha pasado tiempo ya.

-Entonces llevemos más de esos chocolates -comentó el idol, mientras colocaba en la cesta un par de cajas más.

De pronto, el teléfono de San comenzó a sonar, era Hoongjoong, quién estaba preocupado por su repentina ausencia. Le había dicho que habían quedado para ensayar una nueva coreografía y que él no estaba. San se disculpó por no avisar y le dijo que estaba en camino.

-Creo que es hora que te vayas -anunció Misaky.

-Sí, ¿crees poder...?

Ella dio una carcajada.

-Sí, te llevaré hasta la empresa.

-Gracias, te lo compensaré -respondió el idol.

-Puedes compensarme con una cita ¿Qué opinas?

En el rostro de San se dibujó una sonrisa nerviosa.

-Piénsalo y luego me dices -agregó Misaky mientras salían de la chocolatería.

Condujo hasta la empresa del idol y se despidió de él.

-¡Espera! -exclamó él -toma tus chocolates -agregó después entregándoselos en una bolsita.

-Gracias -respondió ella -suerte en el ensayo.

Él inclinó la cabeza a modo de despedida y entró al edificio. Misaky bajó la visera de su casco y arrancó su moto para marcharse de allí.

Por otro lado, Akira terminaba de corregir la novela de Lee Yunjo, feliz de poder sacarla de sus manos. Una vez que concluyó con la última palabra, suspiró hondo, y buscó la otra novela que Hanna le había encargado, cuando de repente le llegó un mail de la editorial que había aceptado su libro.

"Estimada Akira, hemos revisado su manuscrito con nuestros correctores expertos y nos han comentado que no necesita corrección, ya que la novela está muy bien escrita. Por lo tanto, felicidades por ese paso ya superado. Ahora procederemos a crear sus posibles portadas. A continuación, le enviamos un documento para que allí nos comente más o menos las ideas que tiene para la misma y como le gustaría que se viera.

Atte. Editorial Universo."

Akira sonrió muy feliz al recibir ese mail. Quería ponerse a completar el documento, pero sabía que si lo hacía no llegaría a tiempo con la corrección de la nueva novela que le había encargado Hanna, por lo que decidió esperar. Al regresar a su casa, le dedicaría un tiempo a esa actividad.

Por otro lado, el grupo terminaba con su ensayo, agotados, pero felices por el avance que tenían. Tenían una hora libre, para hacer lo que quisieran, claramente Seonghwa iría en busca de su novia, Mingi también quería ir a ver a Akira, por lo que ambos estaban pensando que excusa poner para ir a verla.

-Iré a ver a un amigo -comentó Seonghwa -volveré en una hora, lo prometo.

-No me falles, últimamente has estado muy irresponsable -le dijo Hoongjoong

-No lo haré, lo prometo -respondió y salió del edificio.

-Yo iré un rato a la biblioteca -comentó Mingi.

-Te acompañaré -anunció Yeosang -quiero ver si tienen un libro que hace mucho quiero leer.

-Pero si a ti no te gusta leer -expuso el idol.

-Ya lo sé, pero ese me tiene intrigado, quiero ir a buscarlo.

-Bien... vamos -suspiró Mingi indignando porque no podría ir a ver a Akira.

Seonghwa le pidió a Hosin, el cuidador de su casa que le trajera el auto y una cajita negra que había dejado en la mesa del bar. Una vez que el hombre llegó al lugar le entregó las llaves y la cajita al idol y comenzó a caminar para tomarse un taxi y volver a la casa del artista.

-¡Espera Hosin! Te llevaré y después me voy a lo de Akira.

-No es necesario, aprovecharé para ver a un amigo que trabaja en un taxi. Vaya con tranquilidad.

-Muy bien, tome... -le dijo el idol mientras le daba algo de dinero.

-No, no es necesario que me de dinero, yo puedo pagarlo.

-No, no quiero que gastes de tu dinero, acéptalo por favor -insistió el idol y Hosin lo recibió.

Seonghwa subió al auto y condujo hasta la casa de su novia, frenó en un semáforo y decidió llamarla para confirmar que ella estuviera en su casa. Akira le dijo que sí, que estaba llegando a la misma. El idol sonrió y continuó con su recorrido.

Estacionó frente a su condominio, antes de bajar buscó sus elementos para cubrirse el rostro, cuando la vio corriendo, traía puesto una pollera marrón con tablas, junto con un cancán color piel; una blusa de hilo tejida, color amarilla pastel con unas florcitas de girasol; y un saquito que llegaba hasta su cintura del mismo color y el mismo diseño que su blusa, junto a su icónica mochila color marrón que llevaba para todos lados.

El idol sonrió al verla, estaba muy bonita. Ella corría a toda velocidad, preocupada por llegar tarde y hacer esperar a su novio, iba tan apurada que no se dio cuenta por donde corría y terminó tropezándose y cayendo al suelo.

-¡Auch! -exclamó sentándose en el suelo y viendo que se había lastimado la rodilla -que torpe eres, Akira -agregó después.

-¿Estás bien? -dijo Seonghwa que rápidamente había bajado de su vehículo y había ido a socorrerla.

-Seonghwa que haces así, pueden reconocerte -respondió ella al ver que el idol no tenía cubierto el rostro.

-Te vi caer y salí rápidamente a ayudarte, me preocupé.

-Estoy bien, mejor entremos rápido antes que te vean -comentó mientras se ponía de pie o eso intentaba.

El idol notó el raspón que tenía en su rodilla, e inmediatamente la cargó en sus brazos y la llevó hasta su departamento.

-¿Qué haces? -le dijo ella en el camino -puedo caminar, fue solo un raspón.

Pero el idol no respondió simplemente se limitó a llegar hasta su ubicación.

-¿Cuál es la clave de tu puerta? -le preguntó.

-Yo la pondré, pero bájame primero.

-No, estás herida. Solo dime.

-1117-respondió ella. (si saben a que se refieren estos números, déjenmelo en los comentarios)

El idol colocó la clave y ambos ingresaron al departamento. Él inmediatamente la sentó en el sofá mientras iba por el botiquín.

-¡Estoy bien! -repitió ella -de verdad, no es necesario tanto show.

-No quiero que se te infecte, debemos curar la herida -respondió colocando agua oxigenada sobre la misma.

Ella dio un quejido de dolor.

-Y después me dices que no es nada -le dijo el idol al escucharla.

-A todos nos duele un poco cuando nos ponen ese liquido en cualquier herida -refutó.

Seonghwa sonrió y procedió a colocarle una bandita en la misma.

-¿Cómo serás el día que realmente me lastime de verdad? -dijo divertida -iré a quitarme el cancán y ponerme algo más cómodo -agregó después caminando hasta su habitación.

Luego de unos minutos, la feliz pareja se encontraba tomando un té y conversando sobre su día. Cada día que pasaban juntos era mejor, disfrutaban de su compañía y del amor que se tenían.

-¿Y no tienes novedades de tu libro? -preguntó Seonghwa, después de darle un sorbo a su té.

-Sí, hoy me enviaron un correo, me dijeron que la novela no necesita corrección, ya que esta muy bien escrita, que procederían a trabajar con las posibles portadas.

-Y claro que no necesita corrección, si la escribió la mejor escritora del mundo -comentó con una gran sonrisa -por cierto, ya se estrenó mi canción.

-Sí, fue una locura, la amé demasiado, los felicito por esa gran obra de arte -exclamó ella con emoción -tú estabas hermoso, bueno siempre lo estás -dijo después algo sonrojada.

-Me alegro que la hayas disfrutado, pero no iba a ese punto. -ella lo miró confundida -recuerdas que me dijiste que me contarías como se llamaría tu libro luego del estreno de mi canción.

-Cierto...

-Soy todo oídos -respondió el idol dándole otro sorbo a su té.

-Se llamará "Be with you".

Él idol sonrió enternecido.

-Ese nombre se me hace conocido.

-Pues si... es el nombre de una de sus canciones, creo que quedaba genial con la trama de mi historia, además que es una canción preciosa.

-Queda perfecto ese nombre, gracias por inspirarte en nuestras canciones. De hecho, tengo algo para ti, te lo iba a dar la otra noche que... ya sabes... así que lo traje para dártelo ahora -dijo mientras le entregaba la cajita negra.

Ella la tomó con alegría y la abrió, su rostro se llenó de emoción al ver tan bello regalo, lo tomó en sus manos cuando leyó lo que tenía grabado "I will be with you" (estaré contigo). El estribillo de la misma canción que había inspirado el título de la novela de Akira. Unas lágrimas brotaron de sus ojos, lágrimas de felicidad, e inmediatamente le dio un enorme y fuerte abrazo a su novio, agradeciéndole tan especial regalo.

-Necesitarás algo con que firmar tus libros ¿no? -agregó después.

-Es el mejor regalo, gracias, de verdad muchas gracias. Espero con ansias que llegué ese momento y que a la gente le gusté mi historia.

-Estoy seguro que todos amarán esa historia, confía en ti. Por cierto, ¿Cómo te estás preparando para la presentación individual?

-Ya tengo pensada que canción quiero bailar, pero lo que realmente me asusta es presentarme sola, hace mucho tiempo no hago algo así y la última vez que sucedió sufrí un ataque de ansiedad, fue horrible. La canción por la que titulé mi libro me ha ayudado mucho a tranquilizarme en momentos así, la escuchaba y sentía que estaban conmigo, que la letra de esa canción me sanaba el corazón, pero ahora me asusta un poco la situación, no quiero perjudicar a mi equipo.

El idol acarició dulcemente su mejilla.

-Así como dice nuestra canción: hasta que los copos de nieve se marchiten, hasta que florezcas tan hermosa como una flor de primavera, estaré contigo -le dijo besando tiernamente sus labios -siempre estaré para ti, cuando me necesites puedes venir a mi, yo nunca te dejaré sola, ni te soltaré la mano.

Ella sonrió y lo abrazó muy fuerte, agradeciendo sus dulces palabras. Pasaron un rato más juntos y luego Seonghwa se despidió de ella, debía volver a la empresa. Fue una tarde muy especial para ellos, Akira estaba muy feliz por la visita, compañía y palabras de su novio, agradecida de tenerlo en su vida no solo como su idol favorito, sino como el amor de su vida.

Antes de ir a ensayar con su grupo, entró a sus redes sociales y publicó una foto con la misma frase que Seonghwa le había dicho, agregando dos corazones al final.

El grupo Silent Night ya estaba reunido para coordinar las canciones que bailarían, vestuarios y practicar.

-Como eres la líder, creemos que es justo que tu escojas primero la canción que quieres hacer -dijo una de las chicas.

-Gracias, la canción que quiero hacer es "Guerrilla" -respondió Misaky -hace mucho tiempo que tengo ganas de bailarla.

-¡Wow! Esa es una coreo muy difícil -dijo Akira.

-Por eso solo ella puede animarse a presentar esa coreografía -comentó otra de las chicas entre risas.

Las demás integrantes nombraron la canción que realizarían.

-Yo voy a hacer Eternal Sunshine -anunció Akira.

-Esa canción es muy para ti -agregó emocionada Misaky -¿y tu saky? ¿Ya escogiste?

-Sí, haré answer.

-Muy bien. Entonces ya teniendo todas las canciones escogidas, ¿pensaron en cuál outfit se van a inspirar?

Las integrantes del grupo comenzaron a mostrar las fotos en las que se inspirarían.

-Está -dijo Akira.

-Yo escogí esta, aquí sale hermoso mi Seonghwa -comentó Saky.

-Excelente chicas, yo como es más que obvio escogí una de San. Esta. Mi hermana tiene una amiga que es diseñadora de moda, me dijo que cualquier cosa que necesitáramos podría ayudarnos. Mientras tanto, ahora cada uno pónganse en un lugar del salón y vayan ensayando, luego nos reuniremos de nuevo y mostraremos individualmente nuestros avances -ordenó Misaky.

Luego de una ardua hora de ensayo todas volvieron a reunirse para mostrar el avance que tenían con respecto a las coreografías, pasaron de a una y fueron dándose devoluciones y aspectos a mejorar, cuando llegó el turno de Akira.

-Es tu turno, muéstranos tu avance -dijo Misaky.

Ella tragó saliva algo nerviosa y se paró frente a todas, la música comenzó a sonar y Akira no logró realizar sus movimientos.

-Respira y hazlo de nuevo -dijo su amiga volviendo a poner la música.

Pero ella falló otra vez. Saky comenzó a reir.

-Si así te vas a comportar en la presentación demos por hecho que perderemos -comentó -ya no eres una niña para andar de miedosa.

-Saky, porque mejor no te vas, volveremos mañana, no creo que tu presencia ayude mucho en este momento -ordenó Misaky.

-¡Ya que!, para ver como Akira hace el ríduculo prefiero irme, espero mañana tengas una mejor evolución.

Una vez que Saky se fue del salón todas animaron a su compañera, dándole apoyo y confianza, de esta manera ella logró mostrar sus avances.

***

Había pasado una semana, llegó el día miércoles y la presión aumentaba cada vez más, esta era su última oportunidad de demostrar que valía la pena ganar. Akira estaba sumamente nerviosa, deseando poder presentarse y que su pánico escénico no le jugara en contra.

-Lo harás bien, confía en ti. Tú puedes hacerlo -le dijo su amiga.

Akira sonrió cuando un personal del staff llamó a una de las chicas del otro grupo. El momento decisivo había llegado, este era el momento para darlo todo y formar parte de uno de los videos musicales de Ateez, solo un grupo obtendría esa victoria, pero ¿Cuál seria?

NOTA DE AUTORA: Hola queridos lectores, tenemos nuevo capítulo, yo no se ustedes pero creo que San le ha tomado más cariño a Misaky aunque le sigue huyendo a la idea de las citas jajaj por otro lado, Seonghwa y Akira son muy tiernos. Ahora a esperar y ver como les fue en la presentación individual ¿Qué piensan ustedes? los leo.

Abrazo de oso.