Capítulo 16: Feel Good.

"Por cada risa debe haber una lágrima". Walt Disney

Carlos estaba quejándose nuevamente, no entendía por qué no es como si lo hicieran subir esa montaña, estaba sobre una llama por dios, pero Carlos se estaba quejando, primero el sol, hasta que le paso sus lentes, luego de la sed termino toda una botella de agua y luego fue que quería orinar, en fin Carlos era el peor turista de todos, era tan gruñón y molesto que incluso Víctor ponía excusas y lo dejaba lidiando con sus quejidos, y bueno que Carlos se le sujetara con fuerza como una lapa no ayudaba, mientras Fivel solo reía y reía.

El lamento pedirle ir pero no, fue ahí y se lo pidió, aun lo recuerda claramente.

- No – gruño Carlos – la última vez que fuimos de vacaciones con tu novia ella era tan molesta, no me agrada – Booboo no quiso señalar que de hecho fue Carlos quien se entrometió en las vacaciones por lo que solo suspiro y sonrió.

- Ella no va a venir, fue una invitación para fomentar el ecoturismo en Perú y solo va a venir Fivel y mi papá, así tú y Víctor pueden venir – dijo con una gran sonrisa para convencerle.

- No quiero que vaya Víctor – murmuro de mal humor con un puchero.

- Si el viene será más fácil que puedas estar pegado a mi lado, Libby jamás te dejaría lejos de su atención recuerdas – Carlos suspiro por que técnicamente tenía razón hace dos días había vuelto a suceder, lo del desmayo y ahora Libby lo vigilaba como un halcón.

- Bien – frunció la nariz – iré pero solo porque sé que estarías aburrido sin mí.

Ahora lo lamentaba enormemente, Carlos se había quejado todo el camino hasta que se puso hablar con su llama, esperaba que realmente no pudiera hablar con ella, es decir si sabía que hablaba perro pero llama era completamente diferente cierto.

- ¡Santa mierda! – grito Carlos empujando al guía que parecía estar hablando con uno de los otros guías que les ayudaron llegar ahí – ¡no puedo creer que estemos aquí! – dijo con emoción y corrió de inmediato a ver las ruinas, la única razón por la que estaban ahí.

- Creí que estaba muerto – Five alzo una ceja – literalmente se tiro sobre ti y dijo "estoy muerto quiero ir a casa" hace cinco minutos – le recordó su hermana con una ceja levantada.

- Tal vez tuvo un subido de adrenalina – sonrió Booboo a su hermana.

- ¿Cuánto café le diste a beber? – preguntó Víctor y era como si todos de alguna forma habían puesto sobre sus hombros la responsabilidad de cuidar al chico, iba a replicar que él no era su nana cuando un grito desde unos metros más arriba le sorprendió.

- ¡Boobaaaaa! – se escuchó hasta la falda de la montaña - ¡Tienes que venir a ver esto!

- ¡Maldición! – Grito Víctor pues el guía ya estaba diciéndole que esa parte era peligrosa - ¡Cameron baja de ahí ahora mismo! – ordeno, Carlos frunció la nariz pero hizo lo que le dijeron y termino en un lugar menos peligroso justo cuando Booboo lo alcanzo.

- Tu padre no está feliz – hablo el joven cuando lo alcanzo.

- Él no es mi padre – murmuro Carlos mirando entre las rocas con gran asombro – puedes ver esto Boobaa, como es que esta civilización logro crear una hermosa ciudad poniendo roca sobre roca haciéndolas encajar sin ninguna clase de pegamento, tanto que aun después de tanto años siguen en pie – murmuro.

- Te hace pensar – sonrió el joven viendo aquel brillo característico en su ojos, ese que siempre tenía cuando miraba algo que realmente le gustaba – tal vez los aliens si les ayudaron después de todo.

- ¿Aliens? – pregunto enarcando una ceja – ¿enserio esa es tu teoría? – lo miro incrédulo.

- Lo vi en History – se encogió de hombros, causando la risa del menor.

Y Carlos rio tan suavemente, tan dulce que lo confundió, tal vez fue el cansancio, el que los ojos de Carlos brillaran aún más por la emoción o la luz del sol se daba en el ángulo perfecto haciendo que este luciera mucho más brillante, tal vez no era nada de eso más que su propio deseo pero por primera vez en mucho tiempo Booboo se vio deseando algo, el lamio sus labios con suavidad, vio como Carlos seguía hablando tal vez explicando todo lo que había estado investigando del lugar un día antes de salir pero todo lo que podía observar eran sus labios, su movimiento podía jurar que estaba casi invitándoles.

Se inclinó, Booboo se acercó a Carlos inclinándose suavemente para robar un beso del desprevenido chico cuando la cara de una llama se interpuso.

- ¿Qué rayos? – gruño Booboo pues estuvo a punto de besar al animal.

- Hey lucí – Carlos acaricio al animal – te dije que estaba enamorada de ti boocito – se burló como venía haciendo en todo el camino – te extraño y vino hasta acá.

Uno de los guías llego entones, se disculpó en su idioma y se alejó llevándose al animal pero el momento ya había sido roto, Booboo se congelo al darse cuenta de lo que estaba a punto de hacer, pensó en besar a Carlos, no, él quería besar a Carlos, joder aun quería hacerlo estaba muy seguro de eso, sintiendo pánico estaba punto de huir cuando Carlos volvió a hablarle.

- Gracias – le sonrió – por invitarme a venir, jamás había estado en una ruinas antes – sonrió tocando nuevamente la piedra- bueno si pero el castillo de maléfica no cuenta – frunció su nariz – gracias por traerme, reamente es divertido – y Carlos estaba tomando su mano otra vez entre lazando sus dedos mirándole de esa forma tan dulce.

- No – dijo soltándole con fuerza dándose cuenta de lo peligroso de eso pensamientos, no carajo, él no era gay, el tenia una novia y era feliz, él no quería ni hoy ni nunca besar a Carlos – no – repitió y Carlos parecía herido – no podía dejar que te lo perdieras- dijo con torpeza - ¿Qué tal unas fotografías? – Carlos asintió volvió a colocar sus gafas y poso para las fotografías.

Booboo empujo cada sentimiento sepultándolos con recuerdos de su amada novia, el resto del viaje fue tan normal como pudo hacerlo, después de eso el solo se alejó unos días, salió de la ciudad en otro trabajo.

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- ¿Booboo? – pregunto Carlos recostado del otro lado cama mirando al chico que empezaba a quedarse dormir.

- ¿Qué? – dijo con mal humor pasando su brazos por el rostro para cubrir mejor sus ojos de la luz natural.

- ¿Crees realmente que puedo llegar a ser bueno? – pregunto como si nada.

- Ya eres buena persona – murmuro adormilado.

- Hablo de ser mas como Cameron, ¿creces que puedo llegar a ser mejor hijo para Libby y Víctor, mejor hermano para Maya? – el chico estaba indeciso, esas personas se habían vuelto algo importante para él, no quería reconocerlo pero si lo eran y ahora estaba inseguro sobre merecerlos - yo nunca eh tenido una hermana antes pero, quiero hacerles feliz.

- No debes intentar cambiar para complacer a nadie Cookie, las personas te van a querer por lo que eres solo deja de tener miedo y se tú, hablo del verdadero tu, el chico dulce e inteligente nerd no el idiota pretencioso que finges ser.

- Pero quiero ser aceptado, quiero gustarles – insistió.

- Les gustas, ya me gustas y conozco lo peor de ti solo se tu mismo si eres feliz ellos lo serán igual – dijo soltando un bostezó, tenía sueño de eso no había duda pero primero se esforzó en tratar de tranquilizar a Carlos, el chico que se había convertido en algo muy importante para él.

- No realmente – murmuro porque si puede que Carlos le contara algunas cosas, cosas sobre su pasado pero eso era solo la superficie, las partes tan encima de toda la podredumbre de su alma, extrañamente Carlos se sintió avergonzado por lo que era, por el chico roto en el que se había convertido - ¿Booboo puedo besarte? – susurro buscando un poco de contacto, el anhelo de necesidad, de tomar un poco de calor de aquella persona que le quería.

- No, ya hemos hablado de esto – negó, menos ahora cuando finalmente había borrado esas ganas de besar al chico.

- ¿pero?

- Cookie por favor acabo de regresar de un vuelo de 16 hrs junto a un niño realmente escandaloso, me pararon en medio del aeropuerto porque me confundieron los de seguridad, luego los fans y además tengo que asistir a la práctica del baile próximo por favor solo déjame dormir un rato – gruño sintiendo el principio de un dolor de cabeza.

- Lo siento – murmuro apenado quedándose callado por al menos un par de minutos mirando el techo de la pared pero regreso nuevamente su atención al chico – Booboo – llamo en un susurro.

- Mmmm...

- ¿Puedo abrazarte entonces? – pido realmente no queriendo ser una molestia pero le había extrañado durante todo el tiempo que estuvo ausente las llamadas por Skype no fueron suficiente.

- Ven aquí- palmeo el lado de la cama más cerca de él abriendo los brazos para abrazarle incluso se giro para que sus rostros quedaran casi a la misma altura mas Booboo seguía con los ojos cerrado intentando conciliar el sueño nuevamente.

- También me gustas tal y como eres- hablo con suavidad otra vez dejándose envolver por esa comodidad.

- Ajam – murmuro adormilado abrazándole por la cintura en un reflejo.

- Realmente quiero besarte ahora – insistió tras otro largo silencio donde Booboo estaba a punto de caer dormido.

- Solo si me dejas dormir después – gruño frunciendo las cejas pero negándose a abrir los ojos para no despertar por completo.

Carlos asintió juntando sus labios con suavidad, fue un beso perezoso de esos en los que te tomas todo el tiempo del mundo, Booboo estaba a medio dormir que olvido por completo sus dilemas morales entregándose completamente al beso, siguió con suavidad cada toque, cada caricia que la boca de Carlos hacía, Booboo le beso de vuelta tan dulcemente que sorprendió al pecoso pues esto no sucedía mucho, su mano tuvo que aferrarse a su pecho debido a la impresión para sostenerse con fuerza de arremeter contra la boca del otro.

La mano de Booboo, aquella que se aferraba a su cintura para abrazarlo empezó a dar pequeñas caricias en círculos con su pulgar, toques suaves que fueron disminuyendo al igual que el beso pero que daban el mismo placer.

Finalmente Booboo se quedó dormido no sin antes besar la punta de su nariz y murmurar un suave "Noches Baby" medio dormido acomodándose para acercar a un mas el cuerpo del niño, algo cálido inundo a Carlos, del chico que aun aprendía sobre la gentileza y bondad, se encontró sonriendo ante el gesto del mayor cerrando los ojos abrazándole de igual forma hasta quedarse dormido.

Carlos aprendió dos cosas esa tarde, la primera Booboo tenía razón debía dejar de fingir y ser quien quiera sin miedo a ser reprendido, ya le querían solo por ser Cameron solo debía demostrar, mostrarles que Carlos era igual de agradable.

La segunda fue mucho más interesante pues descubrió que si besaba a Booboo medio dormido este le devolvería el beso con aquella suavidad y cariño tan adictivo a diferencia de todos sus otros besos robados y en medio del sueño siempre murmura cosas dulces al final.

Ellos pasaron toda la tarde dormidos así abrazados, con Carlos enterrando su rostro en el cuello de Booboo y dando besitos perezosos de vez en cuando, con Booboo abrazándole mas fuerte si el chico se sacudía por alguna razón, estaban tan inmersos en su mundo que no notaron que la puerta había quedado abierta.

Nils por lo regular no hacia eso, espiar a sus hijos fue algo en lo que nunca creyó, respetar su privacidad sobre todo con sus hijas fue algo de lo que se enorgullecía sin embargo su hijo como distraído era a veces y mas con Cameron llegando de inmediato tras no verlo en semanas este olvido entregarle el sobre con el contrato que ya había firmado, así que pensó "que mal puede hacer ir a su habitación y se lo pediré", llamo pero la puerta solo se abrió suavemente listo para ver a su hijo tocando la guitarra con Cameron desacomodando todo entro.

Ellos no estaban tocando, de hecho su hijo estaba dormido, lo cual era comprensible, lo que si era completamente fuera de lugar era que Cameron hacia lo mismo y tal vez no sería tan extraño, el niño pasaba mucho tiempo ahí, de hecho desde hace tiempo parecía vivir en esa casa y Booboo en la suya con la cantidad de tiempo que se dedicaban, lo malo o alarmante era que ambos dormirán en la cama abrazados, de una forma muy intima, demasiado intima.

Se dijo que tal vez esto era un accidente que había rodado y quedaron atrapados su hijo era un poco de los que abrazaban mientras dormían pero entonces Cameron se agito un poco entre sueños murmurando algo con la nariz fruncida y su hijo solo le abrazo con más fuerza empujando su nariz entre esos rizos negros calmándole por completo.

Bueno eso explicaba el por qué estaban tan pendiente el uno del otro, lo cual era un problema, un verdadero problema, su hijo no podía estar haciendo esto, su pequeño no podía ser gay, tenía una novia ardiente, claro esto tenía que ser obra de Cameron, el chico bailarín de movimientos afeminados estaba aprovechándose de su hijo y como buen padre no iba a permitírselo.

Salió del cuarto porque en primera su hijo realmente necesitaba descansar y segunda si armaba un escándalo Booboo se pondría de parte de Cameron debido a su terquedad, no dejaría que esto pasara y mañana cuando Cameron se marchara tendría una larga y muy madura charla con Booboo.

Su hijo no iba a ser uno de esos afeminados.

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- ¿Hijo puedo hablar contigo? – pregunto aquella mañana.

- Claro solo déjame llevar a Cameron a casa – asintió el buscando las llaves de su auto.

- Creo que el puede llegar solo a casa – gruño de mal humor. digo pudo llegar aquí sin problemas

- Papá no creo que.

- Está bien Booboo – Carlos le miro sonriente colocando una mano en brazo para llamar su atención algo que Nils no perdió de vista – Nos vemos esta noche online.

- Cookie por favor pensaba dormir un poco mas – bromeo dándole una cálida sonrisa.

- Has dormido todo la tarde de ayer necesito mi respaldo para LOL - hizo un pequeño puchero adorable, Nils tuvo que aclararse la garganta cuando era obvio que su hijo y ese chico volvían a enfrascarse en su burbuja personal ignorándole – nos vemos Sr. Stewart – dijo totalmente educado dejándoles ahí en la sala Booboo ni siquiera pudo dejarle en la puerta pues su padre le detuvo.

Escucharon a Carlos despedirse de Fivel y Sage entonces un raro incomodo silencio se quedo entre padre e hijo, Booboo giro a ver a su padre que parecía a punto que regañarlo por algo, de hecho estaba seguro que no le había dado esa mirada en años, desde que él y su hermana pintaron de rosa una de las yeguas porque esta quería un unicornio, pero bueno su padre realmente parecía molesto y...

- Cameron y tú salen demasiado – dijo finalmente.

- Gracias a dios – suspiro Booboo al ver que se trataba de Carlos por un momento pensó que era más importante – somos mejores amigos ya sabes viene con el nombre, salir juntos, jugar videojuegos, guardar su espalda de trolls cibernéticos.

- Solo digo que tal vez sea bueno que no pasaran tanto tiempo juntos – insistió.

- Me gusta pasar tiempo con el.

- Bueno me gustaría que no lo hicieras, ese niño – empezó con una mueca en la cara y Booboo de inmediato pensó que esto se trataba sobre drogas, después de todo "Cameron" tenía antecedentes.

- No estamos en las drogas papá si eso es lo que te preocupa – respondió con fastidio, lo que le faltaba que su padre le saliera con esto, ya era suficiente de la mirada acusadora de Libby a veces le daba, como si robara a su hijo y ahora esto.

- Estuvo en una clínica para rehabilitarse.

- Y ahora está afuera- apretó los dientes para volver a suspirar - bueno linda charla pero mejor me voy – dijo subiendo a su habitación, iba a regresar al departamento.

- Nils Allen Stewart Jr. – gruño su padre parándole en seco a dos pasos de las escaleras – estoy hablando muy enserio vas a alejarte de ese chico.

- Ok – se giro mirándole molesto ante el uso de su nombre – no entiendo que te pasa todo estaba bien antes te agrada Cameron a mamá también dijeron que era una buena influencia – le recordó.

- Antes de que cayera en las drogas – dijo su padre cursándose de brazos.

- No está en las drogas nunca más, a menos que cuentes su adicción por el chocolate – trato de bromear pero su padre seguía tan serio como al principio - lo importante es que es mi amigo y no voy a abandonarle.

- ¿Eres gay? – pregunto con un suspiro.

- ¿Espera que? – dijo confuso - ¿crees que soy gay?, novia ardiente recuerdas, no soy gay

- ¿Cameron es Gay? – pregunto en su lugar.

- Pregúntale a él y aun que lo fuera no veo como eso es un problema – Booboo ya estaba empezando a cansarse de esto, toda su postura decía que estaba muy a la defensiva.

- Cariño la cercanía con ese chico es demasiado intima – su madre apareció entonces mirándole con suavidad y tocándole el hombro.

- ¿Mamá tú también? – dijo traicionado.

- El te mira como si fueras su mundo – dijo ella.

- Estaban abrazados durmiendo – acuso su padre.

- Tiene pesadillas – explico con tranquilidad.

- Corres ante cada llamada de él, demonios Booboo no voy a permitir que – su padre ya estaba molestándose enserio pero Booboo le corto de golpe.

- No padre tu no entiendes lo que esta pasando, lo que ha sufrido – apretó las manos en un puño con fuerza - el me necesita.

- Fuiste acusado de violación por su culpa y aun así mírate todo el tiempo estas pegado a él.

- Él fue abusado padre – gruño enojado, furioso por recordarle eso, el martirio que ese pobre e inocente vivió toda su vida - por años – apretó más sus puños de ser posible - me confundió por alguien más por mi cabello – señalo, porque no había forma que pudiera decirles que fue confundió con un personaje ficticio que no era tan ficticio.

- ¿Por eso lo cortaste? – su madre dijo sorprendía - cariño no puedes hacer ese tipo de cosas solo le darás ideas equivocadas.

- El sabe muy bien que no me gusta de esa forma – miro a su madre con suavidad tratando de convencerla.

- ¿Qué?

- Cameron – suspiro el mirado a su padre que lucía cada vez más molesto - si él está tal vez un poco enamorado de mí – confeso porque era obvio que Carlos lo estaba se lo decía todo el tiempo.

- Lo sabias y aun así sigues con ese – dijo su padre un poco asqueado.

- Me lo confeso ok pero no voy a darle la espalda – dijo furioso - la última vez que lo hice intento suicidarse tres veces

- Así que de eso se trata lastima – su padre suspiro - ¿hasta cuando vas a hacer esto?, ¿hasta que se enoje y te acuse de violación nuevamente? – pregunto - ¿hasta que te envuelva con sus ideas gay y te vuelva un marica como él? – dijo con desdén.

- No hables así de él – respondió furioso - tu no entiendes nada.

- No vas a verlo – dijo su padre igual de molesto - ¡no voy a tener un hijo marica, no bajo mi techo!

- Bien entonces me iré – rodo los ojos olvidando que de hecho ya no vivía ahí por lo que tomo sus llaves y se marcho.

- ¡Nils Allen Stewart regresa aquí! – grito su padre.

- Vete a la mierda Padre – respondió azotando la puerta de su auto tras subirse en él.

Estaba muy molesto, enfadado con su padre, con su madre por no comprenderlo, por creer que Carlos era malo para él, no entendía ellos amaron a Cameron pero parecían odiar a Carlos, ellos no veían lo que él.

Cameron siempre fue brillante, alarmantemente cálido, iluminó do todo a su paso una explosión de energía y Carlos ese pequeño niño sombrío, aquel chiquillo retraído emana un brillo diferente una luz fría, tranquila y silenciosa tan escasa que para poder verla tienes que traspasar todos esos muros capa por capa para así bañarte en ella y cuando por fin llegas, cuando el trabajo ha sido tan duro finalmente vale la pena... Por qué Carlos brilla de una forma muy diferente Cameron y eso es perfecto.

Cuando volvió en sí, cundo sus pensamientos se enfriaron un poco noto que estaba de hecho en la puerta de entrada de la casa de Carlos y no en su departamento con su novia donde debería estar.

- ¿Booboo? - dijo Carlos sorprendió abriendo la puerta tras escuchar llamar - Acabo de regresar de tu casa, tanto me extrañas que has venido a verme – dijo burlista con su sonrisa coqueta.

- ¿Están tus padres? – pregunto entrando a la casa.

- En el patio – señalo pero noto que su amigo estaba muy tenso - ¿todo bien?

- Vamos – dijo tomándole de la mano para caminar a su habitación, Carlos solo se dejó llevar.

- ¿Quién es cariño? – pregunto su madre desde la cocina.

- Es Booboo – respondió mirando al chico, notando lo tenso que se había puesto en un segundo al escuchar a Libby - estaremos en mi habitación – dijo entonces ahora el jalando al mayor a su cuarto - ¿Vas a decirme que pasa? – pregunto cuando finalmente puso el seguro de la puerta.

- Mi padre quiere que deje de verte – dijo soltando de golpe.

- Oh – dijo mordiéndose el labio – así que – murmuro confuso sintiéndose muy triste - gracias por avisar- Carlos estaba furioso por eso, ¿Qué se cree ese tipo? ¿Cómo se atreve a arrebatarle lo que le pertenecía?, esto no se iba a quedar así, pero por fuera reflejo solo absoluta tristeza.

- No estoy dejándote – Booboo se acercó a él tomándole de la mano.

- ¿A no? – dijo sorprendido y esperanzado, diablos si, el ganaba y ni siquiera tuvo que usar magia, tómala Mal.

- No – nego con fervor.

- ¿Tu padre me odia? ¿Creí que le agradaba? – dijo confuso tratando de parecer inocente, por dentro inventaba mil formas de sacarlo del camino.

- Nos vio – suspiro - nos vio abrazados y sabe que te gusto – apretó los labios - joder el piensa que soy gay.

- Bueno, no soy gay – respondió como si nada.

- ¿Espera que?

- Dije no soy gay – se encogió de hombros.

- Pero siempre estas insinuándoteme – dijo confuso, lo único que faltaba que Carlos nunca se le insinuara y todo estaba en la cabeza, o peor aún tuviera alucinaciones, lo que lo hacía loco y muy gay.

- Pero solo me gustas tú – asintió entonces y aquello alivio la mente de Booboo - no los hombres en general.

- ¿Y las chicas? – pregunto tentativo pero pareció cambiar de idea - ok ese no es el punto solo y no voy abandonarte – insistió apretando sus manos unidas - es solo que arrrrgg ¿por qué diablos lo hace tan difícil? ¿Que no puede entender?

- Hay que matarlo – dijo Carlos con mucha seriedad.

- ¿Disculpa?

- Podemos hacer que sea un accidente, a él y tu madre – empezó a explicar como si nada alejándose y buscando en uno de los cajones de su escritorio - eres el mayor, Maegan no cuenta porque está casada, el seguro pasaría a ti y la custodia de tus hermanas - le entrego entonces un folder.

- ¿Espera realmente hablas enserio? – pregunto asustado - ¿Qué es esto?

- Una copia del seguro de tu padre – se encogió de hombros mientras Booboo miraba el dichoso documento y si lo era la copia del seguro de vida de sus padres - tengo algunas ideas que podrían servir, averiamos sus frenos o simplemente entramos a tu casa los degollamos y zaz problema resuelto tendríamos que hacerlo cuando tus hermanas no estén me agradan pero si quieres ser el único beneficiario podemos matarlas también no me molesta te ayudare – dijo como si nada, con una cara tan tranquila como si hablara sobre el clima y no sobre matar a personas, a sus padres y posiblemente a sus hermanas.

- ¿Dime que estas bromeando? – pregunto en un susurro.

- Nope – sonrió angelical - he estado investigando y descubrí que tus padres tienen una póliza de seguro muy jugosa por si algo pasa tu eres el beneficiario principalmente así que sería muy fácil – señalo la cifra en el documento que le entregaba - descuida tendré una buena coartada para ti, tal vez te hiera un poco así serás exculpado de inmediato.

- ¿Desde cuándo has planeado esto? – agito el papel.

- Desde que llegue aquí – se encogió de hombros - no soy bueno con los hombres, me agrada Libby y Maya pero Víctor, meh él también tiene una póliza pensé que tal vez matarlo y que Libby podría utilizar ese dinero – hizo una pausa como si no pudiera explicarlo relente - pero a ella parece realmente agradarle mucho.

- Claro que le gusta se casó con el – señalo lo obvio- por favor dime que no pensaste en matarme también a mí.

- No seas idiota – rodo los ojos desestimando – nunca te haría daño – sonrió inocente – tu eres seguro – susurro acercándose para pasar sus brazos detrás de su cuello – y realmente me gustas – volvía a mirarle con esa intensidad que hipnotizaba a Booboo – eres lo único seguro que tengo – termino para darle un beso como siempre hacia rezando por que no se equivocara en eso.

- Por cosas como estas mi padre cree que soy gay – murmuro tomándole de la cintura dejando caer los papeles de su mano, listo para otro beso secretamente.

- Bien – rodo los ojos alejándose de el – vamos a comer algo Víctor hizo una barbacoa – ofreció entonces levantando los papeles tirados y yéndolos a poner sobre la cama.

- Perfecto comida – dijo nervioso, dios casi estaba esperando otro beso y lo deseo - Carlos, no vamos a matar a mis padres – dijo mirando la póliza en la cama - a nadie de hecho – miro al niño fijamente que aprecia tranquilo con eso - promételo.

- Bien, prometo que no matare a alguien intencionalmente – suspiro con fastidio - ¿contento?

Extrañamente eso no lo hizo sentir bien en lo mas mínimo, se pregunto que nuevamente que tan malo era la isla para que Carlos pensara en matar a alguien tan fácilmente y con tanta frialdad como ahora.

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- Sigo pensando que esto es una pésima idea – murmuro Booboo tras estacionar el auto justo antes de entrar a la propiedad de su familia.

- Joan, la abuela dijo que era lo correcto – respondió Carlos sentado en el copiloto – y aun que estoy totalmente de acuerdo en ir a vivir contigo estoy con ella.

- Bien aquí vamos – piso nuevamente el acelerador – esto definitivamente terminara mal.

- Peor que las visitas familiares con Cruella lo dudo – bromeo a lo que Booboo rio de solo pensarlo.

Después de la discusión con sus padres y que Booboo terminara con Carlos este había quedándose ahí por cinco días, días en los que Carlos incluso limpio su habitación para hacerle espacio, para el pequeño era lo mejor podía abrazarse todas las noches a Booboo, se iba temprano a la cama con tal de poder abrazarle esperando el momento justo para que este entrara en su sueño, a veces Carlos le besa y era correspondido igual a como lo hacía adormilado, otras veces Carlos le llevo al techo donde pasaron gran parte de la noche mirando estrellas y el pecoso nombrando cada una ignorando el problema real, las tardes las pasaban mirando películas, Carlos abandono cada proyecto que tenia para dedicarse a abrazarse a Booboo o salían a comprar su delicioso Frappucino de unicornio, no fue hasta el cuarto día que Carlos noto lo grave que era el problema.

Booboo estaba sentado en el jardín mientas Cienna buscaba una caricia suya mirando a la nada, Carlos acababa de regresar con una soda cuando de la nada Booboo le miró fijamente "Vive conmigo" fue lo primero que salió de su boca al verlo, Carlos no lo dudo acepto de inmediato ignorándole todo a su alrededor todo su futuro no importaba por que Booboo le pedía a el que se quedara a su lado, Carlos no iba alejarse de lo único seguro que le impedía caer en la locura, no de su red de seguridad.

Pasaron parte de la tarde planeando todo, el lugar, cambiarían de ciudad, de estado lo que fuera para alejarse de sus familias, Carlos le seguiría al mismo infierno y Booboo simplemente estaba tan enfadado, molesto porque sus padres no comprendieran la grave situación de Carlos, que incluso olvido a su novia, él no podía abandonarle, no cuando ese niño estaba tan solo y confundido, no cuando obviamente lo habían desechado como basura, cuando toda persona que alguna vez mostro interés en el fue para aprovecharse, no cuando otra versión suya le causo tanto mal, era tonto pero Booboo de alguna forma se sentía responsable de que fuera su rostro lo que viera ese niño en sus pesadillas.

Al principio admite que fue ira, la necesidad de saber que había pasado con su amigo y que tal vez Carlos era simplemente un usurpador que ocupaba el lugar de su amigo sin remordimiento pero con el tiempo se fue dando cuenta de lo horrible de la realidad, que Carlos no estaba ahí por voluntad y que fueron aquellos que lo llamaron familia que lo desecharon como un juguete roto, Booboo sintió lastima por el pobre niño que nadie quería, por ese que era abandonado, con el tiempo esa lastima se convirtió en algo mas y ahora simplemente no podía abandonarle a su suerte.

Booboo no podía abandonar nuevamente a un amigo y cargar con su conciencia las consecuencias, Carlos era tan impredecible a estas alturas alejarse de su único sostén, de lo único seguro podría ocasionar algo malo, podía llevarlo a cometer una locura, así que se quedaría, y si tenía que alejarse tomaría a Carlos con él, se había hecho una promesa, la hizo a Carlos y así mismo él le demostraría a Melisa que Carlos De Vil podía ser salvado.

Carlos por su parte estaba eufórico, Booboo le había pedido a el que huyeran, no a su estúpida novia, a él, a Carlos, se había puesto contra su familia y lo había elegido, Evie estaría tan orgullosa de saber que hizo caer a un chico noble a sus pies, que al fin le había atrapado y finalmente lo tenía para sí, estaba tan entusiasmado que no pensó en ninguna consecuencia, entonces esa noche llamo Joan la abuela de Cameron para su llamada semanal y sin querer le conto todo.

Ella le hizo entender lo complicada de la situación, le dijo lo mal que estaba, que uno no simplemente puede alejarse así de sus problemas y que si ahora se iban, si dejaban todo se arrepentirían un día, Carlos quiso colgarle por querer destruir su felicidad, pero entonces ella le hizo entender algo, Booboo se arrepentiría, el chico tarde o temprano notaria lo estúpido que fue por simplemente alejarse de su familia por una pelea tonta, Carlos también la oportunidad de tener una vida normal, de una adolescencia como cualquier otro chico la perdería, abandonaría el sueño de ir a la universidad, tendría que dejar a esa nueva familia que le apoyaba en todo, y sobre todo aun cuando Booboo le aseguro que nada le faltaría sabía bien que se lo perdería, que Booboo extrañaría a sus padres y hermanas y tarde o temprano se lo recriminaría.

Booboo no creció en la isla, sus padres no le golpearon de niño, sus hermanas no fueron crueles con él, ni fue obligado a robar o pasar hambre, no fue mancillado y humillado por su familia, Booboo tenía una familia que le amo desde un principio y Carlos no podía entender eso, lo que sí pudo entender fue que cuando Booboo viera todo lo que abandono por un chico sin valor como él lo odiaría y peor aun Carlos se odiara a sí mismo por hacerle pasar por eso.

Aun cuando no lo quería, cuando su egoísmo le gritaba tomar al chico para sí mismo, en contra de todo lo que le fue enseñado Carlos convenció a Booboo de regresar a casa y arreglar todo con sus padres, el quinto día Booboo le abrazo para agradecerle por ser un buen amigo, por no dejarle cometer tonterías.

Carlos pensó que ser bueno y hacerlo lo correcto apestaba si para ello debías destrozar tus sueños.

Así era como se encontraban ahí, Booboo sabía que sus padres estaban en casa por que Fivel le mantenía al tanto de todo así que cuando llego no fue sorpresa que sus padres estuvieran ahí reunidos, todo fue según lo imagino y peor, en cuanto su padre lo vio llegar sonrió pero cuando vio quien le acompañaba toda su sonrisa fue de fastidio.

Booboo intento hacerle entender que no iba a dejar de ser amigo de Cameron y que no era negociable, mientras que su padre comenzó a gritarle cosas entonces empezó a atacar a Carlos sobre la mala influencia que era, de su pasado de drogas y como chantajeaba a Booboo para mantenerlo a su lado, eso hizo que gritaran mucho mas, su madre intento calmar las cosas pero ninguno de los dos parecía querer ceder.

Sage entro en escena miro a Carlos y quiso que la acompañara a jugar su padre le grito por esto y Booboo le grito por hacerlo estaban tan inmersos en su pelea que no escucharon cuando la niña les llamo insistentes, Carlos había tomado la mano de la pequeña quien le jalo un poco para llevarle al jardín cuando se sintió mareado, tras los gritos a Sage el soltó su mano y cuando intento acercarse nuevamente a Booboo perdió un poco el equilibrio, la niña no dejaba de preguntarle si estaba bien, el solo asintió entonces fue que cayó totalmente inconsciente al suelo.

Sage grito causando que finalmente todos la miraran y vieran a Carlos tirado, Booboo corrió de inmediato, su padre pensó que era alguna clase de truco pero entonces Fivel quien también corrió sobre todo a quitar a Sage grito "no está respirando".

Nils era un doble de acción, lo fue por muchos años y sabia obviamente como reanimar una persona, su instinto le dijo que hacer y tras empujar a sus hijas empezó a auxiliar al joven.

- Llama a una ambulancia – empujo a su hijo que solo sacudía los hombros de Cameron intentando despertarlo, era como si todo lo que alguna vez le enseño se le olvidara – Booboo llama a una ambulancia – intento de nuevo pero su hijo estaba congelado, su esposa termino haciéndolo mientras el le intentaba reanimar.

10 minutos pasaron, diez lagos minutos en los que la ambulancia tardó para cuando llegaron solo reafirmaron lo que el hombre temía, Cameron estaba muerto, no respiraba y su piel estaba tan fría que simplemente no había nada que pudiera hacerse, su hijo grito mientras la ambulancia le ponía en una camilla y exigía reanimarlo, gritando cosas sobre que él no estaba muerto, que le dejaran traerlo de vuelta, casi cree que su hijo perdía el juicio cuando de la nada Cameron abrió los ojos sentándose en la camilla aspirando aire con tanta fuerza que los asusto.

Su hijo finalmente se zafo de su agarre y corrió a ver a Cameron quien tosía con suavidad y murmuraba cosas que no podía entender, los paramédicos parecían desconcertados pero igualmente corrieron a revisar sus signos vitales ante esto. Cuando decidieron que necesitaban darle un suero Cameron se negó vio al chico luchar con aquéllos que intentaron levantar las mangas de su playera, su hijo entonces le obligo con voz suave pero firme y el chico finalmente extendió el brazo.

Esperaba encontrar marcas de agujas, algo que dejara en claro su antigua adicción pensando que eso fue lo que evitaba mostrar siempre con su ropa de mangas largas, lo que vio fue mucho más horrible, tenía quemaduras, pequeñas quemaduras redondas tal vez de cigarros, en sus antebrazos aun visibles, algunas eran recientes de tal vez unos meses otras eran mucho más viejas, de años tal vez, cuando la aguja le atravesó su hijo sostenía su rostro en su pecho para tranquilizar al chico.

Nils no podía entender qué clase de persona pudo hacerle eso, varios minutos después los paramédicos se retiraron ordenando que Cameron ya que no quería ir al hospital tenía que mantener reposo y su hijo le llevo a su habitación sin dudarlo, en la sala nadie quería hablar de las obvias marcas que notaron en Cameron.

- Tiene cicatrices en su espalda también – fue Fivel quien finalmente hablo – las vi el otro día en la piscina, cicatrices y quemaduras, tiene dos más grandes en la espalda baja y a un costado – explico lo que había visto.

- ¿Fivel?

- No estoy inventándolo papá – dijo la chica – mi hermano tiene razón, no sé lo que paso y no creo que quiera saberlo pero alguien lastimo a Cameron de una forma horrenda, está a gusto con nosotras, incluso con mamá alrededor parece tranquilo pero cuando entras a la habitación, cuando hay algún hombre cerca que no sea mi hermano todo en el cambia – miro a su padre con dolor – es como si esperaba que fueras a hacerle algo, como si estuviera acostumbrado a eso.

Renne jadeo espantada ante eso, jamás había notado eso, claro que veía como Cameron se mantenía alejado de su esposo y nunca se quedaba en la habitación vacía con el pero jamás pensó que fuera por algo así, Nils por otra parte no podía imaginar qué clase de persona podía dañarle de aquella forma y más aun no creía que su familia fuera tan ajena a eso, sobre todo si fueron años de abuso, aquel hombre culpo seriamente a los padres de Cameron por abandonar a su hijo y se dijo que si algo así le pasara a alguno de los suyos jamás se lo perdonaría, en ese instante comprendió un poco el por qué su hijo parecía tan protector con Cameron, tal vez aun era un poco raro, tal vez el amor de Cameron solo era un enamoramiento pasajero al ser su hijo el único en quien confiar, tal vez algún día reiría de todo esto y Cameron no necesitaría más a su hijo pero algo era claro ahora, ese niño había vivido un horrible infierno y nadie le había ayudado su hijo intentaba hacerlo ahora y sería igual de culpable si intentaba alejarles, lo único que esperaba no equivocarse era en que esto no volviera mas dependiente a Cameron de su hijo o peor que fuese este quien terminara apegado a Cameron.

De cualquier forma alguien saldría lastimado.

En la habitación donde Carlos descansaba Booboo acariciaba sus rizos preguntándole si se sentía mejor, Carlos había estado sospechosamente en silencio todo ese tiempo y algo no le gustaba a Booboo.

- Vas a estas bien seguramente solo fue una confusión y no estabas muerto en realidad – dijo el joven animado.

- Lo estuve – Carlos finalmente cerro los ojos, tenía que confesarlo, decirle a alguien lo que estaba pasando no podía seguir ocultándole, la próxima vez podría despertar bajo tierra o algo peor.

- No mira uno se equivoca - trato de animarlo pero Carlos solo le empujo para que no siguiera aburándole y levanto la mirada con firmeza.

- Estuve muerto, se cómo es estarlo – dijo con voz tranquila, tan firme que Booboo le creyó – ellos – trago saliva por que el simple recuerdo le llenaba de dolor y pánico - ellos le trajeron de vuelta otra vez – dijo tentativo – a Cameron, ambos estamos muriendo – Booboo lo miro en shock congelado en su lugar, escuchado las palabras que Carlos decía para explicarse – durante a coronación de Ben tenía miedo – empezó a relatar, con miedo, con dolor por que odiaba recordar todo aquello – solo quería estar a salvo y creí que... creí – jadeo cerrando los ojos con fuerza – creí que lo estaría del lado de Maléfica – negó entonces – pero ella estaba furiosa y me ataco – Booboo noto como lagrimas caían de sus ojos, como pequeñas lagrima saldas corriendo por sus mejillas – estaba muerto, entonces desperté en una cama de hospital y Mal estaba ahí murmurando magia oscura, prohibida – abrió la boca para decir algo mas pero solo un jadeo se escuchó – creí, que les importaba pero no era eso – soltó un bufido – ellos solo quería a su "familia" no era sobre mí – negó con suavidad – lo deje pasar por que estaba vivo, solo que no fue suficiente – volvió a llorar nuevamente – me desmaye días después y otra vez y nuevamente – Booboo jadeo empezando comprender – hasta que desperté aquí.

- Mal – murmuró intentado darle sentido a eso – ellos intentaban tomar la vida de Cameron – y eso no fue una pregunta, Carlos solo asintió - ¿pero por qué llevarle?

- Es magia muy antigua – respondió Carlos – ni siquiera Mal sabe usarla por completo – apretó sus manos en puños mirándolas con vergüenza – cuando lo notaron se dieron cuenta que Cameron era mejor que yo y pues se negaron regresarlo – suspiro.

- ¿Así que te enviaron aquí? – dijo con horror.

- Pensaron que estaba muerto – las lágrimas volvieron a caer con más fuerza – que mi vida se extinguió para permitirle estar ahí, pero se equivocaron – soltó una risa vacía, tan triste que le dolió – de alguna forma nuestras almas están unidas y seguimos malditos – suspiro.

- ¿Cameron estará bien? – pregunto y Carlos sintió un dolor agudo en el pecho, un intenso dolor al saber que Booboo seguía preocupado por Cameron, porque siempre lo estaría.

- Te lo dije no van a dejarlo ir tan fácilmente – respondió amargo, limpiándose las lágrimas de sus mejillas - Mal no va a dejar que muera.

- Eso es bueno entonces, significa que tú estarás bien – dijo sorprendiéndole, ayudándole a limpiar sus lagrimas y haciéndole sentir nuevamente cálido - ¿pero cómo lo están haciendo?

- Magia tal vez – Carlos decidió no mencionar el hecho de que para tomar esa energía otro ser vivo tenía que morir, decidió no poner esa carga en Booboo, no sabiendo lo mucho que le importaba Cameron.

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La siguiente vez ellos estaban en parís.

La sesión de fotos había sido agotadora, Booboo se despidió de Thomas para ir a su habitación, habían tenido que estar desde muy temprano, no lo mal entiendan amaba su trabajo pero fingir felicidad cuando llevaba despierto desde las cinco de la mañana luego de un largo vuelo era demasiado por lo que llegar a su habitación y dejarse caer en su cama era lo único que le importaba, espera y solo esperaba que su padre le dejara dormir hasta la hora de la cena al menos.

Pasando la llave electrónica en la cerradura entro a la habitación, nada parecía estar de lugar hasta que levanto la vista en dirección a las camas y si ahí estaba algo o alguien que definitivamente no debería estar, en su cama.

- ¿Me extrañaste Boobibo? – dijo con voz melosa el causante de sus dolores de cabeza, Carlos, el chico que al parecer le había seguido a parís, lo peor de todo era como iba vestido.

- ¿Cómo entraste? – ni siquiera se molestó en preguntar que hacia ahí, claro que no, era muy obvio por la enorme sonrisa en su rostro, gracias al cielo que ya no tena esos dientes afilados pero a veces solo en ciertas situaciones podía verlos adornando su rostro.

- Como si no pudiera hakear una cerradura electrónica – desestimo descruzando las piernas de una forma que no debería ser tan sensual para un chico – no has respondido a mi pregunta – Carlos se levantó entonces el enorme abrigo negro de piel sintetiza obviamente se deslizo por sus hombros hasta sus codos, llevaba una camisa de botón alto desabotonada dejando su cuello descubierto color rojo sangre y un apretadísimo chaleco negro, avanzo entonces sus caderas balanceándose seductoramente donde sus pantalones blancos eran retenidos por el enorme cinturón negro y botas negras, todo en el gritaba De Vil – ¿me extrañaste? – volvió a preguntar levantando su mano derecha para acariciar su mejilla, noto entonces que en esta había nada más y nada menos que una pipa larga para cigarros de mujer muy parecidos a los que Cruella siempre uso.

- Carlos – tomo su mano llamando su atención – ¿qué parte de ser discreto en todo esto de Cruella no has comprendido aun? – regaño con un gruñido.

- No seas dramático – el niño se soltó de su agarre tomando sus gafas negras para quitárselas – para eso son las gafas – termino con un tono condescendiente.

- Claro por qué el enorme abrigo negro, la pipa y todo tu gritando mírenme es opacado por tus gafas negras – entre cerro los ojos en su dirección.

- No puedes hablarme así mientras estas usando esa abominación – le reprendió el menor dejando su pipa en una de las mesitas cercanas- ahora quítate esa camisa y podremos quemarla – se acercó a él para jalonearle la ropa.

- Deja de criticar mi gusto en moda – indignado se alejó de sus manos más ni siendo lo suficientemente rápido estaban forcejeando con los botones.

- Lo hare cuando dejes de comprar ropa tan horrenda, enserio Booboo ¿purpura y mariposas blancas? – jaloneo la prenda hasta sacarla de sus pantalones – esto es un crimen para la moda.

- No – gruño el joven – tu déjame en paz.

Tan inmersos en su forcejeo estaban que no escucharon la puerta abrirse así como los dos pares de pisadas que entraron después, un carraspeo de garganta más y finalmente notaron que no estaban solos en la habitación.

- Papá – llamo Booboo empujando las manos de Carlos que finalmente le soltó cruzándose de brazos – estas aquí – señalo lo obvio – con Sofía – y sonaba tan estúpido en ese momento, solo quería que se abriera la tierra y se lo tragara en ese momento.

- Olvidamos quedar de acuerdo para la cena – sonrió la joven mirando divertida la situación – Hola Cameron – saludo.

- ¿Qué hace el aquí? – pregunto su padre sin rodeos ante la situación tan incómoda.

- Él está – se mordió el labio indeciso no sabiendo que decir – Cameron esta – hizo una pausa lanzando una mirada en dirección a Carlos pero este lo ignoraba hablando por teléfono, le escucho murmurar el número de su habitación y se volvió a su padre que esperaba una muy buena explicación.

- Lo mismo que ustedes trabajo – sonrió inocente Carlos – me convocaron para una sesión fotografía y pensé en visitar a mi mejor amigo – sonrió abrazando el brazo de Booboo bajo la atenta mirada de su padre.

- ¿Visitar? – murmuro incrédulo el hombre pues en la pelea el abrigo de Carlos estaba apenas si colgando solo de uno de sus brazos y la camisa toda desfajada de su hijo decían una historia muy diferente.

- Pensaba hacer planes para reunirnos después cuando vi lo horrenda que era su camisa me ofrecí como buen amigo a quemarla por el – Sofía soltó una risita ante esto ganándose una mirada de enojo del joven.

- Te dije que era horrenda – se defendió la chica – bueno que tal si te nos unes a la cena entonces – aplaudió felizmente la joven.

- Me encantaría – dijo con total desprecio bien enmascarado – pero debo cenar con ciertas personas de no sé qué revista – rodo lo ojos ante lo molesto que era, justo entonces alguien llamo a la puerta - ese debe ser Víctor - Carlos arreglo su abrigo y se despidió de todos en la habitación, Booboo le acompaño a la puerta donde el hombre le vio y murmuro un "eso explica que eligieras este hotel" mientras seguía al chico, cuando estos se fueron y volvió a entrar en su habitación su padre lo miraba recriminándole en silencio, Sofía noto la gran tensión en el ambiente y se deslizo de ahí en silencio.

- Te juro que no sabía que iba a venir – de inédito se defendió el joven – es una coincidencia – ni él lo creyó – sabes que es modelo.

Nils solo suspiro derrotado y se acercó a su maleta en busca de entretenerse, Booboo se dejó caer en la cama y el jura que no soñó con Carlos y lo estúpidamente bien que lucía en su ropa, en cualquiera de ella, sospechaba que incluso usando sus camisas que denominaba un crimen contra la moda se volverían toda una sensación si el chico las usaba.

Ahora tendría que aguantar a Fivel y sus chistes de ser gay cuando descubriera a Carlos aquí.

Notas:

En la mayoría de mis fics no me gusta usar la homofobia porque siento que es muy cliché, si leves tintes aquí y allá porque siempre hay alguien molesto pero por lo regular no me gusta usarlo, sin embargo no puede haber tanto apoyo de las familias y si la madre de Cameron en "Un nuevo y Conocido Mundo" parecía un poco homofóbica pero ahora lo deja ser, ella perdió a su hijo no va a hacerlo de nuevo gritándole por querer estar pegado 24/7 con Booboo, los padres de este por otro lado necesitan poner un alto, tal vez no lo haga muy dramático así que no se ilusionen mucho.

Así que amigos míos, como si no fuera suficiente con la perdida de inspiración mi cel murió, lo que se traduce como a todas mis notas, fechas y cronología así como varias ideas y datos de personajes se perdieron por lo que me complica más terminar este fic pero estamos trabajando en ello, ahora sé que a muchos les hubiera gustado ver más de las vacaciones en Perú pero no tengo nada y debo agilizar este fic porque ya van 16 capítulos y aun no llegamos a la mitad de mi trama, ojo no de capítulos si no de la trama que tenía planeada, empiezo a sentir este fic tedioso y aburrido y lo que menos quiero es que se convierta en eso así que agilizando cosas.

Por otro lado tenemos nueva portada y la imagen de este capítulo gracias a mi gran amiguis Manny quien hizo esto que este bellísimo manipulación ámenlo y disfrútenlo.

Galletas?

Tacos??

Inspiración???