Amber POV

La estadía en Oregón fue más rápido de lo que creí, habíamos llegado el viernes en la noche y el domingo por la tarde ya regresábamos a Chicago, la verdad es que conocer a los padres de Chris no fue nada traumatizante después de lo que pasó con Michael, su padre que también era el padre de mi ex esposo, ese secreto que se reveló en medio de la conmemoración de William fue algo que creí iba a poner dependiendo de un hilo nuestra relación pero no fue así. Su madre en cambio parecía que no estaba del todo enterada de lo que pasó, debieron haberle excluido y me pregunté si había sido buena o mala idea, nos llevamos bien, fue una relación inocente, estuve muy cómoda al momento de charlar de cosas muy casuales con ella.

Lo único que consideré extraño es que Chris estuviera ansioso en cuanto llegamos a la ciudad, no quiso salir mucho, incluso pensé que me llevaría por al menos unos cuantos puntos turísticos de la ciudad, pero ni siquiera tuvo intención de salir él mismo. Su fiesta de cumpleaños fue muy íntima, solo sus padres, su tío y yo, sinceramente estuvo muy aburrido pero no quise decir nada, traté de mostrarme feliz de estar junto con él en su vida pero él estaba actuando de una manera extraña.

Tuve el atrevimiento de poder preguntárselo cuando me dejó frente al edificio de mi departamento, por suerte no llevé tanto equipaje para que tuviera la necesidad de ayudarme, así que agarré valor para encararlo.

—¿Qué sucedió realmente? ¿Por qué estuviste la mayor parte de la estadía, ansioso?

Mi pregunta no lo tomó por sorpresa, hasta creo que se lo esperaba, tenía miedo, no quería volver a pasar por lo mismo, con Evan me habían quedado muy malas experiencias acerca de las mentiras, aunque claro que cada uno podía tener sus propios secretos pero no que fuera algo muy significativo, algo que pudiera realmente arruinarlo todo.

Se quedó quieto mirado hacia la calle y luego hacia a mí.

—Simplemente regresar a casa me trae recuerdos extraños, no lo sé —se encogió de hombros, apretándose los labios, abatido —Me trae también recuerdos de mi ex.

—¿Samantha? Solo me has dicho su nombre, ni siquiera sé realmente la historia entre ustedes dos  pero está bien, no necesitas contármela, a menos que...

—¿A menos que...? —me invitó a proseguir, contemplándome con fuerza.

Fui sincera y en un arrebato de sinceridad tal vez lo que dije se había salido de mis manos.

—No quiero después descubrir que Samantha y tu terminaron muy mal, o que hayas tenido un hijo ilegitimo con ella y después venga hasta acá para arruinarte la vida, prefería saberlo ahora si hay algo que te inquiete.

El semblante de Chris se crispó en una expresión de suma indignación, parpadeó y rió sin pizca de gracia, me veía pero parecía que no me reconocía.

—Amber, ¿Qué rayos te pasa? Yo no soy Evan, no tengo una doble vida, simplemente creí que mi madre invitaría a Samantha, es todo.

—¿Y porque la invitaría?

—Se han llevado bastante bien desde que nosotros salíamos, la verdad es que no quiero verla, no tengo buenos recuerdos. Te dije cuando trabaje para ella, nuestra relación no quedó nada bien y no pienso volver a hablarle. ¿Y puedes explicarme porque de repente te comportas así?

Ahora fui yo quien quedó indignada.

—Yo no actué como si tuviera al FBI detrás de mí, tu actitud fue muy sospechosa, solo quería saber si deseabas decirme algo, no quiero volver a lo mismo.

Intentó hablar con serenidad pero no lo logró, se escuchó muy ofendido y molesto, le fue difícil controlar un poco la rabieta.

—¡Parece que me acusas de un crimen o algo! Entiendo que te den miedo las mentiras y la doble vida pero yo no soy él, ¿Entiendes? Y si, me incomodó estar en casa con mis padres, la idea de que ella apareciera me daba mucha inquietud, si era eso lo que querías saber, ya está, te lo dije.

—¿Y porque tu madre tendría intención de invitar a tu ex si sabe que tienes novia?

Se desesperó de mis preguntas que se pasó la mano por el pelo, quiso mantener compostura pero se le veía que perdía la paciencia, tanto como yo.

—¡Porque es muy amiga de mi madre! Pero ella está completamente obsesionada conmigo, todavía quiere hablarme e intenta persuadir a mi madre de darle mi dirección, quiere encontrarme y no entiendo la maldita razón.

Algo en mí intuía que la razón de Samantha por encontrarlo eran otras, tal vez yo exageraba y estaba siendo demasiado paranoica y me creaba ideas locas, tal vez él tenía razón y solo me daba a entender que tenía a un ex detrás de él, tan obsesionada como para querer saber su paradero e ir a acosarlo.

Torcí el gesto, estaba a punto de seguir discutiendo con él porque quería buscar la verdad en esto pero no quería ser demasiado entrometida ni insistente, no había razón para no creerle.

—Sí la idea de ir a Oregón te incomodaba, simplemente la hubieras descartado —admití, a regañadientes, preparándome para salir del auto.

—No podía —me frenó antes de que pudiera poner un pie en la calle —Se lo había prometido a mis padres.

Le di la espalda y puse los ojos en blanco, salí a la calle sin responder y cerré la puerta del auto con cuidado, no quería ya seguir causando más razones para discutir; entré al edificio con el coraje todavía recorriéndome el cuerpo, ahora resultaba que Chris tenía a una ex persiguiéndole y jamás me lo contó, que buena manera de saberlo, de repente el rostro de Camille en esa tienda de vestidos cuando Evan y yo estábamos juntos me asaltó de repente, ¿Y si Samantha era igual que Camille? No, era imposible, Chris y ella no quedaron ni como amigos, dudo que él siga hablándole, era imposible, así que descarté la idea.

Entré al departamento, esperando encontrarme a Mia pero no la vi en la cocina, ni en la sala, me pareció algo extraño, como fuera de lugar.

—¿Mia? —pregunté cerca de su habitación, tampoco estaba ahí, eran las siete, ya debió haber salido del trabajo.

Que extraño, fui a mi habitación a dejar las cosas de mi viaje sobre la cama, estaba un poco cansada pero no quería dormir, tenía que arreglar mis cosas y prepararme la cena; fui a la cocina esperando encontrar algo fácil que solo necesitaba calentar en el microondas pero mi celular vibró en tono de mensaje.

Me acerqué a leer el nombre, era Daniel.

Hola Amber, ¿Qué tal el viaje a Oregón? ¿Ya llegaste?

Sonreí poco.

-Hola, sí, acabo de llegar hace como diez minutos, estuvo bien, gracias. Estaba a punto de llamarte para saber si Mia está contigo, me dio un poco de preocupación no verla, hoy es martes y siempre está aquí saliendo del trabajo pero me supongo que está contigo.

Segundos después, me respondió.

-No, ella no está conmigo, de hecho, no quiere hablarme, se fue esta tarde de mi departamento para casa de tú prima, dijo que necesitaba hablar con alguien.

-¿Pero qué pasó?

-Tuvimos una pelea fuerte. No sé si podría hablar contigo, ¿Estás ocupada?

-No, no lo estoy.

-¿Puedo ir a tu departamento? Espero que ella no llegue cuando estemos charlando.

-Es lo más probable o tal vez se quede a altas horas hablando con Emma, no estoy segura. Hay un parque por la manzana, podemos ir si quieres.

-Seguro, te veo allá en 15 minutos.

-De acuerdo.

Apenas estaba procesando la pelea que había pasado entre Chris y yo, ahora debía solucionar la de Daniel y Mia, era una maldita locura, acababa de pelear con mi novio y no tenía cabeza para arreglar el problema de otra pareja; no terminaba de entender que era la primera pelea entre Chris y yo en todo este tiempo que salíamos, de hecho creí que seríamos una de esas parejas que nunca pelean, teníamos una conducta muy tranquila o al menos eso creí; fui yo la que inició con la fricción en nuestra charla pero él también debió haberme dado una razón de su ansiedad estando todavía en Oregón, ¿Por qué esperar a que yo pudiera comentárselo? Se le veía de inmediato que algo no estaba bien en ese entonces.

Con la cabeza echa un torbellino de pensamientos, salí del departamento, al menos el aire fresco me aclararía un poco todas las conjeturas en mi cabeza, distraerme con los problemas de Daniel y Mia tal vez era lo que podría ayudarme, no lo sé, esperaba que los errores de otra pareja me abrieran los ojos.

Sé que el capítulo es mega cortito pero ya vienen los capítulos largos nenas, lo prometo, pues los estoy haciendo larguitos. 

Perdonen la tardanza pero hoy tuve cosas que hacer que el día se me pasó volando, sorry. 

Disfruten del capítulo, lectoras, las amo