01
Jimin es un niño adorable, con cabello rubio y ojos azules como el mar, para sus padres él es el más grande tesoro que les pudo dar la vida, Jimin es un niño tierno y amable de apenas cinco años, su madre siempre le dice a su amado Jimin que es un ángel caído del cielo que no hay nadie como él que es único y especial.
—Jimin, Cariño ven a comer— le gritó su madre a su amado hijo, pero no hubo respuesta alguna del pequeño Jimin.
A su madre le pareció demasiado raro que su pequeño no le contestara, por que él siempre baja corriendo los escalones para ir comer y siempre le contesta.
Park So Yeon decidió subir a la habitación de su pequeño hijo, tal vez estaba dormido, pensó la mujer, mientras subía por las viejas escaleras de madera que rechinaban al subir. Al llegar a la puerta que tenía el nombre de Jimin, ella la abrió vio a su hijo sentado en la cama mirando un punto fijo en la ventana.
— Jimin, hijo... — Dijo ella a su hijo pero no tuvo respuesta alguna, So Yeon toco el hombro de su hijo pero nada, así que miro hacia donde estaba mirando pero allí no había absolutamente nada, se asustó un poco y decidió pararse al frente de su hijo, se llevó una mano a la boca la ver los ojos de Jimin, los ojos hermosos del pequeño estaban opacos y sin vida.
— Jimin... — lo tomo de los hombros y lo sacudió pero nada sucedía, su hijo parecía muerto, así que ella vio la ventana y rápidamente cerro las cortinas.
— mami... —dijo Jimin pasando sus pequeñas manitas por sus ojitos.
Su madre al ver que había reaccionado lo abrazo con un poco de fuerza.
— Jimin hijo que pasó ¿por qué mirabas hacia la ventana? —pregunto ella con preocupación
— No lo sé mami, solo recuerdo que entre a mi habitación y eso es todo— dijo el pequeño con confusión
Su madre acaricio su cabello rubio con cariño y preocupación
— Bien, cariño vamos a comer, tu padre está apunto de llegar—Dijo ella mientras lo cargaba
— ¡Si! — dijo el pequeño con emoción
✨✨
So Yeon bajaba las escaleras despues de hacer dormir al pequeño Jimin, fue hacia su esposo que estaba en la sala viendo uno de sus amados partidos de béisbol.
— Cariño, algo me preocupa— se sentó junto a su esposo en el sillón
— que es lo que te preocupa— respondió Park Min-ho mirando a su esposa que estaba a su lado.
— es Jimin, Cariño, el ha estado muy raro estos últimos días, no le prestaba atención pensé que eran cosas de niños pequeños pero hoy ví algo que me dejó muy sorprendida— dijo ella mientras daba un suspiro.
So Yeon le contó todo lo que habia pasado a su esposo, Min-ho también se sorprendió al escuchar eso, ahora los dos estaban realmente preocupados.
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