CAPITULO XIV
Logan y Jonah se miran amenazantes e intentan acercarse, pero yo —con las pocas fuerzas que tengo por el momento— sostengo a Jonah y Rosi se encarga de detener a Logan.
—¿No querías pelear? Adelante, ¡hazlo! —habla Logan.
—Ahora lo que quiero es partirte la cara, —Jonah voltea a verme, acaricia mi rostro y limpia unas lágrimas que no sabía que tenía— pero sé que no es el momento ni el lugar para hacerlo.
Toma mi mano y deposita un pequeño beso en ella, luego me envuelve entre sus brazos, me acurruco en su pecho y logro escuchar los latidos de su corazón, que logran transmitirme paz y tranquilidad.
—Siento mucho haberte echo llorar —susurra en mi oído—. Olvidemos esto y vayamos al cine. ¿Te parece bien?
Me limito a asentir.
Nos separamos y veo a Anna por un momento, ella entiende la situación y me da su aprobación. Comenzamos a caminar y a medida que avanzamos mi respiración y mi corazón se normalizan.
—¡Tu no irás a ninguna parte con ese idiota! —Logan trata de alcanzarnos, pero Anna se interpone en su camino.
—¡Logan! Date cuenta que Thomas no quiere hablar contigo y que no es el momento. Deja que pasen unos días y que toda la tormenta entre ustedes se tranquilice. —Él trata de replicar, pero Anna vuelve a interrumpirlo—. Solo dale tiempo...
Logan me da una mirada rápida, aprieta sus puños a hasta el punto de dejar sus nudillos de un color pálido, pasa a mi lado y evado su mirada en todo momento. Puedo escuchar sus pasos resonando por todo el pasillo. Rosy sigue frente a nosotros y dándonos una mirada amenazante, escuchamos el estruendo de los casilleros siendo golpeados y un grito de furia después de eso.
—¡Amor espera! —Rosi sale corriendo preocupada en la misma dirección que Logan.
Pasamos un poco de tiempo en el mismo lugar hasta que Anna toma la iniciativa y nos obliga a Jonah y a mí a salir de nuestro pequeño trance, e incluso hace pequeñas bromas que logran hacernos reír. En poco tiempo llegamos al exterior de la escuela y Jonah me observa con cara de preocupación.
—Creo que sería mejor dejar la salida para otro día, y no es porque no quiera salir contigo, sino porque soy consciente de que ahora mismo tú no estás bien, y creo que necesitas un tiempo a solas.
—Yo estoy completamente bien, si vamos ahora aún podemos llegar y...
—Thomas, está bien, no estoy molesto. Iré por mi auto y los llevaré a ambos a sus casas, regreso en unos minutos.
Le sonrío como agradecimiento, porque al final es obvio que él tiene razón, mis ánimos decayeron un poco con todo lo que pasó. Aún estoy temblando y dudo mucho que el color haya regresado a mi rostro.
Jonah se va, atraviesa todo el estacionamiento y sale de la escuela.
«Creo que por la hora en que llegó no pudo encontrar un lugar donde estacionarse».
Relajo un poco mis hombros, voy hacia la entrada de la escuela y me recuesto, cubro mi cara con uno de mis brazos. Los últimos sucesos que han pasado no dejan de repetirse en mi cabeza y termino preguntándome siempre lo mismo: ¿Cómo es que llegamos esto? No importa lo que yo haga evitar recordar los malos momentos, todo vuelve a mí en menos de un segundo y logra afectarme de una forma demasiado fuerte.
¡Por Dios! ¡Casi tuve un ataque de pánico ahí mismo! La última vez que me pasó fue a los doce años, cuando creí que un chico iba a golpearme.
Todo esto está pasando... ¿por que Logan es quien está a mi lado? Podría haber algo de razón en eso, ya que él fue quien inició mis traumas... y después de tantos años sigue siendo un completo Idiota. En los meses que he estado aquí y en el tiempo que he pasado a su lado, pude darme cuenta que su actitud es igual que antes. En el pasado usaba los golpes para obtener lo que quería y conseguía dañarte hasta que le tenías temor de una manera descomunal.
Ahora es un chico que solo comparte su tiempo con la seriedad, alguien que está enojado todo el día y que parece odiar la vida. Ya no necesita un golpe para dañarte, porque unas cuantas palabras de esa lengua afilada que posee te lastimarán tan profundo que pensarás que no podrás volver a levantarte.
Parece que no sabe que las palabras pueden doler mucho más que los golpes.
—¿Quieres hablar sobre lo que pasó? —Anna está frente a mí y la preocupación se puede ver en su rostro.
—No —sentencio—. Quiero olvidar todo lo que pasó hoy.
—Está bien.
Escucho los pasos de Anna acercarse más a mí. No quito en ningún momento el brazo que está sobre mi rostro, pero por el ruido deduzco que ella terminó acostándose a mi lado sobre la fría acera de la escuela.
—No hablaremos sobre ello, pero no debes reprimir lo que sientes. Sé que ahora tu mente es un total lío, así que solo déjalo salir Thom, estoy aquí para tí.
—No sé de qué hablas. —Mi voz comienza a quebrarse—. Estoy... estoy...
Muerdo mi labio inferior cuando unos pequeños sollozos abandonan mi boca, las lágrimas caen a los lados de mi rostro. Me reincorporo, llevo mis piernas hasta mi pecho y sigo escondiendo mi cara entre mis manos. Lloro en silencio, y las lágrimas se desbordan sin control.
—¡Mierda! —grito frustrado.
No quiero llorar por algo así, sé que no vale la pena, pero la impotencia que siento ahora me consume y no sé que hacer.
¿De qué me sirvió todo el esfuerzo que hice? Años de terapia para poder superar mis traumas y poder llevar una vida normal, entender que mi orientación sexual no estaba mal, sino las personas a mi alrededor al no entender que no tenía nada de malo que me gustaran los hombres, los años de entrenamiento que realicé para no sentirme de nuevo débil y poder defenderme de cualquiera que se atreviera a hacerme daño. ¿De qué sirvió todo eso?
¿Dónde está ese Thomas que se defendió y le dio una lección a esos tipos? Cuando estoy cerca de Logan me olvido de todo y vuelvo a ser ese niño asustadizo.
Odio eso.
Trabajé duro para lograrlo y ahora todo se está desmoronando poco a poco.
—Aqui estoy Thom—. Anna, que aún está a mi lado, se acerca un poco más para abrazarme, pone su barbilla sobre mi cabeza y acaricia mi espalda para transmitirme calma.
—Tengo miedo Anna —murmuro.
—No lo tengas Thom, eres una persona muy fuerte y esto solo es otro obstáculo que lograrás superar.
—¿Cómo estás tan segura de ello?
—Porque soy tu mejor amiga y sé que lo harás.
Luego de eso ninguno de los dijo nada, lo único que hice fue seguir llorando al lado de mi mejor amiga, mientras ella me consolaba. Jonah regresó y a pesar de ver mi rostro lloroso no me preguntó nada sobre ello, se limitó a llevarnos a Anna y mí a nuestros hogares, haciendo bromas en el camino para hacernos reír, algo que intenté hacer, pero que no creo haber conseguido. Lo único que salía de mi era un sonrisa totalmente falsa.
Aún después de haber llorado por una hora y haber sacado un poco de mi frustración, mi cabeza sigue siendo un lío. Una parte de mí odia todo lo que se desata en mi interior al estar cerca de Logan, y la otra no para de pensar en la mirada de dolor que Logan tenía cuando decidí quedarme al lado de Jonah y no hablar con él. En cualquier momento de descuido el rostro de Logan aparece frente a mí y logra hacerme sentir mal. Pero recobro mis sentidos luego de recordar sus crueles palabras y la imagen de él y Rosi juntos.
Estar a su lado no me hace nada bien.
«Entonces... ¿por qué mi maldito corazón no entiende eso?».
Cuando llegamos a la casa de Anna ella se despide de nosotros con un saludo, y me mira de una forma que me hace entender lo que está pensando.
«Estoy aquí para ti».
Yo asiento como respuesta y la veo alejarse. Jonah y yo seguimos en silencio hasta mi casa y llegamos en un abrir y cerrar de ojos.
—Llegamos fresita.
Observo mi hogar desde el auto, y no quiero entrar porque lo más probable es que mi madre estará ahí y me bombardeará con preguntas que yo no responderé.
—Gracias Jonah —desabrocho mi cinturón, bajo del auto, volteo y trato de darle una sonrisa al chico frente a mí—. Una vez más me disculpo por haber arruinado la salida de hoy.
—No tienes que hacerlo, habría sido fácil hacer como que nada pasó, pero eso sería obligarte a estar a mi lado cuando lo que necesitas es estar solo.
—Lo siento —digo nuevamente sin saber qué más decir.
—Las semana que viene tendré mucho trabajo en el bar, no podré verte en un tiempo, pero te escribiré y cuando menos te lo esperes te secuestraré y no te dejaré ir.
—Estaré esperando ese día.
—Hasta pronto fresita mía.
—Hasta pronto sexy Jonah.
Jonah se sonroja un poco mientras una sonrisa se curva en sus labios. Un poco impulsivo entro de nuevo auto y le doy un beso en la mejilla. Cierro la puerta y corro hacia la entrada de mi casa, un poco avergonzado vuelvo a despedirme de él, me devuelve el gesto, arranca el auto y unos segundos después desaparece de mi vista.
Ahora mi única preocupación es entrar a mi casa y evitar a mi madre a toda costa. Tomo la perilla de la puerta, dejo salir un suspiro y abro con cuidado, asomo mi cabeza y lo primero que veo es a mi madre en la sala de estar hablando por teléfono. Está de espaldas, así que con sumo cuidado entro y cierro de nuevo sin hacer nada de ruido.
Las escaleras están a unos cuantos pasos y detrás de mi madre. Avanzo y casi estoy cerca de ellas cuando mi madre se levanta del sofá, asustándome hasta la muerte.
Me quedo en mi lugar petrificado, pensando en que tal vez se dio cuenta de que estoy aquí, pero ella sigue de espaldas, así que aprovecho eso y subo lo más rápido que puedo.
Llego a mi habitación, cierro la puerta con cuidado y la aseguro con llave. Dejo salir el aire que no sabía que tenía retenido, lanzo mi mochila a un lado de mi cama, me dejo caer de espaldas sobre ella y comienzo a masajear mi cabeza para intentar quitar el dolor que siento en ella. Aún recostado en mi cama busco en la mesa de noche una parrilla de ibuprofeno y agarro la botella de agua que estaba en mi mochila para tomármela.
Me acomodo en mi cama y decido que lo mejor que puedo hacer ahora es dormir, encontrar un poco de paz en mi interior y descansar.
(...)
Puedo escuchar un pequeño sumbido de fondo, trato de ingnorarlo colocando mi almohada en mi cabeza para intentar bloquear ese pequeño ruido, pero no puedo. Me reincorporo en mi cama y abro poco a poco mi ojos.
La luz de la Luna entrando por mi ventana es lo primero que veo, y luego busco el objeto que interrumpió mis sueños. Busco por todas partes lo que podría haber sido, pero no lo encuentro. Me recuesto de nuevo en mi cama rendido y dispuesto a dormir de nuevo, pero mi celular comienza a vibrar y me doy cuenta de cual fue el objeto que no me dejó dormir. Con algo de pereza lo tomo de la mesa de noche.
«Olvidé que lo había puesto en vibrador».
Lo enciendo y la luz que emana de él me deslumbra por completo, cierro un poco mis ojos para poder ver de quién se trataba y me sorprende ver la hora que es.
«¿Quién llama a las dos de la mañana?».
Voy al registro de llamadas y todas son de Logan, un total de diez llamadas perdidas.
«¿Le habrá pasado algo?».
¡No! Esto es lo que odio, siempre termino preocupándome por el, cuando lo único que él hace es insultarme. Tengo que dejar eso atrás, él no se lo merece. Si lo que quiere es molestar a alguien a esta hora que llame a su novia, yo ya tengo suficientes cosas en la cabeza como para agregar algo más a la lista.
Mi celular comienza a sonar de nuevo en mis manos y el nombre de Logan aparece en la pantalla.
No debo contestar, solo debo dejar que siga llamando y eventualmente se cansará, así que no hay problema. Dejo mi teléfono en mi pecho, la llamada termina, no pasa mucho tiempo cuando vuelve a llamar. Mi paciencia se acaba y termino contestando.
—¿Hola?
«Desde mañana practicaré para mejorar mi fuerza de voluntad».
—Al fin conteshtaaaaas. ¿Y cómo te va con el idiota? ¿Albino? ¿Por qué she haría esho en el cabesho? She le ve horribleeeee.
—No puedo creer que esto esté pasando de nuevo. ¿Acaso tomaste?
—Esho no te incumbe en lo absholuto.
—Iré ahora. —Activo el altavoz y desesperado comienzo a buscar mis llaves.
—¡No lo haré! No quiero interrumpir tu shita con ese imbéshil, seguro que están aprovechando el tiempo muy bien.
—No estoy de humor para tus estupideces. Dime dónde estás.
—Ahora eshtás con él, no quiero...
Mi paciencia se acaba.
—¡No estoy con él, ni siquiera salimos, canceló todo porque yo no me sentía bien! Ahora dime dónde estás.
La línea de queda en silencio por un rato, pienso que tal vez me colgó, pero me llega un mensaje con la dirección de Logan.
—Voy para allá, así que no te muevas de ahí.
—No lo haré mi capusha...
Mi corazón da un pequeño salto al escucharlo, pero lo hago a un lado. Cuelgo la llamada y bajo a toda prisa las escaleras, voy hacia la cocina y comienzo a buscar las llaves del auto de mi madre, las encuentro e uno de los cajones y las tomo. En el camino tropiezo con uno de los muebles y algunas ollas terminan callendo al suelo.
«Ahora no tengo tiempo para esto».
Salgo apresurado de la cocina, mi madre está bajando las escaleras, pero esa no es una de mis preocupaciones en este momento.
—¿Thomas? ¿Qué es lo que está pasando?
—Mamá, tengo que salir, vuelvo en unos minutos.
Salgo de la casa y voy a la cochera y la abro, subo al auto. Mi madre aún sigue gritándome desde fuera y tocando la ventana para que le abra. Pongo el auto en reversa y voy saliendo con cuidado, cuando voy a presionar el acelerador mi madre se pone frente al auto impidiendo mi paso.
—¡Thomas Garkson, baja de ese auto en este instante! —Ella se acerca a mí con precaución, toca la ventana del auto y me veo obligado a bajarla—. Hijo, ¿qué es lo que está pasando? ¿A dónde vas a esta hora? ¿Acaso le pasó algo a Anna?
—Mamá, no puedo contestar todas tus preguntas ahora, pero si no voy puede pasarle algo y eso me asusta.
—¿Quién te necesita hijo? —pregunta preocupada.
—La persona que odio... ¡la maldita persona que más odio en este mundo! —grito—. Y aún así estoy preocupándome por él.
—Thomas...
—Déjame ir por favor —le suplico—. Te lo explicaré todo cuando vuelva, pero por favor, déjame ir.
Ella asiente y se hace a un lado.
Marco la dirección que me dio Logan en el GPS, presiono el acelerador con todo lo que da, hago sonar las ruedas en el pavimento y arranco. Conduzco entre las calles oscuras de la ciudad, buscando al chico que siempre logra sacarme de quicio.
_______________________________________
Ejem...no tengo palabras para describir este caso de verdad. Pero lo que si puedo decir es que se vienen cosas buenas entres estos dos.
Y también darle las gracias a Kryslaaa por realizar estos hermosos banners y la nueva portada de los chicos. ¡Mujer tu haces arte de verdad! 🌹
Bạn đang đọc truyện trên: Truyen247.Pro