Renard se encontraba en una sala de la base, observando fijamente el reloj con las manos cruzadas detrás de la espalda. Su expresión era de expectativa.

Lysander, su leal asistente, revisaba unos papeles con detenimiento detrás de Renard.

- Pronto deberíamos tener noticias. - murmuró Renard para sí mismo.

Lysander se acercó a Renard y se detuvo a su lado.

- Estoy seguro de que todo está listo para su llegada, señor. Pero aún no hemos recibido confirmación.

Renard se volvió hacia Lysander y sonrió.

- Gracias, Lysander. Tu eficiencia es inigualable. Si llegan, quiero que se sientan bienvenidos.

Lysander inclinó la cabeza en señal de respeto.

- Entendido, señor. Me aseguraré de que todo esté perfecto.

Renard pensó por un momento antes de responder.

- Por cierto, dile a Caspian que se asegure de dar una bienvenida especial, en caso de que lleguen.

Lysander asintió y se dirigió hacia la puerta.

- Entendido, señor.

Lysander llegó a la oficina de Caspian, una habitación elegante con estanterías de madera oscura que reflejaban la personalidad meticulosa de su ocupante. Caspian, un castor antropomórfico con gafas y un aire de concentración, se encontraba detrás de su escritorio, revisando unos documentos con detenimiento.

- Ah, Lysander. - dijo Caspian, alzando la vista y sonriendo ligeramente. - ¿Qué me traes?

Lysander entregó los documentos que Renard le había dado.

- Estos son los informes que Renard quería que revisaras. También me pidió que te dijera que te asegurases de dar una bienvenida apropiada a nuestros invitados.

Caspian arqueó una ceja, intrigado.

- ¿Una bienvenida apropiada? ¿Qué significa eso exactamente?

Lysander se encogió de hombros.

- No estoy seguro. Renard no me dio muchos detalles. Pero parecía importante.

Caspian asintió pensativamente.

- Entiendo. Bueno, me aseguraré de que todo esté listo para su llegada. Fiona quiere que esta reunión sea un éxito.

Lysander asintió.

- Entendido, señor. Me aseguraré de que todo esté listo.

Caspian se levantó de su silla y comenzó a caminar alrededor de la habitación.

- Quiero que revises personalmente los arreglos para la recepción. Asegúrate de que la decoración sea adecuada y que el personal esté preparado.

Lysander tomó nota mentalmente.

- Sí, señor. ¿Hay algo específico que deba buscar?

Caspian se detuvo frente a una ventana y miró hacia fuera.

- Solo asegúrate de que todo sea perfecto. Fiona no tolera errores.

Lysander asintió, sabiendo que la presión venía de arriba.

- Entendido, señor.

Caspian se volvió hacia él.

- Lysander, ¿has notado algo extraño en Renard últimamente?

Lysander se sorprendió por la pregunta.

- ¿Extraño, señor? No, no que yo recuerde.

Caspian frunció el ceño.

- He notado que ha estado un poco... distante. ¿Crees que podría estar preocupado por algo?

Lysander se encogió de hombros.

- No sé, señor. Renard siempre ha sido un poco reservado. Pero si está preocupado por algo, no lo ha compartido conmigo.

Caspian bebió un poco de café.

- Entiendo. Bueno, mantén los ojos abiertos. Si notas algo extraño, no dudes en informarme.

Lysander asintió.

- Sí, señor. Pero, si no es indiscreto, ¿qué crees que podría estar preocupando a Renard?

Caspian se acercó a Lysander y bajó la voz.

- He notado que ha estado recibiendo mensajes cifrados. Y ayer noche, lo vi hablando con alguien en el jardín. Alguien que no reconocí.

Lysander se sorprendió.

- ¿Mensajes cifrados? ¿Y quién podría ser esa persona?

Caspian sacudió la cabeza.

- No lo sé. Pero me preocupa. Fiona confía en Renard, pero si está ocultando algo...

Lysander se puso serio.

- Entiendo. ¿Crees que podría ser una amenaza para la organización?

Caspian asintió.

- Sí. Y necesito saber qué está pasando.

Lysander se volvió hacia Caspian.

- Bien, Caspian. Por favor, comienza con los preparativos para la recepción de los invitados. Asegúrate de que todo esté perfecto.

Caspian asintió eficientemente.

- Sí, Lysander. Me aseguraré de que todo esté listo. ¿Hay algún detalle específico que deba tener en cuenta?

Lysander pensó por un momento.

- Asegúrate de que la decoración sea elegante y sofisticada. También quiero que se sirvan bebidas y aperitivos de alta calidad.

Caspian tomó nota.

- Entendido. ¿Y qué hay de la música?

Lysander sonrió.

- Eso es fácil. Fiona tiene un gusto por la música clásica. Asegúrate de que haya un cuarteto de cuerda para entretener a los invitados.

Caspian asintió.

- Hecho. Me aseguraré de que todo esté listo para la llegada de los invitados.

Lysander se dio la vuelta para salir.

- Excelente. Manténme informado de cualquier problema.

Caspian se puso a trabajar en la preparación de la bienvenida, ordenando a sus ayudantes que decoraran el salón de recepción con globos y serpentinas de colores azul y rosa. También pidió que se preparara una mesa con comida y bebidas, incluyendo algunas botellas de alcohol de alta calidad.

Mientras tanto, Caspian se encargó de preparar un pequeño discurso de bienvenida, queriendo asegurarse de que los invitados se sintieran especiales y apreciados.

De repente, escuchó una voz detrás de él.

- ¿Qué crees que estás haciendo, Caspian?

Caspian se dio la vuelta y vio a Fiona, una zorra antropomórfica con una apariencia elegante y sofisticada, mirándolo con una expresión escéptica.

- Lysander me informó que Renard quería que preparara una bienvenida apropiada. - respondió Caspian, tratando de mantener la calma.

Fiona arqueó una ceja.

- Una bienvenida, ¿eh? - repitió, como si estuviera analizando cada palabra. - ¿Es realmente necesario todo esto?

Miró a su alrededor, observando la decoración y la mesa preparada.

Caspian se encogió de hombros.

- Quiero asegurarme de que se sientan bienvenidos.

Fiona soltó un suspiro.

- Renard le encanta cumplir sus expectativas.

En ese momento, Renard entró en la habitación, una sonrisa confiada en su rostro.

- Ah, Caspian, Fiona. Me alegra ver que todo está listo para la bienvenida.

Caspian asintió, todavía sintiendo una sensación de duda.

- Sí, Renard. Todo está listo.

Fiona se acercó a Renard, su mirada penetrante.

- ¿Acaso olvidaste que ellos solo van a ser nuestras piezas de ajedrez?

Renard negó con la cabeza.

- Claro que no. Primero debemos ganarnos su confianza.

Luna, un cuervo antropomórfico con una sonrisa traviesa, se acercó a Fiona, que estaba hablando con Renard.

- Disculpa, Fiona. - dijo Luna, con una voz llena de inocencia. - Pero tengo que informarte de algo.

Fiona se giró hacia Luna, su expresión curiosa.

- ¿Qué es, Luna?

Luna se encogió de hombros.

- Scourge también vendrá a la reunión.

Fiona se detuvo, su mirada congelada en el tiempo. Un destello de emociones cruzó su rostro: sorpresa, nostalgia, y una pizca de tristeza. Su mente viajó al pasado, recordando momentos felices con Scourge. La conexión que habían compartido, la pasión que los había unido.

Renard notó el cambio en Fiona y se sorprendió. No había visto esa expresión en ella en mucho tiempo.

- Fiona... - dijo Renard, su voz suave.

Fiona se recuperó rápidamente, su máscara de compostura volviendo a su lugar. Pero su voz tembló ligeramente.

- Está bien. - dijo, tratando de sonar convincente. - No hay problema.

Luna notó la tensión en su voz y se disculpó.

- Lo siento, Fiona. No sabía que sería un problema.

Fiona la miró con una sonrisa forzada.

- No es un problema, Luna. Solo sorpresa. Hace poco lo ví, pero no pensé que vendría.

Luna asintió y se alejó, dejando a Fiona y Renard solos.

Renard se acercó a Fiona, su voz baja.

- Fiona, ¿estás segura de que estás bien?

Fiona asintió, su mirada evitando la de Renard.

- Sí, Renard. Estoy bien. Solo necesito asegurarme de que esta reunión salga bien.

Fiona se alejó, su mirada congelada, comenzó a recordar el pasado. La sala, las personas, todo se desvaneció mientras su mente viajaba a un momento que creía haber olvidado.

Flashback

Ella y Scourge, juntos, en una noche de luna llena, sobre el tejado de un edificio abandonado. La ciudad brillaba debajo de ellos, un mar de luces que parecían estrellas.

Scourge la tomó de la mano.

- Nunca te dejaré. - dijo, su voz llena de pasión. - Juntos, podemos conquistar el mundo.

Fiona sonrió, sintiendo su corazón latir con emoción.

- Quiero conquistar el mundo contigo. - respondió, besándolo apasionadamente.

La noche era suya, el mundo era suyo. Nada podía detenerlos.

Pero entonces, algo cambió. Algo que los separó, que los hizo perderse.

Fin del flashback

Fiona sacudió la cabeza, tratando de sacudir los recuerdos. No podía permitirse perderse en el pasado. Tenía que enfocarse en el presente.

La voz de Renard la sacó de su ensimismamiento.

- Fiona, pronto comenzaremos. Asegúrate de estar lista.

Fiona asintió, recuperando su compostura.

- Estoy lista. - dijo, su voz firme.

Se dirigió hacia la sala de reuniones, su corazón latiendo con anticipación. Sabía que Scourge estaría allí, y no estaba segura de qué esperar.

Mientras caminaba, podía sentir la tensión en el aire. La reunión sería crucial para los planes de la organización, y Fiona sabía que no podía permitirse fallar.

Llegó a la sala de reuniones y se detuvo frente a la puerta, tomó una respiración profunda y se preparó para enfrentar lo que venía.

****

Metal Sonic intentó establecer contacto con Shadow y los demás, pero solo recibió silencio. Su frustración crecía por momentos.

De repente, un ruido detrás de él lo hizo girar. Cream emergió de las sombras, corriendo hacia él con una velocidad impresionante.

- ¡Cream! ¿Qué haces aquí? - preguntó Metal Sonic, sorprendido.

Cream se detuvo frente a él.

- He venido a rescatar a Tails. - respondió con firmeza.

Metal Sonic se sorprendió aún más. No sabía que Cream estaba aliada con Tails.

Cream sonrió, mostrando sus dientes afilados.

- No te preocupes, Metal Sonic. No vamos a lastimarte.

Con un movimiento rápido, Cream sacó un dispositivo de su bolsillo y lo activó. La habitación se llenó de un humo blanco.

Cuando el humo se disipó, Tails estaba libre.

- ¡Gracias, Cream! - exclamó Tails, agradecido.

Cream sonrió y se volvió hacia Metal Sonic.

- No te metas en nuestros asuntos, Metal Sonic. Esto no te concierne.

Con eso, Cream y Tails desaparecieron en la noche, dejando a Metal Sonic con más preguntas que respuestas.

- ¿Por qué no contesta ese inútil? - se preguntó Metal Sonic, refiriéndose a Shadow.

****

Shadow, Blaze, Silver y Valtor continuaban su búsqueda en la jungla, siguiendo el sonido del susurro misterioso. Valtor lideraba el camino, su visión aguda escaneando la vegetación densa en busca de señales de peligro.

Blaze y Silver seguían de cerca, sus ojos vigilantes escaneando el entorno, listos para enfrentar cualquier cosa que saliera de la oscuridad.

La jungla se cerraba sobre ellos como una trampa mortal, pero el grupo avanzaba sin cesar, guiados por el susurro misterioso que parecía venir de todas partes.

Los hombres de Valtor cubrían los flancos, utilizando sus habilidades de combate para proteger al grupo de cualquier ataque sorpresa. Shadow se movía en silencio, su presencia casi imperceptible, listo para reaccionar ante cualquier amenaza.

El susurro misterioso se intensificaba, haciéndolos sentir como si estuvieran siendo observados por ojos invisibles. Shadow podía sentir la adrenalina corriendo por sus venas.

- Esto es cada vez más extraño. - murmura Valtor, su mirada escaneando el entorno con una mezcla de curiosidad y precaución. - No me gusta nada. Hay algo que no cuadra.

Shadow asiente con la cabeza, su mirada fija en el frente, su expresión determinada.

- Tenemos que seguir adelante. - dice con firmeza. - Necesitamos descubrir qué es lo que está pasando aquí. No podemos dejar que el misterio nos detenga.

Valtor se encoge de hombros, su mirada aún alerta.

- Pero ¿y si es una trampa? ¿Y si estamos caminando hacia nuestra propia muerte?

Shadow se vuelve hacia Valtor.

- No tenemos opción. - dice. - Tenemos que arriesgarnos. Por Amy, por Sonic, por todos.

Después de horas de caminar por la densa jungla, finalmente llegaron a un claro. En el centro del claro se alzaba un templo antiguo, cubierto de vegetación y con una aura de misterio.

Shadow se detuvo, su mirada fija en el templo.

- Este debe ser el lugar.

Valtor se acercó, su mirada escaneando el entorno.

- No veo ninguna señal de peligro.

Silver se acercó a Shadow.

- ¿Qué crees que encontraremos dentro? - preguntó.

Shadow se encogió de hombros.

- No lo sé, pero tenemos que investigar.

Al entrar en el templo, se encontraron con un pasillo oscuro y silencioso. De repente, una figura emergió de las sombras.

Una ave fénix majestuosa, con plumas de oro y ojos que brillaban como estrellas, se alzó ante ellos.

Todos se detuvieron, sorprendidos.

- ¿Qué... qué es esto? - preguntó Valtor, su mirada fija en la ave.

La ave fénix miró a los viajeros con una expresión sabia.

- Soy la guardiana de este templo. - dijo con una voz que parecía música. - Y también soy la diosa que todo lo ve.

Silver se sorprendió.

- ¿Una diosa? - repitió.

Blaze se adelantó, su mirada llena de curiosidad.

- ¿Qué sabes sobre Sonic.exe? - preguntó.

La guardiana Fénix miró a los viajeros con una expresión triste.

- Sonic.exe fue un príncipe en una vida pasada. - dijo. - Un príncipe justo y noble, pero su destino fue truncado por una muerte prematura.

Valtor se sorprendió.

- ¿Qué ocurrió? - preguntó.

La guardiana Fénix continuó.

- Su alma no descansó. La ira y la tristeza lo consumieron, y se convirtió en un demonio. El Devorador de Almas lo encontró y lo corrompió, convirtiéndolo en la criatura que conocen hoy.

Blaze se estremeció.

- Eso es horrible.

Silver se adelantó.

- ¿Cómo podemos detenerlo?

La guardiana Fénix miró a Silver con una expresión grave.

- El pasado de Sonic.exe es clave para detenerlo. Deben encontrar el origen de su corrupción y romper el vínculo con el Devorador de Almas. El origen de la corrupción de Sonic.exe es un misterio que deben resolver ustedes mismos. - dijo. - Pero les daré una pista: busquen en los lugares más oscuros del pasado.

Valtor se frustró.

- ¿No puede darnos una pista más clara? - preguntó.

La guardiana Fénix sonrió.

- La verdad es peligrosa, viajeros. Deben estar preparados para enfrentarla.

Shadow se determinó.

- Estamos listos. ¿Dónde debemos empezar?

La guardiana Fénix señaló hacia una puerta.

- El Portal de las Sombras los llevará al camino correcto. Pero cuidado, el camino está lleno de peligros.

Blaze se adelantó.

- Estamos listos para enfrentarlos.

La guardiana Fénix asintió.

- La luz del fénix los guiará. No la olviden.

De repente, la atmósfera en el templo cambió. La luz de la fénix se apagó, y una oscuridad se cernió sobre los viajeros.

Shadow se tensó.

- Algo no está bien.

Valtor se puso en guardia.

- Prepárense.

Un sonido de risa maníaca resonó en el templo, y luego una figura emergió de las sombras.

Sonic.exe apareció ante ellos, su mirada roja brillante y su sonrisa cruel.

- Bienvenidos, amigos. - dijo con una voz que parecía venir de las profundidades del infierno. - He estado esperándolos.

Blaze se estremeció.

- Sonic... ¿qué te ha pasado?

Sonic.exe se rió.

- Me he liberado de las cadenas de la bondad. Ahora soy el dueño de mi propio destino.

Silver se adelantó.

- No eres tú mismo, Sonic. Debes recordar quién eras.

Sonic.exe se burló.

- Ese príncipe débil y noble está muerto. Yo soy el nuevo Sonic, y mi reino es la oscuridad.

Sonic.exe se volvió hacia una sombra oscura detrás de él.

- Les presento a mi novia, Amy_Corvus.

Una figura emergió de la sombra, y los viajeros se quedaron horrorizados.

Amy tenía el cabello despeinado y su ropa estaba rasgada y sucia.

Blaze se tapó la boca, horrorizada.

- ¿Qué le has hecho?

Sonic.exe se rió.

- La he liberado de su debilidad. Ahora es mía.

Shadow se enfureció.

- Eres un monstruo.

Amy se acercó a Sonic.exe, su mirada vacía y sin alma.

- Sonic... mi amor.

Sonic.exe la abrazó, su sonrisa cruel.

- Mi querida Amy. Juntos vamos a destruir este mundo.

Valtor se estremeció.

- Esto es horrible.

Silver se adelantó.

- Tenemos que detenerlos.

Sonic.exe se acercó a Shadow y los demás, su mirada roja brillante y su sonrisa cruel.

- Les advierto. - dijo con una voz baja y amenazante. - Si siguen arruinando mis planes, perderán a Amy. Para siempre.

Blaze se estremeció.

- ¿Qué planes?

Sonic.exe se rió.

- No es de su incumbencia. Pero Amy pagará el precio.

Valtor se enfureció.

- No te permitiremos que le hagas daño.

Sonic.exe se encogió de hombros.

- No tengo nada que perder. Pero ustedes sí. Amy es su última conexión con la realidad.

Shadow se tensó.

- No te creeremos.

Sonic.exe sonrió.

- Ya verán. Si no me dejan en paz, Amy será la primera en caer.

Amy se acercó a Sonic.exe, su mirada vacía y sin alma.

- Mi demonio. - dijo con una voz débil.

Sonic.exe la abrazó, su mirada fija en Shadow y los demás.

- Decidan. - dijo. - ¿Quieren salvar a Amy o seguir arruinando mis planes?

Shadow se adelantó, su mirada fija en Sonic.exe.

- No te permitiremos que le hagas daño a Amy. Vamos a detenerte.

Sonic.exe se rió.

- ¿Crees que puedes detenerme? Soy el más poderoso.

La batalla comenzó, con Shadow, Valtor, Blaze y Silver luchando contra Sonic.exe y Amy.

Pero a pesar de su valentía, Sonic.exe demostró ser demasiado poderoso.

Sonic.exe lanzó una onda de energía que envió a los héroes volando.

Cuando se recuperaron, Sonic.exe y Amy habían desaparecido.

- ¡No! - gritó Shadow, mientras corría hacia el lugar donde estaban.

Valtor se acercó a él.

- Lo siento, Shadow. Los perdimos.

Blaze se estremeció.

- ¿Qué vamos a hacer ahora?

Silver se determinó.

- Vamos a encontrarlos. Y vamos a detener a Sonic.exe de una vez por todas.

Shadow se quedó mirando el vacío, su corazón pesado por la pérdida de Amy.

- Vamos a encontrarla. - dijo Valtor, colocando una mano en su hombro.

Shadow asintió.

- Vamos a detener a Sonic.exe. - dijo. - Y vamos a salvar a Amy.

La noche cayó sobre el templo, y los héroes se dispersaron para planificar su próximo movimiento.

Pero en la oscuridad, una figura acechaba.

Sonic.exe y Amy estaban lejos, pero su presencia aún se sentía.

La sombra de Sonic.exe se cernía sobre el mundo, y los héroes sabían que la batalla apenas comenzaba.