—You don't make me feel the same way anymore, Jayden —susurró.
"Ya no me haces sentir lo mismo, Jayden."

Con eso, Ari hizo su mayor esfuerzo por empujar al otro, y lo logró, llevándose también la satisfacción de tirarlo al suelo.

—Stop harassing me! It's been a long time between us and... I don't think I'll go back to it, I'm fine now —replicó nuevamente Ari.
"¡Deja de acosarme! Lo nuestro ya pasó hace mucho tiempo y... No creo volver a retomarlo, estoy bien ahora."

—Are you okay? Ha, I don't think so —alegó Jayden levantándose y sacudiéndose un poco—. You told me you would die if I wasn't by your side.
"¿Estás bien? Ja, no lo creo. Me dijiste que morirías si no estaba a tu lado."

—That was before! Understand! I don't need you anymore.
"¡Eso fue antes! ¡Entiende! Yo ya no te necesito."

—Are you sure? —cuestionó volviendo a acercarse.
"¿Estás seguro?"

—Yes.
"Sí."

—Well, let's see how long you hold out.
"Bueno, veamos cuanto tiempo aguantas."

—What do you mean?
"¿A qué te refieres?"

Jayden volvió a arremeter en contra de Ari y este, por el susto, terminó golpeándolo en la cara con el puño cerrado. Después de eso, abrió su mano y se quejó por el dolor, pues el impacto, también le había hecho sangrar de la nariz al atacante.

El de ojos bicolor empezó a sobarse los nudillos y debido a la distracción, Jayden aprovechó a empujarlo cuerpo a cuerpo nuevamente a la pared. Los quejidos se escucharon otra vez y antes de que pasara otra cosa, Ari reaccionó, agachándose. El otro psicólogo golpeó la pared con intención de dañar a su compañero, solo que falló.

El castaño empezó a gatear por debajo de su escritorio hasta llegar al otro lado, ahí, se dispuso a buscar en los cajones del mueble algo que le ayudara a defenderse, pero solo tenía libros, carpetas y plumas; no le enterraría una de esas en el cuerpo.

Cuando Jayden retomó la postura, por encima del escritorio, levantó a Ari de los hombros del saco, desgarrando un poco más la tela.

—Why are you running away!? Let's make things right —reclamó el agresor.
"¿¡Por qué huyes!? Vamos a arreglar las cosas."

—Because you and I do not share the same concept —informó el castaño.
"Porque tú y yo no compartimos el sentimiento concepto."

El mayor de ambos, Ari, volvió a zafarse del agarre y después lo golpeó con un libro en la cara dos veces, para luego atacar la cabeza.

Tomó ventaja de los golpes que le había dado y empezó a correr hacia la puerta del consultorio, soltando el libro, pero antes de llegar, Jayden lo jaló del collar que llevaba, haciendo que se rompiera. Las perlas empezaron a distribuirse por el suelo y el menor de ambos tiró al mayor al diván, posicionándose encima de él.

Ari quería hacer algo, pero notó que sus manos estaban aprisionadas o más bien, siendo sujetadas de las muñecas con fuerza.

—That's enough! Please! —le reclamaba el castaño.
"¡Ya basta! ¡Por favor!"

—Why~? We are just starting, my love.
"¿Por qué~? Estamos empezando, mi amor."

Una de las manos que tenía sujetas las muñecas de Ari, pasó a soltarlo, para de un segundo a otro, arrancar la camisa, técnicamente volviendo a arrancar los botones de esta.
El mayor se puso más nervioso y eso le impedía pensar claramente.

En ese momento, recordó una frase que le decían mucho en los tiempos de la Universidad: "Si no puedes con el enemigo, únete a él"; eso tendría que hacer.

—You are so sexy —alargaba el menor acariciando el pecho desnudo del otro.
"Eres tan sexy."

—I'm not 20 years old anymore, stop it. We are no longer of age to do these things —suplicó Ari.
"Ya no tengo 20 años, para. Ya no estamos en edad de realizar estas cosas."

—For this, there is no age, relax.
"Para esto, no hay edad, relájate."

—After all... I think you're right.
"Después de todo... Creo que tienes razón."

—Let's go back to those days when it was just you and me, shall we? —preguntó Jayden.
"Volvamos a aquellos días en los que solo estábamos tú y yo, ¿Te parece?"

"Si no puedes con el enemigo, únete a él".

—It is well~
"Está bien~"

Jayden soltó a Ari de las muñecas y se fue directo a besarle el cuello, dejándole una marca por lo fuerte que le "besó".

El de ojos heterocromáticos se dió cuenta de eso, así que tenía que moverse más rápido.

Cuando tuvo oportunidad, comenzó a ahorcar a su compañero, dando paso a que él se pudiera levantar. Después de eso, azotó su cabeza boca abajo contra el escritorio y aprisionó sus manos, como antes había hecho con él.

—I told you to stop and you didn't listen.
"Te dije que pararas y no me escuchaste."

—You're a cheater! You're just like in college! —alegó.
"¡Eres un tramposo! ¡Eres igual que en la Universidad!"

—Lie. I didn't go around provoking anyone at school.
"Mentira. Yo no iba por ahí provocando a nadie en la escuela."

—You were provoking me! —exclamó el sometido.
"¡Me estabas provocando!"

—Exactly, you are nobody.
"Exactamente, tú no eres nadie."

Jayden se enojó mucho al oír esas palabras salir de la boca de su amado, así que tomó fuerza y golpeó con su pie en la rodilla de Ari, sacándole un grito, a la vez que lo soltaba.

El mayor se agachó a sobarse y gracias a eso, el menor arremetió contra él otra vez, estrellándose en la pared. A consecuencia de eso, ambos se deslizaron hasta el suelo.

Ya un poco mareado, el castaño empezó a arrastrarse por el suelo, pero no fue mucha distancia, ya que Jayden lo jaló bruscamente del cabello y lo tiró hacia atrás.
Ari intentaba soltarse, en cambio, no podía.

—I've had enough of you! —gritó el menor jalándolo más fuerte.
"¡Ya estoy harto de ti!"

—It's weird, I thought you'd never feel that way about me. I was your worship —contestó fingiendo debilidad.
"Es raro, pensé que nunca sentirías eso por mí. Yo era tu adoración."

Ese pareció ser el colmo, pues Jayden soltó la cabeza de Ari y le metió un pisotón en la espalda, sacándole el aire y un hilo de sangre de su boca.

Después, se volteó a agarrar uno de los reconocimientos enmarcados del otro, confiado de que él no estaba en buenas condiciones. Mientras eso pasaba, Ari intentó moverse y lo logró, solo que no mucho.

Cuando el menor se dió cuenta de lo que hacía el otro, sujetó con fuerza el reconocimiento y corrió a golpearlo en la nuca, gritando:

—IT'S TIME TO GO TO SLEEP!
"¡ES TIEMPO DE IR A DORMIR!"

Terminó rompiendo el vidrio del marco y desmayando al psicólogo, dejándolo inmóvil; completamente a su disposición.

[...]

Mike, Silvio, Flex y Ela estaban corriendo escaleras arriba hacia el consultorio de Ari, pues la recepcionista les había prohibido el paso y eso le picaba el instinto al rubio; sabía que algo estaba mal.
Le picó más debido a la llamada que tuvo su psicólogo la noche anterior.

Llegando a la puerta, observaron todo desordenado y el caos comenzó dentro de cada uno de ellos.

—Pero, ¿Qué huracán pasó por aquí? —comentó Silvio al aire y adentrándose en el lugar.

—¿Dónde está Ari? —cuestionó la pelicastaña.

—Pues aquí no —respondió Silvio nuevamente.

—¡Cállate! Ten consideración, carajo —regañó el peliazul; Flex.

—Ya, perdón.

Mientras ellos discutían, Mike se agachó en una mancha rojiza que marcaba el suelo. Puso sus dedos sobre ella y se manchó con el líquido, que luego reconoció como sangre.

—Chicos —llamó el rubio temblando y levantándose—, e-esto es sangre.

—¿¡Cómo que sangre!? —se exaltó Ela y caminó rápido hacia él.

—¿De quién? —igual se acercó Flex.

—S-supongo que de Ari, n-no puede ser de alguien más.

Ela se alejó un poco de ellos y pisó algo que levantó al darse cuenta; una perla. Buscó más y las encontró, además de el accesorio adicional que antes tenía el collar.

—Oigan, definitivamente esto es de Ari —informó ella con manos temblorosas.

—¿Estará en casa? —preguntó el de ojos grises.

—Creo que sí, pero no debe estar solo —comentó otra vez Ela.

—¿No está solo?

—A la verga, debimos estudiar criminología —bromeó Silvio.

—Por favor... Cállate, Silvio —expresó por segunda vez su pareja.

Mike metió algunas de las cosas en los bolsillos de su sudadera y se encaminó fuera del centro de ayuda, acompañado de sus amigos.

[...]

—A huevo, misión espía —jugaba el castaño de nacionalidad mexicana entre los arbustos—. Me siento como en película de James Bond.

—¡Silvio! Mantén la cordura, por Dios —volvió a regañar el peliazul.

—Chale, nunca me dejas ser feliz.

Flex rodó los ojos y se acercó a susurrarle algo en el oído a Silvio, algo que lo puso feliz y obediente de un momento a otro.

—Ah, bueno, así sí —dijo la pareja de Flex.

—Muy bien, vas, Mike —mandó Ela—. Avísanos si hay algo extraño o hay alguna otra persona.

—C-claro —afirmó y salió del escondite.

El de ojos grises caminó hasta la puerta de la vivienda del especialista e hizo sonar el timbre, dejándolo esperando un rato.

Pasaron segundos y la puerta se abrió, mostrando a una persona de cabello rubio con ojos azules demasiado claritos, parecían un diamante resplandeciente. El extraño preguntó en su idioma:

—Who are you and what are you doing here?
"¿Quién eres y qué haces aquí?"

—¿Eh? —estaba muy confundido.

—Are you lost? —volvió a cuestionar.
"¿Estás perdido?"

—"¿Cómo le digo que no hablo inglés?" —pensó el rubio.

Como Mike no respondía nada, Jayden estaba a punto de cerrarle la puerta en la cara, pero otra voz le detuvo.

—Don't close! It's Miguel.
"¡No cierres! Es Miguel."

Y Ari apareció a un lado de su compañero, parecía verse bien, si no fuera por el maquillaje instantáneo que colocó en su cuello.

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[N/A]

[🖤🥀] Hablando de desmadre, no les enseñé el consultorio de Ari, ¿Verdad?

Wueno, aquí se los dejo:

Se ve chiquita la chingadera esa -_-

Por cierto, ¿No se confunden con los diálogos? Necesito saber.

¡¡¡Bye!!!

-AshleyHgoRdz