XXII
—Eres todo lo que siempre he buscado, ¡Bésame!
Pero como siempre pasa, Mike solo se imaginaba cosas que jamás diría. Por el lado de la realidad, el menor tiró el plato de cerámica que tenía en la mano al suelo y lo hizo por impresión. Era una de las cosas que tenía en común con el psicólogo.
—Ehh, c-creo que no debí abrir la boca. Me emocioné un poquito —se disculpó Ari y se agachó a recoger los trozos de cerámica.
Al terminar de limpiar, se lo llevó todo al patio, dejando ahí al rubio en un estado de shock.
—No... Puede... Ser. ¿Él es... Gay? ¿E-en serio? —habló para si mismo—. ¡Pero si no lo parece! ¿¡Qué está pasando!?
Mike reaccionó, agarró un paño seco y empezó a limpiar el suelo, pues se había mojado debido a que el plato seguía en ese estado. Quizá por eso resbaló más rápido.
Cuando terminó de secar el suelo junto con los últimos trastes, Ari llegó de regreso a la cocina.
—¿Terminaste? ¿Quieres que te lleve a tu casa?
—¿Eh? —Mike aún no salía de su trance.
—Je, que si terminaste de limpiar —repitió.
—Ahh, s-sí, ya terminé.
Algo incómodo se encontraba Ari, pues habló por hablar y ya casi no le pasaba eso. Haber revelado un secreto que ocultó tantos años y solo le confió a personas cercanas, lo había hecho sentir mal de un segundo a otro.
Para romper un poco la tensión y tener tiempo para él, Ari ofreció nuevamente llevar al menor a su casa.
—¿Q-quieres que te lleve a casa?
—¿Si? ¿Haría eso?
—C-claro. No me molesta —sonrió.
—Bueno, tal vez es mejor.
Mike quería preguntar sobre la cena, pero a ese punto ya no quería seguir incomodando al mayor; ya lo había hecho hablar suficiente.
[...]
Ambos ya se encontraban en el auto de camino a casa del rubio y este no le despegaba la vista a la ventana, porque no tenía el valor de ver a Ari. Bueno, de repente si lo hacía, dándose cuenta que la mirada de él era triste, por primera vez lo veía así.
Para calmarse un poco, el castaño de vez en cuando pasaba su mano por su cara y soltaba un suspiro largo, a la vez que pesado. Él de verdad ocultó su sexualidad mucho tiempo, se la ocultó a todos y ahora, alguien con quien se acababa de relacionar, lo sabía.
La emoción de tener a alguien que relativamente era igual, le hizo revelar su perfecta mentira.
Minutos más tarde, Ari y Mike llegaron al frente de la casa de este último, así que agradeció.
—Gracias por traerme.
—No es nada, era otra lo mínimo que podía hacer.
—¿¡Cómo que lo mínimo!? —replicó el rubio—. Ya ha hecho más que suficiente por mí, no entiendo como piensa que puede ser poco.
—Porque, ¿No es relevante? Quizá —respondió nervioso.
—Ha hecho un impacto muy bueno en mí, en mi persona —suspiró—. Sinceramente le agradezco mucho, incluso agradezco su confianza, si le puedo decir así.
—No fue confianza, Miguel, fue impulso y no está bien involucrarse más allá de la relación doctor-paciente, ¿Me entiendes?
—¿Cómo?
—Si. Aunque te dejé entrar a mi casa por llevarle la contraria a Lillian, no creo que se vuelva a repetir.
—¿Por qué? ¿Me porté mal o algo así? —cuestionó con mediana tristeza—. Tal vez fue porque no recogí la consola, ¿No? No se preocupe, regresemos —dijo poniendo sus manos en el volante del auto.
—No, no, la consola la recogeré yo cuando llegué a mi casa, pero... Mi ética es la que me impide tener de amigo a un paciente.
—¿Qué? ¿¡Qué clase de lógica ética es esa!?
—La que me enseñaron, Miguel.
—Mmm —se quejó y retiró las manos—. Lillian te enferma. Cambiaste de un segundo a otro y hasta me pone intranquilo.
Mike se bajó del vehículo y ya no le dió tiempo a despedirse, pues Ari se había marchado, dejando una mezcla de sentimientos entre tristeza y enojo en el de ojos grises.
El menor entró en su casa y saludó a sus padres, quienes le correspondieron sin preguntar nada. Él se fue a la cocina, sacó una botella de jugo del refrigerador y subió a su habitación. Ahí, se aventó a la cama a ver su celular; no tenía otra cosa que hacer.
Mientras se desplazaba entre sus aplicaciones, recordaba a Ari, recordaba la actitud que le había nacido solo por decir que era homosexual. A Mike no le molestó en lo absoluto, pues cuando él se confesó, le hizo saber que no era único en el mundo, pero cuando se excusó, le hizo sentir lo que él en su momento.
Recordó lo que pasó con su papá, lo que pasó con Javier, lo que pasó con Ela, con Flex, con Silvio, con prácticamente todos a su alrededor. Su confesión había afectado a unos más que a otros, pero no estaría donde está de no ser por aquello.
De alguna forma, entendía porque el mayor se había puesto así, tal vez creyó que lo juzgaría, aunque no tenía porque, ambos son del mismo "bando".
Mike se levantó de su cama, agarró el diario proporcionado por el psicólogo, una pluma y escribió:
"Ari...
Ahora entiendo el porque de tu miedo, yo estuve igual.
No se deberían reprimir los sentimientos de alguien, pues hasta cierto punto te sientes en una prisión, sientes que solo debes decir lo que quieren oír.
Yo batallé bastante con mi padre porque me decía que ya quería una novia, cosa que nunca le entregué por mis gustos. Siempre le decía que nadie me haría caso, gran ironía. Sin alardear, las mujeres de mi Universidad no me dejaban de seguir, siempre querían algo de mí y no era una amistad.
Ser rubio de ojos grises tiene su maldición y creo que ser castaño de ojos heterocromáticos, también.
Te voy a contar algo así bien secreto シ︎
Yo después de decirle a mi papá sobre que era homosexual, me sentí relativamente mejor, porque ya no debía ocultarle nada; sentí menos presión. Aunque no lo aceptó y estoy yendo contigo, me liberó de mi suplicio, es una carga menos para mi mente.
Cuando me dijiste que técnicamente eres lo mismo que yo, sentí que estabas confiando en mí... Aunque no fue así. De todas maneras quiero decirte que somos lo mismo, podemos confiarnos cualquier cosa." ✍︎
Ese texto lo había escrito sin ningún argumento, solo se lo quería entregar de "amigo a amigo".
[...]
El fin de semana del rubio pasó con prisa y ahora ya se encontraba en la Universidad, con su vida rutinaria, atendiendo su futura carrera de economista.
Después de las primeras clases del día, Mike se encontró con Ela en la cafetería y se sentaron donde siempre a contarse su fin de semana.
—¿Qué hiciste el fin de semana, Mike?
—Lo mismo de siempre... Ir a espiar a Ari —contestó escondiendo su cabeza entre sus brazos.
—¿En serio? —suspiró ella—. Sinceramente no puedo decirte nada, solo puedo preguntarte como te fue.
—Bien, bastante bien para ser verdad —informó levantando un poco la vista para verla.
—¿A sí? ¿Por qué? —lo vió con una expresión de mediana superioridad.
—Ehh, m-me invitó a pasar a su casa y... Podríamos decir que me defendió de su amiga.
—¿De Lillian? ¿Por qué?
—Porque me estaba tachando de pervertido, ratero y espía —recordó y se indignó nuevamente.
—¿Y no eres espía? —preguntó con un tono obvio por lo relatado días atrás.
—N-no —se excusó titubeando—, solo soy curioso. Punto.
—Claro —afirmó Ela sarcásticamente—, pero Lillian no es mala persona, a menos que agotes su paciencia.
—¡Apenas me conocía y ya me trataba mal! ¿¡Qué respondes a eso!?
—Bueno, también tiene un juicio a primera vista. Los hombres y las mujeres menores, tipo de preparatoria y universidad, le caen en la punta del pie¹.
—¿Por qué?
—No, por nada —trató de evitar la explicación y se levantó de su lugar—. Ehh, iré al... Baño, ya regreso.
Mike se quedó medianamente enojado porque su amiga no le contestó su duda, pero al fin y al cabo no podía exigirle que lo hiciera.
Como se quedó solo y tenía su mochila a su alcance, sacó de ella el pequeño cuadernito para leerlo; decidió asegurarse de que su redacción estuviera correcta.
Estaba a la mitad de sus escritos y lo interrumpió un aire pesado en su oído, asustándolo.
El rubio giró rápidamente la cabeza y debido a eso, golpeó en la nariz al que estaba detrás de él; Javier.
—¡Agh! ¡Fíjate, imbécil! —se quejó el pelinegro echándose para atrás y sobando donde recibió el golpe.
—¡Tú fíjate! ¿¡Por qué chingados estás atrás de mí!?
—¿Qué dices? ¿Desde cuándo insultas así?
—Desde hace unos meses, ¿Qué quieres aquí? —preguntó regresando la vista a su cuadernito y cerrándolo rápidamente.
—Bueno, hace un tiempo que no hablamos y quería saber como estabas.
—Mejor, muchas gracias —respondió cortante.
—¿A sí? ¿Y qué pasó con nuestra amistad?
—Pues se fue a la mierda... Por tu culpa.
—¿¡Mi culpa!? Tú fuiste el que abrió la boca sin pensarlo antes, sin consultarlo con nadie.
—¡Quería ser franco contigo! ¡No quería quedarme más callado! P-pero ni siquiera lo tomaste bien —le recordó de una forma cruda.
—Es que la noticia me llegó de golpe, no supe reaccionar —aclaró Trollino.
—Ya no me importa. Lo hecho, hecho está y fin de la historia.
Mike trató de levantarse e irse, pero Trollino lo jaló del brazo haciendo que se quedara.
—Quédate, aunque sea vamos a hablar sobre los viejos tiempos.
—Nel, no tengo ganas.
El pelinegro se acomodó en el lugar donde estaba la pelicastaña anteriormente y volvió a jalar al otro, pero esta vez, contra su pecho.
—¡Hey! ¿Q-qué haces? —se puso nervioso ante la anterior acción.
—Nada, ¿Por qué~?
—Porque me tienes aquí aprisionado... Muy cerca de ti, por cierto —alegó Mike en forma de advertencia—. Que yo recuerde, ya no me querías.
—Mmm, puede que durante el tiempo que estuvimos separados, me puse a reflexionar sobre lo que pasó.
—Ajá.
—Y, bueno.
—¿Bueno qué? M-me estás poniendo nervioso.
El mayor de ambos le acarició la mejilla al menor y lentamente se le fue acercando a los labios, cosa que alarmó a Mike. Se puso a pensar para sí mismo:
—"Apártalo, ¡APÁRTALO!"
Pero no lo hizo, y mejor fue él quien tomó la iniciativa de juntar sus labios con los ajenos.
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[N/A]
-Vocabulario-
¹ La expresión "Me cae en la punta del pie" es utilizada para dar a entender que alguien no te cae muy o especialmente bien.
[...]
[🖤🥀] Volví (⌐■-■)
Bien, para el que no esté enterado, me tomé un pequeño "descanso" (entre comillas gigantes) para realizar otro proyecto que tenía en mente y el caso, es que no lo acabé, así que regresé a actualizar estas historias.
No se preocupen que trataré de que no se vuelva a repetir. No haré constante mi ausencia. 😗✌🏻
Por cierto, la definición está hecha por mi propia "experiencia", si le puedo decir así ^^
¡¡¡Bye!!!
-AshleyHgoRdz
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