A la mañana siguiente, Mike comenzó a caminar por todas las calles de su ciudad. Normalmente él se movía en transporte y no prestaba atención a su alrededor, en ese momento se lamentaba de no hacerlo. Al ser de noche y correr sin rumbo, ahora se sentía perdido, sintiendo que daba vueltas en círculos.

Siguió caminando más o menos por donde se acordaba, pero no estaba llegando a ningún lado. Traía su pijama puesta, cosa que era extraña para la gente que estaba cerca, pues todos iban uniformados o simplemente vestidos de manera informal.

Dejando eso de lado, el rubio estaba dándose por vencido hasta que un señor se le acercó, lo veía caminando nervioso y a veces pasaba por el mismo lugar, quejándose.

—¿Hola? ¿Estás perdido, niño? —formuló solicitando la atención de Mike.

Mike lo volteó a ver y se asustó un poco.

—Ehh no, c-claro que no —tartamudeó por el miedo.

—¿Entonces?

—Oiga, no sé quien es usted y no debería importarle lo que hago. Tampoco soy un niño —alegó comenzando a caminar, tratando de ignorar al tipo.

—Bien, solo quería ayudarte.

—¿Ayudarme? —contestó a esa frase mientras volteaba lentamente a verlo—. ¿¡Cómo se supone que me ayudarías!? ¡No sabes donde vivo!

—Pero tampoco es como que no sepas donde vives, ¿O si? —sacó unas llaves y se acercó a un auto.

—S-salí por la noche, entonces... No sé por que calles me metí.

—Entiendo, ahora de día, ¿Crees poder reconocer?

—Pues, ya veo más claro el nombre de las calles, p-podría ser —contestó y se acercó al auto—. ¿M-me llevará usted?

—Si quieres y confías, adelante —señaló la puerta abierta del auto y sonrió.

Mike dudó otro poquito y entró al auto, seguido de ese señor tan amable que apenas conocía. El auto comenzó a avanzar, indicándole al de ojos grises que debía poner atención, tanto a las calles, como a algunos locales cercanos.

Par de minutos después, el auto se estacionó frente a casa del rubio y la Sra. Montes estaba parada en la puerta, solamente viendo a su hijo bajar del vehículo.

Mike no pudo despedirse ni agradecer al señor, pues este, ya se había ido.

—¡Mike! —regañó la Sra. Montes a su hijo—. ¿¡Dónde diablos te habías metido!?

—M-mamá —titubeó y comenzó a sollozar mientras se abrazaba.

—¡Nada de "mamá"! Te vuelvo a preguntar, ¿¡Dónde estabas!?

—¡MAMÁ!

El rubio corrió donde su progenitora y la abrazó, comenzando a llorar de manera bastante escandalosa, gritando y repitiendo la misma frase.

—¡Mamá! ¡Tengo miedo! ¡T-tengo mucho miedo! ¡Por favor! ¡Haz que pare!

La mamá no tuvo de otra, más que dejar de regañarlo y con él en sus brazos, entró a la casa cerrando la puerta, caminó a la sala y ambos se sentaron juntos en un sillón de ahí. La Sra. Montes empezó a acariciarle el cabello a su hijo, al igual que emitía ligeros sonidos para que se calmara.

—Ya, ya, ¿Qué fue lo que pasó, mi vida? —dijo la rubia sin dejar de mimar a su pequeño.

—E-es que ayer... E-esa mujer m-me quiso... M-me quiso.

—¿Te quiso qué?

—¡Me quiso violar! —gritó Mike todavía llorando más fuerte.

—¿Cómo que te quiso violar? ¿E-estás seguro de lo que me dices? —se separó y estremeció ante esas palabras tan atroces.

—Si mamá, nunca podría mentir con eso.

—Ay, mi niño —se lamentó e igual comenzó a llorar—, yo te creo, tranquilo.

—G-gracias, mamá.

—Pero, ¿Por qué quiso hacer eso? —interrogó limpiando la cara de su hijo.

—P-porque escuchó a papá decir que quería nietos, p-por eso.

—¡Pero si ella es una chamaca! Por su complexión, no puede cargar a un hijo.

—¡Eso quiero hacerle entender, pero simplemente no me hace caso! S-solo ve por el lado malo, nunca por el bueno.

—Cuando terminen las clases, me aseguraré de que esa niña no se te acerque otra vez —amenazó y dió otro pequeño abrazo al rubio—. Lamento no haberme dado cuenta, mi niño.

—N-no es tu culpa, mamá, tranquila.

—Debí poner más atención.

—Y-ya pasó y e-estoy bien dentro de lo que cabe, ¿S-si?

—Bien, corazón, ¿Quieres que te prepare algo para desayunar? —mencionó sonriendo y yendo a la cocina.

—S-si mamá, por favor.

—Bien y... Dúchate.

Fue lo último que dijo la Sra. Montes y entró a la cocina.

Como bien se mencionó antes, Mike se sentía sucio e impuro, así que obedeció a su madre mientras unas últimas lágrimas caían de sus ojos.

Al salir del baño, tomó su teléfono en sus manos, abrió el chat de Ela y escribió.

Mike
Ela, necesito un favor

No bastaron más que segundos para que ella contestara.

Ela 🐻
¿Si, Mike? Dime

Mike
La acosadora, ¿Está en la escuela?

Ela 🐻
Obvio, ¿Por? ¿Qué pasó?

Mike
Necesito que le quites el celular

Ela 🐻
¿Y el celular para qué?

Mike
Mi mamá va a hacer que ella venga
después de clases.

Ela 🐻
¿Por?

Mike
Porque ella intentó abusar de mi ayer,
le dije a mi mamá y la va a citar. En
cuanto ella llegue, me echará de
cabeza

Ela 🐻
Ahhh, y necesitas que borre la
evidencia de su celular

Mike
¡Eso! ¡Muy bien!

Ela 🐻
Muy bien, Mike, no creo que sea
tan complicado

Mike
Gracias Ela

Ela 🐻
No es nada, todo sea por un
amigo 😘

Mike
Eres una ternura, en serio

Ela 🐻
Nos vemos, que si no, me quitan
el celular en medio de la clase

El rubio ya no mandó ningún mensaje y comenzó a vestirse. Después de un rato, su madre lo llamó para el desayuno, él bajó y se sentó en los sillones de la sala, para que la mayor le dejara su comida en la mesita de allí.

Mike inició a consumir sus alimentos, la madre se sentó al lado de él y juntos estuvieron viendo películas.

[...]

Ela ya se encontraba en descanso, trataba de localizar a la acosadora, pero no lo lograba. No fue hasta después que ella fue a los sanitarios, la siguió y entró en otro cubículo para que no fuera "sospechoso".

Tranquilamente, la chica puso su celular en el suelo, Ela estiró la mano, tomó el aparato y salió corriendo de ahí. La acosadora no se acordó de su celular, se lavó las manos y salió del baño.

Mientras tanto, Ela chateó nuevamente con Mike.

Ela 🐻
Una duda así bien importante

Mike
¿Qué pasó?

Ela 🐻
¿Cuál es la contraseña?

Mike
Mi fecha de cumpleaños

Ela 🐻
¿¡Y cuándo es tu fecha de
cumpleaños!? 🤬

Mike
27 de Marzo de 2003

Ela 🐻
Ya abrió, gracias

Mike
De nada

La de cabello castaño se dedicó a borrar cada cosa que delatara a Mike, incluyendo, los vídeos de las redes sociales, mensajes, etc.

Cuando terminó su trabajo, fue al salón de Mike y sobre la mesa de la chica, dejó el celular, para después salir corriendo de ahí.

[...]

La novia de Mike, después de clases, iba muy feliz, pues su querida suegra la había invitado a su casa; lastimosamente no sabía para que. Al llegar, tocó la puerta y la Sra. Montes abrió, dejándola pasar.

—¡Señora! Que bueno que me invitó a venir, extrañé a Mike durante la escuela —comentó con una sonrisa muy "tierna".

—Deja de hacerte la tonta —alegó cruzándose de brazos y manteniendo una expresión seria.

—¿P-perdón? ¿Q-qué dice?

—No te hagas la inocente, que sé, ¡Que intentaste violar a MI hijo! —se señaló al decir la palabra "Mi".

—¿¡Perdone!? ¿¡Cómo puede creer semejante atrocidad!? Y-yo no sería capaz de dañar a mi bebé.

—¡Deja de hacerte la tierna! —regañó y golpeó en la mejilla a su nuera—. ¡Que Mike desapareció en la noche!

—¡No puede culparme por los problemas mentales de su hijo!

—¡MI HIJO NO TIENE PROBLEMAS MENTALES!

—¿A no? —contradijo sacando su celular y buscando las evidencias—. A ver si ahora lo ve con otros ojos.

Mike estaba con ellas, pero no dijo una palabra, pues le tenía miedo a su mamá enojada. También rezaba porque Ela habría hecho bien su trabajo.

La chica estuvo buscando un buen rato en su teléfono las evidencias, pero no encontraba nada y comenzó a desesperarse.

—¿¡Q-qué!? ¡P-pero si yo tenía todo aquí!

—¡Ya basta! —gritó la Sra. Montes—. Lo único que sé, es que te juzgué bastante rápido —suspiró y señaló la puerta—. Largo de mi casa.

—P-pero...

—LARGO DIJE —volvió a exigir la rubia.

—B-bien, pero sepa, que su hijo no es quien piensa que es.

La acosadora salió bastante enojada y llorando de aquella casa, luego, la Sra. Montes volteó a ver a Mike.

—Dime, ¿Me ocultas algo, Miguel?

—N-no, madre, jamás te he ocultado nada.

—¿Entonces? ¿Por qué ella estaba así?

—¡Porque está loca! ¡Obsesionada por mi!

La mujer suspiró y se calmó.

—Bien, confiaré en ti como siempre lo he hecho, ¿Vale?

—V-vale, mamá. T-te quiero.

—Y yo a ti, cariño.

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[N/A]

[🖤🥀] *olfatea* Huele a declaración y problemas 🌚

Por cierto, una personita me pidió que mostrara a los personajes principales en Gacha, así que aquí están:

Mike y Trollino:

Ela y Flex:

Por último, la acosadora:

No sé si son los principales :'v Pero pueden decirme si quisieran ver a otro personaje ^^

¡¡¡Bye!!!

-AshleyHgoRdz