Narrador

Bill salió de la cabaña con miles de pensamientos y sensaciones. No quería perder esa comodidad que sentía junto a los Pines, hace años desde la muerte de sus padres que se siente solo, sus hermanos no cuentan, viven sus vidas juntos con su Agapē. Se sintió igual que siempre, como un cascaron vació que nadie quiere tener cerca, aún cuando no le interesaba la opinión de Ford...le dolió que pensaran así de él.

El rubio sin parar de correr bajo la lluvia importándole menos que nada mojarse, solo queriendo poner tanta distancia como fuera necesario entre la cabaña y su persona fijando su destino a un solo lugar. Quería estar solo y sufrir de la misma manera con sus pensamientos, unos cuantos minutos de soledad ¿Era mucho pedir eso?  

Dipper y Mabel al salir de la cabaña vieron las huellas de Bill dirigirse al bosque, no lo duraron y las siguieron. El castaño casi ni miraba el suelo o el camino sintiendo que algo lo jalaba hacia una dirección, una presión en su pecho que le indicaba donde podría estar yendo el rubio.

Correr bajo la lluvia casi a ciegas durante unos largos minutos fue demasiado para Mabel que se detuvo exhausta apoyándose en un pino. El castaño se detuvo al no escucharla y camino hacia ella con las piernas temblándole y con la respiración agitada, no había notado lo cansado que estaba, él y su hermana.  

-Volveré -jadeo- No quiero preocupar a Stan si ya los dos no estamos, Además seré mal tercio si lo encontramos 

Mabel se enderezo y apoyo una mano en el hombro de su hermano dedicándole una hermosa sonrisa que se la contagio a su preocupado gemelo. 

-Estoy segura de que Bill estará más cómodo hablando a solas contigo 

-¿Segura? -Preguntó preocupado- ¿No te vas a perder?

-Estaré bien, cuídate y asegúrate de volver con Bill -sonrió alegre- Me acostumbre a su presencia que no quiero que por la culpa de Ford él se vaya

-Lo traeré -sonrió- ¿Un penoso abrazo de despedida? -extendió sus brazos

-Un penoso abrazo de despedida -lo abrazo- Cuídate 

-Que no te rapten los gnomos

Ambos rieron abrazándose con fuerza sin importarles que estuvieran mojados. 

-Palmada dijeron al unísono

Ambos cortaron el abrazo y tomaron caminos diferentes. Mabel se fue a trote tranquilo a la cabaña viendo por donde iba y siguiendo sus propias huellas para no perderse, Dipper por su parte, guiado más por instinto que otra cosa empezó a correr de nuevo teniendo cuidado donde pisar, debió traer una linterna, apenas podía ver con la lluvia y la oscuridad del bosque.  

Dipper al correr a ciegas en más de una ocasión se tropezó y cayo al suelo llenándose de barro los jeans, pero no se detuvo, se levantaba y seguía. Bill por su parte, no tenía problema con correr ante tal oscuridad, si vista estaba especializada a la noche que no se cayó en ningún momento. Sonrió leve al llegar al claro para luego hacer una mueca de tristeza. Por fin podría pensar.

>...<

Dipper luego de unos minutos de correr entre tropezones y caídas llego a una puerta de hojas las cuales aparto e ingreso al lugar. Era el claro al que trajo Bill tiempo atrás y donde siempre estaban, se veía algo diferente debido al clima lluvioso, pero eso no le llamo la atención, sino un chico con el cabello mojado y de tonos azules, lentes impedían que viera tan hermosos ojos, este permanecía sentado con un aire decaído. 

Regulando un poco su agitada respiración, se acerco lento y con cuidado a Bill que mientras más cerca estaba más se daba cuenta de que estaba tan mojado como él, aunque con menos barro. 

-¿Qué haces aquí? -Preguntó sin dirigirle la mirada 

-Te estuve buscando 

-Eso lo se, ¿Cómo me encontraste? 

Bill se sentía mucho más en confianza con Dipper, queriendo ser mucho más sincero, por lo que no dudo ni un segundo cuando desapareció los lentes que usaba para girarse a verlo delatando unos profundos ojos celestes.

Dipper por su parte se sentó sin responder. Bill al enfocar mejor sus ojos en su Agapē frunció el ceño al ver sus brazos con pequeñas raspaduras al igual que sus rodillas con sus pantalones rasgados y llenos de lodo. Se acercó y arremango los jeans sueltos del castaño notando heridas menores. 

-¿Qué te paso? -lo miró

-Me caí varias veces al correr hasta aquí

-No debiste seguirme -Puso sus manos sobre las heridas con mucho cuidado 

-Claro que si

- No, sé donde esta la cabaña, no era necesario que me siguieras  

Dipper guardo silencio viendo con atención a Bill curar las heridas de sus brazos y piernas. No apartaba su mirada maravillado con ver la luz azul que irradiaban las manos del demonio dándole un toque mágico a la situación. Se sintió deprimido cuando el peliazul termino de curarlo haciendo que la linda luz azul se fuera. 

Bill al terminar con eso arregló la ropa del castaño aprovechando de sacar el barro de sus prendas. Cuando termino se alejó un poco volviendo a su lugar sin mirarlo del todo.

-Bill -Lo llamó

-¿Qué pasa? 

-¿En verdad te sientes solo? -busca su mirada

-No te debería importar eso, soy un demonio -Suspiro

-Me importas Bill ¿Qué tiene que seas un demonio? Demostraste que eres mucho más que eso 

-No debiste traerme a la cabaña, solo causo problemas 

-No es verdad -Toco su brazo 

-Es verdad y lo sabes -Se apartó- Apenas llevo dos meses aquí y ocurrieron varios desastres, casi hago que te maten dos veces 

El rubio tomó aire tratando de calmarse, se estaba exaltando demasiado con todo lo que había pasado hoy, eso sin contar la pesadilla que había soñado no hace mucho. 

-Vuelve a la cabaña Pinetree -Se levantó dispuesto a serenar su mente en otro lugar. 

Dipper sabía que Bill se iría a algún lugar y luego regresaría, sin embargo, no podía permitir que dejara la conversación a medias. Debido a lo anterior, él se levanto por igual y tomo la mano del demonio evitando su huida a un lugar donde seguro esta vez no podría seguirlo. 

-No me iré sin ti

-¡¿Por qué no lo entiendes! ¡Yo no quiero regresar! -se giró a verlo- ¡Déjeme solo! 

El rubio se soltó de su agarre, sin apartar su mirada, ese fue el problema Dipper pudo notar en sus ojos la tristeza y no era para menos, se estaba destruyendo a si mismo por tratar de alejarse de su Agapē, Bill lo sabía, pero quería hacerlo unas cuantas horas por lo menos. 

-Bill no lo haré -Lo miró serio a los ojos- Puedo asegurarte de que yo no te dejaré solo, me quedare a tu lado aún cuando tú no me quieras cerca. 

-¿Por qué lo haces tan difícil? Me complicas las cosas Pinetree -le sonrió con tristeza 

-¿Bill? 

-¿Sabes?  La he pasado muy bien contigo estos dos meses y yo...perdón -Le sonrió apenado 

-¿Por qué te disculpas? 

-Es increíble para mi descubrir como termine atado a tu persona sin que me diera cuenta antes, poco a poco empezaste a ser muy importante para mí que no permitiré que te hagan daño, acepto que me tomó tiempo descubrir y aceptar lo que siento por ti y no me arrepiento de eso 

-¿De qué? -Lo miró con un leve sonrojo, no podía creer lo que decía el demonio

-Lo mucho que te quiero Pinetree -Le sonrió tan sincero 

Dipper contuvo el aliento impresionado por sus palabras, no esperaba esa declaración. Cualquier pensamiento racional se fue por la borda al ver esa hermosa sonrisa, como su cabello antes azul cambiaba poco a poco a uno rubio conforme hablaba, sin embargo, tanto sus ojos como su cabello cambiaron a un color plateado tan puro, hermoso y brillante que sus palabras tomaban mucho más significado ante la pureza de sus ojos.

-No quería decirte nada, pero te lo había dicho hace tiempo, un demonio se enamora una sola vez en la vida y lo que yo siempre espere lo tengo frente a mi -Se acercó mucho más a su cuerpo 

-¿Qué? Yo...yo soy -Tartamudeo sonrojado, sin saber como responderle o que la palabra saliera de su boca 

-Tú eres mi Agapē Dipper -Sonrió entre feliz y aliviado, por fin lo dijo

El rubio pasó uno de sus brazos por la cintura del castaño y lo apegó a su cuerpo, este dejo sus manos en su pecho mirándolo con un fuerte rojo en sus mejillas, la vista de Bill sonriéndole con sus ojos plateados mirarlo con tanto cariño hizo derretir su corazón que no hacía más que saltar contra su pecho. Su sonrojo llego a nuevas alturas cuando el demonio se inclinó y dejo un beso en su mejilla acariciándola con su mano libre con un cuidado y cariño que le encantó al menor. 

-Lamento mucho no haberte dicho antes, pero quería que lo supieras antes de lo que haré 

-Bill yo...

-No tienes que decir nada -Puso un dedo en sus labios- Quiero que sepas que hago esto por tu bien, lamento mucho hacerte esto, pero espero que en lo profundo de tu memoria recuerdas lo mucho que yo te quiero mi hermoso Agapē 

Bill anuló el poco espació que había entre ellos con un lento y suave beso. Dipper al sentir los labios del otro contra los suyos entrecerró los ojos rodeando su cuello con sus brazos correspondiendo, tratando de hacerle llegar sus sentimientos, los cuales acababa de descubrir que durante estos dos meses se estaba enamorando del demonio. 

Dipper no entendía, a pesar de lo bien que se sentía el beso...estaba cansado y débil, entro en pánico cuando sintió que algo muy importante se estaba yendo y no sabía que hacer para conservarlo.

Narra Bill

Al principio pensé que me empujaría, grande fue mi sorpresa cuando rodeo mi cuello y me correspondió. Apreté los ojos y lo apegué más a mi cuerpo tratando de no arrepentirme de lo que estaba a punto de hacer. 

Sellar sus recuerdos. 

Tenía que hacer esto. Todo lo que pasamos juntos desde que me encontró hasta el día de hoy, dos meses de memorias las estoy sellando, reemplace el primer recuerdo con que fue al bosque, pero en vez de encontrarme se tropezó y calló al suelo quedando inconsciente.

Con cada segundo que pasaba sentía como su cuerpo iba perdiendo fuerza a lo largo del beso, como se aferraba a mi cuerpo, sentí la pelea de su mente tratando de conservar sus memorias, pero logré sellar todas. Cuando terminé él se desmayo en mis brazos una de las consecuencias de hacer este proceso forzado sin el consentimiento de la persona. 

Lo abrace contra mi cuerpo, no pude evitar llorar, lágrimas salían de mis ojos mezclándose con la lluvia, lloré por lo que significaba lo que hice y no me arrepiento, pero duele y me va a doler mucho más luego.

Contuve las lágrimas que peleaban por salir y cargue a Pinetree en mis brazos, cerré los ojos para concentrarme en transportarnos a ambos afuera de la cabaña, secando su cuerpo, no iba a permitir que se resfriara. 

Sin más preámbulo ingrese a la cabaña, la primera en recibirme fue Shooting Star que caminaba de un lado a otro en la entrada. Se giró a vernos ante el sonido de la puerta y su alivio paso a preocupación cuando vio a su hermano desmayado en mis brazos. 

-Tranquila Shooting Star él esta bien -Le sonreí- Necesito que hagas algo por mi

-¿Qué quieres que haga? -Preguntó más tranquila 

-Reúne a los demás 

Ella fue a búscalos. No queriendo mojar más el lugar me sequé a mi también y aparecí en la habitación de Pinetree, cambié su ropa por su pijama y lo arropé dejando un beso en su frente. Nunca pensé que dolería tanto una despedida. 

Salí de su habitación cerrando tras de mi. Toqué mi pecho no extrañado con notar un pequeño dolor crecer en la zona como pequeñas apuñaladas. Esto me advierte que debo quedarme y estar a su lado, sin embargo, no puedo hacerlo es necesario lo que haré, aunque me duela.

Me repetía una y otra vez que esto estaba bien, que era necesario hasta que llegué abajo resistiendo las ganas de dirigirme a la habitación de Pinetree y quitar los sellos. 

Me encontré con el resto de la familia Pines, Shooting Star hizo un excelente trabajo al reunirlos a todo.

-Quiero que me hagan un favor 

-¿De qué se trata? -Preguntó interesada

-No le digan a Pinetree de mi estadía aquí estos dos meses

-¡¿Qué?! -Gritó exaltada

-Yo tengo un poder que no me gusta -empecé a explicar- Con el puedo saber cuando, como, donde y el motivo de la muerte de una persona, incluyendo ver su asesino, ese es uno mi otro poder que va de la mano es ver el futuro, es por eso que los protegí tanto 

-Estas diciendo lo que creo que estas diciendo -Me miró serio Half Moon

-Vi sus muertes, la de todos ustedes incluyendo a las amigas Shooting, la pelirroja y Soos. 

-No puede ser...-Murmuró cerebrito

-Sus muertes me afectaron más de lo que pensé y no quiero que mueran -Suspire- 

-Todo lo que dices es mentira

-Puedo proyectar sus muertes si quieres, pero la más dis-distinta es la de Pinetree, cambia mucho al igual que su futuro...

Saqué el aire retenido en mis pulmones, tenía que mostrarme firme y controlar el tono de mi voz, no podía seguir demostrando lo mucho que me afecta eso último. 

-No les estoy pidiendo que me crean o perdonen por lo que les hice hace años, solo les ruego que cuiden a Pinetree -Levanté la mirada

Sabía que con muchos más hechos que verifiquen cosas podrán hacer lo que quiero, lo que yo no podré hacer de ahora en adelante. 

-Un demonio se enamora una sola vez en su vida a eso se le llama Agapē -Comencé a explicar- Después de toda mi vida hasta este momento yo lo encontré y es Dipper, tienen que entender que yo no puedo soportar que algo le suceda a su persona, es mi razón de vivir por eso ver su muerte aún cuando no es verdad me afecta y para que eso no ocurra -Tomé aire- Me iré de aquí 

-Vete sin tanto preámbulo, tu no puedes amar 

-Tienes razón, yo no podía amar hace mucho que yo no conozco ningún tipo de sentimiento, sin embargo, Pinetree me ayudo con eso -Lo miré serio- A lo que iba, me iré, les pido que no le digan nada de lo que les dije o el tiempo que a pasado, selle sus recuerdos 

-¡¿Qué?! -Gritaron

-Para poder irme y que él no me siga le selle sus memorias, el día en que nos encontramos lo reemplace, el despertara recordando que caminaba por el bosque se tropezó en algún punto y se desmayó, le tienen que decir que tu Shooting Star lo encontraste y con ayuda de Half Moon lo trajeron a la cabaña

Ellos guardaron silencio tratando de procesar lo que les estaba diciendo y no era para menos, era mucho que digerir. 

-Si dices que es tu Agapē ¿Qué pasara si te alejas de él? -Preguntó preocupada Shooting Star

-Voy a agonizar, experimentaré tanto dolor que será un milagro si llego a sobrevivir, pero eso no me interesa quiero que él este a salvo aún si yo estoy al borde de la muerte, lo soportaré -Los miré serio- Espero que cumplan, cuídenlo no quiero enterarme de que le paso algo saben de lo que soy capaz de hacer. 

Una advertencia fue suficiente para recibir un coro de Si, me hice invisible para ver que decían al respecto al pensar que ya me había ido.

-Se va justo cuando uno le agarra cariño -protestó Shooting Star- En fin, tenemos trabajo -Sonrió motivada 

-Yo no creo ni una sola palabra de lo que nos dijo, estoy seguro que Dipper bajara preguntando por Bill

Sé que ese anciano se las arreglara para tratar de ver en la mente de Pinetree o hacerle algo cosa que no permitiré. Me fui a la habitación de Pinetree donde seguía desmayado, coloqué una mano en su frente y le puse un hechizo, nadie más que yo puede entrar en su mente, leerla, ver sus recuerdos. A menos que pueda evadir mi sello, cosa casi imposible, podrá recuperar sus recuerdos ya que soy el único que puede sacarlo.

Casi me hago visible del susto que me dio cuando se sentó de golpe, aleje mi mano justo a tiempo antes de que la tocara cuando toco su propia frente, para luego bajar su mano a sus labios con una expresión confundida. No tardo en levantarse lento y dirigirse al piso de abajo, no lo dude ni por un segundo en seguirlo sorprendido, se suponía que despertaría mañana.

-Hola...-Saludo llegando abajo

-¿Dónde esta Bill? -Le pregunto el idiota 

-¿Bill? ¿Quién es Bill? No conozco a nadie con ese nombre -Preguntó confundido, rayos como había dolido eso

-No recuerda a Bill -Pensó Shooting Star- ¡Dipper que bueno que despiertas! -camino hacia él y lo abrazó con fuerza- ¡Me tenias muy preocupada Bro-bro!

Deben darle un premio a esa mocosa, si que actuó de maravilla, estoy seguro que ella evitara que Ford meta la pata de nuevo al igual que su hermano que miraba a Shooting Star con orgullo. 

-¿Por qué? ¿Paso algo?

-Cuando saliste te encontramos inconsciente unas horas después en el bosque -le explico Half Moon.

-¿Cuanto tiempo estuve así?-Los miro impresionados y sorprendido 

-Dos meses -Se separó de él 

-¿Dos meses? ¿Cómo es que sigo vivo? 

-Te aplique unos experimentos para que no perdieras tu forma y así mantenerte estable -Dijo entre dientes 

-Gracias Tío Ford -Le sonrió- ¿Pueden ponerme al día de lo que me perdí? 

Sabía que se sentía extraño de que se le olvidaba algo, pero no escarbo en eso y trato de ponerse al día con su familia. Yo por otro lado me fui a mi dimensión, apareciendo en mi casa, no tarde en dejar que las lágrimas salieran con libertad por mis ojos apoyando una mano en mi pecho el dolor en la zona aumentaba poco a poco. 

Tendría que soportar esto, todo lo que sentiría de aquí en adelante...Todo por mi hermoso Pinetree, mi Agapē.

Continuara.