Narra Dipper.

Trate por todos los medios posibles de convencer a Bill de ir a ver a su tía, el problema es que tengo pocas oportunidades para hacerlo, ya que la mayoría de las veces no es él mismo, delira por la fiebre alta y los síntomas del resfriado se presentaron horas después que hable con Will. Descubrimos que al estar delirando o durmiendo no pudimos sacarlo de la dimensión, por lo que sí o sí tenemos que convencerlo.

Eso ya fue hace dos días, hoy se cumple el tercero y los síntomas de resfriado se presentaron empeorando el estado de Bill, él tuvo tos seca, dolor de garganta y cabeza, sufre de escalofríos, dolor muscular y fatiga. Me siento muy aliviado de que no se haya congestionado y tuviera buenos pulmones, aunque no pudo evitar que le doliera la garganta, le hice tomar jugo de naranja con miel cada vez que estuvo consciente.

Esos síntomas son un amor comparado con su fiebre, ya que generalmente está durmiendo o delirando por ella, su temperatura desde el primer día no hizo más que aumentar hasta que se mantuvo rodeando una cifra en específico, aunque me preocupe me siento aliviado de que se mantuviera en ese rango.

El rango promedio es de 220°C manteniéndose en ese número, pero de vez en cuando suele subir hasta los 222°C por suerte no más allá de eso, mientras que el mínimo que bajo fue hasta los 218°C no he logrado que baje más que eso y me siento frustrado de no poder ayudarlo más que cambiar paños fríos y darle baños tibios casi helados para bajar un poco su temperatura a la mínima.

Sus poderes no se han presentado en lo más mínimo lo que es un alivio, por lo que solo me dedico a cambiar sus compresas frías y tratar de que coma lo que es muy difícil. No he logrado que coma absolutamente nada, lo máximo que pude hacer es que beba agua o jugos de naranja con miel.

Pienso que su falta de apetito se debe a su resfriado, ya que antes de el no había comido nada y parecía muy hambriento, pero desde que enfermó casi no ha tocado comida alguna, termino comiéndola yo.

Dejando escapar un suspiro dejé la bandeja vacía con comida en el velador, lo único que logré en el almuerzo de hoy es que tomara 2 botellas de 1 litro de agua junto con un vaso de jugo de naranja con miel.

Me levanté una vez tuve los tres paños que le coloqué para cambiarlos por otros que estuvieran fríos, uno lo coloqué en su frente otro en su cuello y el último en su muñeca, gracias a esto he podido bajar un poco su fiebre.

-Tengo calor -Jadeo mirándome adormilado.

Me senté a su lado dejando unas caricias en su cabello, él se relaja bastante al tener contacto físico conmigo, estos tres días a estado pegado a mi cuerpo durmiendo abrazado a mi balbuceando sobre quien sabe que cosa, pero mi apodo es muy frecuente. En sus momentos cuando despierta y no esta muy consciente sigue murmurando mi apodo bastante contento de tenerme con él.

Claro que cuando él es consciente y no trato de convencerlo de ir a ver a su tía su actitud es bastante tímida y varias veces evita mi mirada con un sonrojo permanente en sus mejillas se ve tan tierno de esa manera, aunque pocas veces me habla como si se estuviera concentrando mucho en estar presente.

Tengo que decir que Bill es tierno cuando quiero algo nunca me mira, pero generalmente pide que yo esté más cerca, cuando cumplo yo tiendo a abrazarlo mucho y acariciar o besar su cabello, él se retuerce cada vez que lo hago, pero en ningún momento me dice que me aleje o detenga.

-Pinetree~

Me giré a verlo él me miró algo somnoliento, pero bastante apenado fruncí un poco el ceño ya que no había visto su mirada enfocada desde anoche, se pierde mucho con su fiebre alta, pero ahora se ve tan centrado.

-¿Qué pasa?

-Tengo calor.

-No sé cómo bajar tu fiebre -Toqué el paño en su cabeza aliviado de que siguiera frío.

-Podrías...-Desvió la mirada.

-¿Podría? -Lo animé a continuar.

-Bésame -Se giré a verme.

Me sorprendí por su petición, pensaría que es a causa de algún delirio, pero por la forma en que se forzó a sentarse y mirarme tan concentrado sé que está consciente de lo que me está pidiendo.

-Por favor -Murmuró bajo.

Me incliné y dejé un beso suave en su mejilla, él se removió en su lugar quise separarme para verlo, pero no llegué muy lejos cuando él puso una mano en mi cintura impidiendo que me alejara demasiado.

-¿Bill?

-El resfriado o enfermedad de un demonio no se puede contagiar a otra especie -Mencionó apoyando su cabeza en mi hombro.

-¿A qué quieres llegar? -Pregunté dejando una caricia en su cabello escuchando de inmediato un suspiro de su parte.

-Bueno...yo...

Él se separó y me miró no entiendo ¿Querrá otro beso? Me sobresalté cuando se sacó el paño de la cabeza estremeciéndose levemente, al tomarlo sentí lo caliente que estaba por lo que le pasé el termómetro en lo que iba a por otro paño.

Lo escuché bufar y estornudar bajo desde su posición, al tener un nuevo paño helado volví con él colocándolo en su frente ajustándolo con el elástico.

-Pinetree -Susurró mirándome.

Me sorprendí de que siguiera aquí, hace mucho que no estaba tan consciente puede que se esté resistiendo a la fiebre para lograrlo.

-Deberías descansar.

Él sin decir nada me entregó el termómetro frunciendo el ceño tocando la cabeza, por lo que tengo entendido no ha dejado de dolerle y sé que con la fiebre que tiene es mucho mayor. Desvié mi atención de sus acciones a los números en la pantalla.

-Pinetree...qui-quiero...-Tembló ligeramente.

-Tienes 225°C Bill -Lo interrumpí mirándolo preocupado, no había alcanzado tanta fiebre antes.

-L-lo sé yo...

-Estas con mucha fiebre -Pasé mi mano por su mejilla.

No pude decir o hacer algo más cuando él pasó sus manos por mi cintura y me acercó tanto a él dejándome sentado en sus piernas, quise replicarle que no debería hacer eso, pero no pude cuando sentí sus labios con los míos.

Quise separarme, pero el hizo una mínima fuerza en su agarre acercándose más a mi cuerpo. El beso en si era lento y suave que no pude resistirme a corresponder pasando mis brazos por sus hombros dejando unas pocas caricias.

El beso siguió unos pocos segundos más hasta que nos separamos, ni siquiera alcancé a ver su rostro cuando ya estaba apoyado en mi hombro respirando agitado, podía sentir su aliento cálido en la zona, debe tener tanto calor.

-¿Querías besarme? -Pregunté sonrojado, aliviado de que no pudiera verme.

-Te lo di-dije -Murmuró removiéndose en su lugar.

Esperé un poco a que bajara mi sonrojo para separarlo de mí, obtuve bastante resistencia de su parte hasta que logré alejar a Bill lo suficiente para sacar el paño de su frente el cual estaba caliente.

-Deberías dormir otro poco -Lo miré preocupado.

-No quiero -Se quejó con el ceño fruncido.

-Te estas esforzando demasiado en permanecer despierto, debes descansar.

-Si lo hago...¿Te quedaras?

Sentí una punzada en el corazón al verlo, sus ojos estaban cristalinos, un permanente sonrojo en sus mejillas, pero lo que me dolió fue lo vulnerable y herido que sonó al preguntarme eso ¿Qué estará pasando por su cabeza para hacer una expresión tan triste y desolada? Me duele verlo así, que solo pude dejar una caricia en su mejilla provocando que se apoyara en ella con un suspiro.

-Me quedaré -Afirmé pasando mi pulgar por sus pecas.

Él se recostó dejando escapar un suspiro, mientras yo me levanté a buscar otro paño para su frente, debe estar hirviendo en fiebre en este momento y me sorprende lo capaz que fue de mantenerse consciente, aunque seguramente fue su terquedad lo que lo permitió.

Al girarme me sobresalté al ver a una mujer de cabello blanco largo con ondas hasta la espalda baja, piel blanca y ojos dorados. Usaba un suéter de cuello alto color crema junto con unos pantalones ajustados negros un cinturón del mismo color y para finalizar un abrigo que le llegaba hasta las rodillas de cuello alto color burdeo de botones de oro.

(Créditos)

Junto a ella estaba Will quien se veía apenado, enfoqué mi vista en Bill quien ya estaba sentado viendo con molestia a su hermano, pero su expresión cambió a una de dolor. Me acerqué de inmediato, pero me detuve a medio camino cuando escuché la voz suave de la mujer.

-¿Por qué no fuiste Billiam? -Le reprochó con los brazos cruzados ¿Billiam?

-No me llames así -Le gruñó con el ceño fruncido.

Miré a Will buscando una explicación de lo que estaba pasando, pero él solo murmuró un adiós y se fue a su casa supongo. Dirigí mi mirada a la mujer quien ni siquiera tuvo la decencia de presentarse.

-Disculpe, ¿Quién es usted? -La miré serio.

-Pero que modales los míos, soy Irina Chernova la tía política de Bill, un placer conocerte -Me sonrió.

-Dipper Pines, un placer conocerla -La miré impresionado.

Al mirarla pude ver que no se parecen en nada a los hermanos Cipher, ni siquiera tiene el mismo apellido y supongo que de tía política se acerca mucho más a su relación. Aunque siento curiosidad por ella y lo capaz que debe ser para poder crear una dimensión en compañía de Bill.

-¿Y qué te pasó Billiam?

-¿Por qué le llama así? -Me atreví a preguntar.

-Es su nombre -Me miró divertida, yo fruncí el ceño.

-No, él se llama Bill.

Ella con el ceño fruncido dio un paso en mi dirección, pero no pudo avanzar más que eso cuando Bill apareció frente a ella molesto, me sorprendí que ella siguiera sonriendo y levantara una mano para tocar la frente de Bill.

-Tienes mucha fiebre, pequeño -Puso su otra mano en su mejilla.

-No me digas así -Dio un paso atrás desviando la mirada.

-Hace mucho que no te veía.

-Unos cuantos años.

Vi a Bill devolverse a la cama y aproveché ese instante para acercarme y colocar el paño frío en su cabeza y le pasé el termómetro, al principio refunfuño negándose a tomar de nuevo su temperatura, pero terminó aceptando cuando lo hice me senté a su lado.

-¿Will le informó sobre el estado de Bill? -Pregunté dirigiendo mi mirada a ella.

-Sí.

Me sobresalte cuando Bill repentinamente me abrazó apegándome al costado de su cuerpo, no me negué al contacto dejando un brazo por su espalda sintiendo como se apoyó en mi hombro.

-¿Cuál es su temperatura actual? -Preguntó cuando Bill me entregó el termómetro.

-Tiene 219°C -Le dije aliviado, su temperatura bajo- ¿Tiene alguna forma de bajar su fiebre?

-Sí.

Ella se nos acercó, pero en el momento en que estuvo cerca Bill me apegó más a su cuerpo haciendo un poco más de fuerza en su agarre.

-Tengo una pregunta que hacerte -Se detuvo mirándome intrigada, pero con un brillo en sus ojos.

-Adelante.

-¿Eres el Agapē de Bill? -Me miró con seriedad.

Sentí de inmediato a Bill tensarse y apegarse mucho más a su cuerpo, hasta le gruñó a su propia tía. Viéndolo justo ahora parece un gatito arisco que le quieren quitar su juguete favorito.

-Lo soy -Afirmé sintiendo a Bill crisparse a mi lado.

Subí mi brazo y dejé una caricia en su cabello tratando de calmarlo, él se apegó otro poco a mi dejando escapar un suspiro, pero sigue mirando a su tía de forma fulminante.

-Ahora entiendo su reacción -Me miró con un brillo en sus ojos.

-Ni se te ocurra decirlo -La interrumpió casi gruñéndole.

-Pero Bill...

-Es tema de él, no te metas.

-¿Bill?

-Deberías...

-No me interesa lo que digas -Se alejó un poco casi colocándose frente a mí- No te metas donde no te llaman ¿Entendido?

-Bien -Gruñó bajo.

Me sorprendía las agallas que tiene Bill frente a ella sobre quien sabe que cosa, pero encendió a Bill mostrándome al de siempre sin esa inseguridad o timidez, fue fuerte y fiero a pesar de lo tenso y tembloroso que esta.

Ninguno volvió hablar después de eso, solo Irina le pidió a Bill que se recostara, fue difícil lograr que me soltara y se recostara lo convencí diciéndole que me quedaría en su rango de visión. Una vez logrado Irina pasó sus manos por sobre su cuerpo casi tocándole, pero centrándose en su cabeza.

Me sobresalté al ver a Bill cerrar sus ojos con forme Irina pasaba sus manos, pude relajarme al darme cuenta que se había quedado dormido en el proceso que estaba haciendo su tía.

-¿Está bien? -Pregunté cuando terminó

-Solo esta dormido.

-¿Eso ayudará? -La miré preocupado.

-Se recuperará, su fiebre bajará en unos días. -Se giró a verme- Siendo su Agapē sabes que mitigas sus síntomas ¿no?

-Sí, me lo había dicho.

-Bien, mantén el contacto con él, mientras más afecto le des y estén juntos mejor será el resultado.

-¿Por qué es necesario el contacto físico? -Pregunté curioso.

-Generalmente nosotros deseamos estar junto a nuestro Agapē, cuando nos sentimos más vulnerables ellos nos dan fuerza y estabilizan nuestra magia, es uno de los factores para que cuando un demonio enferma tendemos a ir directamente hacia ellos si lo encontramos así nuestros poderes se calman.

Miré a Bill sorprendido por esa información, por eso cada vez que tenía una visión tendía a apegarse a mi cuerpo, cuando empezó su resfriado siempre volvía conmigo, en especial cuando pensaba en él venía mucho más rápido.

Deseo poder ayudarle con todo lo que sé ahora. No me separaré de Bill, lo ayudaré tanto como pueda con su resfriado. Él ya me ha protegido todos estos años, me ha cuidado, me toca hacer esto por él.

-¿Lo quieres? -Llamó mi atención Irina.

-Aún no lo sé -Acaricie su mejilla pecosa- Bloqueo mis recuerdos cuando estuvo conmigo sin ellos...

-El pasado no define tu futuro muchacho, la respuesta a tus sentimientos no está en los de Bill o en tus recuerdos -Puso una mano en mi hombro- Esta en tu interior.

-Pero siendo su Agapē...

-Aunque seas su pareja destinada no está predestinado a enamorarnos, lo que nos hace vernos es una atracción física y de alma, mágica en nuestro caso también, pero los sentimientos hacen que nos quedemos.

-Pero él...si yo lo rechazo...

-Para nosotros que ustedes estén a nuestro lado es suficiente, que nos permitan verlos, tocarlos y cuidarles es todo para nosotros, no nos tienen que amar y estamos satisfechos con eso -Me sonrió- Siendo nuestro amigo, amante o pareja somos felices viendo que nos dejan estar junto a ustedes.

-¿Y solo son satisfechos con muestra felicidad? -La miré con un nudo en la garganta.

-Para nosotros verlos felices, el simple hecho de verlos estamos completos.

-¿Y si...salgo con otra persona?

-Nos dolerá, pero viendo que son felices nos acostumbraremos, por eso la mayoría de los demonios no son celosos.

-¿Mayoría? -Murmuré.

-Mientras más poderoso sea el demonio, él deseará lo mejor para su Agapē, si él ve a tu pareja querrá comprobar que sea digno de ti, aunque queme por estar a tu lado velará por tu felicidad y si con él o ella es feliz lo aprobará.

Ella dejó una suave caricia en mi hombro para retirarse, todo lo que dijo...¿Esa es la realidad de los demonios? Se sacrifican tanto por su Agapē que ni siquiera ven por ellos mismos.

Mirando a Bill puedo confirmar eso, y me siento indigno de un amor tan devoto como ese, tanto cariño y cuidado hacia un simple humano.

¿Siquiera lo merezco?

-Pinetree -Ronroneo entre sueños.

Acaricie el cabello de Bill sé que hay muchas cosas que no entiendo y muchas otras que debo procesar, tengo tiempo para descubrir mis sentimientos por Bill, quiero ser capaz de darle el amor que se merece, ser digno de ser su Agapē.

-Con o sin recuerdos espero algún día quererte como mi pareja -Acaricie su mejilla- Solo espera por mí un poco más.

Continuará

Hola gente!

Al estar en proceso de terminar el semestre por lo que estaré haciendo milagros para continuar con el maratón, espero sean pacientes.

En fin, este capítulo si que cambio un poco en relación al original, espero lo hayan disfrutado tanto como yo.

Nos vemos, espero que en unas horas con el capítulo correspondiente de hoy.

Bye bye 💕✌

Maratón: 8/9