Narra Dipper

Me llamo Dipper Pines, cuento con 20 años, en unos meses cumpliré 21 años. Terminé la escuela y tengo un diploma de la universidad, una carrera corta de investigador que duro tres años, ahora libre de estudio pienso en que puedo estudiar.

Sinceramente estoy feliz de haberme mudado permanentemente a Gravity Falls, han pasado cosas emocionantes y tengo acceso al bosque con todos sus misterios y criaturas. Sin embargo, lo más llamativo fue lo que paso hace cuatro años, Bill Cipher con un cuerpo humano de unos 20 años mató a unos demonios.

Recuerdo perfectamente esa batalla sangrienta donde luego de esta y una locura de mi tío termine sobre él. Estando a tan poca distancia me sentía extrañamente completo, aún cuando mi cuerpo me pidió más contacto él nos separo, hizo una reverencia con su típica frase y se fue. En ese tiempo intente buscar las respuestas a esa agradable sensación tan cálida. Una vez que me calmé y lo pensé fríamente no se sintió mal y quise sentir esa cercanía de nuevo.

Sin embargo, desde que eso sucedió no lo he vuelto a ver por ningún lado y de la misma forma ese vacío que he sentido por años estaba presente en el tiempo que no estuve en Gravity Falls y luego de mis dos meses inconsciente, cuando desperté ese vacío persistía. Traté de explicar o encontrar una razón de esa incomodidad, pero jamás he logrado descifrarlo o llenar ese condenado vacío en mi pecho.

Dejando ese misterio de lado, siento mucha curiosidad por los sueños que tengo, uno en especial me llama la atención; Un día lluvioso en un hermoso claro me beso un chico de cabello rubio con toques plateados con ojos del mismo color con leves tonalidades celestes.

Traté de saber quien era o si lo conocían mis tíos o mi hermana, pero no me dieron buenas respuestas, que solo eran sueños y nada más notando un poco de preocupación en la voz de Mabel.

Un día intenté ver mis memorias para asegurarme de que solo fueran sueños, bajé al laboratorio de Tío Ford, pero la maquina recientemente reconstruida exploto, confirmando que mi mente o memorias están bloqueadas o con una especie de seguridad. Más tarde ese mismo día mi hermana y mis tíos insistieron en que solo se trataba de sueños y que deje de enfocarme en eso. Lo dijeron con tanta seriedad e insistencia que siento que me ocultan algo o tuvieron algo que ver cuando repentinamente olvido mis sueños.

Esos sueños son mi única conexión con ese chico donde siempre sale él conmigo, estamos juntos jugando, comiendo en una cafetería o caminando en el bosque, pero jamás puedo escuchar las conversaciones que tenemos, me alegra el día soñar con él, verlo reír y sonreír en mi sueño con sus ojos siempre viéndome solo a mi y me encanta.

Cada vez que sueño con él siento que no son eso, se siente demasiado real para ser un producto de mi mente, además no debería sentirlo como si lo hubiera vivido. Sé que suena loco, pero yo quiero a ese chico, se que él también me quiere ¿Por qué? Porque en el más repetitivo sueño de la lluvia donde me besa puedo leer de sus labios 2 palabras "Te quiero" Una sola vez lo escuche decir esas palabras y desde que paso no he vuelto a soñar con él. Extraño ver al chico de mis sueños, no puedo sacármelo de la cabeza cuando ese vacío se intensifico en el momento que deje de verlo.

Hablando de ese vacío con una intensidad constante se intensifica en la madrugada juntándose con un frío que recorre mi pecho, eso dura hasta las 6 de la madruga donde se estabiliza y el frío se va. Una vez llegué a sentir mi pecho tan apretado y un leve dolor bastante sofocante.

Dejando mi experiencia nocturna de lado, estoy regresando una vez más a Gravity Falls. Mi hermana y yo nos fuimos una semana para unas clases y saber un poco de nuestros padres, me impresiona que después de todo este tiempo ellos todavía no sepan donde estamos o nos encuentren.

Ahora que volvimos nuestros tíos nos recibieron muy bien. Yo me fui directo a mi habitación que, aunque la encuentro algo solitaria, prefiero mil veces eso a la maldita habitación de hotel donde nos tuvimos que quedar.

Después de desempacar planeo salir al bosque con mi diario a seguir escribiendo los sueños que he tenido con ese chico, aquí no lo puedo hacer tranquilo porque de seguro Mabel me dice que lo olvide con lo que cuesta recordar un sueño. Además, es mucho más cómodo estar solo en el bosque. no me desmayaré de nuevo y ya estoy bastante grande para hacer una caminata tranquila por el lugar sin perderme.

Narra Bill

Han pasado cuatro años desde la ultima vez que vi a Pinetree, ahora debe tener 20 años y en unos meses cumplirá los 21. Me preguntó como luce ahora, ya que no he pisado Gravity Falls hace mucho, tampoco me puedo hacer una idea o lo que pudo haber pasado ya que las llamadas mensuales que tenía con Shooting Star fueron escaseando con forme el tiempo pasaba hasta que no llamo nunca más.

Estos cuatro años han sido muy difíciles para mi, los síntomas empeoraron mucho más que antes con forme pasaba el tiempo. Mi única forma de desahogarme no es la correcta que he alcanzado un número de 10.709 intentos de suicidio. Generalmente lo hago en la noche, aunque trato de parar de hacerlo no puedo evitarlo, lo bueno es que logro recapacitar lo suficiente para detenerme. Sin embargo, las heridas que tengo al despertar alertan a mis hermanos que me vigilan más que antes en el día.

Sinceramente, no sé como he resistido el dolor que recorre mi cuerpo y se acumula en mi pecho, el frío atroz que siento en el mismo lugar y mis latidos...los extraño tanto, mi corazón con el tiempo que ha pasado, mis latidos disminuyeron demasiado, antes podía sentirlos cada unos cuantos minutos u horas dejando una sensación cálida. Sin embargo, ahora cuatro años más tarde apenas late una vez por mes, dos o tres si tengo suerte.

Siendo este uno de los pocos días en los que mis hermanos no vienen todo el día, sino que solo en la tarde por lo que aprovecharé un tiempo para mi y salir de esta casa. No quiero estar en este lugar por lo menos en unas cuantas horas y tomando ventaja de que Pinetree y Shooting Star no están en Gravity Falls pasaré mi estadía en el bosque, específicamente en ese hermoso claro donde le selle sus recuerdos. Puede que sea un poco masoquista de mi parte, pero es uno de mis lugares favoritos.

Al llegar y sentir el aire fresco del bosque, me relaje. Me gusta estar en este lugar me siento en casa por la magia que me rodea, las criaturas, es perfecto para un demonio como yo.

Me senté en una roca cerca de la laguna meditando.

Pensando fríamente, gracias a mi descuido por estar agonizando debido a todo lo que siento le permití a Pinetree recordar varias cosas a través de sus sueños, hasta pudo escucharme decirle "Te quiero". Por ese motivo tuve que fortalecer desde la distancia el sello impidiéndole recordar más cosas y que no pudiera ver los sueños, más bien recuerdos, que ya vio antes.

Dejando escapar un suspiro me incline viendo mi reflejo en el agua cristalina, no fue una sorpresa para mi ver que tanto mi cabello como mis ojos estaban celestes, hace mucho tiempo que no retomo en totalidad mi cabello rubio solo variando entre el azul claro, celeste o el azul rojizo. Esto de ser un maldito bicolor algunos días es un verdadero fastidio.

Narrador

Bill miró fijamente el agua recordando lo feliz que era junto a Dipper esos dos meses antes de irse, fue inevitable que ante esos hermosos recuerdos lágrimas rodaran por sus mejillas. Sujetó su pecho con fuerza no haciendo ni un solo intento en contener las finas lágrimas que salían de sus ojos impotente al no poder hacer su dolor más soportable, más llevadero y menos sofocante.

Mientras Bill se ahogaba en soledad y dolor. Dipper hace unas pocas horas luego de ordenar su habitación y ayudar un poco con la limpieza de la cabaña por fin pudo salir de su hogar. Caminó por el bosque perdido en sus pensamientos buscando en su memoria alguna pista que le ayudara a encontrar el lugar donde ocurría el sueño del beso bajo la lluvia.

El castaño dio un largo y pesado suspiro cuando tanto su cuaderno como la misma naturaleza no lo ayudaba en su búsqueda. Antes de darse vuelta y regresar a la cabaña abrió los ojos como platos al sentir que ese vacío que, hiciera lo que hiciera, jamás se llenó con algo se estaba llenando y desapareciendo con cada paso que dio.

Narra Dipper

Me paralice cuando ese vacío que intente llenar por años y jamás funciono se había llenado un poco con solo ir en esta dirección. Empecé a caminar rápido siendo guiado por esa sensación en disminución, no tarde en comenzar a correr por el bosque.

Corrí por el bosque esquivando arbustos, arboles y rocas, entonces vi una cortina de hojas que no dude en correr con mi mano con el corazón a mil. Entonces pude contemplar un claro con un césped lleno de flores, una laguna siendo rodeada por césped, arboles y rocas, un lugar sumamente hermoso e idéntico al de mi sueño.

(Créditos al creador/a de la imagen)

Claro que toda mi concentración se fue a un chico encapuchado como de mi edad, tal vez unos pocos años más, sentado en una roca cerca del agua. Él estaba usando magia jugando con un pobre venado a sacarle los dientes.

-¡Deja al venado! -Grité

Apenas grité el chico se giró a verme sorprendido, sus ojos tan hermosos y celestes impregnados en una tristeza que pude descifrar y un sutil sonrojo se poso en sus mejillas. Me sobresalte cuando él soltó los dientes levantándose como resorte sin dejar de mirarme.

Bendito sea el viento que sopló y logró bajar su capucha dejándome verlo mejor, su cabello era largo llegándole pasado el cuello y rosando sus hombros de tonalidades azules y rubias, sus ojos expresaban miedo y desesperación, pero también felicidad y alivio y que decir de los colores variando entre un celeste y dorado.

(Créditos al creador/a de la imagen) (mas o menos hasta ahí le llegaba el pelo solo imaginen que todo es del mismo largo)

El chico frente a mi de cabello y ojos coloridos con la capacidad de cambiar se me hacia muy parecido a Bill solo que más maduro y atractivo. Tenía que ser él, no creo que exista otra persona o más bien demonio en el mundo que sea capaz de cambiar de color.

Intente acércame para verlo de más cerca, pero con cada paso que di el se alejó casi espantado, pero con una emoción que se reflejaban en sus ojos que no se deciden si ser celestes o dorados.

-Bill -Lo llamé

-Te debes estar confundiendo de persona, yo no me llamo Bill -Me miró exaltado

-Sé que eres tu, te recuerdo de esa vez que mataste a unos demonios -me acerqué mas

Bill parecía preocupado y dudoso, pude notar que su cuerpo no dejaba de temblar. Me lleve la sorpresa de que cuando se cruzo de brazos su cabello ahora es completamente rubio y sus ojos totalmente dorados. En verdad él es Bill Cipher.

Me avergoncé cuando me miró fijamente y paseo su mirada por cada parte de mi cuerpo, por un momento pude sentir que podía verme a través de la ropa.

-¿En verdad eres Bill? -Sonreí

No importo cuan intensa era su mirada en mi persona, no podía contener la extraña felicidad que recorría mi cuerpo, como ese vacío desapareció por completo al estar a esta distancia ¿Cómo es posible que esa incómoda sensación desaparezca justo ahora?

- Hace tiempo que no te veo Pinetree -Me sonrió ladino

-A pasado tiempo dorito

-Oye no insultes mi hermosa forma -bufo con una mueca de disgusto- Aunque admito que la forma humana es cómoda

Sentí mis mejillas arder cuando sonrió, nunca lo había visto sonreír de esa manera. Desvié mi mirada poniendo más atención a su cuerpo, su cabello rubio atado a una pequeña coleta con algunos mechones tapando casi por completo su ojo derecho. Es mucho más alto que yo y se ve atractivo con esa ropa casual que era algo ajustada permitiéndome notar sus músculos, me causa curiosidad lo formado que debe estar bajo esas prendas de ropa.

-¿Qué pasa? -Paso su mano por mi cara

-Nada -me sonroje, no había notado en que momento se me acerco- Solo... ¿Por qué no te cortas el pelo?

-Porque yo no soy bueno cortándolo y no confió en los peluqueros o en mis hermanos para que lo hagan

-¿Hermanos?

-Tsk verdad...

Sonrió triste, me sorprendí cuando su cabello se tornaba poco a poco azul al igual que sus ojos. Curioso me acerqué un poco y con mucho cuidado desaté su coleta, tomando entre mis manos un mechón de su cabello viendo impresionado como cambiaba de color.

-¿Qué haces? -Me miró a los ojos tenso

-Tu cabello y ojos cambian de color

Me acerqué para ver fijamente sus ojos, toqué suavemente su mejilla para acercarlo un poco, noté un leve color rojizo en sus mejillas indicándome que se sonrojo, pero no tanto como yo que siento mi cara arder.

-¿Sabes lo que es espacio personal Pinetree? -Alejó mis manos con las suyas, note que temblaban- Bueno no importa yo ya me iba

Me soltó las manos rápido y se separó. Sé que con solo chasquear los dedos se iría, por lo que tomé su temblorosa mano haciendo que me mire curioso soltándose de mi agarré con velocidad.

-¿Qué pasa Pinetree?

-Me pareces familiar -entrecerré los ojos

-¿Familiar?

-Quiero que me lleves contigo -Cambie de tema, no sé porque, un presentimiento tal vez

-Yo iré a mi casa

-Déjame ir también

Él se alejo de mi sorprendido negando con la cabeza con el ceño fruncido notablemente confundido. Yo mismo estoy algo confuso preguntándome de donde vino esa propuesta que más parecía una exigencia que otra cosa.

-¿Por qué quieres ir a mi casa? -Se cruzó de brazos

-Solo quiero ir, por favor

-No

Bill Cipher, un demonio triangular pasando por un dorito, alguien orgulloso y algo arrogante querrá algo a cambio para dejarme ir a su casa con él.

-¿Sabes? Eso me dolió -puso una mano en su pecho- Mi corazón sufrió con tus palabras, creo que moriré

- Por lo que se los demonios no tienen corazón -Rodee los ojos ante su dramatismo

-¿Quien te dijo esa estupidez? -Frunció el ceño claramente molesto

-Tío Ford

-Te mintió, los demonios si tenemos corazón solo que a nosotros no nos late

Queriendo comprobar lo que decía tome su muñeca y me sorprendí al sentir un latir tan rápido. Quise seguir sintiendo ese latido, pero se soltó tan rápido casi alarmado de mi agarre llegando a retroceder unos pocos pasos.

-Te late el corazón

-Existen casos específicos y especiales donde a nosotros nos empieza a latir, pero no quiero hablar de eso -Me miró serio- A lo que iba ¿Quieres hacer un trato conmigo?

-¿De qué se trata? -Pregunté curioso

-Te permitiré ir a mi casa, pero con la condición de que no entres en una habitación en especifico

-¿Por qué?

-¿Quieres ver mi colección de dientes? -Sonrió haciendo flotar algunos, me dio un escalofrío el solo verlo

-No, gracias

-Bien, entonces ¿Trato? -Estiró su mano en llamas azules

-Trato -estreché su mano

Me sonrió y antes de que soltara su mano me tomó con fuerza y con la izquierda chasqueo los dedos. No tardamos en aparecer en una sala de paredes color blanco, pero con alfombra azul oscuro, sillones negros. Muebles de tonalidades café oscuro, frente a mi una escalera que se dividía en dos y unas cuantas puertas aquí en el primer piso.

-Tu casa es enorme -Lo miré sorprendiéndome de su mirada curiosa como si no conociera su propia casa.

-Eso dicen -se encogió de hombros- Iré a ordenar mi habitación, mientras tú no te muevas de este piso y no bajes al sótano, es asqueroso -me impresione al ver como sus ojos cambiaban a un verde esmeralda.

-Arcoíris -murmuré

-¿Q-Que dijiste? -Me miró de inmediato, sus ojos brillando en un intenso dorado.

-Pareces un arcoíris -Repetí- Tus ojos cambian de color como uno -reí levemente

-No me lo digas -Suspiró- Allá esta la cocina -la apuntó chasqueando los dedos- Llené los estantes y el refrigerador, si tienes hambre puedes ir a buscar algo de comer, pero no vayas a otro lado sin mi

-Esta bien

Cuando él se fue pude escuchar con claridad mi estómago rugir por comida, por lo que sin dudas me dirigí hacía la cocina. No me sorprendí al ver lo grande que era considerando el tamaño de lo que parecía ser la entrada y la sala.

Las paredes eran grises, el techo blanco y el piso de un material suave y de color claro, los muebles, el refrigerador y la isla en el centro todo era de color gris oscuro y claro. Dándole un toque elegante había una especie de candelabro alargado en el techo con pequeñas luces a su alrededor adornando y brindándome luz.

(Créditos)

Sintiendo que mi cocina era un asco a comparación con esta. Todo era grande y espacioso como para que varias personas estuvieran aquí sin problema haciendo rica comida juntos.

Alejando el leve dolor que me dio debido a mi pobreza, me dirigí al pequeño refrigerador para sacar algunos alimentos que me ayudaran a hacer lo que planeo. Los dejé en el mesón girándome a buscar en las despensas, me sobresalte al escuchar el sonido del mega refrigerador abrirse.

Me calmé al ver que solo era Bill quien rebuscaba algo en el contenido de su refrigerador casi con la cabeza metida dentro.

-¿Por qué...?

-Aunque sea demonio si me alimento -Me interrumpió antes que siquiera pudiera preguntar.

-¿De verdad?

-Sí, mi cuerpo necesita comida.

-¿Una soda? -Pregunté al verlo sacar una

-La comida humana sabe mucho mejor que la demoniaca -Se giró a verme- ¿Quieres una?

-Has cambiado en este tiempo

-Uno cambia con la persona correcta Pinetree, nunca lo olvides

Me sorprendí con sus palabras, apoyado casualmente en el refrigerador mirándome con una sincera sonrisa que no hizo más que sonrojarme ¿Qué rayos me sucede con este demonio?

-Volviendo a mi pregunta ¿Vas a querer una soda? -Abrió la suya sabor naranja

-¿De qué sabor tienes?

-Tengo de...-se inclinó a ver- Naranja, Limón, Sprite, Coca-Cola y Piña

-Naranja esta bien -tomé el apio que saqué y empecé a limpiarlo

-Te la dejo en la mesa

Se tomó de un sorbo toda su soda y dejo la mía a mi lado yéndose tan rápido como apareció. Escuche sonidos extraños desde arriba, pero le reste importancia.

Me demoré menos de lo que pensé limpiar, lavar y picar el apio en una fuente. Iba a buscar nuevamente en el refrigerador algún limón para aliñar, pero un estruendo mucho más fuerte que el anterior me distrajo.

-¡VUELVE AQUÍ MALDITO PEDAZO DE BASURA!

Me exalté cuando escuché a Bill gritar claramente molesto. Precavido y curioso me asomé por la puerta viendo que pasaba y me sorprendí mucho con la escena que me encontré.

Una especie de perro grandísimo de 4 cabezas, 4 colas y 6 patas de color negro. Pude notar que en una de sus colas sostenía a un pequeño conejo blanco su hocico con las puntas de sus orejas azules al Igual que, por lo que alcancé a ver, un pino en su lomo.

(Créditos) (imaginen que lo café es azul claro por favor)

Ese extraño y majestuoso animal estaba siendo perseguido a vuelo por Bill que feliz y tranquilo no se veía.

-¡¡MALDITA COSA ASQUEROSA DEVUÉLVEME ESE CONEJO!!

Nunca en mi vida vi a alguien tan enojado como lo esta Bill en este momento. El perro, corriendo por su vida, trataba de esquivarlo dando muchas vueltas por el lugar. Mi atención se desvió cuando de la nada misma apareció un chico idéntico a Bill de cabello y ojos celestes, me parecía familiar.

-¡Bill él no le hará nada!

-¡Cállate Will! ¡Y tu pulgoso devuélveme a mi conejo!

Pude ver que ese perro por poco y no esquiva la bola de fuego de Bill, aquello al parecer alivio a ese tal Will. Me lleve la sorpresa de que a Bill lo empujo otro chico parecido a él, pelirrojo de ojos rojos, me asuste al verlo salir disparado y chocar con una puerta destrozándola y cayendo en lo que parece ser el sótano.

Me preocupe por Bill al escuchar que aún después de destrozar la pobre puerta seguía escuchando mucho escandalo abajo, lo más seguro es que choco con varias de las cosas que tiene ahí y que se cruzaron en su camino.

-Will es mejor que le quites el conejo a tu mascota, sabes que Bill adora ese conejo -Miró al animal- Volverá en cualquier segundo y es mejor que no vea que tu pulgoso lo sigue teniendo o lo matara.

-Rocky dame a Сосна -Extendió la mano

-¡¡¡AAAAAAH!!!

Apenas escuche a Bill gritar salió volando del sótano lleno de tierra y baba tanto en ropa como en su cabello. Me sorprendí que unos segundos después de reparar la puerta fuertes golpes azotaron contra ella. ¿Qué rayos tiene en ese lugar?

Dejando eso de lado pude ver a Bill buscar con la mirada a su conejo hasta encontrarlo moviéndose inquieto en los brazos de ese peliceleste. Este le entrego al asustadizo animal apenas lo tuvo enfrente. Temí por la vida de esa especie de perro cuando Bill con el cabello rojo enfoco sus ojos en él.

-¡Maldita sea Will! -gruño por lo bajo- ¡Te dije mil veces que no dejes a tu asqueroso perro en mi casa! -gritó furioso

-Lo siento -murmuró- no pensé que tomaría a Сосна...

-¿Qué rayos fue ese grito? -Lo distrajo el otro

-Un encargo de Raphael uno muy asqueroso -Vi curioso como sus ojos tomaron un color verde y rojo- No quiero volver a ver a ese pulgoso en mi casa ¿Entendiste Will?

-Comprendo -Acaricio a su ¿perro?

Pude ver la intensa mirada que le dirigió Will a Bill, una curiosa examinando por completo su cuerpo.

- ¿Por qué no estas mal?

-Ya deberías saberlo -Rodo los ojos- Pero no importa, tengo visitas -me apuntó

Los tres me miraron. Eran totalmente idénticos a excepción por el color del pelo y ojos, es increíble que me parezcan familiares los recién llegados. Dejando eso de lado, me acerqué para presentarme, sería de mala educación no hacerlo cuando parecen cercanos.

-Hola -Saludé para mirar a Bill- Estas lleno de baba

-Es comprensible cuando esa cosa casi me come, fue asqueroso -sus ojos cambiaron de dorado a verde

-Él es...-Me miró sorprendido el peliceleste

-Soy Dipper Pines -Les sonreí algo incómodo por sus fijas miradas en mi persona

-¿Qué hace un humano aquí? -Preguntó el pelirrojo ganando, para mi sorpresa, un ceño fruncido de Bill.

-Hicimos un trato, él quería venir a mi casa y se lo permití con la condición de que no entrara en una habitación en especifico.

-Un gusto conocerlos

-Y nosotros a ti, yo soy Will y el Phill somos los hermanos de Bill -Acaricia a esa especie de perro- Y este es mi mascota Rocky

-¿Y el conejo?

-Es mío

-¿Dónde lo encontraste? -Pregunté curioso

-Hace un año lo adopte cuando era pequeño

-Es lindo -lo acaricie

El conejo me miró y tenía unos hermosos ojos bicolores, uno era dorado y el otro café. Enternecido por como movía su pequeña y tierna nariz acaricie sus orejitas y cabeza sintiendo la mirada de Bill en mi.

- ¿Puedes cargarlo? Quiero sacarme esta baba de encima y ver si no estoy herido por la caída

-Claro

Bill me paso el conejo, dejé unas cuantas caricias en su pequeño cuerpo, pero cuando Bill desapareció por las escaleras el pequeño conejo empezó a moverse inquieto entre mis brazos.

-¿Pasa algo? -Pregunté al sentir la mirada insistente de los hermanos de Bill en mi

-¿Por qué querías venir? -Me miro acariciando a Rocky

-Bill se parece a un chico que veo en mis sueños, quiero ver si son la misma persona confirmando que lo que sueño es real.

-¿No crees que estas rebuscando mucho para venir por eso? -Comentó el pelirrojo

-Puede ser, pero solo necesito ver una foto de él hace unos cuatro o cinco años para ver si estoy loco o mis sueños son reales -Baje la mirada tratando de sostener al inquieto animal.

-Quisiera ayudarte, pero mi hermano no es muy fotogénico -Se excusó el pelirrojo

-¿Y si se hubiera sacado una foto? -Pregunté esperanzado

-Podría guardarla en un solo lugar, pero no sé en que parte de la casa este -Comentó apenado el peliceleste

-Entiendo, gracias por decirme -Les sonreí

-Espero que tengas suerte en tu búsqueda, yo me tengo que ir espero que en casa acepten a mi perrito

Will se retiro dirigiéndome una sonrisa con los ojos llorosos. No pude profundizar en eso ya que toda mi concentración esta en el conejo de Bill específicamente que no se me escape de los brazos lo cual se estaba volviendo cada vez más difícil.

-No podrás lograr que se calme -Habló serio- Solo lo hace cuando mi hermano esta cerca

-¿Por que?

-Bill lo ha salvado en distintas ocasiones, es muy asustadizo y tímido, es muy apegado a él que raras veces se separan

Antes que pudiera mencionar algo se me escapo de mis brazos saltando escaleras arribas demasiado rápido, intente inútilmente alcanzarlo cuando se trepo por las piernas del recién llegado Bill hasta quedar en sus brazos.

Bill estaba con un pantalón negro con una playera manga larga gris y sobre eso un polerón negro desabrochado, noté de inmediato que se había dado una ducha por la toalla que estaba en su cabello.

-Nos vemos luego Bill -Se acercó un poco a él

-Adiós Phill -contesto arisco

-Vamos sonríe -Sonrió ladino- Disfruta tu día

Phill se fue apenas terminar esa oración, mientras Bill terminaba de bajar las escaleras con el ceño fruncido. Baje la mirada a sus brazos notando que su conejo esta mucho más tranquilo recibiendo feliz las caricias en sus orejitas y cabeza. Si que es tierno.

-Te dije que lo sostuvieras Pinetree -Me miró algo serio

-Intenté mantenerlo en mis brazos tanto como pude, pero estaba demasiado inquieto que no pude sostenerlo más y se me escapo.

-Bueno te entiendo, siempre estoy junto a Сосна, debió asustarte y desesperarse al no verme -suspiro. Ese nombre de nuevo ¿En que idioma esta?

Bill con una mano cargando a su conejo con nombre extranjero y con la libre se saco la toalla del pelo no sin antes frotarlo un poco, me sorprendí de que su cabello le llegara a los hombros.

-¿Quieres que te corte el pelo? -Pregunté

-Por mi bien, pero tal vez luego -Me miró de arriba a abajo- Venías por otro motivo a mi casa ¿Cuál es?

-Es verdad -suspire derrotado- ¿Tienes una foto de ti de hace unos 5 años?

-Sí, pero no puedes verlas -paso por mi lado

- ¿Por qué? -Lo seguí

- Porque no -Me cortó entre serio y temeroso

-Por favor

-Pinetree dije que no -Entro a la cocina- ¿Qué planeabas preparar?

Pude notar como cambio el tema radicalmente, era claro que no me dejará ver una foto de él. Suspiré frustrado para girarme un poco y ver los ingredientes que alcance a reunir en la mesa antes de que el perro de Will hiciera todo ese escandalo.

-Una torta de selva negra -Respondí parándome a un lado suyo viendo como sacaba un apio

- ¡¿Sabes hacerla?! -Me miró con un brillo en sus ojos metiéndose otro apio a la boca

-Gracias a Mabel puedo prepararla ¿Por qué preguntas?

-Intente preparar una de esas una vez, no quedo rica -miró la cocina- lo único que quedo de esa torta fue media cuchara

Reí levemente, viendo como Bill peleaba con su conejo para dejarlo en el suelo, en algún punto se rindió dejando la toalla en una de las sillas que había en el lugar. Cuando miré a la mascota de Bill y ver aquel símbolo en su lomo me llamó la atención, además de su exótico nombre.

-Necesito que te quedes en mi habitación Сосна -Lo tomó colocándolo frente a su rostro

Bill lo bajo, pero el conejo sin pensarlo trepo por sus piernas hasta sentarse en su hombro sin problema al ser pequeño. Ahora entiendo las palabras tanto de Phill como de Bill, el conejo es muy apegado a su persona.

-¿De que idioma es su nombre? -Pregunté no resistiendo la curiosidad

-¿Disculpa? -Me miró extrañado

-El nombre de tu conejo ¿Qué idioma es?

-Oh eso, es ruso

-¿Sabes ruso? -Me sorprendí

-Sé todos los idiomas de tu mundo

-¿Cómo es que...?

-Necesito saberlos por si me invocan de algún país que no hable inglés

-Comprendo... ¿Qué significa su nombre?

-Azul

-¿Azul? ¿Por qué le pusiste ese nombre?

-Porque tiene parte de ese color en su cuerpo, en especial en su lomo -Se encoge de hombros- No tiene mucho significado

-¿Dónde lo encontraste?

-Fue en otra dimensión -Acarició su cabeza con dos dedos- Lo encontré solo en un bosque abandonado por su propia familia por ser el más pequeño de la camada.

Al ver como Bill acariciaba ese conejo me hizo darme cuenta de lo mucho que le gusta esa raza ¿La razón? No sabría decirlo con seguridad, pero si que ver como el conejo se ganaba toda su atención, la forma en que le sonreía me producía un sentimiento agrió que se me hacía imposible sentir en esta situación. ¿Celos de un conejo? Ridículo.

-¿Quieres que te enseñe a preparar la torta? -Pregunté llamando su atención

-Me encantaría, solo déjame sacar a Сосна

Bill caminó a la entrada con el conejo en sus manos, lo dejo afuera de la cocina y cerro la puerta. No dio ni dos pasos cuando hizo una mueca de dolor, sus ojos...extrañamente podía ver que expresaban dolor y culpa. Me causó un sentimiento...no me gustó verlo de esa manera.

-¿Bill? ¿Qué te ocurre? -Me apresuré a preguntar

-Es Сосна, puedo leer sus pensamientos, quiere entrar -Me sorprendí al escuchar un lloriqueo y pequeños gimoteos ¿Esta llorando?

Bill no tardo en devolverse y abrir la puerta, apenas lo hizo su conejo subió muy rápido hasta acurrucarse tembloroso en sus brazos.

-Ya, todo esta bien -Lo acaricio cuando paso su pequeña cabeza por una de las manos de Bill- Te puedes quedar, pero con la condición de que no nos interrumpas

Me acerqué un poco más a ellos, era increíble y hermoso verlo, Bill acariciando su conejo que estaba recostado de costado sacando un sonido como un ronroneo.

De repente se sentó y me miró, me sorprendí cuando salto de los brazos de Bill a los míos, agradezco mis buenos reflejos, casi se me cae.

Curioso del pequeño animal lo acerque más a mi rostro viendo sus ojos bicolores, me sorprendí cuando de una pequeña lamida en mi nariz y se removió en mis brazos, lo deje sentado en mi mano y no tardo en saltar una vez más a los brazos de Bill mirándose en completo silencio.

Narra Bill

Cuando encontré a mi conejo buscaba la forma de tranquilizar los síntomas, tener una compañía que me reconfortara y entendiera. Por eso hice que Сосна pudiera pensar por si mismo para que hablara conmigo. Con él cerca pudiendo ver ese pino en su espalda...sentía a Pinetree cerca haciendo más llevadero estar lejos.

Tengo que admitir que con Сосна cerca haciéndome compañía mis intentos de suicidio no son tan altos en número, sin él y mis hermanos probablemente no hubiera sobrevivido.

Siendo honesto conmigo mismo, la compañía que él podría brindarme era tan necesaria para mi como para él que deseaba una familia, el cariño de un hogar.

Tengo que decir que a mi conejo no le gusta separarse de mi, teniéndole miedo tanto a la soledad como a los lugares con mucho espacio, agregándole a seres que no conoce.

Teniendo en cuenta lo anterior, fue sorprendente para mi que mi mimoso conejo saltara de mis brazos a los de Pinetree, no tardo en volver luego de lamer su nariz.

Ahora en mis brazos me miraba fijamente con sus ojitos bicolores, froto su hocico contra mi mano llamando claramente mi atención.

- ¿Él es tu Agapē?

Pude escuchar tan suavemente su pensamiento, tiene una voz de pensamiento muy suave que me relaja, no como otros que son solo ruido y gritos.

-Si -Le respondí sincero

-Sé que quieres estar con él, pero no me dejes afuera de nuevo -Movió su colita totalmente en desacuerdo por mi acción

-No lo volveré a hacer -Acaricie su cabeza con suavidad

-Quiero que le regreses sus memorias

Me tense al escuchar su pensamiento en un reclamó. Recuerdo que al Сосна pasar tanto tiempo conmigo pudo ver mi estado, lo que provocaba la lejanía de mi Agapē. Le tuve que decir porque me pasaba eso, porque quería matarme y lo entendió perfectamente quedándose conmigo mucho más tiempo.

Sin embargo, ahora que mencionaba eso me trajo de vuelta...Pinetree no me recuerda, ante esa realidad sentí una presión leve, pero increíblemente dolorosa en mi pecho y sabía su motivo de existir. Ante esa reacción involuntaria Сосна bajo sus orejas claramente culpable por recordármelo.

-Sabes que no voy a hacer eso -suspire acariciando su cabeza- Solo ve a sentarte por allá -apunte una silla

Él bajo de mis brazos sonando como un susurro en su mente un "lo siento". Lo vi sentarse en la silla junto a un mueble. Dejando escapar un suspiro me giré a ver a Pinetree mirarme curioso, me di cuenta en ese instante que hablé en voz alta.

Lo que faltaba.

- ¿Bill a qué te...?

-No preguntes -desvié la mirada- ¿Empezamos?

Narra Dipper

Todo iba bien en su extraña conversación con su conejo, sin embargo, algo paso que su estado de animo decayó. Aún cuando me dijo que no preguntara sentí que debo hacerlo, es muy importante para Bill ¿Cómo lo sé? No por nada tendría una mirada tan triste y dolorosa.

-¿Estas bien? -Me acerqué

-Lo estoy -Se alejó sin mirarme

-¿Seguro? -Insistí

-Completamente

No importa lo que diga, sé que no esta bien. Traté de sacarle un poco de información, pero solo evadía o negaba mis preguntas.

Rendido suspire, agitando mi cabeza para alejar esos pensamientos y la extraña angustia que inunda mi pecho.

Cambiando de enfoque, sé que podré divertirme y pasarla bien en compañía de Bill esta tarde haciendo el pastel. Puede que no sepa como hacerlo, pero puede ayudar. Me sentí animado de pasar este tiempo con este demonio como lo harían dos amigos.

A pesar de que debía producir la sensación de como dos amigos van a cocinar... ¿Por qué no lo siento de esta forma? ¿Por qué se me hace tan familiar? ¿Por qué tengo el pequeño deseo en una esquina de mi mente, de mi ser, que no seamos unos simples amigos?

Ok, Mason Pines ¡¿Qué rayos fue eso?! Agite mi cabeza alejando esos pensamientos tan extraños y que me lleve el diablo ¡Tan familiares y agradables!

Mirando a Bill de nuevo, antes de perderme en la locura de mis pensamientos, pude verlo a mi lado esperando que dijera con qué comenzar...me hizo sentir cálido.

De repente un flash pasó por mi mente y me vi a mi mismo junto a un chico rubio en la cocina de la cabaña en Gravity Falls preparando, por lo que vi, panqueques.

¡Y lo pude escuchar reír!

Continuará

¡Hola gente!

Aquí vengo informar, el nombre del conejo de Bill, Cосна, es ruso, pero significa "Pinetree" venido del ingles siendo "Pino" su versión en español.

Con eso aclarado, la pronunciación de Cосна es Sosna, no Cосна.

Eso es todo, nos vemos en otra edición.