Capítulo 5
La noche había caído, la imagen de su mejor amigo tirado en el suelo muerto había conmocionado al cobalto, Tails estaba nervioso en su cabaña y Amy seguía llorando en la suya. Todo parecía perdido, ¿entregarse era la opción?
Sonic estaba sentado debajo del árbol cerca de dónde su maestro custodiaba la esmeralda grande de color verde, estaba tan confuso y temeroso que tenía miedo de perder a alguien más que quería. Nunca pensó volver a pasar eso tan rápido, menos verlo cómo remataban a su ser querido. Golpeó el piso con fuerza dejando caer sus lágrimas de tristeza e impotencia, ¿ese era el destino de todos los que se acercaban a él?
—Sonic...
La voz del zorrito le sacó de sus pensamientos, le miró ganándose una sonrisa del menor, el cual, se sentó a su lado tomándole la mano y recostadose en su hombro.
No decían nada, solo el sonido de la brisa y los grillos acompañaban su entorno, Tails miró a las estrellas del cielo nocturno y dejó salir un suspiro.
—¿Sabes?, desde que decidí salir del castillo a escondidas sólo he conseguido ver el mundo real y salir de la burbuja que mis padres me habían puesto. — explicó sin apartar su cabeza del hombro del mayor. —Pero agradezco más que pude conocerte, sin ti aquí no sé si podría soportar todo lo que está pasando.
El menor se acercó aún más al cobalto, éste último solo se limitó a escucharlo.
—Sonic... Sé que esto se vé mal, pero mientras estemos juntos sé que estaremos bien. — diría bajando la mirada. —Yo cumpliré mi promesa, no voy a dejarte sólo.
El menor escabulló su rostro por el pecho del cobalto para mirarlo y sonreír. Sonic le dedicó también una sonrisa, a pesar de que sus ojos escurrían lágrimas, el menor bostezó y volvió a recargar su cabeza en el hombro del cobalto, combinándolos con sus colas el menor de apoco se fue quedando dormido.
Sonic suspiró acariciándole la mejilla, nunca había sentido tan cercano a alguien que no fuera Shadow, pero esta cercanía se sentía... Diferente. Knuckles salió del bosque viendo a su aprendiz mirando el sueño del menor, se acercó con algo en la mano, parecía un collar con un cristal de color azul.
—Hey Sonic. — saludó el equidna en voz baja para evitar despertar al menor.
—Hola maestro. — habló de la misma forma, aunque un poco más entristecido.
—Sé que ver morir a un colega puede afectar de manera significativa, pero si algo debe aprender un equidna es aprender a llevar el dolor de perder un ser querido. — explicó susurrante y tratando de ser sereno en sus palabras. —Este collar es la última prueba para sacar tu potencial al máximo, eres un guerrero valiente, pero no muchos consagrados cómo guerreros equidnas lograron pasarla.
El guardián del Caos le dio el colar al cobalto, el cual, lo recibió confundido.
—Sonic, estoy más que orgulloso de haber sido tu maestro... Lleva el nombre de mi linaje a lo más alto. — le menciono haciéndole una reverencia yéndose poco después.
Sonic se colocó el collar y volvió a lo suyo, sin embargo, de apoco el sueño le iba ganando, sintiendo los párpados pesados y pestañeando de vez en cuando. Bostezó, cerró los ojos y sin darse cuenta se quedó dormido.
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—Sonic, despierta holgazán.
Se escuchaba la voz de una fémina que despertaba a Sonic.
—Vamos, se te hace tarde. — diría la voz haciendo abrir los ojos al erizo.
Al abrir sus ojos notó a su madre despertándole, Sonic se frotó los ojos incrédulo.
—¿M-mamá? — preguntó levantadose de apoco.
—¿Quien más sino yo? — preguntó riéndose. —Vamos, tu papá espera en la sala.
El cobalto se levantó y mirando a su alrededor, estaba en su vieja habitación tal y cómo la recordaba. Caminó hacía la puerta llegando a la sala, dónde su madre y su padre le sonreían.
—Hijo, acércate. — le invitó el padre al sofá mientras su madre se levantaba y se iba. —Mírate nada más, dieciséis años cumplidos.
El padre le abrazo tan pronto Sonic se sentó en el sofá.
—Quien diría que mi retoño crecería tanto, aún recuerdo cuando solíamos ir al parque a hacer unos tiros en la canasta. — diría nostálgico el padre.
Sonic seguía confuso, sin embargo, pronto la voz de su madre cantando las mañanitas mientras traía un pastel con velas en forma de dieciséis, pronto el padre se unió a cantar con ella mientras Sonic sonreía levemente.
—Pide un deseo y sopla las velas hijo. — diría el padre entusiasmado.
—Jules, deja que él lo haga a su ritmo. — le reclamó la madre.
Sonic miró a ambos, se sentía tan real esa sensación de estar juntos. No obstante, la puerta siendo golpeada rompió el momento familiar, Sonic miró con desconfianza, se adelantó a su madre para abrir la puerta, sin embargo, antes de siquiera tocar el picaporte una explosión le sacó volando chocando con el muro.
Estaba desorientado y un pitido se escuchaba al rededor. Cuando su vista dejó de ser borrosa y su audición se recuperó notó a los guardias reales atacando a sus padres.
—¡No! — gritó levantándose para atacar a los guardias.
Derribó a uno con el ataque que había aprendido con Knuckles, y al cual llamó Spin-dash, con ese mismo ataque sacó al segundo por la ventana, y el tercero que intentó golpearle con su espada lo esquivó todo espadazos para tomar su espada, desarmarlo de un codazo y darle un puñetazo que le sacó disparado hasta chocar en el muro agrietandolo.
Miró rápidamente a sus padres los cuales yacían en el piso con marcas de espadas en sus cueros, cayó de rodillas tomando su cabeza, llorando y negando con la cabeza.
—No, no otra vez por favor. — se dijo cerrando los ojos para evitar ver el cuerpo de sus padres.
Sonic de pronto se encontraba en un espacio totalmente oscuro, se dio cuenta de esto al abrir los ojos, no obstante, sintió una mano tomándolo del hombro. Volteo a mirarle dándose cuenta que era su madre que le sonreía, su padre estaba a su lado de la misma forma.
—Sonic, no importa cuento lo desees no puedes cambiar el pasado. — diría su padre comprensivo.
Sonic agachó la mirada.
—Pero eso no significa que no puedas cambiar tu futuro. — replicó la madre. —Hay gente allá afuera que te ven cómo lo que eres, un joven sonriente y alegre, que te tienen mucho cariño y que harán lo imposible por ti.
Explicó la madre levantado su mirar para limpiarle una lágrima.
—Sonic, en la vida siempre habrá situaciones que nos marquen, que hubiéramos deseado nunca vivir... Sin embargo, puedes aprender de esas experiencias para lograr ser alguien mejor en el futuro. — le habló con cariño y levantandole de apoco.
—Hijo, eres un héroe. Siempre haces lo correcto sin importar lo que sucedió en tu pasado. — le animó el padre.
—Pero... Los extraño, me he sentido tan sólo sin ustedes. — habló el cobalto con el habla quebradiza.
—Sonic, nosotros nunca nos fuimos de tu lado. — explicó la madre acariciando su cabeza. —Siempre hemos estado ahí cuando usabas tu don para ayudar a otros.
—Ahora hijo, hay alguien allá que no te va a dejar solo. — mencionó el padre señalando a una luz a lo lejos.
En dicha luz se encontraba el zorrito de dos colas sentado bajo el árbol durmiendo.
—Sonic, hemos estado ahí contigo siempre, orgullosos de ti cada día.
Ambos padres abrazaron al cobalto, éste les correspondió de inmediato haciendo brillar su cuerpo con una energía azulada hasta que dicha energía iluminó cada espacio oscuro del lugar.
—Los seguiré haciendo sentir orgullosos, protegiendo con mi don a los que amo... — mencionó Sonic dejando salir unas cuantas lágrimas.
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Tails despertaba en su cabaña, bostezó y buscó al cobalto con la mirada, no obstante, no estaba a su lado y en su escritorio se encontraba el anillo de promesa en el lugar del inhibidor de control mental. El zorrito se levantó apresurado yéndose a buscar a Sonic en su cabaña, no tuvo éxito.
—Se fue. — diría el equidna al menor.
—¿Qué? — preguntó viendo al equidna. —¿Por qué no lo detuviste?
Preguntó molesto y preocupado.
—No es honorable que un guerrero equidna detenga a otro de su deber. — explicó manteniendo su orgullo. —Además, el fue el que me pidió no decirles nada.
El menor miró la cama del cobalto, regresó a su habitación tomando el portátil para irse detrás del erizo. Vio el anillo tomándolo, suspiró apretandolo dentro de su palma y salió corriendo de la cabaña.
—Hice la promesa de nunca dejarte sólo, ¡y la voy a cumplir! — gritó agitando sus colas para irse volando al reino.
Knuckles y Amy veían cómo se alejaba, con la esperanza de que esta pesadilla acabara.
Mientras tanto, el cobalto entraba en Station square viéndola en ruinas, parecía vacía aunque rápidamente fue recibido por un erizo albino que salía de su casa.
—¡Sonic! — le abrazó felizmente. —Joder, desde que ese impostor apareció el reino estuvo patas arriba, pero cuando Robotnick te habló por las pantallas del reino todos supimos que ese imbécil no era nuestro justiciero azul.
Las demás personas de la ciudad se asomaron por sus ventanas, adultos y niños estaban apoyando a Sonic en esta batalla.
—Silver, agradezco tus palabras pero Zonic es otra víctima de Robotnick, tiene un control mental en su casco pero con ésto podré salvarlo. — mencionó mostrando un chip. —Debo acercarme lo más posible a él.
Silver no entendía el motivo del chip.
—¿Qué?, ese bastardo ha asesinado a gente y a Shadow, merece el peor castigo. — diría enfadado el albino.
—Silver, antes de juzgar hay que entender. — diría el cobalto. —Literalmente él no tenía libre albedrío para decidir si hacerlo o no, una vez que lo libere de su correa, si sigue actuando del mismo modo yo mismo le voy a detener.
Habló serio y pasando de largo al albino.
—Si quieres entrar a Mobius será difícil, Robotnick cerro el acceso y colocó sus drones y sus nuevos robots abeja que cuidan las entradas. — habló Blaze cargando a su hija yendo con su esposo. —No creo que sea buena idea, te verá llegar.
—Eso es lo que quiero. — habló colocándose en pose para dar un acelerón. —Sólo debo acelerar...
Sonic corrió tan fuerte que la estela azul dejaba rayos a su alrededor, junto a ello apenas era visible para la gente de Station square.
Llegó a la puerta bloqueada y la derribo con un Spin-dash, rápidamente los drones comenzaron a dispararle, Sonic esquivaba las balas recordando su entrenamiento con los peces y los huevos. Destruyó uno a uno los drones y robo abejas y continuo corriendo, frente suyo había un bloqueo puesto por "Eggman", Sonic solo aumentó la velocidad y de un Spin-dash también le destruyó el bloqueo sin perder su velocidad.
Las personas del reino empezaron a tener esperanza de nuevo, el legendario justiciero azul había llegado una vez más para salvar el reino.
—Señor Robotnick, Sonic ha llegado a la ciudad, nuestros bloqueos no son capaces de detenerlo.
La voz del encargado de vigilancia le avisó al doctor, el cual, a duras penas lograba ver algo por las cámaras de vigilancia.
—Fascinante... No cabe duda que es una creatura imparable. — diría sorprendido.
—Papá, yo me encargo de él, le demostraré que velocista es más fuerte. — mencionó Zonic con decisión poniéndose el casco.
Zonic salió del laboratorio con una velocidad equiparable a la de Sonic, sino decir que más rápido.
—Interesante, veré que pasa cuando un objeto inamovible, se choca con uno imparable. — diría agarrando su taza y volviendo su vista a las pantallas.
Sonic seguía avanzando, llegando al castillo dónde los guardias le empezaron a disparar, Sonic saltó el muro y atacó a los guardias. Derribó a uno, desarmó a otro para golpearle y a otro más le conectó un Spin-dash para lanzarlo a chocar con otro más.
Más guardias salieron del castillo con sus armas, Sonic solo río un poco y se limpio el polvo de su mentón. Dentro del castillo, los reyes y su hijo mayor escuchaban los disparos detrás de la puerta y los gritos de los guardias siendos golpeados o lanzados con fuerza. La puerta se abrió y un guardia cayó desmayado, detrás de él el cobalto cruzado de brazos con una multitud de agentes noqueados y seminoqueados detrás suyo.
—El justiciero azul en persona. — reaccionó con emoción el padre de Tails.
—Vengo de parte de Tails. — mencionó positivo pateando a un agente que le había agarrado el pie. —Debemos salir antes de que Eggman mande más robo huevos.
Los reyes se apresuraron a salir, mientras Zails solo veía un tanto curioso al erizo, riendo por qué su hermano en solo dos días que había escapado logró encontrar a alguien que él buscó por cinco años. Al salir al patio el cobalto aceleró para romper el bloqueo de la puerta y así los reyes pudieran salir, no obstante, antes de golpear la puerta algo le golpeó a él.
Una patada en la zona de las costillas le lanzó lejos, aunque se recompuso dando un giro cayendo de pie.
—Vaya vaya, el justiciero azul en persona. — el agente "perfecto" le miraba con algo de enfado.
—Zonic, justo a ti te quería ver, ¿que cuenta la familia? — saludó divertido. —¿Sabes que podemos evitar esto?, no soy tu enemigo.
Zonic frunció el entrecejo.
—Cualquier enemigo de mi padre es mi enemigo. — diría el cobalto de la cop empezando a destilar energía azulada de su cuerpo.
—Vaya, ¿el cara huevo tu padre? — preguntó confuso. —¿sabes que solo te utiliza para dominar el mundo?
Zonic se enfadó y de una cargó contra Sonic, su velocidad al ser iguales emparejaba la reacción, por lo que, el aprendiz de Knuckles no pudo esquivarlo. Había sido agarrado del cuello chocando contra el muro del castillo rompiéndose, Zonic le lanzó al cielo y saltó para juntar sus puños y golpearle haciendo que se impactara con el suelo duramente arrastrándose por el asfalto.
El cobalto que recibió el golpe tosía por el impacto, levantándose de apoco.
—¿No lo entiendes?, soy el guerrero perfecto, todo lo que eres yo puedo mejorarlo. — espetó volviendo a cargar contra Sonic.
Le pateó el abdomen alzandolo, aprovechó la inercia del golpe para tomarlo de la pierna y lanzarle contra un edificio, atravesando la estructura cayendo del otro lado de la calle.
Sonic se levantaba, sus golpes se sentían cómo un tren de golpeara en múltiples ocasiones. Su vista era borrosa a demás de ver doble, notando a duras penas cuando el otro cobalto se acercó y le golpeó el rostro volviendo a sacarle disparado, esta vez chocando con una escuela.
—Imagino todo lo que papá sufrió por tu culpa y me hierve la sangre, me hace querer golpearte una vez tras otra. — espetó Zonic para que ek otro cobalto le escuchara.
Sonic salió disparado haciendo un Spin-dash, sin embargo, Zonic le detuvo tomándo su ataque con ambas manos, eso sí, el clon se arrastró varios metros antes de detener al erizo.
—Tsk, me esperaba más de ti. — habló alzando al erizo y lanzandolo lejos.
Sonic se recompuso y volvió a cargar su Spin-dash contra Zonic, no obstante, esta vez le saltó justo cuando el agente de la cop pensó que podría agarrarlo, sorprendido y desorientado, Sonic logró caer detrás de él y darle una patada que le sacó disparado, corrió tras él y ahora si impacto su ataque especial para que impactara contra un bloqueo de Eggman, rompiendolo con su cuerpo.
—Escúchame, Robotnick solo vela por sus intereses. — diría el cobalto viendo a Zonic levantarse. —No tienes que hacer esto, yo no te guardo rencor.
Zonic limpio su visera de la tierra, viendo al erizo con el entrecejo fruncido.
—Bien, si así lo quieres, te mostraré porque los equidnas son los mejores luchadores. — habló antes de salir corriendo del lado contrario al erizo.
Le siguió, una batalla de velocidad ahora se libraba en las calles del reino, Robotnick veía interesante el enfrentamiento, no obstante, ahora su vista se centró en la familia real, la cual, escapaba por la abertura del muro del castillo. Suspiró pesadamente y giró la silla para levantarse.
—Si quieres algo bien hecho, hazlo tu mismo. — diría caminando a la mesa de trabajo.
Mientras tanto, ambos cobaltos salían de la ciudad, pasando el bosque Zonic comenzó a lanzar disparos de energía de un pequeño disparador que salió de un costado de su casco. Sonic empezaba a esquivar cada disparo, hasta llegar a Green Hill, terreno abierto, perfecto para despegarse.
—¡Oye Zonic, ¿sabes que esto es lo que él quiere?, matarnos para su diversión! — gritó Sonic empezando a subir el loop.
—¡Cállate, no lo conoces, él sólo quiere lo mejor para el reino! — gritó siguiéndole.
Bajaron el loop y siguió la contienda, Sonic saltó donde un riel de un antiguo sistema de transporte aún estaba, mantuvo el equilibrio y dejó que la bajada hiciera el trabajo.
—¿Que carajo? — preguntó confuso y sorprendido por el equilibrio de Sonic.
—¿Acaso no sabías que los equidnas pueden avanzar por cualquier superficie? — preguntó mostrándose desafiante.
Llegó al otro extremo y suspiró, el desgaste de energía fue demasiado brusco y su cuerpo no soportaba aún ese gasto.
—Zonic, no somos enemigos. — habló el cobalto de extremo a extremo. —No somos tan distintos, yo también quería hacer sentir orgullosa a mi familia y hacer pagar a los que les hicieron daño, pero la venganza nunca es el camino.
Trató de hacer entrar en razón al otro erizo, el cual, sólo le miraba tratando de escucharlo.
—Zonic, se que piensas que él quiere lo mejor para ti, pero Robotnick sólo lucha por sus intereses, no caigas en su juego y arriesgues tu vida por una guerra que no te incumbe. — espetó sonando comprensivo, cómo esa voz de tu padre cuando te da un consejo.
Zonic movió las orejas un poco y bajó la vista levemente.
—Oye, ¿en verdad querías matar a todas esas personas? — preguntó el cobalto. —Porque a Robotnick no le importa si quieres o no ser un asesino, él solo te utiliza para mostrar que tiene poder.
Zonic apretó los puños, recordando aquel niño albino que lloraba mientras él ahorcaba a su padre, nunca quiso hacer daño, pero no tenía el control de su cuerpo en aquel momento.
Una explosión surgió a lo lejos, el reino estaba bajo ataque. Usando su visor notó un robot atacando los edificios del reino, el visor no lo mostraba cómo amenaza, por lo que habló al comandante.
—Papá, ¿que es eso que ataca al reino? — preguntó extrañado y preocupado.
—Ya te dije que no me llames papá, y es un proyecto nuevo, Mecha Sonic. — diría el doctor orgulloso. —Ante tu inútil intento de evitar que mis prisioneros escaparan activé al orgullo de mis proyectos, y sin sentimientos patéticos o capacidad de habla que haga que me irrite.
—Pero, está atacando a gente inocente. — replicó el agente.
—Tú voz siempre ha sido irritante, ¿cuando entenderás que la vida de esos inútiles no me importa?, son sólo molestias, alimañas. — hablaba serio y firme. —Estamos apunto de ganar Zonic, el reino será nuestro y no hay creatura viva que pueda detenernos, ahora acaba con Sonic y regresa para ejecutar a los prisioneros.
Zonic guardó silencio dejando derramar una lagrima que bajo hasta su mentón. Todo era cierto, las palabras que no quería creer eran verdad.
—No... — habló tajante.
—¿Disculpa? — preguntó el doctor.
—Yo no soy tu juguete, yo soy el soldado perfecto que fue creado para proteger a los débiles... — habló apretando los puños. —Robotnick, serás enjuiciado por tus crímenes.
El cobalto cortó comunicación y volteo a ver a Sonic, el cual, le sonrió y le mostró su pulgar.
—Vaya, un pequeño inconveniente que se arregla fácil.
El doctor volvió a abrir comunicación con Zonic y apretó el botón de su guante. El cobalto agente de la cop recibió una gran descarga, a lo que Sonic empezó a subir el riel para implementar el chip inhibidor.
—Zonic, destruye a Sonic y después ejecuta a los reyes. — ordenó el doctor sonriendo de manera maliciosa.
—Tranquilo Zonic, te pondré es...
Sonic recibió una mano en su cuello ahorcandole, soltó el chip y este cayó al cráter de debajo del riel. Sonic le dio una patada al otro cobalto liberándose del agarre, miró al cráter y se maldijo por soltar el chip.
Zonic se reincorporó, se lograba ver sus iris azulinas, cargó contra Sonic y ambos cayeron por el cráter. La velocidad era demasiada, Sonic tenía las manos de Zonic en su cuello ahorcandole, entre su vista borrosa divisó al chip cayendo aún lado de ellos. Haciendo el esfuerzo de alcanzarlo gastando su energía empezó a quedarse levemente fuera de combate, pestañeando.
Cerró los ojos, pero al momento los abrió dejando ver su iris cambiando a azul logrando dar un estallido de energía liberándose de Zonic, tomó el chip y realizó un Spin-dash para agarrarse de una roca de la pared. El otro cobalto cayó al piso, aunque gracias a sus botas y su traje pudo caer de pie, empezando a correr por encima de la pared hacia Sonic.
—Carajo, en su modo líquido de cerebro es más determinado aún. — mencionó divertido y preocupado Sonic. —Venga, tengo sólo una oportunidad para salvarlo, haré que valga la pena.
Se guardó el chip en sus púas y se soltó de la roca para girar a gran velocidad y comenzar a correr de la opuesto a la subida, ambos corrían para chocarse en su estado desatado. Chocaron y la corriente de energía azulada llegó hasta el reino, donde otra historia surgía al paralelo...
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Los cobaltos habían llevado su duelo de velocidad hasta las afueras del reino, mientras eso sucedía los reyes y Zails salían del castillo para resguardarse.
—Espero que el justiciero azul le gane. — mencionó la madre de Zails preocupada. —¿Crees que le gane a Zonic?
—Ambos son muy diferentes, no sabría decirle quien ganará. — respondió Zails llevando a su madre de la mano durante el trote.
Unos roboabeja llegaron para detener su andar, no obstante, antes de que les dispararan una onda eléctrica les frió dejándolos inútiles, el hermano menor de Zails bajó de su vuelo y abrazó a su familia sonriente.
—¡Mi pequeño que bueno que estas bien! — gritó el padre abrazando con fuerza a su hijo menor.
—Hay que irnos, antes de que Robotnick despliegue más drones. — habló el hermano llevándose a su familia.
Sin embargo, Tails se zafó del agarre para la sorpresa de su familia.
—Yo no me voy, este es mi reino y voy a pelear por él. — espetó decidido. —Detrás de los muros de esas casas hay gente que lucha cada día por tener una vida mejor, que tiene esperanza de que el mañana mejorará... ¡Yo pelearé por mi gente, por mi pueblo!
Gritó decidido ante el asombro de sus padres y el silencio de su hermano.
—Que últimas palabras tan conmovedoras. — se escuchó la voz de Robotnick a través de sus drones. —Lástima que tu novio azul no esté aquí.
—¿El justiciero azul es tu novio? — preguntó sorprendida la reina.
—¡N-no! — gritó sonrojado el vulpino menor. —Quiero decir, es guapo y todo pero... ¡Eso no importa!
Robotnick rió por su dron.
—Vean al príncipe tonto, piensa que con el poder del amor salvará su reino.
El dron fue derribado por un disparo del blaster que Tails tenía en su muñeca.
—Amor y balas, Eggman. — diría riéndose.
—Vaya que Sonic y él son una piedra en mi zapato, desplegaré mis nuevos escarabots, tal vez por fin lo maten. — mencionó irritado tecleando en su computador.
Los robots fueron activados y rápidamente circularon por las calles del reino.
—Zails llévate a mamá y a papá de aquí, hay una aldea en este lugar, ahí estarán a salvo. — habló el menor dándole su móvil con la ubicación del lugar.
Zails lo tomó dudoso, aunque asintió y se fue corriendo con sus padres.
—Hermano, volveré para ayudarte. — mencionó el joven zorro antes de irse.
Tails corrió a su habitación del castillo, llegando buscó debajo de su escritorio encontrándose con varios inventos suyos, entre ellos estaba una mochila de color rojo, a conectó su baster a ella y sonrió.
—Es hora de recuperar mi reino. — habló saliendo de la habitación por la ventana.
En el centro de la ciudad los escarabots hacían estragos, las personas buscaban salir de ahí aunque no les dejaban los robots. No obstante, el disparo de la baster de Tails llamó la atención de los agresores, giró una manivela de su mochila seleccionando electricidad.
Disparó y la honda eléctrica atacó varios robots a la vez, sonrió y siguió atacando.
—Salgan de aquí, vayan a las afueras del reino, ahí estarán a salvo. — espetó el zorrito atrayendo la atención de los robots del doctor.
Eran demasiados, parecía que le superarían en cualquier momento. Uno de los escarabots le rasgó la mochila haciéndola inútil, la aventó para evitar dañarse y siguo disparando con su blaster, no obstante, no parecía que ganaría.
—¡Abajo zorrito de colas características! — gritó alguien a lo lejos.
Tails lo hizo y el equidna llegó golpeando el suelo haciendo que los bots salieran disparados.
—¡¿Knuckles?! —reaccionó confundido.
—No iba a dejar que mi pupilo luchara sólo contra estas bestias mecánicas. — habló orgulloso. —Vaya a resguardar a los demás, yo me encargo de estas chatarras.
Knuckles chocó los puños y cargó contra la multitud de robots. Tails sonrió y emprendió vuelo.
—Tsk, ¡en momentos cómo estos desearía tener pelo para jalarmelo! — gritó enfadado. —Es hora de activar el proyecto Mecha, veremos si esto es de su talla.
Robotnick caminó hasta una cabina donde un robot con la apariencia de Sonic reposaba, tecleo la contraseña y la pantalla colocó un "activado" en ella. Mecha Sonic prendió sus ojos y salió de su cámara viendo al doctor.
—Jojojo, Mecha Sonic, ve a liquidar este reino, inauguraré uno nuevo en sus cenizas. — habló con decisión y confiado en su robot.
El robot rompió el techo y salió disparado al reino, Robotnick sonreía mientras volvía su vista a sus pantallas.
Tails resguardaba a sus ciudadanos en el bunquer contra amenazas del castillo, no obstante, el sonoro estallido de Mecha Sonic llegando a lo más alto del castillo le tomó por sorpresa.
—Rayos, sigan metiendose, yo lo distraigo. — habló fuerte el zorrito volando lejos del castillo llevándose al robot.
Obviamente la velocidad era una cuestión significativa, pronto Mecha Sonic le alcanzó aunque Tails le disparaba múltiples veces sin éxito alguno. El menor decidió sobre cargar su blaster y lanzarselo, explotando sonoramente dejando una estela de humo que usó para esconderse.
El roboSonic escaneaba la zona en busca del menor, sin éxito aparente.
—No pierdas tiempo, destruye el reino y saldrá muerto tarde o temprano. — habló el doctor a su robot.
Mecha Sonic empezó a lanzar un rayo de su pecho que destruía todo a su paso.
El apodado Eggman sonreía triunfante, aunque esa sonrisa se borró.
—Papá, ¿que es eso que ataca al reino? — preguntó Zonic extrañado y preocupado.
—Ya te dije que no me llames papá, y es un proyecto nuevo, Mecha Sonic. — diría el doctor orgulloso. —Ante tu inútil intento de evitar que mis prisioneros escaparan activé al orgullo de mis proyectos, y sin sentimientos patéticos o capacidad de habla que haga que me irrite.
—Pero, está atacando a gente inocente. — replicó el agente.
—Tú voz siempre ha sido irritante, ¿cuando entenderás que la vida de esos inútiles no me importa?, son sólo molestias, alimañas. — hablaba serio y firme. —Estamos apunto de ganar Zonic, el reino será nuestro y no hay creatura viva que pueda detenernos, ahora acaba con Sonic y regresa para ejecutar a los prisioneros.
Hubo un silencio entre ambos, a lo que el doctor cortaría comunicación con el tablero de su máquina, aunque algo le tomaría por sorpresa.
—No... — habló tajante.
—¿Disculpa? — preguntó el doctor.
—Yo no soy tu juguete, yo soy el soldado perfecto que fue creado para proteger a los débiles... — habló a través del comunicador con notable enfado. —Robotnick, serás enjuiciado por tus crímenes.
El cobalto cortó comunicación para el enfado del doctor.
—Vaya, un pequeño inconveniente que se arregla fácil.
El doctor volvió a abrir comunicación con Zonic y apretó el botón de su guante.
—Zonic, destruye a Sonic y después ejecuta a los reyes. — ordenó el doctor sonriendo de manera maliciosa escuchando al erizo cobalto quejarse dolor.
De regreso al reino Tails estaba cubierto dentro del metro del reino, herido del brazo pero con vida.
—Perdón Sonic, no soy tan fuerte cómo tú... — habló agarrándose la herida fuertemente llorando.
—Tienes el espíritu de un guerrero, y eso es lo que importa. — habló Knuckles llegando con él.
—¿Knux? — preguntó confuso el menor. —¿Cómo me encontraste?
—Tu hermano me dio tu rastreador cuando me lo encontré en el camino. — explicó levantando la ceja.
Tails río, la actitud sobre protectora de su hermano siempre le había dado gracia.
—Su nuevo robot es invencible... No creo que podamos salvar el reino. — diría desanimado el menor.
—En una batalla siempre hay un momento donde se puede aprovechar una debilidad... — explicó Knuckles.
El suelo empezó a temblar y una energía azulina cubrió el reino desconectando los aparatos eléctricos, entre ellos Mecha Sonic que se quedó inmóvil.
—¿Uh? — reaccionó confuso el doctor. —Me lleva, por suerte tenemos un generador de emergencia.
Knuckles sonrió viendo inmóvil al robot, chocó los puños y salió para lanzarse al cielo a golpearle.
Le golpeó con tanta fuerza que le mandó al suelo, cayó duramente el robot, el equidna se postró arriba suyo para seguir golpeándolo una y otra vez. Cada golpe destinaba una energía rojiza y dejaba toda su fuerza en él.
Mientras tanto, en el foso de Green Hill ambos erizos caían ilesos del choque, sin embargo, el casco del cobalto empezó a fallar debido a la descarga de energía cosa que hizo que Zonic empezara a quejarse. Sonic aprovechó eso para correr y colocar el inhibidor, el chip hizo efecto y el erizo empezó a respirar más tranquilo.
Sonic tomó distancia y de apoco Zonic volvía a la normalidad.
—¿Otra vez? — preguntó agarrándose la cabeza.
—Sí... Pero ya no te controlará más. — habló mostrándole una sonrisa sincera.
Vieron al reino, humareda y fuego le cubrían.
—Ahora a ir por Eggman. — diría decisivo Sonic. —¿Vienes?
Zonic estaba confuso, indeciso.
—Oye, nunca es tarde para hacer lo correcto. — diría caminando para tomarlo del hombro.
Zonic suspiró fuerte, se limpio la visera y asintió al otro cobalto.
Ambos aceleraron para ir al reino, dónde el doctor había activado el generador de emergencia, activando todos los servicios de la cop incluido el casco de Zonic.
Knuckles golpeaba una y otra vez ql robot dándole abolladuras, no obstante, Mecha Sonic se reactivó y le disparó un rayo que le atravesó el pecho al equidna. Éste último se tambaleó y caminó hacia atrás, Mecha Sonic apuntó un último rayo hacia él pero un golpe le sacó volando chocando contra un edificio de enfrente.
—¿Zonic y Sonic? — preguntó confuso el doctor viendo cómo su soldado junto a su enemigo atacaron a su robot.
Sonic fue directamente con Knuckles tomándole mientras caía al suelo.
—¿Maestro? — preguntó confuso el cobalto.
Mecha Sonic se reincorporó, aunque Zonic para darle tiempo al justiciero azul se adelantó a atacarle.
Sonic trataba de detener la sangre que salía del pecho de Knuckles de manera apresurada, Tails llegó con ellos para tratar de ayudar.
—¿Puedes hacer algo? — preguntó el cobalto al zorro.
—No sé... No tengo equipo médico y el ataque atravesó su corazón. — mencionó entristecido.
—¿Saben?, es un orgullo que mi última batalla fue a su lado... Sin duda ambos son un equipo increíble... Hechos el uno para el otro. — diría el equidna con sus últimas fuerzas. —Dejen en alto a la tribu equidna...
Tails no aguantó el llanto dejándolo salir, Sonic solo veía a su mentor cerrar los ojos de apoco.
Knuckles dejó caer su cabeza mirando al cielo, donde se transformó su visión a un prado lleno de flores, donde Tikal le sonreía y abría los brazos para recibirlo, Knuckles caminó a ella tomándole de las manos, ambos se sonrieron y se abrazaron mientras los pétalos les cubrían.
—Amor... Por fin puedo volver a abrazarte. — diría cerrando los ojos y dando su último aliento.
Sonic cerró los ojos, dejó caer sus lágrimas aunque respiraba con fuerza. Se levantó y miró a un dron de Eggman con enojo, esa sería la última vida que él arrebatará.
Tails también se levantó viendo al dron limpiándose las lágrimas.
—¿Cuál es el plan? — preguntó el menor.
—Acabar con esto... — respondió seco.
—Bien, ¿en que te ayudo? — preguntó el menor con decisión.
Sonic no dijo nada, solo volteo rápidamente le tomó del mentón y le plantó un beso. El menor se sonrojó aunque tan pronto cómo pudo se dejó llevar por el beso.
Sonic se separó y volvió su vista al robot y a Zonic luchando.
—Mantente a salvo... Sólo quiero eso. — mencionó empezando a cambiar su iris de color.
Dio un acelerón que rompieron los vidrios de las casas haciendo también temblar el suelo. Su determinación era mayor aún, otra vez veía todo en cámara lenta, pero esta vez en su mente estaban los rostros que le mostraron quien era, sus padres, Shadow, Knuckles y Tails le daban ese impulso para volverse ese héroe imparable.
—No me importa si debo dar mi vida, no lastimarán más a mis seres queridos. — pensó generando más energía.
Realizó un Spin-dash, uno que gradualmente se iluminaba más y más. Recordó una frase de su mentor durante el entrenamiento.
"No es quien sea más fuerte, sino a quienes queremos proteger con esa fuerza. Una persona que no usa su fuerza para proteger a los demás nunca evolucionará."
El ataque de Sonic brillaba tanto que era imposible que no lo vieran a la distancia, Zonic dio un salto para quitarse del ataque, Mecha Zonic lo recibió de lleno y fue arrastrado golpeando casas, edificios, y demás en el trayecto hasta que Sonic se detuvo y la energía azul le siguió mandando lejos.
Mecha Sonic estaba horriblemente desfigurado, apenas y funcionaba. Sonic saltó y realizó un Spin-dash que terminó de destrozar al robot en pedazos.
Zonic llegó poco después viendo el gran cráter de la calle.
—Eso fue increíble. — diría el agente de la cop.
—Zonic, ¿dónde está Eggman? —preguntó aún con enfado Sonic.
Ambos cobaltos llegaron a las oficinas subterráneas de la cop, dónde sólo había una nota del doctor diciendo "Perdedores".
Zonic corrió a la mesa de trabajo pero la púa no estaba.
—Carajo, ese infeliz se escapó. — mencionó con enfado el agente de la cop.
—Oye, lo atraparemos. — le mencionó Sonic agarrándole del hombro para mostrarle una sonrisa.
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El reino hacía labores de reconstrucción con la ayuda de la rebautizada Cop Zone, la cual, después de que el reconocido villano "Doctor Eggman" escapara recontrató a sus antiguos agentes, ya que Eggman los había echado por darle espacio a sus máquinas.
En el castillo todo se respiraba tranquilo y con un aire de paz. Tails estaba en su habitación viendo sus apuntes para calibrar su nuevo baster, no obstante, su hermano mayor le interrumpió.
—Oye Tails, ¿puedo hablar contigo? — preguntó su hermano.
El menor asintió y le prestó atención.
—Sólo... Perdón por todas las veces que te hice daño... — diría tratando de hablar claro.
—Zails, es la tercera vez esta semana, ya te perdoné. — diría riendo.
El mayor río nervioso.
—Por cierto, ¿Sonic aún no vuelve de su viaje? — preguntó el mayor curioso.
—Nop, y dudo que lo haga siendo el nuevo proyector de la esmeralda maestra. — diría viendo a su hermano.
El mayor suspiro y asintió dejandole sólo. Tails sacó su móvil y comenzó a teclear.
Mientras, en un lago no muy lejos del reino, dos cobalto pescaban tranquilos.
—Bien Zonic, ahora que el pez pique empiezas a jalar del anzuelo. — explicó el cobalto "mayor".
—Vaya, esto es demasiado tranquilo. — habló el erizo que portaba una chamarra roja. —Robotnick no hubiera echo esto conmigo.
—Olvida a ese cara huevo, ahora tienes una familia que te apoya. — diría sonriéndole.
—Tienes razón, "hermano". — diría alegre moviendo sus orejas.
El celular de Sonic vibró, por lo que se apresuró a contestar.
El cobalto guardó su móvil al escuchar a Zonic batallar con la caña de pesca. Tails siguió en lo suyo con una sonrisa en su rostro.
Pero en las lejanías del reino, muy apartado se cualquier civilización, un doctor terminaba una máquina impulsada por la púa de Sonic.
—Usando lo último de mi mente y mis materiales voy a crear un nuevo ayudante, capaz de derrotar a esas alimañas por una vez por todas. — diría prendiendo la máquina.
Una descarga de energía iluminó la cámara desgastada y explotó dejando al doctor tirando en el suelo, se sentó quejándose y de la humareda salió un erizo de color verdoso que portaba una chaqueta de cuero negra y unos lentes.
—Doctor Robotnick... — miro el erizo al mencionado.
—Hola creación, haz sido creado para...
—Destruir a Sonic y a sus patéticos amigos. — diría sonriendo mostrando sus dientes afilados.
—Veo que entiendes. — habló sonriendo de lado.
—Claro que si, después de todo me diste parte de tu ADN. — diría cruzándose de brazos.
—Jojojo... Que se preparen esos inútiles, que Eggman vuelve a las andadas con... Eh... — el doctor se puso pensativo.
—Scourge... Llámame Scourge. — habló sonriendo de lado el erizo esmeralda.
He aquí el último capítulo de nuestra historia owo
¿Qué les pareció?
Horrible, abyecto, vomitivo, feo, mal hecho, cualquier adjetivo despectivo es bienvenido owo
Espero que les haya gustado esta historia tanto cómo yo :D
Estoy originalmente sería un One Shot que le prometí a usagi_chan2233, pero decidí dividirlo por capítulos y salió esta cosa xd
Muchas gracias por leer hasta el final owo
Se viene la edición en PDF y Ebook en mi patreon para que no se lo pierdan ewe
Sin más por el... ¿Uh?, ¿secuela?
No querrán una secuela, ¿o si?
Vamos, si veo mucho apoyo tal vez les haga una secuela 👀
Sin más ahora si me despido.
Bye bye!!
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