1 mes después..

Narradora.

Había pasado un desde aquel "Húmedo" momento, pasó un mes desde que Vegeta mintió a Bulma, y pasó un mes desde que Bulma excitó a Vegeta.
Entrando al tema de los días después de aquel suceso, y resumir un poco de lo que a estado pasando en este mes, todo marchaba a la perfección, y cuando me refiero a la "Perfección" es por las continuas discusiones que tienen Bulma y Vegeta, un día se tratan bien, al otro mal, un día se quieren, al otro se odian, al parecer esa es la rutina de ambos. Varios de la preparatoria han empezado a especular sobre un supuesto noviazgo entre ambos, mucho creen haberlos visto abrazados, como otros creen haberlos visto tomados de la mano, pero en realidad todas esas creencias son falsas, y eso lo aseguraron ambos.

Bulma estaba llegando a casa de Milk, a terminar un trabajo que les dejo el profesor, Milk afreció hacerlo en su casa, ya que no estaría el molesto de su hermano para entonces, cosa que a Bulma entristeció un poco, ya que no tendría esa chispa de acción que le vuelve a surgir cada que discuten, y sentir esa sensación le gustaba.

Tocó la puerta, esperó unos segundos hasta esperar respuesta, Milk la recibió.

— Pasa Bul.

Bulma dejo los materiales que se asignó así misma para traer, en la mesa.

— ¿Comenzamos?

— Claro, pero para tener más espacio podríamos hacerlo en el cuarto de estudio, sin interrupciones.

Bulma asintió, cargó nuevamente sus materiales y los llevó arriba, junto su amiga.

(•••)

Pasaron dos horas desde entonces, Milk y Bulma estaban agotadas y sudando por el tanto esfuerzo y empeño que le pusieron al trabajo que tenían: una maqueta, y de ello hace una exposición en diapositivas, y por ultimo hacer un dibujo en un papel gigante sobre el tema que les había asignado el profesor.

— Estoy cansada. ¿Como antes no me costaba tanto hacer una bendita maqueta? — se quejó Milk bebiendo un poco de su limonada.

— Lo mismo digo, pero hay que acabar, tenemos que ser el primer puesto.

— Tienes razón.

— Oye, ¿Y Vegeta no hará su maqueta con su compañero?

— Según él, dijo que ya lo acabaron, pero yo no le creo.

— Jaja, quien le cree.. — hizo una pausa, viendo la maqueta y las partes faltantes en ella. — Milk, pasame la silicona, es hora de pegar estos soldaditos.

— Toma.

La peli-azul tomo en manos la silicona, pero al momento de querer echarle en la parte inferior al soldadillo de jueguete, se quejó. — Milk, se acabó la silicona.

— Ash se gastó, ve a comprar otro mientras yo veré si encuentro otro así sea entrar al cuarto de Vegeta.

— Bien, no tardo.

— ¡Espera!

— ¿Que?

— ¿Te alcanza el dinero?

— Me alcanza para dos. — sin decir más, Bulma se paro del frío suelo, se acomodo un poco el short de mezclilla que usaba, abrió la puerta y se dirigió hacia las escaleras, para después bajar rápidamente hasta la sala, se encamino hacia la puerta, pero una vez que giro la perilla, raramente sintió que esta también estaba siendo girada. Una vez se abrió sola mágicamente, la puerta chocó contra su cabeza, provocando un leve dolor y el retroceder de Bulma.

— Mierda..

— ¿Bulma? ¿Que haces aquí?

— ¡Lo siento! — dijo sarcástica — Vine aquí para hacer un trabajo con tu querida hermana, si me disculpas iré a comprar algo. — dijo, paso al lado del peli-negro.

Bulma.

Iba caminando hacia una nueva tienda, había pasado por esa tienda hace no mucho y me llamo la atención, pero para ese momento no tenia nada que hacer allí y por eso pospuse mi visita.
No quedaba lejos, pero tampoco quería caminar, me sentía cansada, y olvide tomar agua antes de salir y sentirme fresca. Había un atajo, un callejón, ese me llevaría de frente a la tienda y no será necesario cruzar toda la calle

Era un callejón un tanto estrecho, el piso estaba en malas condiciones, un poco levantados y con baches.

— ¡Apesta!

El lugar olía a horrores, me agarraba de las paredes para poder guiarme mejor y no chocar con los baches.

Cuando mas pasos que daba. El olor aumenteba, pero era más.. asqueroso, poco a poco fui asimilando el misterioso olor, y llegue a la conclusión de que era droga lo que estaba aspirando, rápidamente tape mi nariz para no inhalar más ese olor.

Narradora.

Con los segundos que pasaban, la inseguridad y el arrepentimiento se estaban apoderando en Bulma, ese lugar le estaba dando mala espina, quería salir de allí, pero ya se encontraba a mitad de camino y no podía retractarse.

Hasta que a lo lejos, un hombre misterioso la observaba, estaba detrás de una puerta verde, cubriendo la mitad de este. Ella noto la mirada del hombre, parecía un hombre de 30 años mínimo. Dio un paso hacia atrás, el hombre se dio cuenta que esta se había percatado que la observaba, fue en donde actuó, salio del lugar donde se encontraba viéndola para después con pasos lentos se acerco a ella. Bulma empezó a retroceder más rápido, apoyándose de la pared y no caer. El hombre apresuro su paso hacia ella, y en una de esas, Bulma con su talón piso un bache, provocando que esta se caiga y el hombre se aproxime y apreveche de la situación.

— ¿Quien eres? ¡Ayuda! — gritó al ver como el hombre se ponía encima de esta.

— Shh tranquila muñeca, solo nos divertiremos un rato.

— ¡No, porfavor! ¡No me toques! — volvió a gritar y a suplicar ya que este le estaba tocando sus piernas suavemente.

— ¡Silencio!

— No, no, no. ¡Ayuda por favor!

El hombre metió su mano bajo la blusa de Bulma, empezando a tocar sus zonas privadas. Haciendo que Bulma empiece a intentar quitar las manos del hombre de encima.

— ¡¡Sueltame!! ¡¡Desgraciado!! — comenzó a dar patadas hacia el aire torpemente, ya que no daba con el blanco. Su Pene.

— ¡¡Cállate!! — el hombre cansado de escuchar los gritos de Bulma, con la palma de su mano golpeo un cachete de ella, fuertemente, dejando marcada su mano en la mejilla derecha de Bulma, además que, su cabeza chocó brutalmente contra el rocoso piso. Haciendo que Bulma se desvanezca.

— ¡Oye tú! ¡Suéltala!

— ¿Quien te crees para darme ordenes, niño? Por que no mejor vienes y te diviertes conmigo. Ademas, creo que esta niña es virgen. — dijo acercando su rostro hacia el cuello de Bulma y rozar su lengua con este.

— ¡Pedazo de mierda!.. ¡Suéltala!

— ¿Cómo me llamaste engendro?

— Por un carajo. ¡Deja a la chica imbécil!

— ¡Cállate Tarado! Mocoso desubicado.

— Deja a la muchacha antes que..

— ¿Antes de qué? ¿Me vas a pegar marica?

— ¡Tu te lo buscaste!

Aquel muchacho se aproximó hacia el otro hombre quien te tenia debajo a Bulma inconsciente, se paró y se dirigió hacia el joven muchacho. El hombre rápidamente se dejo de parlotear, con su mano formo un puño, y con el mismo pegarle en la cara fuertemente, el muchacho dio unos pasos atrás tras el fuerte golpe que le proporciono el hombre. Entonces, actuó, e imitó lo que el hombre le acaba de hacer minutos antes, sin dudarlo unos segundos mas, aprovecho que este se tocaba la cara para que se suba encima del hombre y empiece a pegarle fuertemente la cara, sin parar, sin piedad, sin pararse.

Después de minutos, el muchacho relajo los nudillos, fue entonces donde el hombre con pocas fuerzas se levantó y dijo:

— Maldito estúpido. ¡Maldito!

El muchacho no hizo caso, pero respondió:

— Si sigo viendo tu asquerosa cara un poco más... esta vez no me va a importa ir a la cárcel.

El hombre no dijo nada, entonces se metió al lugar donde se encontraba minutos antes de que comience la acción.

Bulma poco a poco iba despertando, cuando abrió los ojos, su vista fue asimilando a la persona que se encontraba viéndola encima suyo. Al principio pensó que era el hombre que minutos antes quiso en herirla, pero no.

— ¿Vegeta?

- Vámonos, no debiste venir aquí, ¡¿No te han advertido de este lugar?!

— No..

— ¡Por dios bulma! ¡Casi te violan!

— Shhh, no grites por favor, mi cabeza me duele. Por favor.. — la peli-azul toco su cabeza, y con la yema de sus dedos empezó hacer círculos con ellos. Dejo caer algunas lagrimas, se paro como pudo, con sus manos limpió las lagrimas que se quedaron baradas en sus mejillas. — Estoy sangrando..

— Tranquila, no es mucho, aguantará...

— Oye Vegeta..

— ¿Qué?

— Gracias por salvarme..

Vegeta no respondió, solo se dispuso a seguir caminando, donde Bulma era quien iba junto a él, el sangrado que tenia era leve, no escurría mucho, agarró una bufanda que tenia guardada por emergencia, y se la colocó donde se encontraba su herida.

— Oye Bulma..

— ¿Que pasa?

Vegeta pensó un poco lo que iba a decir, y que palabras serían apropiadas para hacer sentirla mal.

— El.. el señor dijo.. o bueno, creyó, que tu.. que tu.. jamás... — dio una pausa. Dio un suspiro, seria directo, sin remordimientos. — el señor creyó que tu eres virgen, ¿Es verdad?

— ... — guardo silencio por unos segundos, ese tema le incomodaba en todos los aspectos. El ambiente se volvió tenso, ninguno emitía sonido alguno. Vegeta esperaba respuesta de Bulma, pero Bulma esperaba que este cambiara de tema. Pero no le quedaba más, tenia que responder a la pregunta, por mas incómoda que se sienta, no lo puede dejar con la duda. — si, si lo soy. Pero promete no decirle a nadie.

— Lo prometo.

(•••)

Iban llegando a la casa de Vegeta, pero Bulma paró, ya que recién se acordó a lo iba.

— ¡Ahh! ¡La silicona! ¡Ya vuelvo!

— ¿A dónde vas?

— Ahh es que.. tenia que ir a comprar, ¿Te acuerdas?

— Esta bien. Vamos rápido.

— ¡Una carrera!

— No.., sería un abuso verte llorar de nuevo.

— ¡Que chistoso! ¿Que pasa? ¿O es que acaso tienes miedo Ouji? — lo incitó.

— Bueno, pero después no me vengas con excusas.

— Bien, tres..

— ¡Alto! ¿Quien dijo que tu puedes contar? ¡Yo voy a contar!

— ¡No seas un arrogante!

— Uno, Dos, Tres, ¡Corre!

— ¡Oye!

Ambos salieron disparados hacia la tienda, sin detenerse por la mas mínima mosca.
Los dos estaban solo enfocados en lo que había en frente para no tropezarse.
Bulma se dio cuenta que habia una paloma en su camino. No tomo en cuenta de que esta podía volar, pero también hay veces en el que la paloma esta distraída. Bulma paró. Mientras Vegeta pensó que se rindió, miro hacia sacando una sonrisa, pues se había dado cuenta que era por una simple paloma, no pudo evitar reir, pero cuando volvió la mirada hacia al frente, vio una gran fuente acaparando todo su camino, no supo como reaccionar, entonces fue donde tropezó con la orilla de la fuente para después caer en el agua, Mojandose por completo.
Bulma estaba detrás de el corriendo, pero volvió a parar ya que las risas se apoderaron de ella.

— ¡¡JAJAJA!! — rió Bulma.

— ¿De que te ries? ¿Acaso nunca viste alguien mojado? ¿No te viste mojada? — habló soltando las palabras ofendido.

— ¡De... Na... Nada! ¡JAJAJA!

— Que graciosa.. por mi suerte que no hay gente, ven ayudame no voy a poder solo — dijo extendiendo su mano.

— Jajaja jajaj — puso su mano en su pecho para asimilar su respiración, limpio las pocas lagrimas que salían de sus ojos, y después volver su mirada a Vegeta. — esta bien.. solo por que me das pena.

Bulma agarró la mano de Vegeta fuertemente para poder jalarlo. Pero fue todo lo contrario, fue Vegeta quien agarró fuertemente la mano de Bulma, para después traerla hacia él, provocando que ella caiga también al agua.

— ¡JAJAJAJA!

— ¡Te odio!

Ambos salieron de aquella fuente aun mojados, y con las gotas aun cayendo de sus cabellos.

Vegeta se había sonrojado, gracias a la corta camisa que portaba Bulma, y por el agua, hizo que este se remar que y se hagan notar sus pechos. Pero este desvió rápidamente su mirada para que esta no lo notase.

~♡

¡Nueva historia! Hace minutos publique una nueva historia, les agradecería si se pasaran un rato a leerla, espero y les guste♡ Es Apuesta Mal Hecha. Y sip, el trama es escolar.

Buenas noches, gracias por votar y comentar.

¡La historia esta maldita! JAJA jakahsja

¡Nos leemos!