Maratón (2/3)

Miré el closet una vez más, no sabia que iba a usar, es qué ¿Qué te pones para ir a conocer a la madre de tu novio? Es raro, nunca había pasado por eso, y cuando le pregunté a mi mamá que qué podía usar me miró divertida y negó con la cabeza, dijo que no tenía porqué estar tan nerviosa y que me vistiese como lo hacía generalmente.

Tomé unos pantalones color beige, una blusa blanca bastante bonita, y unos zapatos del mismo color que el pantalón, me arreglé el cabello rápidamente y coloqué un poco de maquillaje.

— ¿Quieres que te lleve? — dijo mi padre en cuanto me vio.

—No te preocupes, tomaré un taxi, yo les llamo cuando llegue. — sonreí y ellos lo hicieron de vuelta.

—Te irá bien cariño, no te pongas nerviosa— dijo mi mamá sonriendo.

Tomé mi bolso y salí de casa en dirección a la de Wade, en verdad nunca había ido pero hice caso a las señas que el me dio para poder llegar, no podía ser tan tonta y perderme, ¿Verdad? El taxi estacionó en un lindo condominio de casas, le pagué y bajé, no sabía si estaba en el lugar correcto hasta que ví el auto de Wade, toqué la puerta y después de unos minutos se abrió dejando ver a un sonriente Wade.

—Creí que no vendrías—dijo besando mis labios.

—Te dije que lo iba a hacer—sonreí y el hizo lo mismo.

—Bueno, entra, bienvenida a mi hogar.

—Gracias— dije entrando, pude ver que la casa era realmente hermosa, pero había algo que no me gustaba, y era el uso excesivo del rosa en muchas cosas.

—Lamento el color rosa, mi mamá es algo obsesionada con eso, yo lo detesto. —se encogió de hombros.

—No te preocupes, no vine a criticar la decoración de tu casa—el besó mi frente— Eres increíble.

—¿Hola? —dijo una voz femenina haciendo que nos separarmos.

—Mamá— dijo incómodo—Se supone que nos conoceríamos en la cena.

Me giré y me encontré con una señora bastante joven, probablemente tendría la edad de mis padres, lo cual me sorprende ya que creí que no sería tan joven, la madre de Wade tenía el cabello rubio y un cuerpo demsaido voluptuoso.

—Mucho gusto, mi nombre es Isabella Hemmings—sonreí y ella me miró unos segundos a los ojos y luego sonrió.

—Mi nombre es Laura, Laura Colleman.

—Muy bien,¿podemos pasar a almorzar?—dijo Wade algo incómodo.

Caminamos en dirección a la mesa, y ya la estaban poniendo,¿tenían tantas empleadas?

—Espero que te guste—sonrió Wade.

Las empleadas de Wade empezaron a traer varios platos de comida, primero la entrada y luego el plato principal, para finalmente traer la bebida y el postre, ¿era necesario? En mi casa nos conformábamos con pedir hamburguesas o pizza a domicilio.

—Y bien Isabella, cuéntame de ti.

—Bueno, pues vivo con mis padres y mi hermano menor, voy en último año de escuela y siempre he vivido acá.

—¿Y como se conocieron con Wade?

—En la escuela, el es amigo de un amigo nuestro, y así nos conocimos.

—Que lindo, yo también conocí a mi primer amor en la escuela, luego nos separamos pero en fin, espero que el sea feliz.

—¿Al padre de Wade? —pregunté y esté me lanzó una mirada asesina, por lo que supe que no debía preguntar eso—Lo siento, no quería ser intrometida.

—James—suspiró—James es un idiota que en cuanto supo que estaba embarazada se fue, pero no importa.

—Mamá no tienes que hablar de esto—dijo Wade tomando su mano.

—Si me disculpan, me siento mal—sonrió de lado su madre—Nos vemos luego Isabella.

—Lo siento—dije pero ella ya se había ido.

—Soy una idiota, me va a odiar—negué con la cabeza.

—No te va a odiar, es solo qué aún le duele hablar de eso, termina de comer—sonrió.

Y eso hizo, seguí comiendo y cuando terminamos salimos a dar una vuelta por el hermoso jardín que tenía en su casa.

—Mi madre vivía en Miami cuando todo sucedió, me contó que cuando supo que estaba embarazada corrió a contarle a mi padre, ella estaba emocionada porqué él era el amor de su vida, y ella creyó que ella también lo era. —sonrió algo triste. — Cuando le contó el actuó como un cobarde, le dijo que eso no era parte del plan, que ellos solo habían estado juntos para vengarse de alguien, le dijo que iría a buscar algo de comer—negó con la cabeza— Y nunca volvió.

—Que hijo de puta, ¿Y no lo has buscado? Le guste o no, el es tu padre, y tiene que responder por ti.

—No, digamos que mi madre no le quiso pedir nada, y bueno, yo he sido muy feliz con ella.

—¿Sabes por lo menos su apellido?

—No, mi mamá no me ha querido decir y es mejor así, mira como se pone por tan solo mencionar el tema.

—Lo siento mucho, arruiné todo, y además puse triste a tu mamá, soy una idiota.

—No eres una idiota—tomó mi mano— De hecho, creo que le agradaste mucho.

—Eso espero—sonreí y el hizo lo mismo.

—Estas muy linda hoy, bueno, siempre lo estas—dijo divertido.

—Tu también, siempre te ves atractivo—reí y el hizo lo mismo.

Miré el reloj y ya era hora de irme, había quedado en verme con Camila, ya que ella tenía que contarme un montón de cosas, y yo también a ella, creo que me estaba comportando como la peor mejor amiga de todas.

—Me tengo que ir, quedé de verme con Cami.

—Te llevo—se encogió de hombros y caminamos hacía el auto. —Realmente no tengo nada que hacer.

—Gracias—me giré hacía el y besé sus labios—Eres el mejor de todos.

—Te llevaré más seguido si eso hace que me beses de esa forma—sonrió y lo volví a besar.

—Vamos—reí.

Ya en camino hacía la casa de Cami, el ambiente fue divertido, habíamos olvidado lo ocurrido con su madre y estábamos hablando de cosas banales, era agradable estar con él, te podía sacar una sonrisa hacía estuvieses mal, y además cuando el silencio aparecía no era nada incómodo.

—Listo, llegamos.

—Gracias por traerme— me solté el cinturón y besé sus labios—La cena estaba muy rica, y de nuevo discúlpame con tu madre, no quería ser así de imprudente.

—No te preocupes Isabella, tu no sabías— besó mis labios de nuevo—Me encanta besarte.

Sentía como el color subía a mis mejillas, y el sonría coquetamente al ver lo que había logrado.

—Nos vemos en la escuela.

—Adiós Isabella—besó mi mejilla y finalmente me bajé del auto.

El portero del edificio de Cami me conocía bastante bien, y por tal motivo me había dejado entrar, subí las escaleras casi corriendo y finalmente llegué, ¿Porqué tenía que vivir en el ultimo piso?

—Isabella hace mucho no te veía—dijo el hermano de Cami en cuanto abrió la puerta—Ya no eres una niña.

—Eres un idiota Jaden—lo empujé para entrar.

—Que linda vista tengo— dijo y cuando me giré el muy idiota me estaba mirando el trasero.

—Vete a la mierda idiota—sonreí y el rió.

—Me encantas enojada.

—¿Dónde esta Camila? —ignoré su estúpido comentario.

—En su habitación.

Caminé hacía la habitación de mi mejor amiga, ella vivía con su hermano el cual era dos años mayor que nosotras, en verdad cuando no se comportaba como un hormonal de mierda era una persona agradable.

—Camila—golpee la puerta. —Ábreme, no me dejes con el idiota.

Una risa se escuchó al otro y la puerta se abrió.

—Hola—dijo acomodando sus gafas— ¿Qué tal eh?

—Te extrañé, y no sabes todo lo que ha pasado—me encogí de hombros—Pero primero vas a hablar tú.

Me senté en su cama y ella hizo lo mismo.

—¿Prometes no enojarte?

—Claro que no me voy a enojar, a menos que seas amante de mi papá, ahí si me voy a enojar.

—¿Qué? —dijo confundida.

—Pues que no me voy a enojar, a menos que seas de esas chicas que se meten con el papá de su mejor amiga.

—No es eso—me fulminó con la mirada.

—Bueno, entonces empieza a hablar.

—Me gusta Paul—dijo algo tímida.

—¿Te gusta Paul? —ella asintió.

—¡Eso es genial!— chillé— Me emociona mucho, ¿Y ya están saliendo?

—No sé, es que el aveces se comporta tan lindo y luego es indiferente. —suspiró—No sé si tomar la iniciativa o algo así.

Quizás si yo los ayudaba ellos podrían estar juntos, quizás solo necesitaban que alguien les diera un empujoncito a ambos.

—No—dijo.

—¿No qué?

—No vas a interferir, te conozco bien Bella, no quiero que hagas cosas para que estemos juntos.

—¿Porqué? ¿Y como sabías que yo quería interferir?

—Pues te conozco Bella —sonrió— Y no quiero que interfieras porqué quiero que las cosas se den y que no se pongan incómodas.

—Esta bien, como quieras.

—¿Y tú qué? ¿Cómo te fue en la fiesta de ayer?

—¿Quieres la verdad?

—La verdad.

—Entonces toca desde el inicio.

—Tengo tiempo.

—Todo empezó hace años, bueno te haré un resumen, me enamoré de Nicolas LeBauf—ella me miró divertida— Ayer en la fiesta el me confesó que estaba enamorado de mi, pero que no podíamos estar juntos—me encogí de hombros—Y no me dice porqué, pero yo he estado con Wade y ahora estoy confundida.

—Lo sabia— rió. —Siempre supe que sentías algo por Nicolas, pero estaba esperando que dijeses algo, y bueno con respecto a lo de Wade, te diré lo que creo, primero que todo tienes que aclarar tus sentimientos, y cuando ya lo tengas claro debes decidir si arriesgas todo por Nicolas o si simplemente lo dejas ir y te centras en Wade.

—Es que, necesito saber los motivos de Nicolas, porqué esto ayudará a aclarar mis sentimientos.

—Creo que te puedo ayudar, bueno lo investigaremos.

—Lo haremos con Paul, el me dijo lo mismo—dije y ella se sonrojó— Entonces, ¿Me ayudarás?

—Si claro—sonrió.

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Perdón por no subir ayer, es que mi computador anda una mierda y me estresa, ¿les gustaría que subiera un pov de Nicolas? Lo tengo medio listo.