Ya en la sala de recuperación, cargaba a mi bebe con todo mi amor. Ya le había dado de amamantar y muy feliz, Joey entró a vernos.

Los dos nos sonreímos y él se me acercó.

_ ¿Cómo está?

_ Ya se durmió. Acaba de comer

_ Jejeje, que bien ¿Y tú? ¿Cómo te sientes?

_ Feliz, muy feliz – me miró perdidamente.

_ Me alegro tanto que lo estés. Serás una gran mamá, la mejor – lo miré amándolo con todo mi corazón.

_ Mi Joey. Gracias, muchas gracias por esto, por haberme acompañado en el parto y por ser tan bueno conmigo – me miró perdidamente enamorado.

_ Lo haría mil veces más, a cambio de que siempre estés bien Constanza. Yo te amo y solo quiero que tú y tu hija estén bien

_ Yo también te amo. Te he amado siempre

_ Niña mía. Mi amada y preciosa Constanza. Solo quiero cuidar de ambas y estar a su lado – lo miré sorprendida y me emocioné – Quiero, si me lo permites, ser el padre de tu preciosa bebe. Te amo amor mío y solo quiero estar contigo

_ Mi Joey, mi amado Joey – lo abrasé fuerte, muy fuerte y llorando, él amó que yo lo abrasará, y feliz, correspondió a mi abrazo.

_ Yo también te amo. Te adoro – me sonrió con ternura.

_ ¿Entonces es un si mi preciosa? – le sonreí más emocionada y acaricié su mejilla.

_ Si mi vida. Yo también quiero estar contigo. Te amo

_ Y yo, y yo mi preciosa Constanza

Sostuvo con cariño mi rostro en sus manos, y yo pérdida en él, él comenzó a besarme con todo su amor.

Al otro día...

Feliz, corrió a verme al hospital, puesto que luego tendría que irse al estadio, para la prueba de sonido, ya que ese mismo día darían su tan esperado recital.

Yo más que feliz, cargaba a mi hermosa bebe, cuando él llegó con un tierno oso de felpa. Yo lo miré perdidamente y Joey me sonrió con destellos.

_ Mi Joey, eres tú

_ Si mi vida – ambos nos mirarnos con amor y él se me acercó. Yo estaba más que emocionada.

_... Creí por unos segundos que no volverías – acarició mi mejilla.

_ Jamás podría hacer eso y menos cuando sé que tú también me amas. Cariño, solo quiero hacerte feliz, a ambas quiero verlas feliz

_ Mi Joey – lo abrasé fuerte y él estremecido de mi abrazo, me amó con locura.

Luego me sonrió.

_ ¿Ya pensaste en un nombre para ella? – le sonreí con ilusión.

_ Si, se va a llamar Andrea – sonrió con ternura.

_ Andrea, que lindo y dulce – miró con amor y dulzura a mi bebe.

_ Hola hermosa Andrea ¿Cómo está la bebe más bella de todas? – le sonreí enternecida y se la pasé.

_ ¿Quieres cargarla?

_ Si – más sonrió.

La sostuvo con mucho cuidado, y mi bebe en sus brazos, Joey la miró con cariño y comenzó a mecerla. Yo lo miré perdidamente.

_ Shuuu. Hola preciosa. Es tan bonita. Es igual a ti mi vida

_ Mi Joey. Te amo – se me acercó.

_ Y yo te amo a ti. Siempre

Me sonrió con destellos y tomó mi mentón con cariño.

_ Qué lástima que no puedas estar hoy en el recital. Te extrañaré – le tomé su mano en mi mentón con cariño y le sonreí.

_ Yo también te extrañaré. Me hubiera encantado poder estar, pero – ambos miramos a mi bebe y sonreímos.

_ Tranquila. Ella ahora es mucho más importante que cualquier cosa en el mundo. Te prometo que vendré a verte, a verlas, mañana a primera hora – le sonreí con ilusiones.

_ ¿En serio? – me miró perdidamente enamorado y acarició mi mejilla.

_ Se vendrán conmigo. Te lo prometo – lo miré con amor.

_ Confío en ti Joey – me amó más.

_ Te amo

Besó mis labios y yo no queriendo que aún se fuera, lo abrasé fuerte y él siguió besándome.

Las luces se apagaron y él más que feliz, y pleno, comenzó a cantar frente a las miles de personas, que ansiaban verlo a él y a su banda.

Sin dejar de sonreír, miró a todo el público, y con ilusión y mucha, mucha alegría, cantó con todo sentimiento y toda su pasión.

Sin soltar su micrófono blanco, se acercó a la primera fila del público y miró a todos con una sonrisa de oreja a oreja y pensó en nostras con amor. Esperó con ilusiones a que mañana llegará pronto para ir por nosotras.

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