Desperté con un dolor en la espalda debido a que dormí mal, Dante no quiso dejar que durmiera en el sofá, así que dormí con él y quedé adolorida. Con respecto a lo de anoche, no se quien carajos lo hace, pero debe ser alguien que me conoce, porque solo nosotros sabemos que quiero matar a Will.

- Buenos días.- Le di un beso en la frente a Dante.

- ¿Acaso tu no duermes? Son las 6. Espera un ratito más.- Me abrazó y me echó para atrás.

Me eché para adelante.- La verdad no duermo, pero esta vez es porque tengo que irme, necesito irme a la empresa. Ando planeando la fiesta.- Me miró extrañado.

- ¿Qué fiesta? ¿Para mi?- Exclamó asombrado.

- No, es para celebrar la caída de Will.- Musito un Demonios, apenas audible.

Me fui directo al baño, y me cepille los dientes. Agarre las llaves del coche y salí.

- Nos vemos más tarde.- Le di un abrazo y me fui.

Me monté en el auto y me fui directo a la casa a alistarme, debía estar en la empresa a las 9.

***

Llegue a la empresa y ya tenían las tarjetas, más tarde le diría a Tony que las mandara.

- Sam ¿Como va todo?- Le pregunté a la peliroja.

- Muy bien Megan, mejor de lo que pensábamos, a los inversionistas les gustan nuestras propuestas, y quieren lanzar al mercado todo lo que les propongamos. Dicen que es bueno que una empresa sea dirigida por mujeres, y jóvenes.-Estaba muy feliz se le notaba, ella hacía su trabajo demasiado bien.

- Te felicito Sam, con todo esto de Dante ando apartada de la empresa.- Le tome la mano.- Pero se que dejé a cargo a la mejor.

- Muchas gracias Megan, no te defraudare.- Dicho esto se fue por el pasillo.

Caminé hasta mi oficina, para empezar a llamar al banquete y al decorador.

Cuando entré me conseguí con Alejandro.

- Tenemos que hablar.- Estaba serio.

- ¿De qué?- Me hice la que no sabia nada.

- Están pasando cosas en mi vida muy extrañas, necesito tu ayuda.-Me acerqué a él y tome su mano, tenía los ojos rojos.

- ¿Qué pasa hombre?- Estaba exasperada no soltaba nada.

- Mi mamá...- Tomo un poco de aire.- Esta viva.

Abrí los ojos.- ¿Cómo puede ser eso posible?

- Mi padre la encerró en un psiquiátrico.

- ¿Y por qué?- Esto de mentir se me daba bien.

- Por una traición.- Me miró tanto, que sentí que era una pequeña indirecta para mí.

- No se que decirte.- Me aparte y fui a agarrar una taza de café.-¿Quieres?- Le ofrecí la taza.

- Claro.- La tomo y se la pego en los labios.- Está caliente.

- Pues ni modo que va a estar frío.- Rode los ojos.

- Mentirosa y sarcástica.- Tomó un sorbo de café.- Una delicia.

Me tensé al instante, ¿Qué carajo me pasa?

- Vengo a hacerte una propuesta.-¿Ah?

- A ver, dime.- Tomé de mi café y me senté en el sofá. Quedamos frente a frente.

- Acompañame a un viaje.- No me estará jodiendo.- ¿Aceptas?

- ¿A dónde?- No demostré lo confundida que estaba.

- A España. Tengo que visitar unos inversionistas. Y aprovecharé para dar un paseo, pero quiero ir contigo.- Se acercó a mí, y me entregó la taza. Y me susurró al oído.- Estaba rico.

- Lo hice yo, ¿Qué esperabas?- Se sentó a mi lado.- Bien, vamos.

- ¿De verdad?- Me miró extrañado.

- De verdad.

Esto tenía dos objetivos: Uno, conocer los inversionistas y tratar de convencerlos a que se vengan conmigo sin que él se de cuenta. Y dos, conocerlo mejor.

- Mañana nos vamos.- A la mierda.

- ¿Tan pronto?

- Si señorita.- Recibió una llamada. Y se paró para atender.-Dame un segundo.

Esto me parecía una maravilla, todo estaba bien hasta ahora, sacando los anónimos, me tenían cabreada hasta más no poder.

- Me tengo que ir, tengo que ir a la empresa urgente.- Me dio un beso en la mejilla y salió prácticamente corriendo.

- ¿Ok?- Me dispuse a llamar a los del banquete.

Arregle todo con ellos, la fiesta sería en 3 días.

Cuando estaba a punto de irme, mi teléfono sonó. Número desconocido, ¿Qué más puedo hacer?

- ¿Aló? ¿Quién habla?- Lo se, estoy loca.

Solo se escuchan jadeos, y sollozos.

- Espero que no sea una broma de mal gusto, porque soy capaz de...

- Megan...-Era Lucía, y estaba llorando.

- ¿Lucía? ¿Por qué lloras? ¿Qué pasa?- Hablé rápido, para que me pudiera contestar.

- Megan... Alexandro... y tú.- Jadeó un poco.- Son... hermanos.

Quedé en shock, ¿Mi hermano? No puede ser, claro que no. No me pude haber besado con mi hermano.
Me cago en la puta madre que los parió.

- Nada...es...lo que- Habló lentamente.- Lo que parece.- Todo quedó en silencio.

- ¿Lucía? Hablame por favor.-Cuando estaba apunto de hablar.

- NOOO.- Y sonó un disparo.

Esto no puede estar pasando, me fui corriendo hacía el ascensor, necesitaba hablar con Tony, teniamos que descubrir que le había pasado a Lucía. Y si... Alexandro y yo eramos hermanos, el simple hecho de pensarlo me daba repulsión.
Pero ¿Por qué dijo que nada es lo que parece?

HOLAAA MIS PERSONITAS PRECIOSAS♡
¿Que les pareció? Pobre Lucía :/ ¿Quien estará detrás de todo esto?

Espero tengan un lindo día :3 Y que su crush les pare♡

Quiero llegar a las mil vistas. Ayudenme con esta meta,y les prometo MARATÓN xD Con algunas sorpresas ;3

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