17. Mi pequeño ángel roto
Era como marea. Cada vez que se acercaba, sabía que era sólo cuestión de tiempo antes de que se alejara aún más. Él no pudo evitarlo. Era sólo lo que era. No iba a ser yo quien lo cambiara, y no quería hacerlo.
(J.A.)
* * *
-Hola, Isabelle -dijo Alice, después de un largo silencio y una intensa mirada, durante la cual Izzy se negó a mostrar su nerviosismo, aun cuando lo que quería era retorcerse y huir. ¿Por qué las madres tienen esa mirada como si supieran todo lo malo que has hecho en tu vida?
-Hola... uh... Directora... -esta bien, tal vez sus nervios sí se notaban.
Alice sonrió e Izzy pudo relajarse un poco. -Dime sólo Alice. Veo que Alexander ha decidido por fin volver. ¿Qué lo hizo, después de dejar claro que ya no quería esa amistad y desaparecer durante cuatro años, querer volver de repente?
Izzy miró sus manos. No sabía si debería decir la verdad, porque era un secreto de Alec, no suyo, pero sospechaba que -como toda madre- Alice quería lo mejor para Magnus y no estaría de acuerdo en que Alec volviera si era sólo para herirlo.
-Fui informada de nuestro pequeño invitado temporal, de Max Lightwood. No tengo ningún problema en recibirlo, ya sean verdad o no las razones que dieron. Y Alec sabe cuánto lo quiero, él y Magnus fueron mis pequeños ángeles favoritos durante mucho tiempo, pero Magnus en mi hijo y no quiero que Alexander vuelva a jugar con él. Magnus ha sufrido mucho, por el abandonó de sus padres...
El ceño de Alice se frunció. "Mami me dejó. Papi no me quería" había dicho Magnus a Alec aquella primera noche. Y él muchas veces lloró y les repitió las palabras de su madre biológica: "Tus ojos son feos, como los de un gato, como los del maldito de tu padre."
Alice y Bianca habían investigado, Magnus era hijo biológico de la mujer, pero no del hombre, por eso es que su "papi" no lo quería, y la mujer no lo quiso cerca porque le recordaba a su padre biológico. Al hombre que había abusado de ella. Fue por eso que, con apenas tres años, lo abandonaron en Pequeños Ángeles.
-...después la adopción de Alec y Jace, y él esperó, sabes que siempre lo esperó sin olvidar. A veces, cuando crecemos, olvidamos mucho de nuestra infancia, Magnus no, Magnus guarda cada detalle de su vida con Alec. Tu hermano volvía y parecía que nunca era para quedarse. Y al final, cuando parecía que por fin estarían juntos, tu hermano decidió irse. No sé sus razones, pero sé que las tuvo, porque un niño como Alec no pudo ser tan cruel sin una buena razón, pero eso no evita el dolor de mi hijo, Isabelle. Me destrozaba, nos destrozaba a Bianca a mí, cómo lloró los primeros días y después cuando se rindió fue mucho peor. Sólo Max y Rafa, bebés en aquel entonces, lo hacían sonreír. Y lo único que lo hacía salir de la cama era la escuela, sus deseos de ser profesor. Creo que de otro modo...
Un sonido al otro lado de la puerta las interrumpió.
Era Alec. Alec había escuchado toda la última parte sin querer. Su culpa y su dolor creciendo. Magnus había sufrido por él. Él había sentido su corazón romperse cuando accedió al chantaje de Robert, pero no pudo demostrarlo, él tenía que fingir estar bien porque "había sido su decisión alejarse" y, por lo tanto, no debía afectarle. Él había guardado su dolor, sobre todo cuando veía a Maryse durante su embarazo y cuando nació Max, supo que hizo lo correcto, pero Magnus, Magnus no ocultó cuánto dolió. Y era su culpa.
Alice abrió la puerta y se encontró ahí a su pequeño ángel, tan frágil, tan roto, como cuando niño. Ella podía querer proteger a Magnus, pero no podía evitar el cariño por Alec. Ella negó, sabiendo que algo pasaba aquí, y envolvió a su ojiazul en sus brazos. -Ay, Alec.
Pasaron a la dirección y, después de una seña, Izzy salió.
Alice se sentó al lado de Alec, sin dejar de abrazarlo. Como cuando su niño lloraba porque iba a tener una cicatriz, como cuando quería chocolates o flores para Magnus, como cuando se casaron sus angelitos para que no los separaran.
-Está bien, Alec. Está bien. Llora. A veces hace falta -ella le habló con cariño, mientras frotaba suavemente su espalda.
¿Por qué Alec, teniendo una familia, parecía que estaba tan solo y roto?
Alec lloró, tal vez lo que llevaba guardando cuatro años y pudo sacar -sólo un poco- con Izzy. -Lo s-siento -sollozó Alec-, lo siento. Y-yo...yo... Yo no q-quería...
Alec no pudo seguir y Alice esperó paciente hasta que pudo volver a hablar, hasta que estuviera listo para hacerlo.
Alec, con la nariz y ojos enrojecidos, y las mejillas húmedas, se separó unos minutos después. -Lo siento. Obviamente tú estás con Magnus y no vas a creerme nada. No debería estar llorando aquí, ya no soy un niño. Lo hombres no...
La mirada de Alice lo hizo detenerse. -No se te ocurra terminar eso. ¿Sabes? Dejarlos ir con Robert Lightwood fue lo más difícil que he tenido que hacer, eso y verlos a ti y a Magnus separarse. Ustedes, mis niños, eran como un solo corazón. Verlos juntos hacía creer en el amor real. No hace falta crecer y tener un romance para que sea amor, ustedes se querían y era tan puro que, incluso como adulto, yo quería algo así. Y siempre supe que Robert los iba a cambiar, confíe en que Maryse haría algo, ahora veo que no. Él metió sus pensamientos en ustedes. Alec un hombre puede llorar, cualquier ser vivo puede cuando hace falta, cariño -ella limpió las mejillas de su pequeño ángel.
-¿Por qué no me odias? -los labios de Alec temblaban-. Yo lastimé a Magnus. Mucho. Tú lo dijiste.
Alice lo miró fijamente. -¿Querías hacerlo? ¿Querías herirlo y saber que sufriría?
Alec negó varias veces. Sus ojos ya con nuevas lágrimas. -Claro que no. Yo lo quería. Lo quiero. Yo lo amo, desde niño, desde antes de saber lo que en el mundo adulto significaba un beso o un te amo. Nunca quise estar lejos de él. Yo nunca quise irme.
Ella tomó su mano. -Dime qué pasó entonces y por qué vuelves hasta ahora. ¿Por qué esperaste cuatro años, Alexander?
Alec no lo dudó, le explicó lo que Robert le había dicho. Alice estaba furiosa para cuando terminó. -¡Alexander, tu madre tiene que saber esto! Maryse no estaría con él si supiera. Ella te quiere, Alec, aunque no lleves su sangre sé que te quiere.
-¡Y yo a ella! Por eso no puedo decirlo. Ella es feliz ahora, parece que Robert la trata bien a ella, igual que a Jace. Somos Izzy y yo el problema, cuando ella sea mayor de edad podremos irnos. Pero él podría hacer lo que amenazó, él tiene dinero, puede quitarle a Max. Eso la destrozaría.
-Oh, Alec. Tú eres un ángel entre demonios. ¿Por qué no nos contaste? A mí o a Magnus. Lo habríamos entendido. ¿Por qué hasta ahora?
-Mi castigo supongo que sería una vida sin Magnus. Yo también lloraba, ¿sabes?, sólo que cuando nadie veía. Yo también sufrí y recuerdo todo, nunca olvidaría a Magnus, pero pensé que él me odiaba, y con razón, o que ya no quería saber de mí. Supuse que ya no dolía tanto, que podía seguir. Pero entonces el destino puso a Magnus de nuevo en mi camino y me di cuenta que no, que siempre estaría vacío sin Magnus, sin mi corazón.
Alice sonrió. Los recordaba preguntándose "¿Cómo está mi corazón?" y tocando el pecho del otro.
-Magnus no sabe esto, ¿cierto? Él no me ha dicho nada.
Alec negó. -Hablé con Izzy, sé que ella es menor, pero... Si le digo a Magnus, podría pensar que me escudó en ello, o podría perdonarme porque yo era un niño y no sabía lo que hacía, por lo recuerdos podría olvidar o intentar olvidar cuanto lo herí, pero yo no quiero eso. No quiero que me acepte de nuevo por lo que tuvimos, aunque fue lo más bonito de mi vida, yo quiero una nueva oportunidad ahora, una nueva historia con estos que somos y no sólo por el pasado. ¿Me explico?
Ella asintió y prometió, igual que Isabelle, no intervenir. Magnus y él eran los únicos que decidirían si todavía podían estar juntos o eran sólo recuerdos.
-¿Alec? -preguntó ella, cuando Alec ya estaba por abrir la puerta-. Creo que te falta pedirme algo...
Alec frunció el ceño.
-Cuando eran niños, entiendo que lo decidieras por un impulso...
Alec seguía sin entender. -¿Qué?
Alice sonrió. -Esta vez, si hay boda, tienes que pedir su mano.
Alice soltó una carcajada cuando Alec se ruborizó.
CONTINUARÁ...
No sé si en la primera parte prestaron atención a lo de los ojos de Magnus, lo que su mamá le decía, y que el papá no lo quería... Y bueno, esa era la razón 😭 *para quienes preguntaron sobre el padre de Magnus*
¿Habían olvidado que tan linda es Alice? ❤
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