"Quemando etapas"

Leon smith

Salimos del agua cuando vimos que Eider y Adasme habían llegado, nos acomodamos en la arena y comimos rápidamente.

Pasamos la tarde llenos de conversaciones y sonrisas, cada uno tuvo un momento con uno de los gemelos, yo puse al día a Eider y Hope supongo que hizo lo mismo con Adasme.

Cuando comenzó a atardecer ambos miramos el atardecer juntos como si fuésemos la pareja más feliz del mundo, mientras los mellizos guardaban las cosas en el jeep.

Ambos aprovechamos un descuido de ambos para besarnos y despedirnos de aquel lugar donde había comenzado nuestra promesa.

Hope pasó a dejarnos a casa y ella se marchó a la suya.

Me sorprendió ver un mensaje con una foto adjuntada en mi chat, estaba ella solo en ropa interior.

El mensaje decía:

" este será mi conjunto para nuestra primera noche"

No pude evitar sonreír e imaginar mis manos rodeando su cuerpo, quitando cada prenda que cubra su delicioso cuerpo.

"eso que haces se considera tortura Hope, no seas traviesa."

Escribi respondiendo su mensaje.

"si quisiera torturarte creeme que esto no está ni cerca de ser mi método"

Mordí mi labio imginando su forma de torturarme y deje el celular en la cama.

Dormí como nunca, soñando en aquel fin de semana que se venía para nosotros, joder, quería hacerla mía, pero quería que todo saliera perfecto.

Realice un par de llamadas mientras manejaba a la preparatoria.

Vi a Diego a la distancia con un cigarrillo encendido, Hope llegó junto a los gemelos en su nuevo coche y no pude evitar ver como todos la miraban.

Venía con el uniforme de la preparatoria, su corta falda dejaba ver sus hermosas y largas piernas.

—Joder, si no fuese como tu hermana te juro por mi vida que me la cogeria cada vez que se me diese la oportunidad.

Le quite el cigarrillo de la boca y lo pise.

—No me hace ni puta gracia.

—Tío la defiendes más que a Adasme, si no fuese porque te conozco juraría que te la cojes.

No me la cojo, pero te puedo jurar que de este fin de semana no pasa.

— A adasme la proteje Eider.

Eider llegó a nuestro lado y caminamos a nuestro salón.

Hope se sentó donde siempre y todos los babosos a su alrededor, ella al igual que Adasme eran muy guapas, y sabía pero intentaba hacerme el ciego de sus conquistas, sabía que mi hermana ni Hope eran niñas, sabía que ambas sabían protegerse, pero reconocía que de cierto modo alejaba a los gilipollas de Hope por celos.

El último imbecil con el que se acostó, sabía quién era, y era nuevo en la preparatoria, por eso no sabía las reglas del lugar, nadie habla de ella.

No había escuchado ningún rumor, pero sabía que en algún momento alardearia de que se follo a mi preciosa pelirroja, y era lo que yo esperaba para partir le la cara.

Salimos de clase y me fui con los puños apretados sabiendo que no había logrado golpear a ese gilipollas.

Llegamos a casa y Hope entró directo en mi habitación, quedé sorprendido al ver que se desnudaba.

— ¿que haces? — sonreí notando cómo mi ereccion aumentaba.

— Quiero mostrarte algo, para saber si te gusta para meterlo en la maleta el fin de semana.

Mordí mi labio inferior viendo que llevaba un conjunto de ropa negra, que se ajustaba a sus muslos, junto con unas ligas, era todo encaje, podía notar sus pezones bajo aquella delgada tela que cubría sus senos.

— ¿"Te gusta?

Se giro para darme una buena vista de su trasero y aquella pequeña tela que se metía entre sus muslos.

Me acerque cegado por la provocación, la bese suavemente y ella comenzó a recorrer con sus manos mi cuerpo.

— Se que prometí que nuestra primera noche juntos sería en aquel hotel. En aquel viaje, pero joder Hope, me la estas poniendo difícil.

— digimos que nuestra primera noche de sexo sería en aquel viaje, pero podemos quemar etapas.

— ¿quemar etapas? — pregunté en un susurro mientras mi mano tocaba su trasero.

— podemos llegar hasta aquella gran base del sexo oral. — la mire con malicia, y ella me miró con lujuria, definitivamente hope sabe lo que quiere y claramente no es la niña que me empaña a en ver.

— no se que tanta fuerza de voluntad tenga, teniendote así en mi cuarto.

— pongamos a prueba tu fuerza de voluntad.

Sus manos quitaron mi camiseta y comenzó a besarme, sus besos bajaron por mi cuello y llegaron a mi pecho, mordió algunos de mis abdominales hasta llegar a la pretina de mi pantalón.

Gemi al sentir su toque en mi polla dura, tocó la punta encontrando el líquido preseminal, sacó su mano y lamio aquel dedo y saboreó sus dedos y gimió.

Joder era lo más erotico que mis ojos podían ver.

Me descontrole, la tomé del cuello y la arrastre a mi cama.

La bese con desesperación, bese sus pecho sobre el encaje y ella gimió en mi oído. Quería verla venirse, si no podía hacerla mía, al menos le daría el orgasmo de su vida, lograría que olvide a cada tipo que pasó por su cuerpo.

Baje el encaje de su brasier y mordi directamente su piel, sabía que dejaría marcas, peor no me importaba.

Baje por su abdomen y llegue a sus bragas, mis manos se colaron en aquella pequeña tela.

Sus manos se colaron en mi pantalón nuevamente, me moví para poder controlar mis malditas ganas, si ella me seguía tocando perdería los papeles.

De cierto modo ya los había perdido, rompí sus bragas de encaje. Lo que fue muy facil, ya que eran sólo una pequeña tela de encaje.

Abrí sus piernas viendo lo perlada que estaba por la humedad, sin piedad me lance directamente a morder aquella parte que sabía que las volvía locas.

Ella gimió y se levantó de la cama, dejándome con ganas de seguir probando su sabor.

— Estirate en la cama — ordenó y yo obedeci.

Quito La ropa que me quedaba, ni siquiera había notado que aún no me desvestia, cuando quito mi pantalón y mi bóxer me dio un lameton en aquella hendidura que me hizo temblar.

— Quiero seguir probandote Hope. Por favor.

—entonces tenemos un problema, yo también quiero probarte.

—¿35+34? — propuse y ella mordió sus labios asintiendo.

Se monto sobre mí, con su delicioso coño en mi boca. Antes de que logrará acomodarse, yo lami de forma fuerte y ella gimió.

Se apoyo sobre mi cuerpo y tomó mi ereccion y temble.

Esto era una mala idea, me correría en su boca en instantes.

Mi nuevo objetivo era que se corriera en mi boca antes de que ella lograse aquella explosión en mi.

Lami como si solo tuviésemos 5 minutos para corrernos, dedique mi lengua y dientes a ello.

Mordí , succióne y lami haciendo que sus piernas tiemblen, estaba en la cima, y yo era la razón de aquello.

Seguí con aquello hasta aquel punto que ella se distrajo de lo que hacía en mi, y se dedico solo a disfrutar.

Separe sus labios y busque un mejor acceso a sus deliciosos jugos, joder era exquisita.

Tembló cuando llegó al orgasmo y se corrió en mi boca. Ella callo sobre mi cuerpo e intente sacarla para que se acomodar a en mi pecho. Ella no lo permitió, se recuperó como la reina que es y su boca volvió a mi polla que aun seguía dura.

Chupo y temble ante la sensación, tocó mis testículo mientras jugaba con su boca en mi pene, me deje llevar en segundos cuando ella succióno mi glande de forma poderosa.

—Hope... joder.. Voy a... — mi semen lleno su boca sin que acabase aquella frase. Ella se trago cada gota y beso suavemente la punta antes de quitarse de encima de mi cuerpo.

Ella se levanto y la tome y la acomode en mi pecho.

—Aquello fue grandioso.

— Lo sé, pero necesito que te vistas porque así desnuda eres demasiada tentación.

Ella sonrió con malicia y yo negué con la cabeza, le daría la mejor noche de su vida en aquel hotel, ya me había dejado llevar por mis ganas, pero no volvería a pasar, ella quito sus bragas rotas que aun estaban envueltas en su cadera y las lanzó en el cesto de la basura de mi cuarto de baño.

—Creo que el conjunto ya no sirve para el viaje.

— Lo siento — dije sin lamentar nada.

—Se que no lo sientes, y la verdad es que yo tampoco.

Ambos sonreímos, ella se vistió y yo hice lo mismo, la acomode en mis brazos y se durmió agotada por quemar etapas.

Me salí de la cama y la dejé durmiendo, cuando salí al pasillo y baje las escaleras me tope con Eider, el me miró con malicia, y sabía que nos había oído.

— Te hacía disfrutando de Hope.

— Joder no puedo seguir durmiendo a su lado, me tienta demasiado, y debo entregarle la noche que se merece.

— espera, ¿si no la hiciste gemir de sexo que pasó arriba?

—Quemando etapas — sonreí y lami mis labios y el entendió.

—Hermano, admiro tu fuerza de voluntad.

—Papá nos enseñó a que debemos tratarlas como reinas, y te juro que casi me ciego por la calentura, estuve a nada de despertarla y hacerla mía. Sin importarme el momento y el lugar.

—Por favor León, papá nos enseñó algo que claramente no puso en práctica — nos señaló a ambos y yo sonreí. — ¿haz logrado saber algo más de tu madre biológica?

— Se lo mismo que sabes tú, el estuvo con mi madre biológica cuando no estaba con mamá, lo poco y nada que me contó, fue que tuvieron una noche de sexo, ella volvió avisando que estaba embaraza y obvio el lo dudo, cuando nací hicieron la prueba de Adn, mi madre murió dando a Luz.

—Y mientras tu madre biológica te gestaba el seguía con mamá y se encargaban de traernos a nosotros al mundo — dice refiriendose a él y a nuestra hermana.

—El amor perdona muchas cosas, por eso admiro tanto a mamá, ella fue capaz de perdonar y formar una nueva base para aquella relación, puedo notar como se aman.

— Sabes, me gustaría saber quien era el prometido de mamá cuando papá apareció en su vida. — ambos sonreímos.

—Jamás no los dirá.

— Crees que lo conocemos.

—Jamás lo había pensado.

— Podríamos preguntarle al tío Aitor, el siempre es el que nos cuenta las historias del pasado — ambos sonreímos y caminamos a la cocina.

Hope bajo cuando ambos comíamos un coctel de frutas y conversábamos de la vida de nuestros padres.

—Creo que iré a casa a terminar la maleta.

Yo me pare de la mesa y la bese en los labios.

— En la noche prepararé la mía.

Ella sonrió y se despidio de mí hermano.

—Suerte cuñadita —

Ella sonrió y se marchó.

—Te tiene loco — Suspiré y asentí.

—Fue la mujer que siempre desee.

—Espero que cuando ya sea tuya aquel deseo no desaparezca, ambos sabemos que papá y tío Cris te mataran si le haces daño—

— Lo sé, le prometí exclusividad — mi hermano abrió los ojos.

—Me estas jodiendo.

—estarán en una relación oficial, ¿se lo dirás a nuestros padres?

—Será una relación en secreto, ambos somos exclusivos mientras esto perdure.

— espero que esto no se salga de tus manos hermano.

— Espero lo mismo. — suspiré sabiendo lo difícil que sería esto.

—No puedo creer que Hope sea la mujer que consiga tu exclusividad.

—gilipollas — lo golpee.

— en realidad no se porque me sorprende, siempre fue ella ¿no?

— Como vas tu con la búsqueda — el sonríe y entiendo que hay alguien.

Con Eider a pesar de que éramos ambos unos mujeriegos, siempre buscamos aquella persona que nos diera vuelta la vida, así como a papá y al tío Cristóbal, mamá y tía Nora habían llegado a la vida de ellos cuando ambos estaban perdidos en las noche de sexo sin repetir.

Ellas llegaron, dieron vuelta su vida, y fueron el motivo de exclusividad, digamos que por las historias que cuenta tío Aitor, a papá claramente le costó más, y nosotros éramos la prueba viviente de ello.

—Ese silencio es peligroso, cuanta e quien es?

— Es una amiga de Adasme — sonríe de forma carente — Pero supongo que los rumores sobre nosotros no la dejan ceder ante mi.

—¿La nueva amiga de Adasme?, ¿la que fue a la fiesta de Hope?

—Si, joder hermano, no se como acercarme a ella.

— ¿no lo has intentado?

—Claro que sí, la bese aquella noche, pero dijo que no quería ser una más de la lista. De hecho me gane un golpe de Adasme, porque no ha venido a casa desde esa noche.

—Tío, esa chica te lo pondrá difícil.

— Lo sé, pero los Smith jamás nos rendimos — yo sonrei dándole la razón y me encamine a mi cuarto.