Pov. Ruby

Ya era un poco tarde pero parecía que esta reunión nunca acabaría.

Wallace y Winona organizaron una reunión entre todos aquellos que visitamos a Sapphire para relajarnos y celebrar que todo salió sin problemas en Ciudad Arborada...era lo que todos pensaban menos el profesor y yo.

Después de las inesperadas noticias de la enfermera, lo único que hago es pensar y perderme en mi mente, llamando la atención de algunos. Ahora que ya se acercaba la media noche, el tema de conversación se había ido y no sabíamos qué hablar, estaba a punto de pensar en aquel video hasta que Blue-senpai me habló.

-Oye Ruby,¿cómo van las cosas con Sapphire?- gracias a su comentario, los demás comenzaron a mirarme diciendo "uuuuuuuuhhhh" y el calor se subió a mi cara.

-No sé a que te refieres, ella es mi amiga- logré responder desviando mi mirada hacia un lado.

-Aww vamos Ruby- Respondió de nuevo Blue-senpai- Ya no debes negarlo más si han pasado 5 años y es raro que no recuerdes esa confesión todavía - y todos comenzaron a asentir con respecto a la opinión de Blue.

Bueno, luego de 5 años ha sido difícil disimular aquella amnesia pero cada día comienzo a temer que la puedo perder, Blue-senpai está en lo correcto, a pesar de tener 20 años y yo 16 no le niego su palabra (por región nos llevamos por 2 años comenzando por los de Kanto que tienen 20, seguidos de Johto con 18, nosotros de Hoenn con 16 y los dex holders de Sinnoh con 14).

Solté un bufido y todos se alegraron que ya no podía mentirles.

-Ha sido difícil, en especial esta ocasión que estuve a punto de perderla...Pero, no me siento preparado para protegerla y alegrarla- comencé a mirar el suelo a la vez que la gran mayoría me imitaba o miraban con pena, una mano se apoyó en mi hombro y al ver al dueño me encontré con la mirada de Winona.

-Ruby, no debes tener miedo, todo este tiempo Sapphire comienza a deprimirse, esa sonrisa que tenía antes que se enterara de tu supuesta amnesia está desapareciendo. De lo que estoy segura es que todavía tienes la oportunidad de contarle la verdad y explicarle de tus miedos- me dijo ella al mismo tiempo que me dedicaba una sonrisa.

-Tiene razón Ruby- escuché de Wallace y lo miramos- Ustedes tenían apenas 11 años y ahora que han pasado 5 años han adquirido una mayor madurez y que te pueden ayudar a tomar decisiones y confiar más en ti mismo es cosa de tomar val...-

¡RING! ¡RING!

Noté que mi pokegear sonaba y me sorprendí un poco al ver que era el profesor Brich que me llamaba, contesté inseguro y dejé el aparato en mi oreja.

-Ruby...-el profesor jadeaba y se le notaba un poco cansado- ...hay problemas...me llamaron del hospital... el cuarto de Sapphire explotó. -

Unos minutos después...

Gracias a la ayuda de los pokemon de Sapphire que me ofrecí a cuidar, Pilo me llevaba a Malvalona con la mayor velocidad en la noche estrellada de Hoenn seguido de los demás dex holders que trataban de igualar mi velocidad. Pasó un rato y ya pudimos distinguir el hospital en la ciudad.

Al llegar no necesite estar más de un minuto fijando mi atención en el hospital para distinguir una ventana de un piso superior destrozada y con cintas amarillas que decían "peligro" a su alrededor. Subí por las escaleras hasta el piso donde estaba su habitación (n°5), al llegar a este vi al Profesor Birch esperando afuera de su habitación y al verme se acercó enseguida con un rostro preocupado y cansado.

-Que bueno que llegas Ruby, ¿dónde están los demás? - dijo él y miró a todas las direcciones sin encontrar a los dex holders y a los lideres de gimnasio.

-Vine lo más rápido que pude y me adelanté mientras pasaba el rato, necesito saber qué sucedió profesor- respondí yo muy preocupado y sentí un golpe pequeño en mi cinturón, encontrando a los pokemon de Sapphire llamando mi atención, mostrando en sus caras la misma preocupación que yo y los liberé para tratar de ayudar.

-Nadie sabe que sucedió realmente, la policía y el departamento de investigación entraron y no me permiten entrar...No puedo comprender...no sé donde está mi hija...¿Qué pasa si terminó herida?- el profesor comenzó a agacharse y a mover su cabeza de un lado para otro, aquellas ideas eran muy supositorias y no había que desesperarse. Decidí apoyarle dejando mis manos en los hombros del profesor.

-Tranquilo profesor, si a su hija le sucedió algo así o incluso peor, a ella no le gustaría verlo en el estado que se encuentra, ella es fuerte y usted debe demostrar que también puede ser fuerte- le respondí tratando de sonar tranquilo. El Profesor permaneció en silencio unos segundos, luego se levantó, caminó rapidamente a la habitación de Sapphire y abrió la puerta de una patada mientras yo lo miraba sorprendido y los pokemon le seguían, así que reaccioné y le seguí.

Cuando entré a la sala me encontré con varios policías y detectives mirándonos sorprendidos. Observé cada uno de los investigadores hasta distinguir a uno de ellos con el pañuelo azul de Sapphire que yo le hice hace mucho tiempo. Al igual que el profesor, la buscamos en toda la sala sin encontrar algún rastro de ella(aparte de su pañuelo).

-Lo lamento caballeros- dijo una voz proveniente de la puerta, me doy vuelta y veo a una persona con una vestimenta azul, un gorro del mismo color, cinturón con pokeballs, una pistola, y un rectangulo pequeño de un tono dorado que decía "capitán de la policía" en el pecho derecho de su camisa. Dio una pequeña pausa observando la habitación destruida, luego nos miró y de un bolsillo de su vestimenta sacó un objeto rectangular destruido y rojo;una pokedex -Esto fue lo único que se pudo encontrar además del pañuelo que posee mi camarada, la joven que aquí descansaba no ha sido encontrada-

Esas últimas palabras se repetían en mi mente cada segundo que pasaba "no ha sido encontrada"

..."no ha sido encontrada"...

..."no ha sido encontrada"...

..."NO ha sido encontrada"...

Sin darme cuenta, lágrimas caían a través de mis mejillas, mis piernas comenzaron a caer al punto que ya no pude estar más de pie y caí enseguida al piso al igual que la ley de gravedad.

-...N-no...no puede ser...¡Digame que es una mentira!- miré al profesor que apretaba con fuerza el cuello de la camisa del capitán, sus lágrimas caían sin control mientras él miraba indiferente su acto, aquel momento me hizo pensar acerca de cuántas veces ha presenciado el mismo momento.

Los pokemon de Sapphire se acercaron a su paño que un investigador dejó en la que antes era una cama, mirando con nostalgia el objeto perteneciente a su entrenadora. Pasados unos segundos Toro llamó la atención de todos al correr y saltar por la ventana, seguida de Rono, Pilo(que obersaba desde la ventana) y Dono, ya que Walo y Relo se encontraban habitando en el mar. Me acerqué a mirar su dirección, avanzando con rapidez a las afueras de Malvalona, hasta el río que si cruzas te podrás dirigir más al este de la región.

Mi mente ya no sabía si seguirles o acompañar al profesor, lo que quedaba de la noche fue doloroso para todos. Los demás que estabamos en la reunión llegaron luego de un rato, a quienes se les tuvo que informar nuevamente, recibiendo a más personas en el mismo estado que yo;la mayoría estaba en mal estado a pesar de algunos que trataban de mantener la compostura. Cuando estaban distraídos, fui a su cama donde posaba su pañuelo, miré con atención a mi alrededor y guardé la tela en mi bolsillo, me despedí de los demás y me fui del hospital hacia mi casa.

En villa raíz, le agradecí a Pilo por llevarme a varios lugares y aceptar mis favores con varios pokecubos y caricias, entré a mi casa ignorando las preguntas de mis padres sobre el estado de ella en el hospital, pero ya no quería comentar más acerca del tema.

Entré a mi habitación, mirando el lugar en las mismas condiciones que estaban al amanecer de hoy, mis pokemon salieron y me miraron preocupados.

-Perdonen si los he preocupado- contesté -Ha sido un día difícil para todos, ya es momento de descansar- todos me miraron algo inseguros, pasó un rato y cada uno fue a sus respectivos cojines a dormir. Debido a la situación, ya sé que no podré dormir y me fui a sentar a la ventana que dejaba a la vista toda la villa y los árboles que estaban a la redonda, donde podías ver a los pokemon durmiendo, a los volbeat e Ilumise bailando al compás de la luna,a los pokemon nocturno paseando con tranquilidad. Todo ese paisaje me hizo recordar lo que he aprendido de Sapphire y del bosque a través de estos años; nuestra apuesta, las peleas, la aventura, las risas, el desastre, la paz en Hoenn. No podía creer lo mucho que he aprendido de ella; tan salvaje, amante de la naturaleza, alegre y energética que sin importar su gran cambio sigue conservando a esa pequeña niña con la que una vez jugué hasta agotarme.

Miré a mi alrededor y con un poco de duda saqué su pañuelo, y al igual que la otra tela roja, las usaba con mucha frecuencia al nivel donde era extraño verla sin ellas. Recordando esto miré un closet de mi habitación, con un aspecto algo viejo y pasado de moda con su madera muy ennegrecida y pomos con algo de polvo. El mueble guardaba aquellas cosas que ya eran de un pasado y que no quería botar, me levanté para echar un vistazo y pude encontrar cosas como cajas llenas de polvos con titulos como "libros", "apuntes", "fotos"...Pero una de estas cajas acumuladas estaba en buen estado, decorada con papel azul, detalles de un zafiro brillante, y estaba sellada con una cinta roja con mucho cuidado. A decir verdad no me sorprendía su presencia en este viejo mueble, fue algo intencional para esconder este regalo en caso de Sapphire modo curiosa, justamente este presente sería su regalo de cumpleaños dentro de unos meses pero debido a este accidente pensaba entregárselo apenas volviera a su casa...pero eso ya no sucedió...

Abrí mis ojos con lentitud y me encontré acostado y tapado en mi cama, el sol comenzaba a salir y la caja seguía en el mismo lugar, fui al baño y me vi con ojeras y los ojos rojos, y com verme pude recordar lo mucho que lloré por ella y terminé dormido abrazando su regalo, posiblemente mis padres debieron ayudarme y dejarme en la cama.

Lavé mi cara, al salir del baño y entrar a mi habitación un rayo de sol se posicionó en mis ojos, cuando traté de recuperar la vista vi como el bosque cobraba vida y los pokemon comenzaban su día con tranquilidad, sin saber que su gran amiga del bosque había desaparecido. Luego de esto, vi a los pokémon de Sapphire acercándose a la villa, y con cada paso que daban una idea surgía en mi mente.

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Pov. normal

El coordinador sin pensar sus actos, saltó de su ventana para aterrizar frente a frente con un blaziken, un donphan, un Aggron y un Tropius que le miraron sorprendidos, pasados unos segundos del suceso los pokémon reaccionaron y le entregaron unas telas al joven de ojos rubí, una vestimenta muy peculiar y conocida para él que con verla le hizo recordar y soltar algunas lágrimas del acontecimiento de ayer acerca de la dueña de las prendas azules.

El joven corrió acompañados de los pokémon al único laboratorio ubicado en la villa, donde un investigador podía ayudarle con su idea para encontrar a la desaparecida, pero lo que nadie sabía y solo nosotros los lectores sabemos es que desde este momento deberán pasar dos meses para conocer la nueva ameznaza que se acerca a Hoenn