— Te escucho —solté sentándome en el sillón observando como a pasos lentos el se aproximaba a mi—.

— Estos meses han pasado muy rápido...  un año y dos meses es el tiempo exacto —asentí—.  De repente yo estaba aquí viéndote a unos metros de distancia llegar con un vestido azul, que ahora si no lo dije antes te quedaba hermoso, fue la mejor noche de mi vida conocerte, al día siguiente viéndote frágil debajo de mi... —se sentó a mi lado—. No podía creer todo lo que estaba pasando, los meses pasaban y cada vez que te veía, mi mente me decía que con nadie más iba a pasar todo esto. En fin yo te amo y se que esto en ningún momento volverá a pasarme —me tomó una de mis manos e hizo que lo mirara a los ojos—. Estas últimas semanas fui un completo estúpido y te traté tan mal, evitándote, y esa noche cuando llegue ebrio y tu me esperabas, debiste dejarme...

— No puedo —susurré y el rompió en llanto recostando su cabeza en mi pecho—.

— Estoy destruido, mi abuela falleció, las personas que más amo se van de mi lado —comenzó a temblar y lo abracé muy fuerte—. No quiero que pienses... —levantó su cabeza de inmediato para mirarme y pude ver la esclerótica de sus ojos enrojecida— que estoy utilizando esto porque cometí un error contigo, quiero que me perdones por que soy humano y te fallé, te hable mal mi pequeña —tomó mi cara entre sus manos y yo al sentir el primer toque cerré los ojos— realmente te amo, solamente déjame solucionar todo esto... Por favor

Se puso de pie, caminó a pasos agigantados rumbo a la salida y yo lo perseguí de prisa. "¡Harry!, ¡Harry!" repetía como niña pequeña cuando tus padres pelean y vas a socorrer al más perjudicado. Lo tomé del brazo finalmente cuando estaba por subir a su auto a las afueras de mi casa y el volteó a mirarme secando sus últimas lagrimas con su pulgar.

— No te dejaré ir... —lo abracé fuerte—. No en ese estado...  —lo tomé de las mejillas y lo besé de una manera que pocas veces lo había hecho—.

Subimos al auto, subí al auto sin que el lo pidiera, no iba a dejarlo. No sabia a donde iríamos, ni que haríamos, pero sabia que con el estaba segura.

A los minutos estábamos en la carretera, con una velocidad que al comenzar estaba en sesenta kilómetros por hora y a los segundos estábamos pasando los ciento cuarenta. Las ventanas abajo, las luces dentro apagadas, su cabello revoloteando con el viento, su sonrisa cuando notaba un poco de su cabello cubriendo su cara, todo esto era perfecto.

Miraba cada uno de sus gestos, sus pestañas juntándose entre si cada exactamente cuatro segundos, su lengua pasando por sus labios, mirarlo cuidadosamente era perfecto.

—¿Alguna vez haz hecho esto? —bajé la ventana por completo y saqué la cabeza meneando el cabello con el aire. Tocó mi hombro y escuche desde afuera gritar "Tn no hagas eso"—. Es muy divertido —respondí sin si quiera saber si había dicho en verdad aquello—.

— ¡Mete la cabeza al auto ya!   —gritó desesperado jalando un poco de mi brazo—.

No introduje la cabeza hasta que vi un auto cerca que iba a pasar por nuestro lado e iba a ser probable que terminara sin ella.

— No debiste hacer eso, ¿Sabes que tan peligroso es?

— Es muy divertido deberías intentarlo —Dije riendo. Negó. Yo continué insistiendo hasta que finalmente aceptó—.

Sacó ligeramente la frente sin perder la vista en la carretera. Yo reí y el se rió de mi risa.

— Puedes intentar gritar algo, es importante liberarte de algo que sientes dentro —Asintió sonriendo—.

  — ¡Te amo Tn! ¡No permitiré que nadie me aleje de ti! —gritó como loco mirándome y volvió a meter la cabeza dentro otra vez—. ¡Amo como luce tu cabello negro aunque ahora siga rubio! — siguió "liberándose"  —. ¡Cuando duermes a mi lado es la mejor sensación del mundo! ¡Juro solemnemente que mis intenciones son buenas! —gritó riendo—.

(...)

Estoy enamorada. Estoy enamorada. Estoy perdidamente enamorada. Sus ojos debería ser lo último que mire en el resto de mis días. Es la mitad del corazón que me falta y quiero que nunca más me deje. Nunca más.

— Este es el mejor día de mi vida —dije acomodándome sobre el capó del auto—. Embriagame Harry haz que no recuerde nada de lo que pasara esta noche —dije tomando la botella de cerveza—.

— Quiero que recuerdes el mejor día de tu vida —dijo con la cámara instantánea tomando fotos de la gran vista de la ciudad—.

Me tomó entre sus brazos y me besó muchas veces muy dulcemente. Saboreaba sus labios con suavidad, con lentitud, con delicadeza. Amo sus besos, sus labios, sus manos sobre mi cintura acariciando tan lentamente que podía sentir cada fibra, mis manos sobre mi su sedoso cabello envidiando su suavidad.

— Te amo —dije de repente, mirándolo a los ojos y el se sorprendió un poco—. Te amo Harry

— Y yo a ti como no tienes idea  

FELIZ NAVIDAD PARA TODOS USTEDES PASENLA EN FAMILIA Y EN COMPAÑIA DE SUS SERES QUERIDOS♥ MUCHAS GRACIAS POR TODO, GRACIAS POR SER PARTE DE "MI PEQUEÑA" SU PRIMER NAVIDAD