- ¡Qué sorpresa! ¡No os esperaba!

- ¿Qué tal, Lena? – Dijo un tímido Leo.

- ¡Muy bien! ¿Y vosotros? ¡Estáis adorables! – Mi vena shippeadora del Wontaek salió demasiado evidente. Ante mi último comentario Leo se tapó la cara con las manos y como un acto reflejo Ravi se las quitó mientras le sonreía. –Bueno ¿Qué os trae por aquí?

- Antes de decirte nada, - Comenzó Ravi. – Que sepas que ya lo hemos hablado aquí, tu solo tienes que decir que sí. – Les miré extrañada.

- Bien, continuad...

- Como sabes muy bien, Hak Yeon ha hecho muchas cosas por nosotros y no sólo en el ámbito profesional. – Asentí. – Queremos hacer algo por él y vamos a aprovechar su cumpleaños para agradecerle.

- Me parece estupendo chicos, pero ¿Qué tengo yo que ver?

- Nos gustaría que adelantaras tu viaje y estuvieras aquí para su cumpleaños. – Ravi no me dejó contestar. – Como he dicho antes, ya hemos hablado con los de la empresa donde trabajarás y han dicho que no hay problema si quieres venir con antelación.

- Yo... verás, todavía tengo cosas que preparar y papeles que dejar listos antes de irme, no sé si me daría tiempo en dos semanas.

- Hak Yeon está insoportable con el tema de que vas a venir. – Habló Leo mientras sonreía. – Sería agradable que estuvieras aquí en su fiesta.

Accedí y esta vez no tuve que pensarlo. Hak Yeon me repitió incontables veces que le encantaría que estuviera allí el treinta de junio y yo le respondía una y otra vez que no era posible debido a toda la preparación del traslado.

Ravi y Leo me explicaron lo que tendría que hacer para poder venir en esa fecha y yo me puse a arreglar todo lo que me faltaba. Gina se sorprendió bastante de mi decisión cuando le expliqué todo, también se entristeció ya que me iba antes de lo planificado y estaría menos tiempo con ella.

Durante la siguiente semana vinieron varias personas al hotel a ser entrevistadas para cubrir mi puesto, finalmente escogieron a una chica que acababa de terminar sus estudios y Gina sería la encargada de enseñarle todo. El último día todos comimos juntos en el restaurante del hotel y me hicieron una pequeña fiesta de despedida.

Y al fin llegó el día de mi viaje, eran las tres de la mañana y me encontraba facturando mi equipaje en el aeropuerto. Gina no se despegaba de mi lado.

- ¿Tienes todo? Acuérdate de llamarme en cuando llegues, duerme en el avión, cuando llegues allí será por la mañana y estarás cansada.

- Sí mamá...

- Te echaré de menos. – Y comenzó a llorar.

- Gina... dijimos que no íbamos a soltar ninguna lágrima.

- Lo sé... - Y me dio el último abrazo antes de irme a la fila que había formada para pasar el control de las maletas. – Lena... se feliz, lo mereces.

Minutos después me encontraba en el asiento del avión, sorprendida de que hubieran escogido la primera clase para mi viaje. Mi asiento era bastante más ancho en comparación al que tuve cuando fui a París. No me acomodé mucho ya que ahora volaría hacía Milán donde haría el trasbordo hacía Corea del Sur.

Dos horas más tarde me encontraba en el aeropuerto de Milán esperando para mi siguiente vuelo. Miré mi reloj y reí acordándome de Hak Yeon, me dijo que hoy me llamaría para verme antes de su cumpleaños ya que durante ese día estaría tan ocupado que no tendría tiempo libre para hablar conmigo. Me dio un poco de pena el pensar que estaría llamándome sin recibir respuesta.

Me acordé de mi pequeño Leo, seguro que estaría asustado. Aunque los de la compañía aérea me aseguraron que los animales viajaban en excelentes condiciones no pude evitar preocuparme.

Y finalmente embarqué en el avión donde me esperaban quince largas horas hasta mi nuevo destino, Corea del Sur. Mis nervios hicieron que no comiera casi nada en todo el viaje, a pesar de que me ofrecieron deliciosa comida e infinidad de bebidas. Procuré dormir, pero solo conseguí cerrar los ojos un par de horas. También intenté entretenerme con las películas que me ofrecían en la pequeña pantalla que tenían incrustadas los asientos. Y así pasó el tiempo hasta que el piloto nos informaba que en quince minutos el avión comenzaría a descender.

Pasé el control de las aduanas correctamente y seguidamente fui buscar a Leo. Entregué los papeles conforme era la dueña y en pocos minutos mi pequeño pequinés saltó a mis brazos como si hiciera años que no me veía. Luego recogí el resto de mi equipaje.

Cuando lo tuve todo listo fui hasta las puertas donde se encontraban todas las personas que venían a recibir a los que acabábamos de aterrizar. La compañía me dijo que el chofer me esperaría con un cartel con mi nombre, no tardé en localizarlo. Me dio la bienvenida y me ayudó con mis maletas. Debido a la cantidad de gente Leo iba en mis brazos.

Seguí a aquel hombre hasta un gran jeep de color negro, me abrió las puertas de atrás, acomodó mi equipaje y nos pusimos en marcha hacía mi nuevo apartamento. Miré por la ventana, el paisaje era espectacular. Primero pasamos por varios campos de un verde intenso y luego la imagen cambió a la típica ciudad, no pude evitar sentir una sensación de emoción y alegría, mi mente todavía no asimilaba donde estaba.

Una hora después el coche paró. Estábamos en una calle bastante estrecha y los edificios eran muy altos. El chofer me comunicó que mi apartamento se encontraba aquí. Miré la entrada del lugar, era bastante lujosa.

- ¡Hola! ¿Tú eres Lena? – Asentí. – Te estábamos esperando, mi nombre es Yang Mi y seré la encargada de las personas que trabajareis en el nuevo proyecto de la compañía.

- Encantada.

- Seré la asistenta en vuestra estancia aquí, os informaré de horarios y vuestras tareas durante estos meses. Ahora acompáñame, te enseñaré tu nuevo piso.

La seguí hasta uno de los ascensores que había junto a la recepción y subimos al piso número siete. Luego nos paramos en una de las puertas de esa planta.

- Es aquí, esta es la llave y la contraseña de la entrada es esta. – Me tendió un papel con cuatro dígitos. – Puedes cambiarla cuando quieras, tienes las instrucciones de cómo hacerlo en uno de los papeles que te entregaré a continuación.

En cuanto entramos dentro mis ojos se abrieron más de lo normal. No era un apartamento extremadamente grande pero no era para nada pequeño y estaba completamente amueblado. En el mismo salón se encontraba la cocina con todo tipo de electrodomésticos, justo al lado una puerta daba a un baño reluciente. Un pequeño pasillo me llevó a dos habitaciones más, mi dormitorio y...¿Un armario?

- Esto es increíble...

- Me alegro que te guste. – Estaba tan asombrada que olvide que Yang Mi se encontraba a mi lado. – Debemos firmar tu contrato.

Me llevó a una de las mesas y nos sentamos, tras varios minutos de leer todos los papeles y documentos firmé.

- Bien, todo en orden. El proyecto comenzará en un par de semanas así que espero que aproveches ese tiempo para conocer la ciudad. Por cierto, casi se me olvida. – Sacó de su bolso una caja. – Este es tu nuevo teléfono, mi número es el único que está guardado, llámame si tienes cualquier duda. ¡Nos vemos en un par de semanas!

- Gracias por todo. – Le sonreí.

Yang Mi salió de mi apartamento y me quedé a solas con Leo. Realmente estaba en una nube, comencé a revisar mi nueva casa a fondo abriendo todos los cajones y armarios, encendiendo y apagando las luces como si en mi vida hubiera visto algo así. Finalmente decidí desenvolver mi equipaje poco a poco. Aún faltaban algunas cosas mías que llegarían mañana.

Después de un rato me duché y me senté abriendo mi portátil, Gina me mataría si no la llamaba de inmediato, miré mi reloj, en España serían las dos de la mañana. Le di al botón de la video llamada pero mi amiga no contestó, como era de esperar. El programa me avisó de que Hak Yeon me había llamado, sonreí pero en realidad sentía un poco de pena.

Mis tripas sonaron recordándome que no había comido casi nada desde el aeropuerto, por supuesto no tenía comida en mi cocina así que me vestí para salir a comprar, y ya de paso investigar la zona donde vivía. Estaba a unos metros de mi puerta cuando sonó el timbre.

- Cuanto tiempo si vernos, Lena. – Me decía Chin Hwa, el simpático mánayer de VIXX, al que no veía desde París. - ¿Cómo has estado?

- Bien, me alegro de verte. ¿Cómo has sabido donde estaba?

- Digamos que Taek Woon y Won Shik me han comentado su plan para Hak Yeon y yo soy cómplice y encargado de llevarte a la celebración. A veces creo que me manipulan demasiado, soy yo el que debería decirles lo que tienen que hacer. – Reí ante su comentario. - ¿Estás lista? Debemos ir al apartamento de los chicos.

Le miré sorprendida, no sabía cómo lo habían organizado, pero al parecer iría al piso de los miembros y aparecer de la nada cuando Hak Yeon soplara las velas, o algo así me explicó Chin Hwa. Pero... no estaba preparada ¿Qué ropa me ponía? Y mi pelo estaba hecho un desastre a causa del viaje, necesitaba a Gina en ese momento.

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Bueno, ya tenemos a Lena en Corea, tenía muchas ganas de llevarla! Creo que a partir de ahora los capítulos son un poco más interesantes. :) Creéis que a nuestro líder le gustará la sorpresa?

Lo dije antes, pero no está de más, menos VIXX el resto son todo ficticios, no tengo ni idea de como se llama el mánayer de VIXX, pero como será importante en la historia le he puesto nombre.

De nuevo cualquier estrellita y comentario es bienvenido para animarme, últimamente estoy un poco depre por esto :(  Pero nunca pierdo la esperanza, se que hace nada que he empezado, pero un "me gusta/no me gusta tu historia" no estaría mal  :D

Muchas gracias a las personitas que se animan a leerme ^^

PD: Gif: Wontaek planificando cosas a las espaldas de su lider no se si será el cumpleaños en este caso xD

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Por que se lo merecen todo, a reproducir como locas por el canal oficial!!! y a votar cada vez que tengáis oportunidad, fighting Starlights!!

https://youtu.be/Q2Rsmi7jhg8