capítulo 58: Kevin y Margaret
20 DE SEPTIEMBRE, 2014.
-¿Entonces es cierto? -Le pregunta Margaret, frunciendo el ceño.
-Sí. -Asiente Kevin.
Ambos se encontraban sentados en una pequeña mesa de un restaurante, conversando.
-Estoy enfermo, Margaret. -Le confiesa Kevin, con miedo a una reacción negativa por parte de la mujer frente a él-, Tengo psicosis crónica, con cierto grado de intensidad.
-¿Has llegado a ser agresivo? -Le pregunta la mujer con hermoso vestido rojo.
-No. -Kevin titubea-, Bueno, sí. Elenna dice que le he llegado a hacer daño, ligeramente, claro; pero yo no recuerdo nada.
-Entiendo, nunca haces nada conciente. -Dice Margaret-, Pues es bastante curioso, querido Kevin, pues tú y yo padecemos de lo mismo.
-No, tú padeces de algunos trastornos más además de la psicosis, ¿O me equivoco? -La cuestiona Kevin.
-Es cierto, según mis doctores tengo algunas pequeños problemas para diferenciar entre la realidad y la ficción, pero, no es nada grave. -Admite Margaret-, En serio, soy casi una persona normal.
-Yo también, soy prácticamente normal. -Dice Kevin-, La mayoría del tiempo estoy conciente, sólo pocas veces tengo episodios repentinos en dónde me cuesta asimilar la situación, en dónde puedo tener un león justo al frente y quizás confundirlo. Hablo sobre esto con la certeza que me han otorgado todos estos años, sin embargo, sé que soy una buena persona. Y jamás le haría daño a nadie.
-Lo entiendo, eres indefenso, yo igual. -Le contesta Margaret-, Creo que tú y yo formamos una pareja ideal, pues nos logramos comprender a la perfección.
Kevin sonríe levemente.
PRESENTE.
02 DE DICIEMBRE, 2023.
El sol había llegado, anunciando un nuevo día. Era una mañana fresca y hermosa.
Pero el clima era sólo una simple apariencia, podría ocurrir un acontecimiento indescriptible y horrible en un día precioso, ¿No? O eso era lo que pensaba Billy.
Luego del desayuno, Billy quería salir a caminar por el paisaje, pero, aún le dolía su herida al caminar, así que no podía hacer mucho.
Entonces sólo se quedó en el balcón conversando un rato con Hannah.
-¿Sabes? Tan vez no deba decirte esto, pero ayer tuve sueños muy raros. -Le dice Hannah.
-¿Por qué no deberías decirme? -Le cuestiona Billy.
-Porque... Olvídalo, olvida eso. -Le pide Hannah-, Soñé con Lucas, soñé que él se acercaba a ésta casa buscando venganza.
-¿Y realmente crees que él pueda volver? -Le pregunta Billy preocupado.
-No lo sé. -Dice la chica.
Basilio se encontraba en la ventana de la cocina, le parecía muy rara aquella conversación entre Hannah y Billy, ¿por qué se hallaban tan perturbados? ¿Acaso era normal esa excesiva preocupación de ambos por el regreso de Lucas?
Entonces Basilio sale un rato por atrás de la mansión, y enciende un cigarrillo mientras lee algunos mensajes de texto, al voltear atrás, ve a las mucamas Carmen y Vera sacando unas grandes cajas de una habitación cercana.
Basilio se les acerca y les pregunta:
-¿Qué son?
-Decoraciones navideñas. -Le responde Carmen-, Desde inicios de diciembre empezamos con las decoraciones. Lo primero en poner es el árbol y luego todo lo demás, las botas, las alfombras, los manteles.
-¿Qué? -Dice Basilio-, ¡Qué asco!
-¿Asco por qué? ¿No es la navidad hermosa para usted? -Le pregunta Vera mientras saca unos adornos más.
-No, nunca me ha gustado mucho, de cierta manera se me resulta algo escalofriante. -Le contesta Basilio.
-Bueno, deberá acostumbrarse a ella en ésta casa, ¡Aquí amamos la navidad! -Exclama Vera-, Aunque, no pondremos el árbol hasta que Óscar llegue, pues le encanta colaborar al respecto.
A Basilio le estresaba ver tantas decoraciones, rojo, verde, ¿Eran muchas cajas con adornos o sólo a él le parecía así?
~~~
En Winterpark, Elenna y Alfred se hallaban conversando en la cocina de la sala de la casa.
-Aún no logro asimilar la idea de que Kevin estaba enfermo mentalmente. -Dice Bennedick.
-Pues... Aún me sigue pareciendo que es algo que carece de importancia en este caso. -Comenta Elenna.
-A mí no, estoy casi seguro que esto es un detalle muy importante. -Dice Alfred-, Es como... Una de las últimas piezas de un rompecabezas cuyo transcurso de armar ya tengo siete años.
Elenna se queda en silencio, pensando.
-Hay algo que me extraña, ¿Billy nunca se dió cuenta del trastorno de su padre? -Le pregunta el FBI.
-No. -Niega Elenna.
-¿Y Hannah? ¿Ella tampoco se dió cuenta? -Le vuelve a preguntar Alfred.
-No, ninguno de los dos nunca sospechó nada. Lo sé porque si Hannah hubiese sospechado Bill se hubiese dado cuenta. -Le explica Elenna.
Alfred se queda pensando unos segundos, y luego le contesta:
-Elenna, hay algo que no está bien aquí. Hay algo sumamente extraño aquí, en este caso. Pues... Es casi imposible que Hannah y Billy nunca se hayan dado cuenta del trastorno de Kevin. Y eso sin contar que Billy convivía lo suficiente con Margaret como para darse cuenta de su trastorno, y tampoco lo hizo.
Elenna se queda pensando.
-Elenna, eso no está bien. -Le vuelve a decir Alfred-, Billy me dijo antes de irse a la casa Dennis que él siempre vió a Margaret actuando normal, que nunca le vió nada raro a ella.
Elenna aún sigue callada.
Entonces Alfred vuelve a hablar:
-Eso sólo significa una cosa, Elenna. Hay una explicación lógica de por qué Billy nunca se dió cuenta de los trastornos psicológicos de Kevin y de Margaret. Hay una razón bastante evidente. Y creo que tú lo sabes, y no lo quieres decir.
Elenna traga saliva de los nervios.
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