"Existe una palabra para definir el momento en que fantasía y realidad se mezclan: locura."

28 DE MAYO, 2017.

-Billy, siento que hay cosas que no me has dicho aún. -Le dice Josephus-, Siento que ocultas secretos sobre tí.

-Pues está usted sintiendo algo erróneo. -Le dice Bill-, Pues he sido completamente sincero con usted respecto a todo.

-No, no completamente. -Le contesta Josephus-, Bill, yo soy un psicólogo, me doy cuenta de las cosas. Y tus actitudes demuestran que... Además de tener un trauma, tienes algo más. Tienes algo que intentas ocultar.

-No sé de qué me está hablando, señor Josephus.

-Dime algo, jóven Billy, ¿Alguna vez has escuchado voces? ¿Alguna vez te has confundido con la realidad? O ¿Alguna vez has mezclado la realidad con la fantasía?

-Con mucho respeto, señor, ¿Está usted mal de la cabeza? Porque yo no. -Le confiesa Billy.

-Existe una palabra para definir el momento en que fantasía y realidad se mezclan: locura. -Le dice Josephus-, Creo que alguno de tus comportamientos o actitudes me hacen creer que tienes algo más, tal vez no muy grave. Algún trastorno depresivo, quizás. Y me temo que debo insistir en la idea de que esto sea una posibilidad.

Billy guarda silencio.

-Lo extraño y curioso aquí es que no tienes ningún informe médico al respecto. -Le dice el psicólogo.

-Exactamente, no lo tengo porque no lo he requerido en ningún momento. Señor Josephus, mi único problema es mi trauma... No existe nada más.

Josephus se queda en silencio, anotando en su pequeño cuaderno de siempre.

En su cuaderno, anotaba lo siguiente:

Billy está mintiendome, aunque no sé si tanto como yo a él. Pero algo oculta, no me cuenta todo lo que siente y piensa... Eso es un problema.

PRESENTE.

Billy se había quedado, extrañamente, dormido en la cama. Y Hannah sólo permanecía observándolo fijamente.

Luego, el teléfono de Bill, el cual estaba en la mesita de noche, suena debido a un mensaje de texto.

Hannah toma el teléfono de Bill, y lee el siguiente mensaje:

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Devon:
Billy, amigo, tu hermanastra está demente, necesito que veas mis mensajes. Ella me chantajeó y me obligó a irme de la casa. Creo que algo planea esa chica. Ojalá fuera igual de bonita por dentro como lo es por fuerza. Pero, no es así. Debes tomar precaución, e irte lo más pronto posible de esa casa. No entiendo por qué aún no lo has hecho.
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Hannah abre los ojos como platos al leer ese mensaje. Y, peor aún, al ver la bandeja de mensajes llena de textos enviados por Devon.

Ese maldito drogadicto está obrando mal, no sabe lo que hace, pensaba Hannah.

Entonces, Hannah toma el celular de Billy, sale de la casa, y ya estando fuera, toma un martillo y golpea repetidas veces el teléfono de Bill... Finalmente, lo introduce dentro de un bolso que pronto iba a ocultar muy bien.

En ese preciso momento, venía llegando Óscar de la escuela, y al ver a Hannah, le pregunta extrañado:

-¿Qué estás haciendo?

-Nada, nada que te concierna. -Le contesta Hannah-, Ve adentro, haz tus tareas y no preguntes nada.

~~~

Por otra parte, en la carretera, Basilio se encontraba llevando a Carly en su auto hacia una parada de taxis cercana, para poder así ir camino a Winterpark.

-Carly, entiendo que se haya agotado la batería de tu teléfono y por ello no pudiste pedir un Uber, yo con gusto puedo hacerte el favor de llevarte a alguna parada o estación. Sin embargo, no comprendo por qué tan repentinamente quieres irte, y, sin Billy. -Le dice Basilio, muy confundido por lo que estaba pasando.

-Ya te dije, Basil, son problemas personales de suma importancia respecto a mis padres. Necesitan que vaya a casa. -Le dice Carly-, Le dejé a Bill una carta explicándole con detalles todo.

-De acuerdo, sólo espero que todo esté bien. Porque me preocupa esto, que dejes a Billy solo. Cuando te ví saliendo de la mansión tan apresurada pensé al instante que te habías peleado con Bill. -Le dice Basilio.

-No, nosotros estamos bien. En verdad, sólo son problemas personales en casa. -Le dice Carly-, Cuando Billy lea la nota le puedes pedir que te explique. Y además, Billy no estará solo, estará contigo.

Al llegar a la parada de taxis, Carly estaba a punto de salir del auto, pero, toma por la mano a Basilio, y le pregunta:

-¿Tú quieres a Billy?

-Claro, como a un hijo. -Le contesta Basilio.

-Entonces, si es verdad lo que dices... Necesito que te quedes en la mansión Dennis, no puedes irte de allí hasta que Billy se recupere y se vaya. -Le pide Carly, con tono un poco suplicante-, No puedes abandonar a Bill, por favor, por favor, quédate con él, no lo dejes solo. Él te necesita.

-¿Qué? Carly, ahora sí que me estás asustando. -Le dice Basilio-, Yo tenía pensado irme mañana mismo, me necesitan en mi trabajo. Por otra parte, si Billy necesita a alguien, entonces tiene a Hannah, ella puede cuidar de él hasta que se recupere, ¿No?

-No, Basilio, quédate con Bill. -Es lo último que dice Carly, luego sale del auto, y camina hacia los taxis.

Basilio sólo pensaba: ¿Por qué está chica estará actuando así?