Chào các bạn! Vì nhiều lý do từ nay Truyen2U chính thức đổi tên là Truyen247.Pro. Mong các bạn tiếp tục ủng hộ truy cập tên miền mới này nhé! Mãi yêu... ♥

capítulo 17: Él no te merece

Billy se encontraba en el apartamento, sí, en el viejo pero pintoresco apartamento de Kevin y Margaret.

Él no podía creer que estuviera allí, no podía creer que fuera posible.

—¡Hola hijo! —Lo saluda Kevin—, ¿Cómo has estado?

Kevin sonríe, Billy frunce el ceño con preocupación y con miedo.

Alguien viene detrás, y empieza a golpear fuertemente a Kevin, parece ser un hombre el dueño de estos maliciosos actos.

Luego de golpearlo, el extraño y oscuro sujeto toma una martillo y le va partiendo los dientes a Kevin, uno por uno. Finalmente comienza a apuñalarlo.

Billy grita y llora de desesperación, hay una barrera que no le permite acercarse a su padre y ayudarlo.

Luego de que el sujeto asesinara a Kevin, se dirige hacia Margaret, la viola ferozmente, y luego la asesina, quitándole el ojo derecho con un cuchillo de sierra, y luego dándole machetazos a su cabeza.

—¡No! ¡Por favor! ¡Ya para! —Exclama Billy llorando.

—¿Qué sucede? —Le pregunta el extraño, que era más como una sombra—, ¿Extrañas a tu padre? ¿Acaso te quieres ir con él?

Acto seguido el sujeto se acerca a Billy para asesinarlo. Pero al instante Billy abre los ojos casi en resalto, y nota que se encuentra en la habitación de visitas, lo único que iluminaba era la luz de la luna.

Todo había sido una pesadilla, no muy diferente a muchas de las anteriores que había tenido.

Billy casi no podía respirar, no quería volver a soñar con ese suceso.

Luego notó que Carly no se encontraba a su lado en la cama, pero tenía tanto sueño que sólo volvió a cerrar los ojos, y a volver a soñar.

Abajo, en la cocina, se encontraba Carly tomando algo de agua. No quería hacer mucho ruido, estaba en una casa ajena y se sentía algo incómoda.

De repente escucha pasos detrás de ella, y al voltear algo asustada, ve a Hannah.

—¡Hola! ¿Te asusté? —Le pregunta Hannah.

—Sólo un poco.

—A veces bajo por un vaso de leche tibia, se me resulta difícil dormir con tanto frío. —Comenta Hannah, quien comienza a sacar algo de leche de la nevera.

—Te entiendo, hasta las paredes están heladas. —Responde Carly.

—¿Te apetece algo de leche?

—Sí, está bien.

Y mientras Hannah meneaba la leche en la pequeña olla, aprovecha la oportunidad para decirle a Carly:
—¿Sabes? Noté que excusaste a Billy para no hacerlo quedar mal. Eres una buena novia.

—¿Qué? ¿A qué te refieres? —Pregunta Carly extrañada.

—Digo, es obvio, ¿No? —Hannah hace una pausa—, ¡Vamos! Conozco a Bill más que tú. Sé que nunca le ha gustado leer.

—¡Ah! Te refieres a eso... Pues sí, tienes razón, no se ha leído mi novela por más que se lo he pedido.

—Es una pena, es una novela bastante buena, algo que vale la pena leer. —Dice Hannah—, Y no lo digo porque esté en frente de la escritora justo ahora.

Carly ríe levemente.

—Seguramente se la leerá pronto. —Dice Carly.

—Lo dudo. —Contesta Hannah fríamente —, ¿Puedo decirte algo?

—Claro.

—Tú pareces ser una novia muy bonita y atenta. Pero creo que Billy no debe valorar mucho eso, ha de estar pensando más en su padre muerto que en tí. —Dice Hannah sin pelos en la lengua.

—¿Disculpa? —Responde Carly frunciendo el ceño—, Creo que mejor me voy.

Y cuando Carly estaba a punto de irse, Hannah la toma por el brazo y le dice:
—Lo siento. Se me ha escapado. En verdad no quise decirlo. Es que es lo que pienso, que él no te merece, que tú mereces a alguien mejor.

Carly se queda callada.

—Es que se les nota mucho, la atención tuya y la falta de interés de él. Y perdona que me meta en su relación. —Dice Hannah.

—¿En serio crees eso?

—Pues sí. Creo que él no ha de valorarte mucho. ¿Tú qué piensas?

—Yo pienso que deberías conocer más a Billy, al Billy actual. Porque se nota que sólo recuerdas cómo era, y asimilas eso.

—Parece que no entiendes lo que digo, bueno, no importa, ¡Ya te darás cuenta tú misma! —Exclama Hannah.

Acto seguido Carly sólo se va.

Al entrar a la habitación de visitas, Carly se acuesta en la cama y abraza a Bill.

No quería pensar que quizás Hannah tuviese razón, que quizás Billy sólo pensaba en su maldito trauma, y que tal vez no tenía el suficiente tiempo para pensar en ella.

Bạn đang đọc truyện trên: Truyen247.Pro