Sientes como si murieras mil veces… como si estuvieras atrapado en un vacío de blanco eterno del cual no puedes escapar, un vacío en el que sabes que no existe el dolor, la ira, la culpa, la tristeza…

Miras el bombillo que alumbra el lugar en el que estas y te sientes en paz, como si no hubiera nada por lo que luchar, nada por lo que vivir, nada por lo que hay necesidad de escapar. No recuerdas tu nombre, no recuerdas como llegaste a ese lugar vacío, sin embargo, sientes que has vivido allí desde que tienes memoria, un lugar que extrañamente te resulta sumamente familiar, un sitio en el que se puede estar solo, sin nadie que moleste, sin nadie que acompañe, solamente esta… la soledad absoluta

Te levantas y miras a tu alrededor, solo puedes ver unas pocas cosas:

Un televisor antiguo que usa cintas viejas para funcionar y una libreta negra sobre una caja

Recuerdas que la libreta es tuya, allí hacías tus dibujos, de todo lo relacionado contigo y con tu vida, la curiosidad por abrirla es tan grande que lo haces, la primera página solo pone una palabra “Hiki". No recuerdas porque esta eso allí, pero tu mente supone que es tu nombre, luego de mirar unas cuantas páginas te das cuenta de que todas están en blanco a excepción de la página con tu nombre. Decides acostarte de nuevo en el suelo y mirar el techo inexistente, fijando tu mirada únicamente en la nada

Tu mirada se queda perdida allí en lo que parecen ser horas, sin ningún tipo de motivo sigues sintiendo tranquilidad por el gran vacío que hay en el lugar, pronto dejas de sentir esa calma, dejas de sentir esa relajación, dejas de sentir, no sientes nada. Escuchas como suena la puerta, una puerta que antes no estaba, una de color blanco que sigue sonando como si alguien estuviera llamando del otro lado, pronto decides levantarte y caminar hacia la puerta con una expresión neutral y nula en tu rostro, la puerta sigue sonando con un toque constante de 3 golpes, como si estuvieran llamándote en casa, estas delante de la puerta con la misma expresión, no sabes si debes abrir o ignorar el llamado, el golpe sigue constantemente sin dejar el ritmo de los 3 golpes, Sientes… vacío, no sientes temor, no sientes nada, abres la puerta.

Puedes ver a través de la puerta algo, es un espejo, un espejo que a diferencia de los colores del espacio blanco este tenia colores pastel y el vidrio era azul, decides acercarte y ver tu reflejo, miras con atención y vez que no estás solo, estas con tus amigos, Audrey, Kel y Henry. A pesar de no haberlos visto en mucho tiempo miras aun fijamente el espejo

Decides mirar a los lados, pero no hay nadie, vuelves a mirar al espejo y no vuelve a reflejar a tus amigos, solo a ti, solo, solo, solo, solo solo solo solo solo solo solo solo solo solo. Repites esa palabra todas las veces posibles en tu mente mientras sigues mirando tu reflejo, no sabes cuanto tiempo ha pasado desde que estas allí de pie, pero sientes que ha pasado el tiempo suficiente y te volteas para atravesar de nuevo la puerta, pero esta se cierra de golpe. Intentas abrir la puerta, pero esta no cede, intentas darle una patada para abrirla, comienzas a estresarte por la insistencia de la puerta para mantenerse cerrada, recuerdas que tienes un cuchillo de cocaína en tu bolsillo, no te preguntas que hacia allí y pronto lo usas para intentar abrir la puerta, pero esta sigue resistiéndose, pronto sientes que ya no estás solo en esa habitación.

Miras hacia atrás tuyo y logras verlo, no sabes lo que es, pero sientes algo dentro de ti, miedo, terror, un terror puro y total al ver esa cosa, no sabes lo que es, no sabes como llego contigo pero solo logras tener claro de que te asusta, no quieres verlo, quieres apartar la mirada y salir corriendo de allí para no tener que seguir viendo, no puedes moverte, tu mirada y la de esa cosa sigue siguen fijas, sientes que no te queda otra opción, más que luchar

Tratas de mantener la calma y recuerdas como relajarte, lo Intentas, no funciona, por alguna razón el simple hecho de que esa cosa este en tu presencia te causa un terror puro, un terror de no querer que te siga viendo, de que te deje en paz, de que te deje en tu lugar blanco y que desaparezca de tu vista. Te odias por pensar todo esto y sientes como recibes daño mediante la mirada de esa cosa, cada vez te asustas más y tu cuerpo comienza a fallar por el alto temor que te ha generado la criatura, sigues intentando moverte pero aun así tu cuerpo tembloroso se mantiene quieto en su posición sin avanzar ni retroceder, miras el cuchillo en tu mano, sientes que debes atacar pero al mismo tiempo sientes que debes correr y esconderse para que nunca puedan encontrarte, sigues pensando y el miedo se apodera cada vez mas de ti, comienzas a estresarte, sientes que toda esta presión es demasiada para ti, quieres que deje de mirarte, quieres que deje de exigirte, quieres que simplemente deje de gritar, quieres que pare de una vez todo. Tu estrés sigue subiendo y aprietas con más fuerza el cuchillo, la criatura se mantiene callada pero aun así puedes escuchar gritos, gritos que dicen que debes hacerlo mejor, que debes seguir, que debes, que debes que debes que debes que debes…. Estas harto, solo quieres escapar y que esa criatura te deje en paz, tomas firme el cuchillo con tus 2 manos y volteas el filo en dirección a ti, usas toda tu fuerza consiguiendo asi que tu cuerpo reaccione y cause que te apuñales…

Miras la sangre y el cuchillo, miras delante, la criatura ya no esta, miras tus manos llenas de sangre y vez como todo vuelve a tornarse blanco, miras el goteo de la sangre y del cuchillo, caes hacia atrás y miras el vacío infinito del cielo, cierras los ojos….

Y finalmente….

Despiertas

FIN DEL PROLOGO