❄️ Five ❄️
SeokJin miraba atento cómo Taehyung se movía por la pequeña cocina, concentrado en elaborar el almuerzo, con un marcado puchero. Para los ojos de SeokJin, era algo etéreo, una belleza y ternura sin igual.
—Zanahorias listas— dijo SeokJin, alcanzando el cuenco dónde depositó las verduras cortadas.
Haciendo que Taehyung se estremeciera, pues el joven oso de nieve no estaba acostumbrado a la compañía, mucho menos a tener alguien que no apartaba la mirada de él.
—G-gracias— tomó el cuenco, con los dedos temblorosos.
Odiando a su cuerpo por esa reacción, estaba seguro que el humano debía estar pensando que es un rarito.
—P-puedes ir a sentarte al sillón— propuso Taehyung, con la esperanza que aceptara y así le diera un poco de descanso a su pobre corazón.
—Prefiero quedarme acá, si no te molesta. Se está mejor en compañía— respondió con una sonrisa en los labios, que Taehyung no se atrevió a mirar por mucho tiempo. Pues sintió su corazón altear con ese simple acto, sumado a sus mejillas que comenzaron a calentarse.
SeokJin adoró la reacción de Taehyung, ese oso de nieve era maravilloso en todos los sentidos. Le encantaba la reacción que tenía a sus palabras, ese color rosadito que se asentaba en sus pómulos, lo hacían ver más adorable.
El corazón de SeokJin latía más rápido con cada segundo que pasaba, estaba más que seguro que era culpa del dueño de los labios más bonitos que había visto, de esos ojos celestes que lo veían con timidez y curiosidad al mismo tiempo. Sus manos picaban por tocarlo, por abrazarlo. Se preguntaba si sería así de suave como se veía.
El silencio se prolongó, un silencio para nada incómodo, dónde ambos estaban disfrutando en secreto de la compañía del otro.
Finalmente, todos los ingredientes estaban en la olla; el guiso cosía tranquilamente.
—Debo cambiar las vendas— dijo Taehyung casi en automático, al girar sobre sus pies.
—Oh, claro— respondió SeokJin, regalando una de sus sonrisas que inflaba sus pómulos y aparecían pequeños hoyuelos sobre las comisuras de sus labios.
Taehyung ahora sí que pudo verlo con claridad y su corazón se derritió, era una sonrisa demasiado tierna para su estado mental.
Nervioso, subió las gradas siendo seguido por su más grande tentación. No estaba seguro de poder controlar a su corazón, ni sus hormonas –que por la temporada en la que estaban–, se sentían más alborotadas.
SeokJin se fue a la habitación, se sacó de encima la piel que le había prestado Taehyung para que no sintiera frío; preguntándose por primera vez:
¿De qué era esa piel?
Su brillo, su color, se parecía bastante a la del oso de nieve que lo rescató. En ese momento se le vino a la mente la oración de uno de sus libros.
“Los osos de nieve pueden despojarse de su piel, y andar entre los humanos. Si quieres atrapar a uno, debes robarle la piel y jamás podrá volver a su forma de oso”
De sólo pensar que eso realmente era verdad, le dio un escalofríos. Ese libro en sí era muy perturbador, porque sólo hablaba de cómo tener en cautiverio a un oso de nieve; o de cómo cazarlos. Apenas pudo terminar de leerlo, porque sus métodos eran espantosos.
En ese momento Taehyung ingresó con los materiales para curar sus espalda, y dio un brinco del susto. Sin querer estrujó la piel que yacía en su regazo y no se perdió el gesto de incomodidad en el rostro ajeno.
No puede ser, ¿realmente es su piel?
—Traje lo necesario, date la vuelta por favor — pidió Taehyung, recuperando la postura anterior. Aún no se acostumbraba a los toques del humano sobre su piel de nieve.
—Tu…— SeokJin no estaba seguro de preguntar, ¿habría algo malo en decirle sus sospechas?
Se dio la vuelta, obedeciendo a Taehyung. Necesitaba calmar sus emociones, porque según esa lectura. Un oso de nieve sólo dejaba que su pareja de por vida, tocara su piel de nieve.
Eso significaba que…
¿Estaba comprometido o algo así?
No era que se queje, en realidad no se quejaría en absoluto. Porque el dueño de dicha piel, era increíblemente encantador.
Las cosquillas que sintió en su herida, lo trajeron a la realidad, necesitaba calmarse. No todo lo que leía en los libros era real al ciento por ciento. Lo mejor era preguntar directamente al oso de nieve que estaba curándolo.
—Listo, tus heridas están sanando bien— escuchó a Taehyung hablar con esa voz afable, aireada, única.
No sabía lo que le pasaba, al parecer sus sentidos estaban mejorando también. Porque podía escuchar cada ruido de esa habitación.
Armándose de valor, se dio la vuelta. Era momento de preguntar.
—Muchas gracias, sin tus cuidados estaría perdido. Muerto, para ser exactos— comentó SeokJin, intentando bromear para disipar sus nervios.
Taehyung soltó una risita, negando con la cabeza. Al parecer eso de adular venía en la sangre de ese hombre.
—¿Ésta es tu piel de oso de nieve?—finalmente preguntó, era ahora o nunca.
Taehyung levantó la mirada tan rápido, que seguro alguno de sus huesos tronó.
Ese humano sin duda sabía mucho sobre ellos, le daba miedo y curiosidad a la vez. Pero, no tenía sentido tenerle miedo, el hombre no cargaba absolutamente nada que le podría hacer daño.
—E-es, eso es…— Tae estaba más nervioso.
Sin embargo, esos ojos negros le transmitían confianza, seguridad. Además de estar brillando en interés.
—No sé si vayas a entenderme, espero no pierdas la cabeza— finalmente Taehyung habló, después de todo, si quería dar un paso más serio con él, necesitaba ser honesto.
¿Quería dar avanzar con el humano?
Pero qué rayos.
Ignorando sus terribles pensamientos, continuó hablando.
—Por más loco que te parezca, sí. Esa es mi piel de oso de nieve. Tiene la característica de siempre mantenerte cálido, sin importar las circunstancias. Y como estabas tan helado, no se me ocurrió otra forma de ayudar a que no mueras por hipotermia— explicó sintiéndose más calmado, al ver que SeokJin no estaba enloqueciendo.
—¡Woah! Entonces… si te colocas esto…
—Sí, paso a mi forma animal— completó la frase que el humano claramente había deducido.
—¡Increíble! — SeokJin estaba emocionado, además de confirmar que una parte de la información de ese libro, era real.
Aunque aún no se atrevía a preguntar por el resto de la información sobre esa piel. Mejor lo dejaba para después, cuando su corazón no se sienta tan alterado.
—¡La comida!— gritó Taehyung de repente, recordando que dejaron el guiso en el fuego.
Salió corriendo para verificar que no se hubiera quemado.
Realmente el humano era una gran distracción.
Una hermosa distracción.
Hoseok quedó inquieto después de hablar con NamJoon, tampoco quería tener problemas si realmente Yoongi hubiera matado al intruso.
Necesitaba hablar con él, afortunadamente ese día era su cambio de guardia y regresaría a la aldea.
Sólo esperaba poder hablar con él, antes de la fogata donde harían el baile de emparejamiento. No sería cómodo interrumpir algo así.
—¿Todo listo para esta noche?— preguntó Jackson, el guardia que sería su reemplazo.
—No estoy seguro de participar en el baile, aún tengo cosas que hacer— se encogió de hombros.
—Nada de eso, ya estoy acá ¿No? Ahora sal de aquí, y ve a encontrar pareja. ¡Que cada vez estás más insoportable!— lo golpeó en la espalda, soltando una carcajada que seguro se escuchó hasta el Pacífico.
Hoseok no objetó más, después de todo debía llegar temprano para hablar con Yoongi.
Se despidió del loco de su amigo, y salió rumbo a la aldea. Que no estaba tan lejos, se puso su piel de oso de nieve y salió a toda carrera.
En menos de veinte minutos llegó al centro de su aldea, un nuevo récord si le preguntaban. No por nada era conocido como el oso de nieve más veloz de la aldea.
Pasó a su forma humana, ya que de ese modo recuperaba más rápido el aliento. Saludando a todos los que se encontró en su camino, se dirigió a la casa de Yoongi.
En el camino pudo ver que los preparativos para el baile de emparejamiento estaba casi listo, la hoguera al centro de la aldea estaba ya ardiendo. Sólo faltaba la llegada de todos los aspirantes de este año a conseguir pareja.
En cuanto llegó a casa de Yoongi, tocó la puerta con notable desesperación.
—¡Ya voy! Quien quiera que seas si derrumbas mi puerta de partiré en pedazos — se escuchó gruñir una voz desde el fondo de esa pequeña casa.
Hoseok rodó los ojos, Yoongi siempre tan cariñoso.
—¿Qué?— Yoongi lanzó la escueta pregunta, en cuanto abrió la puerta.
—Buenas noches para ti también, y sí, quiero pasar gracias— respondió Hoseok con ironía, invitándose solo a pasar dentro.
Yoongi gruñó, pero se hizo a un lado, sabía que no serviría de nada pelear con Hoseok, porque era ridículamente testarudo y eso drenaría sus energías. Las cuales deben estar al máximo esa noche en particular.
—¿Se puede saber a qué debo tu molesta presencia?— preguntó aún irritado.
—Necesito saber con detalles a qué te referiste con “me hice cargo” cuando te pregunté sobre el intruso— pidió información, sin rodeos.
—¿Detalles? Sólo usa la imaginación Hobah, hice lo que tenía que hacer para tener segura la aldea— respondió tan frío y espeluznante como siempre.
Hoseok soltó un suspiro de nervios, al parecer NamJoon estaba en lo cierto.
—Espero que eso no signifique que lo mataste o algo así, porque sabes que eso nos traería grandes problemas. La humanidad ya no es como antes, ahora se enteran de hasta tus estornudos— reclamó entre nervioso y furioso.
—No tengas miedo, él fue el culpable. ¿Por qué estaba husmeando tan cerca de nuestra aldea? ¿Y si quería cazarnos?— defendió su punto, aunque estaba harto de tener que hacerlo. No le debía explicaciones a nadie.
—¿Tenía pinta de ser un cazador? ¿Tenía equipo? — Hoseok no recibió informes de nada parecido, NamJoon le había dicho que sólo era un turista aventurero.
—No, pero las apariencias engañan y no estaba dispuesto a poner en peligro a nuestra gente— gruñó tajante, odiaba que los humanos causen tanto problema. Si fuera por él, los mataría a todos.
—Por tu bien y por el nuestro, espero que ese humano esté vivo. Que NamJoon lo encuentre y le haga creer que se perdió. Si está muerto… no quiero ni pensar en las consecuencias— sacudió su cuerpo, tratando de aleja ese escalofríos.
—No creo que lo encuentren, pero de todos modos pueden decir que simplemente se perdió. No le veo tanto problema, eres un dramático— se encogió de hombros, caminando a su perchero para tomar su piel de oso de nieve.
—Eso espero. Cambiando de tema, veo que te acicalaste. ¿Vas a participar del baile de emparejamiento?— Hoseok lo molestó con el codo en su costado y sus ojos sugerentes.
—Si mi presa se presenta, sí— respondió con la característica frialdad. Pero su rostro mostraba un divertido rosado en sus pálidas mejillas.
—Mmm ya veo, ¿Y quién es?— Hoseok tenía una idea, pero prefería que de lo diga.
—No te importa, ahora salgamos o llegaremos tarde.
Hoseok lo siguió, sólo por saber quién era el dueño, o la dueña de ese frío corazón.
Al llegar a la hoguera, vio que toda la aldea estaba presente. Sin duda era un festival muy esperado por todos, en especial los interesados en tener pareja. Aunque también había gente como él, que sólo estaban de curiosos.
—¡Hobi! Qué sorpresa verte por acá— Jimin se acercó alegre como siempre, dándole un fuerte abrazo.
—Jiminnie, que bueno verte después de tantos meses— respondió con una gran sonrisa.
—Hola a ti también, Yoongi — Jimin se dirigió al sombrío oso que ni se dignó en voltear, ni responder.
—Ya sabes como es, de pocas palabras— respondió Hoseok ante la ausencia de repuesta de su amigo.
—Lo sé, lástima que no está el único que le saca conversación— Jimin se encogió de hombros, extrañando a su amigo.
—¿No vendrá?— preguntó al instante, asombrando a los contrarios.
—Amm, no. Me dijo que éste año tampoco participaría, quizás al año— Jimin soltó una risita nerviosa, no quería y no podía decirles que quizás nunca participaría porque el tonto de su amigo anhelaba un romance humano.
Yoongi soltó un gruñido bajo, con los ojos más sombríos que antes. Jimin y Hoseok intercambiaron miradas sospechosas. Con ésta reacción era más que obvio que Yoongi quería, deseaba, a Taehyung.
Era algo extraño pensar en los dos juntos, uno era como el amanecer, lleno de vida y brillo. Y el otro era como la noche, frío y lúgubre.
—Y… ¿Joonie por qué no está contigo?— Jimin cambió de tema, porque Yoongi estaba dando más miedo a cada segundo. Quién sabe lo que estaría pensando.
Hoseok estaba más nervioso ahora, ese tampoco era un tema del que se podía hablar en medio de los aldeanos. Además que Jimin era otro que odiaba a muerte a los humanos, pese a que estaba casado con un mestizo.
—Me dijo que le dieron un último trabajo y recién entraría a vacaciones. De seguro llega en unos dos días— respondió lo más convincente que pudo.
—¡No puede ser y yo que había preparado todo para esta noche!— Jimin zapateó en su sitio — odio a esos humanos, ¡Me quieren quitar a mi Joonie!— chilló con un nuevo berrinche.
Hoseok suspiró aliviado, al parecer su mentira fue muy buena. Aunque no quería tantos detalles, como el saber que NamJoon tendría acción esa noche, si hubiera llegado a tiempo.
Quizás no era mala idea buscar pareja esa noche, después de todo.
Pensó pícaro, buscando con la mirada futuros prospectos.
—Me voy, no tengo nada que hacer aquí — finalmente escucharon el gruñido de Yoongi, quien se puso su piel de oso de nieve.
—Pero… ¡Tu casa es para el otro lado!— gritó Hoseok al verlo correr el la dirección opuesta.
—Por ese camino está la casa de Tae. ¿Qué está planeando?— susurró Jimin, por algún motivo no le gustaba la idea de Yoongi en la casa de Tae.
Además que, Taehyung vivía tan lejos de todos, que no podría pedir ayuda si es que esa bestia intentaba forzarlo. Aunque nunca vio que Yoongi lo tratara mal, por ello no entendía ese presentimiento.
—Bueno, ya que Joonie no vendrá hoy. También me despido, ¡suerte encontrando pareja!— gritó a modo de despedida, haciendo reír a todos porque Hoseok se quedó más rojo que una fresa.
—Malditos, todos me dejaron solo— murmuró queriendo que se lo trague la tierra.
Jimin se puso también su piel de oso de nieve, salió corriendo hacia la casa de Tae, aunque por un camino distinto pues sabía que Yoongi era experto en rastreo.
La casa de Tae al estar tan lejos, al límite de la barrera; les tomaría 2 días en llegar. Si Hoseok estuviera ahí, seguro que llegaba en un día, pero ellos no tenían esa velocidad. Sólo esperaba que Yoongi no le tuviera tanta ventaja.
❄️❄️❄️
Holas pixelitos de mi corazón!! 💜
He vuelto con un nuevo capítulo! 🎉🎉
En la encuesta que hice, ganó ésta historia para empezar el ciclo de actualizaciones 7w7
Espero les guste 🥺
Cuídense mucho, las amito 🥰
Bye 💜
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