NARRA PAULINA.



Minutos después de que Teresa y Sergio destruyeran con sus lanza cohetes el muro norte de las instalaciones enemigas junto con todas las defensas, salieron alrededor de 80  soldados con perros para enfrentarnos a los que pudimos derrotar fácilmente porque tenían poco experiencia en combate, cuando entramos nos topamos con una segunda línea defensiva conformada por soldados un poco más experimentados que dieron una buena batalla, al igual que los soldados de la tercera línea  pero logramos vencerlos aunque tuvimos varios heridos. La cuarta y última línea defensiva estaba conformada por soldados de élite.



Después de luchar por casi dos horas utilizando solamente nuestras armas sin que ninguno de ambos bandos tuviera una clara ventaja, varios miembros del clan incluida yo comenzamos a frustrarnos por no poder utilizar nuestros colmillos y garras, por lo que lo ordene la retirada. Mientras esperábamos a que anocheciera para atacar otra vez Isaac interceptó una comunión donde el comandante enemigo informaba al comando central sobre el ataque y se jactaba por supuestamente habernos echo huir con la cola entre las patas.



Cuando anocheció cómo los cazadores tenían la guardia baja fue bastante fácil entrar a las instalaciones y matar a cuánto cazador nos topáramos sin hacer ningún ruido hasta que un antes de morir hizo cuatro disparos, lo que fue suficiente para alertar al resto de nuestra presencia. Como habían sido tomados por sorpresa los cazadores no tenían casi ninguna oportunidad de salir victoriosos.



Luego de unas horas los cazadores que seguían en pie se atrincheraron en las barracas, y como no podían pedir refuerzos porque habíamos bloqueado sus comunicaciones después de darles un ultimátum se rindieron. Con las instalaciones por fin bajo nuestro control mientras Sara hacia el conteo de bajas y heridos los demás revisamos el lugar rematando a cada cazadores herido que no pudiera caminar por sus propios medios al terminar nos fuimos con los prisioneros también armas.




Ximena.




Como todavía no habían llegado los cuerpos de los cazadores caídos durante el ataque del clan vampiro, ni podían comunicarse con la instalación de Rionegro me mandaron junto a mi equipo para ver lo que estaba pasando, cuando llegamos al lugar encontramos solamente cuerpos de camaradas por todos lados con heridas de colmillos o garras, al revisar un camión encontramos más cuerpos, transcurridos unos minutos habían muerto en ataques distintos.




Cuando los soldados bajo mi mando subieron  en varios camiones los cuerpos de nuestros camaradas caídos nos pusimos en marcha rumbo al cuartel, después de unos minutos silencio Julia comenzó decir que los culpables de que nos hubieran atacado fueron Antonio y Marcos por como habían tratado a los diplomáticos del clan colmillo carmesí sin siquiera investigar sí su clan era una amenaza para el nuestro.



Carolina.


Aunque mi madre me insistió para que me quedara y hasta dijo que podía alimentarme de ella, cuando anocheció salí y fui al parque para casar, transcurridos unos minutos llegaron mis amigas todas como siempre vestidas con faldas bastante cortas y blusas que resaltaban sus senos o dejarán el ombligo al descubierto, después de mirarlas desde las sombras en especial a Melissa que estaba usando una blusa que no sólo la hacía ver más tetona también dejaba su ombligo al descubierto me acerque a ellas y las saludé dándole después le dije a Melissa sí podíamos hablar en privado