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capitulo 14: salidas

Dos días antes de final de mes. 

En una zona montañosa con grandes árboles y con un hospital en una de sus colinas se encontraba un ser que a la gente común lo llamaría un fenómeno, para el doctor, era una de sus creaciones, los Nomus 

pisas se marcaban y arboles destrozados mostraban su paso veloz. El Nomu tenía la forma de un lobo, saltando en árbol en árbol aterrizando debes en cuando en el suelo.

A lo lejos se lograba notar como el polvo salía por su velocidad, solo para detenerse en bruto este camino de destrucción. 

el lobo camino de una forma más lenta mientras sus orejas empezaban a apuntar a todas direcciones.

Su movimiento se detuvo cuando una de ellas escucho la respiración agitada y los pasos constantes.

sus ojos se ampliaron, rugió con fuerza al saber que ya había localizado su presa

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Las pisadas de Taida aumentaban cada vez que se acercaba a la zona segura que el doctor le indico el primer día. Sus ropas estaban rasgadas. Respiraba agotado, ha estado moviéndose por todo el bosque para burlar al Nomu.

Escucho un rugido a lo lejos. Se paralizó por un momento, su respiración se cortó mientras escuchaba como algo se acercaba a él a una gran velocidad.

Cuando recupero la compostura no espero y avanzo lo más rápido que pudo. Él ya se encontraba cerca de la reja que delimitaba el bosque del hospital.

Escucho como el nomu le rugió directamente a él, volteo por un segundo a sus espaldas. Observo como el nomu salía de la cortina de humo que este mismo creo. Sus ojos resaltaron del polvo. Una ira descomunal se apodero del nomu, avanzando su cuerpo hacia esto con sus fauces abiertas.

Taida dio la vuelta completamente viendo a los ojos a su depredador. Noto como por unos momentos sus pasos de detuvieron, y juro ver como retrocedió un poco, su quirk logro hacer que transmitiera su miedo. Un error hizo que volviera a correr a máxima velocidad. Sentirse aliviado.

El nomu en ese momento de debilidad se dio cuenta del truco que le estaban haciendo, su mandíbula se retorcía y sus ojos se inyectaron de enojo.

Las pisadas de ambos aumentaron. Taida sentía nuevamente miedo y su dolor de cabeza aumentaba, un zumbido empezó a resonar por sus oídos.

Lucho contra esto mientras trataba de concentrar su mente en un punto. Ya estaba cerca de la reja, apenas la tocara iba a ser llevado nuevamente por un portal a la sala del doctor.

Choco con la reja al estar distraído con el zumbido. Volteo hacia atrás viendo como el nomu se abalanzaba sobre él. trato de usar nuevamente su quirk contra el nomu de pura desesperación, pero noto como algo diferente paso. duro apenas unos segundos, pero lo noto, noto como si la sombra atrás de ellos, hecha por la luz de la noche, se retorcía, parecía tratar de tomar forma.

Como él esperaba, su respiración se detuvo un momento al aire no pasar de la baba verde. Su cuerpo fue cubierto de la baba antes de sentir como caía.

Choco con el metal frio mientras sentía como se le era devuelta la respiración. Tomo varias bocanadas de aire por el miedo mientras escuchaba como algo caía de la misma manera que él.

Sus ojos tardaron el acostumbrarse al repentino cambio de luces. Volteo a su vista a un lado, viendo como el nomu gruñía adolorido y frustrado mientras se levantaba.

—arriba —le dijeron. El doctor lo vio moviendo su silla de las pantallas

Taida hizo caso. Sentía como sus articulaciones le dolían apenas ahora.

—hiciste un excelente trabajo, sin embargo, el quirk parece no acoplarse aun —le hablo, volviendo a sus pantallas mientras ahora le ordenaba al Nomu —vuelve a tu patrulla. Vigila las capsulas y reporta si llega a pasar algo—

La orden fue captada y tomada. El Nomu salió del lugar, sin antes darle una mirada a Taida de ira que lo asusto, lleno de cables con cada rincón del gran cuarto lleno de repisas con botellas que brillaban de un color purpura.

—mientras que tu —le hablo a Taida, sin voltear la mirada —de ti, me encargare luego, por el momento estoy ocupado. Vuelve a tu cuarto asignado—

—s-si, señor —contesto con temor de hacerlo enojar, quería decirle lo que observo, pero aún no estaba seguro si era real o no, estaba muy alterado para saberlo

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El cuarto fue vaciado de invitados, dejando al doctor solo con su mente. El doctor mientras tanto no paraba de ver sus pantallas y no dejaba de presionar teclas. estaba nuevamente reportando sus estudios de nomu

El problema más grave de esto eran los quirk, la carga mental que conllevaba el portar múltiple quirk's sin tener algún tipo de defensa natural como la de su maestro los volvía bestias que para evitar que fueran salvajes se les borraba todo, siendo como los básicos, pero con leves instintos, pero con una fuerza mucho más alta, un ejemplo era el Nomu lobo.

Así fue echo de los primeros alfa o gama-alta, un Nomu sin pensamiento propio, pero con una fuerza sin igual, aun estando el proceso, pero el doctor calculo que le faltaba un año y algún mes más para que funcionara correctamente.

Otro del problema que conllevaba crear un gama-alta era el tiempo y la correcta transportación de quirk's. Como ya el doctor escribió, los quirk's eran la fusión perfecta entre lo mental y físico, y el problema de esto, era el mental. Al funcionar como parte del cerebro, también significa que tiene algún propósito, y así es, muchos creyeron que solo para activar y desactivar el quirk, pero no.

El quirk funciona como un sistema de defensa, pero no solo esto, sino que también algo emocional hasta cierto punto, por eso había casos de personas que despertaban su quirk después de un trauma o al estar al borde de la muerte. El doctor no era religioso, pero algo que tomo de esto, fue el hecho de las almas, lo tomo como la simplificación de lo que hacía el quirk.

En pocas palabras, el quirk era como el "alma" hasta cierto punto. Esto era el problema al que también se enfrentaba era el quirk al este no saber muy bien su comportamiento y que efectos tiene este en el cuerpo.

El proceso era largo y tardado con múltiples problemas. Él fue perfeccionando esto a lo largo de los años, pero eso no significaba que esto era perfecto. En lo que más se enfocó, fue el proceso en masa.

Las capsulas funcionaban para mantenerlos desactivados y poder activarlos simplemente pasando corriente sobre ellos, pero también funcionaban para otras cosas, por ejemplo, la inyección de copias de quirk's, los nomu aún en proceso están con varios cables en su cuerpo, modificando el cuerpo y cerebro desde dentro.

Esto lo hizo para poder trabajar con varios nomus al mismo tiempo.

Ahora observaba y trabajaba con varios nomu's, pero dos en específico estaba concentrado. Uno de ellos era de los trabajos más largos que ha tenido que hacer, por lo complicado de hacerlo, y el otro, lo tenía más por entretenimiento y curiosidad para saber si lo podría lograr a convertir en nomu.

El nomu que más le interesaba era el que estaba haciendo por curiosidad, un hombre de pelo verde con pecas. Su piel no parecía ni humana y tampoco a la de un nomu, porque, a diferencia de los demás, este tenía un tono más blanco, como un cadáver que no se descomponía.

¡Ahora estaba viendo sus signos vitales, aún estaba vivo!, Aun tenía conexiones cerebrales, su corazón aun daba pequeñas palpitadas.

Ahora el doctor lo observaba mientras sacaba uno de los quirk's de su gran colección de repisas, donde cada uno era conectado por un tuvo. El más recientes de todos ellos fue transportado, pero este también fue acompañado con otro frasco, este no contenía el quirk. El segundo frasco estaba lleno de un líquido negro que no parecía peligroso.

Estos dos eran parte del quirk del hermano de taida, el doctor decidió que era mejor darle el quirk original. El cuerpo del hermano estaba siendo convertido en un nomu de gama-media sin su quirk.

Este quirk junto a él líquido que controlaba avanzo por dos tubos diferentes, pero ambos se dirigían al mismo lugar.

se movió su mirada a otra pantalla observando como el nuevo lote ya estaba más de la mitad listo. recordó por qué estaban ahí en primer lugar.

alguien fuerte con un quirk igual de fuerte sería bueno para convertir en Nomu.

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En la ciudad más pobre del musutafu.

Se podría ver varios edificios medio construidos y abandonados por gente. Humo salía de algunas esquinas, indicando que gente vivía o se calentaba por el frio de la noche.

En una parte del lugar se lograban ver dos personas saltando de un edificio a otro. Ambos se les notaba la practica en esto, pero uno lo hacía más toscamente que el otro.

Este tenía chamarra verde oscuro, unos pantalones negros junto a unos guantes del mismo color sin dedos, botas con bordes metálicos, este tenía fajas de color rojo junto a una mascarilla negra y por último tenía una mochila en su espalda.

Este saltaba por los edificios tropezando debes en cuando con sus pasos. Este se detuvo cuando estuvo cerca de su última entrega.

Esta bajo como le enseño su "maestra" casi desvelando en algunos momentos, aterrizo con las rodillas adoloridas mientras se quitaba el cubrebocas un momento para respirar.

Cuando se recompuso, busco algo en su mochila mientras era observado por el vagabundo.

Saco un par de manzanas mientras daba una pequeña reverencia, poniendo las manzanas en enfrente del señor

—lamento la tardanza —se disculpó mientras seguía extendiendo las manzanas —aquí tiene sus manzanas—

—no hace falta que te disculpes, no tardaste tanto —negó las disculpas mientas agarraba el puñal se manzanas —a comparación de antes, esto es rápido. los primeros días sí que tardabas jeje—

—lamento eso —una vez más se disculpó, antes de sacar su teléfono, y ver que le llego la notificación de alarma, ya le faltaba poco para volver a casa, y dormir al menos un poco.

—lo lamento, ya me tengo que ir —dijo apurado, empezando a salir del callejón

—adiós chico —fue lo que dijo el vagabundo antes de ver como el chico era propulsado con las botas

Yami en este poco tiempo logro aprender bastante, pero cometiendo errores al principio de este "trabajo".

Uno de ellos fueron los horarios. Al principio de todo el tiempo fue lo que menos le importo, pero con el correr del mes se dio cuenta del peso que se pone trabajos, escuela, entrenar, estudiar y practicar con mei y lo que no espero tener que poner atención, su vida más social, que no era mucho, pero era algo por lo menos por izumi.

Y se preocupaba de mantener la relación por solo un motivo, era agradable, incluso mei le dijo que era poco inteligente mantener una relación que complica todo solo por que es agradable, pero para el importaba, porque era un amigo, una amiga despues de tanto tiempo.

En su intento de mantener un equilibrio de su vida trato de hacer dos cosas en este tiempo. La primera fue tratar de hacer sus trabajos en medio del patrullaje, después de perder dos libros supo que no era la manera.

Ahora su segundo intento era el poner alarmas para hacer estos patrullajes. Les funcionaba a medias, ya que las ojeras de le estaban empezando a marcar de más en su cara.

Yami le mando mensaje a su compañera de que ya se retiraba mientras entraba a su cuarto por medio de la ventana.

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Yami veía la mañana desde la playa, encima de una pila. Bostezo.

En todo este mes fue viendo como su zona era limpiada por ellos mismos, tirando piezas a la chatarrería que no les servían y recogiendo el metal que podían usar y cables que aun funcionaban.

—¡Yami! —grito Mei —ya está todo listo, ven a probar—

—ya voy —respondió

Bajo de la colina y camino a la parte limpia que crearon, en media estaba Mei escribiendo en su libreta.

Ella a su lado derecho tenía un maniquí con un brazo echo de metal y una pierna de palo, con un casto cubriendo su pecho y una pequeña armadura de metal oxidado en su pecho.

En su lado izquierdo tenía una mesa rota y soldada con partes de madera y metal, en esta estaban dos guantes con placas de metal en donde deberían estar los primeros 4 dedos.

Este guante llegaba hasta llegando casi hasta el codo, donde toda esa parte del guante estaba cubierto de cableado expuesto con partes de metal. En la mesa también había algo más, algo parecido a un cinturón, pero en este tenía acoplado y soldado una placa de metal, pero esta con modificaciones, con una batería de auto, junto a esta la pila con dos conectores de corriente.

—¡muy bien, prueba uno de nuestro bebe, el amplificador de fuerza! —grito entusiasmado mientras observaba como Yami se acoplaba los guantes —los guantes por el momento usaran baterías que puse en la parte trasera de un cinturón. ¡El siguiente experimento será convertir las pulsaciones del corazón en energía funcional!, así no se tendrá que cargar con la pila —hablo mientras escribía, no voltio la mirada cuando Yami casi cae de espaldas por el peso de la batería

—no crees que esto, no sé, podría lastimarme? —pregunto con cierto sarcasmo en su voz.

—tonterías! —grito ignorando el sarcasmo —esto es lo suficientemente seguro. ¿Dudo que la batería explote, después de todo, tú la compraste no?—

Era verdad, él lo compro con el dinero de las figuras. No todas se lograron vender, aún quedaba una buena porción, pero las que las personas más comunes se podrían costear se vendieron de buena manera y las caras y exóticas casi todas fueron compradas por la misma persona. 

—lo sé, pero no sé si el transformador que le pusiste a la parte de atrás funcionara —dudo, mientras conectaba el primer cable a su guante. Cerro los ojos antes de sentir un pequeño chispazo, pero no pasando a mayores. El peso de los guantes disminuyó de forma rápida, sintiendo como si no tuviera casi nada de peso.

Volvió la mirada para observar como las luces let de color rojizo que pusieron brillaron. Esto de la luz fue más por Yami, para saber cuándo estaban prendidas o cuando la energía estaría fallando.

—¡todo listo Mei, cuando me digas! —grito Yami mientras abre y cerraba su mano sintiendo raro su mano por lo liviana que se sentía

—espera, deja grabo, este será nuestro primer experimento documentado! —su emoción no bajo mientras soltaba pequeñas risas dementes

Saco su celular, empezando a grabar.

—primer documental y prueba uno de nuestros bebes —dijo Mei mientras en la grabación que apuntaba a Yami este gritaba "invento no bebe" —como sea, él bebe será probado por su padre, Yamikumo, o Yami, saluda —Yami hizo caso, y saludo nerviosamente hacia la cámara tratando de ignorar como lo llamaron padre —y su madre, la mejor de todas, Hatsume Mei! —dijo con emoción, poniendo su mano en frente de la cámara saludando

—prueba 1 de los guantes de fuerza, Yami, hazlo —grito Mei

muy bien, aquí vamos —susurro, mientras preparaba el golpe

Lanzo un gancho al maniquí al pecho, dando un grito de guerra.

El resultado que planeaba era el abollar la armadura, sin embargo, sus expectativas fueron superadas.

El muñeco fue lanzado por la fuerza. La placa se dobló y el maniquí se partió.

Creo un estruendo cuando chocó con una pila de basura la cual aun no buscaban piezas.

La cara de sorpresa de ambos duro un buen rato, con Mei rompiendo esta, teniendo una expresión en sin algún tipo de emoción, o eso se pensó por un momento.

Esa cara se fue quitando, por la lenta risa de Mei, aumentando en fuerza, locura y emoción por cada carcajada.

Al final, en la grabación se escuchaba como si, o había escuchado el mejor chiste de su vida, o había caído en la locura; si alguien oyera la grabación, seguramente pensara en la segunda opción.

La risa fue contagiosa para Yami, quien empezó a acompañarla por nervios y una subida de adrenalina repentina. Ahora parecía en descenso de dos locos.

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Yami pensaba lo que paso por la mañana mientras come en el tejado sentado en una banca del lugar. Izumi se encontraba a su lado, comiendo a su lado y disfrutando de su silencio cómodo.

Parece raro pensar que ellos estuvieran callados por tanto tiempo, pero esto se debe porque ambos estaban extremadamente cansados. Yami casi se quedó durmiendo en medio de sus clases si no hubiera sido el repentino golpe que recibe en la mesa diario para molestarlo junto a las bolitas de papel con saliva que se le arrojaban aunque algunas eran detenidas por Izumi quien parecía haber cambiado de lugar a uno mas cercano a el.

Izumi no estaba acostumbrada a una rutina de trabajo, ejercicios, y deberes escolares que pensaba que eran pocas.

En ambos se notaban las ojeras, pero solo uno pareces curioso del otro.

Yami no se preguntaba mucho esto, varias veces logro ver como entrenaba para dirigirse a su zona. Entiende él porque estaba cansada.

Izumi por otra parte. Era curiosa del porque él estaba tan cansado. en un primer momento pensó que solo era el agotamiento de recoger metal, pero la idea se fue rápido cuando recordó como ellos incluso estaban antes que ella.

Descarto la idea. Supo que conocía menos de lo que pensaba. Se sentía mal. Pensaba que él era bastante normal y resulta que le gustaba crear cosas locas con su amiga, la cual jamás pensó que tendría.

"Eso suena triste" pensó viendo al cielo mientras se daba cuenta de sus pensamientos. El como ella pensaba que él no podría tener amigos. Ahora de sentía incluso peor.

El silencio fue cortado cuando Izumi trato de iniciar una plática.

—y, como ha ido tu día? —hablo Izumi, volteando a verlo

Curioso —hm, ¿y por qué tan de repente la pregunta?—

—y-yo solo, quiera conocerte mejor. La mayoría del tiempo nos quedamos callados sentados, solo comiendo —menciono levantando su plato de katsudon hecho en casa.

Levanto los hombros —no veo el problema —hablo mientras seguía comiendo sus fideos con sal

—¿fideos? —algo asqueada

Yami completo cerrando los ojos, sin parar de comer —con sal—

—en serio te gusta? —sacando la lengua

—esta delicioso para que sepas —sin parar de comer en frente de ella —no te gusta la sal?—

—no es eso, solo que, por que solo sal y fideos?, no te gusta con más condimentos—

—esta rico y es fácil de comer. Mejor cambia de tema, que esto no llega a nada. No me harás cambiar mi opinión de mis fideos —recomendó mientras cerraba sus ojos, disfrutando sus salados fideos

—ohhhhh, al menos lo intente, no todos pueden tener buenos gustos —rio mientras pensaba que podría decirle. Lo miro un momento hasta que se dio cuenta que en sus ojos se veían decaídos

Entre cerro los ojos y le hablo —no has dormido bien, te vez cansado—

Paro de comer, abrió los ojos para verla y trago —yo no te pregunto porqué estas también con esas ojeras—

—no evadas —acuso, apuntando con su dedo su cara —tu solo no preguntas porque sabes que entreno, pero yo no sé por qué tú tienes eso– hincho sus mejillas, tocando la cara de Yami con su dedo —dime, dimee—

Llame aguanto unos minutos hasta que ella se rinde sola.

ambos quedaron en silencio mientras terminaban de comer.

Izumi se quedó pensando en alguna forma para tratar de volverse más conocidos. Como ella lo veía era lo mejor sabiendo que ambos conocían la identidad de All-Might.

cerro los ojos un momento hasta que su foto se prendió.

—vallamos de compras —dijo sin más, llamando la atención de Yami quien se le quedo mirando para que explicara —digo, no creo que seas de hablar mucho, y quisiera que nos conociéramos mejor, que mejor que ir a comprar y ver cosas que nos gustan para ver si tenemos gustos similares —respondió mientras veía como Yami guardaba su comida y se recargaba

—no tienes entrenamiento?—

—bueno, es agotador, ya hasta no puedo comer demasiadas cosas dulces para estar saludable ahhh —bostezo y se quejó mientras se recargaba junto a él —pero los domingos por la tarde puedo tener un descanso, podría usarlo para salir, qué opinas o tienes algo mejor que hacer—

no respondió, la verdad no tenía nada planeado por la tarde, normalmente esos días su madre se juntaba con el padre de Hatsume para platicar mientras ellos practicaban. pero eso era por la mañana.

dudo antes de contestar —estaría.... bien, supongo —espero a que ella hablara. no escucho nada, solo sintió un peso sobre su hombro.

solo escucho una leve respiración. Volteo solo para ver al pelo verde dormida. Supuso que apenas se debe estar adaptando a su rutina de ejercicio

Estaba por despertarla, pero cambio de opinión después de verla dormir tan tranquilo. Saco su teléfono y reviso la hora, notando que aún les quedaba algo de tiempo antes de la campana.

—'yo también no me he acostumbrado a mis salidas además no creo que algo sea diferente. dormir un rato no me hará daño' —apenas termino de decir eso, se recargo nuevamente, apago su teléfono, y al instante se durmió

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'te maldigo universo' Yami maldigo su suerte. Estaba encima de un edificio observando como una pandilla de 5 personas estaban caminando directos a uno de los edificios del lugar. Aun recordaba su última lucha con una pandilla y como acordonaron el lugar, no salió por unos días para evitar que ellos lo relacionaran con esto, incluso ahora estaba más lejos de la "base" que tenía el con su entrenadora y más cerca de la ciudad.

Por un momento pensó en llamar a los héroes para que se encarguen. negó con la cabeza cuando se dio cuenta que posiblemente lo estarían buscando a él también por esta zona si es que los llamaba.

'no puedo llamar a los héroes, tal vez tenga que pelear' se inclinó a ver a las personas entrando al lugar quitándose sus jafas rojas para ver mejor 'ninguno muestra tener un quirk de mutación, posiblemente puede noquearlos si es que los tomo por sorpresa' frunció el ceño cuando noto como había uno que parecía más alto y con un cuerpo más formado entrar al lugar 'ese, debe ser el jefe. ok ese me puede complicar las cosas' pensó para sí mismo mientras se ponía nuevamente las jafas.

está bien, no te pongas nervioso —susurro mientras estaba indeciso de dar un paso. Se dio cuenta que lo único que hizo que luchara en primer lugar contra esa "pequeña" mafia era que su vida corría peligro y este no se lanzó solo a esa mazmorra llena de enemigos. ahora tenía la oportunidad de decidir si darle a "entrar" o "escapar".

divago por un momento mientras se aseguraba que las botas estuvieran bien calibradas y tener su bate a la mano.

"ok cálmate, piensa que esto es un RPG, has jugado muchos antes de todo esto. venciste enemigos que te superaban 20 niveles encima de ti" se animó así mismo mientras se ajustaba bien los guantes y se subía la capucha "bueno, también tenía muchas opciones, habilidades y formas de esquivar" se dijo mientras sacaba el bate de su mochila, ladeo la cabeza mientras miraba el lugar y como cerraban la puerta. "sino haces esto no tendrás XP, no podrás mejorar y te estancaras, debes hacerlo "

Dio unos pequeños saltos antes de lanzarse directo a la entrada de la mazmorra nivel 20


Siguiente Cap. : RPG

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del 1 al 10 que les parece


sin mucho más que decir, chau 

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