El transcurso de camino hacia al departamento de Chaeyoung fue muy agradable para ambas. Se la pasaron conversando de las cosas que más les gustaba hacer y descubrieron que realmente tenían mucho en común.

Mina no paraba de sonrojarse cada vez que Chae la llamaba linda, no es que fuese la primera vez que alguien la halagaba, definitivamente no, pero con Chae era diferente... se sentía diferente.

— Es aquí — Comentó Chaeyoung señalando por la ventana — Gracias por traerme Mina, espero no haber sido una molestia para ti.

— Nada de eso Chaeyoung — Respondió Mina con una leve sonrisa. Prestó un poco de atención al enorme edificio que se encontraba al frente — Vivimos bastante cerca. Mi casa se encuentra a 20 minutos.

— ¿En serio? Maravilloso, así podré visitarte a menudo — Dijo Chaeyoung. Obviamente el sitio donde buscaron el departamento había sido escogido estratégicamente — Te invitaría a pasar, pero me imagino que debes tener muchas cosas que hacer...

— En realidad no hago mucho — Admitió Mina soltando una risita — Pero tampoco quiero molestar.

— Oh, de ninguna manera molestas Mina — Chaeyoung le extendió la mano y Mina la tomó con un poco de timidez  — ¿Puedo invitarte algo de tomar? Por favor...

— Esta bien... — Mina asintió dirigiendo su mirada hacia su chofer — Alfred, estaré con mi amigo, puedes esperarme aquí o ir a comer si lo prefieres.

— Con todo respeto... no puedo dejarla sola señorita — Contestó el chofer — Su padre dijo que...—

— Estaré bien Alfred, si necesito algo yo te llamo, ¿de acuerdo?

Chaeyoung observaba la escena, era de esperarse que el chofer se pusiera renuente ante la idea de dejar a una de las chicas más pudientes y reconocidas de Seoul con un simple desconocido.

— Oye, esta bien — Interrumpió Chae — Solo quiero invitarla a tomar algo por el gesto de amabilidad que tuvo conmigo al traerme hasta aquí.

— Esta bien... — Aceptó aquel hombre aún sin estar del todo de acuerdo — Voy a permanecer aquí por si algo se ofrece.

— Gracias Alfred — Contestó Mina y luego dirigió su mirada hacia Chaeyoung — Perdona... él siempre cuida muy bien de mi, solo esta curioso de que haya aceptado venir con prácticamente un desconocido.

— Es verdad... ¿no crees que eres un poco confiada? Digo, yo podría ser un asesino o secuestrador y fácilmente te estarías entregando a mi — Murmuró Chae con vacilación observando el semblante callado de Mina — Estoy bromeando.

— Lo sé — Respondió con simpleza — Sería muy loco que de verdad lo fueras, pero con esa carita tan tierna, dudo que seas así.

— ¿Crees que soy lindo? — Preguntó Chae de repente y sintió su pecho palpitar cuando Mina asintió tratando de evadir su mirada — Tú eres hermosa Mina.

— Gracias... — Murmuró Mina sintiendo su agarre ser intensificado por parte de Chaeyoung.

Caminaron juntas sin romper el contacto hasta que Chaeyoung tuvo que buscar en sus bolsillos la llave de su departamento.

— Vaya... es muy lindo y acogedor — Comentó Mina observando a su alrededor.

Era un departamento bastante elegante, contaba con tres recámaras, una cocina, un comedor y una espaciosa sala de estar con una enorme pantalla plana que Jeongyeon se encargó de comprar.

— Muchas gracias, aunque me imagino que debes estar acostumbrada a cosas mejores.

— Es verdad, pero lo cierto es que prefiero más lo simple y tradicional — Confesó Mina observando cada rincón — Si algún día logro independizarme, me gustaría vivir en un lugar como éste.

— ¿Por qué querrías volverte independiente? Lo tienes todo, no tienes la necesidad de trabajar.

— No es lo mismo, no siempre quiero depender de mi padre, quiero superarme en algún momento, quiero ganar mi propio dinero — Dijo Mina con ilusión — Quiero comprarme un auto, un departamento, ropa, zapatos... todo eso con mi propio dinero.

— ¿Lo dices en serio? — Preguntó Chaeyoung con impresión tomando la mano de Mina para atraerla hacia su enorme sillón — No pensé que tuvieses esas aspiraciones.  No todos los días se ve a una chica que lo tiene todo querer comenzar desde abajo. Eres... eres increíble.

— ¿Tú crees? — Mina juntó sus manos contra las de Chae sintiendo un pequeño choque de electricidad — Nadie me había dicho eso antes... todos mis amigos suelen ser un poco superficiales, a excepción de Lisa y Sana, ellas son mis mejores amigas.

— Yo creo que tienes todo el derecho de querer superarte, yo haría lo mismo si estuviese en tu lugar — Contestó Chae con su característica sonrisa — Ojalá que algún día puedas cumplir eso que tanto te anhelas.

— Muchas gracias Chaeyoung... aprecio mucho tus palabras.

— A mi me encanta decirte palabras así — Chaeyoung por un momento se perdió en aquella mirada que aunque pareciese fría a simple vista, justo ahora mismo estaba expresando tantos sentimientos. Su mirada se desvío a sus labios...

¿Debería hacerlo?

¿Es muy pronto?

No supo exactamente cuanto tiempo estuvo detallando la cara de Mina, pero justo cuando se armó de valor para acercar su cara a la de ella sintió a Mina voltear su rostro de repente. Chae se sintió avergonzada, era obvio que Mina no iba aceptar besarla solo por haberla salvado de un patán.

— Emm... ¿Qué te ofrezco de tomar? Mi hermano se encargó de surtir nuestro pequeño mini bar, apuesto a que lo tengo, tú solo dime — Dijo Chaeyoung rompiendo el incómodo silencio que se había formado.

— No sé de bebidas, no suelo tomar — Confesó Mina — Sorpréndeme.

— Siendo así... — Chae sacó una botella de vino — Voy a mostrarte mi bebida especial, espero que te guste — Tomó con sus manos dos copas de vino y se dirigió hacia Mina.

— Hmm.. ¿Qué es? — Preguntó Mina a la vez que tomaba un sorbo — Los licores nunca me han gustado, pero éste en especial me ha parecido delicioso, sabe a fresa.

— Es vino Fragolino de origen Italiano, me encanta por su color y porque es ligeramente espumoso — Contestó Chaeyoung llevando la copa a sus labios y cerrando los ojos con satisfacción — No mentía cuando te dije que amaba las fresas.

— Me encanta...

— Me alegro que te haya gustado mi bebida especial — Chaeyoung extendió su copa hacia Mina — Quiero hacer un brindis.

— ¿Un brindis?

— Sí, un brindis por que hoy conocí a la chica más hermosa que mis ojos hayan visto — Dijo Chaeyoung chocando su copa con la de Mina — Por ti, Myoui Mina.

[🍋]

— Nayeon... que sorpresa verte por aquí —  Yeri se tomaba el atrevimiento de sentarse en la silla libre de la mesa donde se encontraba Nayeon en compañía de Jeong — ¿No me vas a presentar a éste guapetón?

Nayeon rodó los ojos y suspiró con fuerza. A quien menos quería encontrarse ahora era a Yeri. No entendía como es que ella se consideraba amiga suya, quizás solo lo hacía como la mayoría en el club, por conveniencia.

— Hola... — Susurró Jeong en tono amistoso — Me llamo Jeong.

— Jeong... — Yeri se acercó para dejar un beso sobre su mejilla a modo de saludo y así lo hizo, solo que fue más sobre la comisura de sus labios. Jeongyeon se quedó realmente inmóvil ante tal recibimiento — Kim Yeri, a tus órdenes.

— Gracias...

— ¿Por qué no me habías dicho que tenías amigos tan guapos? — Yeri se dirigió a Nayeon esta vez — ¿Puedes creer que todos en el club están murmurando que estás saliendo con él?

— Así es — Contestó Nayeon con firmeza — Jeong y yo estamos saliendo, ¿no es así, caramelito?

— Eso es cierto... cariño — Respondió Jeongyeon con una risa forzada — Somos novios, sí.

— ¿Qué? No juegues Nayeon... todos sabemos que a ti te van más las chicas.

— Pues resulta que te equivocaste, estoy felizmente en una relación con mi chico — Nayeon envolvió los brazos alrededor de Jeongyeon — Y te voy a pedir que no vuelvas a besar a mi novio, por favor.

— Y-yo.. lo siento... no pensé que de verdad estuviesen saliendo — Yeri forzó una sonrisa y sin más se retiró del lugar — Permiso.

— Vaya... — Murmuró Jeong logrando que Nayeon se soltara de su agarre y volviera a su postura — Yo...

— Si vamos a ser novios tiene que quedarte clara una cosa — Habló Nayeon con determinación — No vas a dejar que algo así se vuelva repetir ¿entendido?

— ¿A qué te refieres?

— ¡Yeri! No creas que no me di cuenta que casi te besa en los labios — Expresó Nayeon en tono molesto.

— Creí que seríamos novios de mentira...

— Novios de mentira ante nosotros, pero novios verdaderos ante todo el mundo. O me vas a decir que Yeri te gustó ¿es eso? — Cuestionó Nayeon con el ceño fruncido — Responde ¡Joder! Por que si es así entonces te dejo el camino libre para que vayas a besuquearte con ella — Jeongyeon abrió la boca con impresión al ver a Nayeon irse caminando dejándola atrás. 

— Nayeon... — Jeongyeon corrió tras ella observando como todos a su alrededor las veían. Había muchos que estaban presenciando su primera pelea de "pareja" — Nayeon, espera...

— ¿Qué? — Nayeon intentó soltarse del agarre que Jeongyeon tenía sobre su muñeca — Suéltame.

— Vamos a hablar a un lugar más privado — Dijo Jeongyeon jalando su mano sin detenerse — Estamos llamando la atención de todos aquí.

— ¿No quieres que Yeri nos vea? — Preguntó Nayeon y Jeong se detuvo en seco — ¿Qué pasa?

— Veo que te estás tomando muy en serio eso de ser la novia celosa — Murmuró Jeongyeon con la vista fija en Nayeon mientras jalaba de ella posando las manos en su cintura — ¿Entonces estamos actuando ahora? ¿Qué se supone que hace un novio para reconciliarse con su novia? ¿Debería besarte ahora?

— N-no... suéltame.

Jeong no le dio tiempo de hablar y se aproximó a juntar sus bocas. Al principio Nayeon puso resistencia pero luego de un par de segundos correspondió al casto beso que Jeongyeon le brindaba. Se separaron por falta de aire y con las mejillas coloradas debido a los muchos pares de ojos que las observaban a su alrededor.

— S-supongo que ya no quedará ninguna duda de que estamos saliendo — Murmuró Jeongyeon tratando de ocultar su sonrojo — Como novia mía creo que debes conocer mi departamento. Mi auto esta afuera.. ¿vamos? — Nayeon solo asintió sin decir una sola palabra.

El camino hacia el auto se tornó silencioso. Jeongyeon no sabía si eso era bueno o era malo. Tal vez no debió besarla...

¿Por qué lo había hecho?

Ni ella misma lo sabía. Solo tenía claro que la situación se había vuelto incómoda.

— Lamento lo que pasó — Nayeon rompió el silencio luego de subir al auto de Jeongyeon. Trataba de evadir su mirada fijando su vista sobre la ventana — Lo hice porque no podía permitir que me tacharan de cornuda.

— Ni siquiera conocía a la tal Yeri... yo jamás podría tener algo con ella porque yo soy...—

— Gay, sí ya lo sé, pero todos los demás no lo saben, ¿qué crees que van a decir de mi si dejas que una desconocida te besé y en mi propia cara?

— Bueno... — Jeongyeon tragó saliva — Tienes razón... te pido una disculpa, no volverá a suceder.

— Ya te dije que no tengo problema en que tengas tus aventuras, siempre y cuando seas discreto...

— ¿Tú las tienes? — Preguntó Jeong haciendo que Nayeon fijara su vista en ella — ¿Tienes aventuras?

— Sí, por supuesto que las tengo.

— Bien... — Jeongyeon no supo como sentirse al respecto. Simplemente decidió cambiar de tema rápidamente — Ya casi llegamos a mi departamento... Te dije que tenías que conocerlo pero no te pregunté si de verdad querías hacerlo. En caso de que no... puedo llevarte a tu casa.

— No, esta bien, tienes razón, tengo que conocer el departamento de mi novio fake — Dijo Nayeon observando por la ventana — ¿En serio vives por aquí? Estamos muy cerca de mi casa.

— ¿En serio? Que coincidencia — Comentó Jeongyeon bajando del coche corriendo a abrir la otra puerta para que Nayeon pudiese salir — Supongo que eso es lo ideal en cualquier pareja... vivir cerca.

— Supongo que sí — Nayeon bajó del auto y caminó siguiendo a Jeongyeon.

— Si mi hermano está aquí te lo presentaré — Dijo Jeong.

— ¿Le vas a decir que lo nuestro es falso?

— ¿Tú le dirás lo mismo a tu hermana? — Cuestionó Jeongyeon y enseguida Nayeon negó.

— Mina no va a creerme si le digo que tengo novio. Todo el tiempo le he dicho que los chicos simplemente no me van.

— Bueno, yo tampoco creo que mi hermano crea que en la primera vez que visito ese club ya conseguí novia... — Admitió Jeongyeon — Creo que ellos pueden saberlo, me dijiste que no hay problema con tu hermana.

— Pues... no esta de acuerdo, pero estoy segura de que no me delataría con nuestro padre, sé que puedo confiar en ella — Dijo Nayeon con una leve sonrisa — ¿Es aquí? — Preguntó al ver a Jeongyeon buscar las llaves del departamento.

— Sí, es aquí — Tan pronto como abrió la puerta se pudieron escuchar las risas de dos personas, una de ellas era inconfundible para los oídos de Nayeon. 

— ¿Mina? — Nayeon se adentró al departamento observando como su hermana tenía las mejillas coloradas y el cabello ligeramente alborotado — ¿Qué haces aquí?

— ¿Hermanita? — Mina intentó ponerse de pie pero sintió que el piso a su alrededor se movía y volvió a quedarse en su sitio — ¿Qué haces tú aquí?

— ¿Estás ebria? Tú nunca tomas... — Nayeon posó su mirada en la persona que acompañaba a su hermana — ¡Degenerado! ¿Qué le diste de tomar a mi hermana?

— Nayeon tranquila... él es mi hermano Chaeyoung — Jeongyeon frenó a Nayeon antes de que se dirigiera hasta Chae para posiblemente golpearla.

— La chica que está riéndose sola es mi hermana y ella nunca se pone así, algo le dio de beber tu hermano — Reprochó Nayeon caminado en dirección a su hermana — Mina, ¿cómo te sientes?

— Solo se le pasaron un poco las copas... observa como esta Chaeng — Señaló Jeong a Chaeyoung quien se encontraba ahora boca abajo en el sillón durmiendo plácidamente — Nadie se aprovechó de nadie, los dos están tomados.

— Te llevaré a casa Mina — Murmuró Nayeon colocando el brazo de Mina sobre su hombro — Llamaré a Alfred para que venga por nosotras.

— Espera... no puedes llevártela así, al menos espera hasta que despierte — Comentó Jeongyeon señalando como Mina ya estaba medio adormilada — Ven, te ayudaré a llevarla a la recámara de huéspedes para que pueda recostarse mientras se le baja la borrachera.

— Chaeng... — Musitó Mina — Quiero estar con Chaeyoung...

— Mina, no seas necia, vamos a que te recuestes — Regañó Nayeon pero enseguida su semblante cambio al observar el pequeño bar de los hermanos Son — ¿Esa es una botella de Vino tinto Chateau Petrus?

— Sí — Afirmó Jeongyeon con orgullo.

— No puede ser... ¿cómo la conseguiste? Siempre producen una cantidad mínima de éstos vinos por año y según yo, ésta vez se terminaron como pan caliente — Nayeon tendió a Mina sobre el sillón junto a Chaeyoung y corrió hasta llegar a la botella de su vino favorito — No puedo creer que la tengas. Éstas cosas son carísimas.

— Tengo mis contactos, ellos me apartaron un par de botellas — Respondió Jeongyeon acercándose a la barra de su mini bar — ¿Quieres tomar una copa conmigo?

— ¿Bromeas? No pienso irme de aquí hasta que no nos terminemos hasta la última gota de ese grandioso vino.

[Amo a Nayeon, Chau 💛]