➳[ ESPECIAL: HALLOWEEN ]
El día más esperado por los muertos había llegado al fin, era halloween y solo significaba una cosa.
Subir con toda libertad al mundo de los vivos.
―¡Park Jongseong! ¡Park Jungwon! ¡No corran lejos de nosotros!― mi hermoso esposo correteaba a los niños que se encontraban demasiado emocionados al poder subir al mundo de los vivos.
Sólo espero que no se asusten demasiado como en la boda.
―¡Park JiMin! ¡Mueve tu culo tieso y ayudáme con los niños!
Tan hermoso como siempre.
Me levánte después de dejar a Chimy en el suelo y caminé hasta Jongseong quien se escondía de Yoongi al no querer usar el bonito conjunto para ir al mundo mortal, consistia en un lindo trajesito de pántalones cortos beige con rayas grises, junto a un polo color celeste y toques beige al igual que una pequeña corbatita y tenis color beige, precioso sin duda.
―Jay― Llamé. ―¿Qué sucede, pequeño?
―No quiero ponerme eso, es feo― Se cruzó de brazos frunciendo su ceño.
―Claro que no es feo, se verá muy lindo en ti.
―No, se verá feo― Dijo haciendo un puchero. ―No quiero...
―Pero, ¿no son tus zapatos favoritos? ¿Al igual qué el conjunto? ¿Qué es lo que sucede Jay?
Los ojos de mi pequeño hijo se llenaron de lágrimas mientras su boquita hacía un pronunciado puchero, un sollozo escapó de sus labios llamando la atención de su hermano menor, quien llegó corriendo hasta Jongseong mientras tomaba su pequeña mano y daba un besito en su dorso.
―No llores hyung...
―Ves hasta Jungwonie se preocupa por ti― Dije mientrás me agachaba hasta quedar más cerca de ambos, instantáneamente Jungwonie se apegó a mi hasta enterrar su pequeña carita en mi torso. ―¿Ahora nos dirás qué sucede JayJay?
Su boquita comenzó a temblar amenazando con ponerse a llorar en cualquier momento, cosa que extrañamente no sucedio, mi pequeño valiente se limpió las lágrimas y sorbió su naricita y se aferró a mi brazo.
―No quiero ir al mundo de los vivos― sollozó. ―Porque me dan miedo.
Sonreí con ternura, sabía muy bien que entre los niños contaban historias de terror sobre los vivos.
Que cosas...
―Pero tu conoces a muchos vivos JayJay― Lo abrazé junto a Jungwonie. ―Sabes que no son como los cuentos que hablan tus amigos, además, hoy verás a tus padres mortales.
Jay me miró con sus ojitos brillantes en lágrimas y asintió pequeño mientras me correspondía el abrazo y daba un pequeño beso en la frente de su hermanito.
―Hoy veré a mis papás vivos― Murmuró cerca de mi oído gracias a que nos encontrábamos a la misma estatura. ―Pero papi JiMin y papi Yoongi son los mejores y me tienen para siempre, los amo, también a Jungwonie.
Sonreí mientras acariciaba los cabellos negros de mi pequeño hijo para después dejar un dulce beso en su mejilla al igual que en la de Jungwonie, bueno, aunque a él le hacía falta un trocito dejando ver parte de su pequeña dentadura.
―¿Todo está tranquilo JayJay?― Pregunté levantándome mientras les sonreía a ambos.
―Todo bien papi JiMin― Respondió sonriendo.
―Vamos hyung, papi Yoon te pondrá muy bonito como yo― Jungwon tomó la manito de Jay y ambos caminaron hasta la habitación donde se encontraba mi esposo.
Yoongi me agradeció con una hermosa sonrisa junto a un beso volador, haciendo que me cohibiera apartando mi mirada rápidamente. Yoongi comenzó a reír pero poco me importo que se burlará de mi reacción.
Porque era inevitable no volverme a enamorar de la misma persona cada día desde que nos conocimos.
―¡Rápido Jungwonie!
―¡Voy hyung!
―¡No corran se ensuciaran rápido!― Abrazé por la cintura a mi esposo mientrás suspiraba y se recargaba contra mi pecho. ―Estos niños tienen demasiada energía, ¿Cómo puedo cansarme siendo un muerto con éstos niños?
―Son niños amor, déjalos― Bese su mejilla dando suaves caricias en su abdomen cubierto.
―Son igual de torpes que tú.
―Pero mi torpeza te enamoró, ¿o no?
Giró entre mis brazos mientrás pasaba los de él sobre mi cuello, mientrás me miraba con aquellos hermosos ojos que, a pesar de que su dueño no posea vida, ellos brillaban como si todo el universo existiera dentro de ellos, esos hermosos ojos que me enamoraron desde el primer día.
―Todo de ti me enamoró Jiminnie― Dijo besando mis labios por un momento. ―Te amo y me encantas demasiado.
―¿Aunque haga tonterías al ponerme nervioso?― Pregunté de forma coqueta.
―Aunque desarmes a nuestros hijos cuando juegan soccer, con todo eso eres el amor de mi existencia Park JiMin.
―También te amo Yoongi― Besé sus labios mientras daba suaves caricias en su suave espalda.
Nuestros labios siguieron acariciándose con pereza, en un beso lento pero dulce, lleno de muchos sentimientos que hacían que ambos nos sintieramos cálidos a pesar que el calor había abandonado nuestros cuerpos desde hace mucho tiempo atrás.
―Papis, Jungwonie y yo... ¡Iugh! ¡¡Papis no hagan eso, es asqueroso!!
Nos separamos para ver a nuestro hijo, quien se cubría sus ojitos con ambas manos, con gracia. Yoongi me empujó completamente tímido por ser descubierto por nuestro hijo dándonos unos inocentes besos, cosa que pasa muy a menudo.
Suerte que no nos han pillado en otras situaciones...
―¡Minnie! Los niños están listos― Dijo mi dulce esposo con ambos niños tomados de la mano. ―¿Apoco no están hermosos?
―¿Están listos mis pequeños príncipes?― Dije tomando a Jungwonie en brazos mientras que Jay se aferraba a la mano de Yoonie muy emocionado.
Los cuatro comenzamos nuestro camino al mundo mortal para poder disfrutar de la única noche en el año que podemos convivir con nuestros familiares aún vivos.
Sin duda será una noche épica.
══════⊹⊱≼≽⊰⊹══════
―¡Auch! ¡Tengan más cuidado!
―Perdón tío Nam.
Sonreí al ver como los niños corrían de aquí a allá mientras rodaban al pobre Namjoon, que sólo era una cabeza sin poder defenderse de aquellos demonios imperactivos.
¿Cómo podían tener tanta energía?
―Buenas noches Yoongi.
Le dediqué una sonrisa a la castaña que se sentaba aún lado de mí. Jennie vestía un lindo trajes de bruja mientras que en su mano traía un cupcake con arañas de chocolate por todos lados.
Los mortales son muy creativos.
―Buenas noches Jennie― Sonreí.
―Sólo dime Jen― Rió avergonzada. ―Jennie es muy formal y me hace sentir más vieja.
―Esta bien― Reí junto con ella. ―Entonces tu dime Yoon.
―Como gustes Yoon― Sonrió ya más confiada. Sus ojos brillaban mientras veía a los niños jugar. ―¿Ha sido muy difícil?
―¿Criar niños?― Asintió a lo que suspiré. ―No mucho, a pesar que son niños inmortales son muy imperactivos y curiosos, como los niños mortales, con la única diferencia que no podré vivir ningúna otra etapa más que su niñez― Sonreí un poco melancólico.
―¿Y no son mal vistos?― Preguntó con cierto temor y timidez. Tomé su mano llena con un poco de crema batida y la apreté tratando de transmitirle confianza.
―Fue difícil al inicio, Jay hacía muchas preguntas del porque éramos dos hombres sus nuevos papis y no un papi y una mami como había tenido aquí― Mi vista se clavó en mi pequeño Jay quien se encontraba en el regazo de su padre mortal mientras hablaba con Jungwonie quien se encontraba en el regazo de mi esposo. ―Él lo entendió muy rápido, que el amor es lo único que importa a final de todo, no importa si es hombre o mujer. Jungwonie también lo entiende y hemos vivido los cuatro juntos como una familia normal, porque lo somos― Dije con una sonrisa melancólica. ―Y sobre si nos han visto mal por ser dos hombres, bueno, incluso en el mundo inmortal existen ese tipo de personas― Rasqué mi cuello mientras posaba mi mirada en la castaña a mi lado. ―Pero no es como que nos importará mucho, mientras nuestros hijos estén bien, todo esta perfecto para nosotros.
―Ya veo― Jennie suspiró terminando de un sólo bocado lo que hacía falta del cupcake.
―Lo harán bien― Dije mientras me acercaba un poco más. ―¿Puedo?
Asintió mientras se acomodaba mejor en aquella silla y dejaba a mi vista su vientre abultado, orgullosa de sus seis meses de embarazo. Pose mi mano sobre su vientre y comencé a dejar tímidas caricias a la pequeña vida que se estaba formando, sonreí al sentir una patadita bajo mi tacto.
―Parece que no le agrada mucho tu tacto helado― Dijo con burla. ―Solo deseo que este pequeño bodoque nazca y crezca sin nada que temer, quiero lo mejor para él o ella.
―¿Aún no saben que será?
―Nop― Rió. ―No quiere dejarse ver, Lisa y yo hemos apostado, si es niña llevará el Kim, y si es un varón, el Manoban.
Reí negando con la cabeza, sin duda ese par era muy creativo con respecto a tomar desiciones.
Que suerte que JiMin y yo estabamos de acuerdo en que nuestros hijos tengan el apellido Park.
―Espero que ya no me odies Yoon― Dijó con burla levantándose con un poco de dificultad. ―JiMin nunca fue mi tipo, yo bateo para el otro lado.
―Lo sé― Reí. ―No te preocupes, ya no eres una zorra― Le guiñé el ojo con burla.
―Me alegra escuchar eso, pero si me disculpas― Movió su mano en señal de despedida. ―Necesito a mi esposa ahorita y que nos de mimos a mi y al bodoque.
Me despedí con un movimiento de cabeza mirando como la castaña vestida de bruja embarazada caminaba entre los niños que corrían y jugaban por todo el patio decorado de acuerdo a la festividad hasta llegar donde la pelinegra quien sonrió automáticamente al verla llegar. Abrió sus brazos mientras besaba con ternura los labios de su esposa, frente a la dulce vista de mis suegros.
Al inicio habia sido muy dificil el que nos aceptaran, sobre todo porque Jiminnie habia decidido dejar su vida mortal para vivir junto a mi, pero ahora todo era distinto.
Mi familia y yo estabamos más que felices.
Sentí como unas manos se posaban en mi cintura, llevándolas hasta mi vientre, sonreí al sentir como un beso era depositado en mi cuello y me permití descansar mi espalda en el fuerte pecho de mi esposo.
La mejor sensación del mundo.
―Veo que ya no quieres arrancarle la cabeza a Jennie― Dijo con burla.
―Es una buena chica― Dije, descansando mi cabeza sobre su hombro.
―¿Ya no la odias solo porque tenía que casarme con ella?― Negué con la cabeza girando entre sus brazos.
―No la "odiaba" por eso― Admití con un poco de vergüenza. ―Tenia miedo de que me dejaras por ser un simple cadáver viviente y por... ser un hombre y no una hermosa mujer hermosa y llena de vida― Dije jugando con los cabellos de su nuca y mirando su pecho, no me sentía capaz de afrontar su mirada.
Unos dedos sobre mi mandíbula hicieron que elevará mi rostro, encontrándome con unos hermosos ojos que me miraban llenos de brillo, justo como la noche en la que estabamos, sentí como mi corazón, a pesar de estar inmóvil, se volvía a enamorar perdidamente del hombre frente a mi.
―Yo nunca busque enamorarme de una mujer hermosa y llena de vida, lo único que me importaba era que el amor de mi vida me correspondiera tanto como yo lo amará― Sonrió mientrás acariciaba mi mejilla. ―Y sin duda encontre algo mejor de lo que esperaba, te encontré a ti Min Yoongi, no solo te convertiste en mi esposo y amante, te convertiste en el amor de toda mi existencia, con el que pasaré toda mi eternidad, mi hermoso Yoonie, no sabes lo mucho que te amo.
Sonreí tanto que sentí como mis mejillas dolían un poco ante aquella acción, pero poco me importo. Tome el rostro de JiMin entre mis manos y lo acerqué hasta que nuestras narices se rozaban, con un poco de centímetros de distancia, sintiéndome ansioso.
―Te amo Park JiMin.
Junté nuestros labios, fue un beso tierno, donde transmitimos todos nuestros sentimientos, dándonos pequeñas y sutiles caricias hasta que un pequeño Jay llegaba corriendo siendo seguido por un pequeño Jungwon los cuales habían sido asustados por su tío Hoseok que se ocultaba entre las sombras.
No importa lo frío que mi cuerpo se sentía, el ver a mi familia hacía que mi interior se sintiera cálido, sabía que todo el sufrimiento que viví había válido la pena.
Sin duda alguna mi eternidad junto a Namjoon y nuestra pequeña y rara familia será toda una aventura.
Y con este especial finalizamos ❝Mi Novio es un... ¡Cadáver!❞, espero que les haya gustado esta adaptación y les agradesco el apoyo que le han dado, así como tambien agradesco a @Gathy26 por haberme permitido adaptarla.
Con esto dicho, me despido de ustedes, recuerden que lxs quierx muchx.
Abrazos y bendiciones para todos. ❤🥰💜🤗💖.
Bạn đang đọc truyện trên: Truyen247.Pro