En algún momento de la vida, toda persona termina enfrentándose con la famosa charla, en algunos casos te dirán cosas horribles, en algunas otras inventarán una historia sin sentido y muchas veces tratan de explicarte algo con algún ejemplo que no comprenden.

Max fue interceptada por Susie que a diferencia de otros días de mala cara en esta ocasión se veía un poco más seria, no enojada solo seria y precavida.

— Así que cuál es esa otra gran sorpresa — preguntó Max.

— ¿Sabes porqué te tocó el rol del malvado vampiro en el juego de ayer? — preguntó Susie.

— Ayer me dijiste que fue para compensar a Oscar — Max reclamo

— Bueno olvida lo que dije ayer, fue más bien una solicitud de un viejo amigo — Comentó Susie.

— ¿Y debo darle las gracias o algo así? — Cuestiono Max.

— No lo creo, el lo ve más como un regalo para el dia que se presente la oportunidad, veras los vampiros son algo pacientes — Comentó Susie pensativa — O quizá sabe sobre el futuro —

— Y entonces qué quiere — Máx tenía mucha más duda ahora.

— Has oído el cuento de las abejas y las flores — Susie dijo seria

— Creo que sí, pero eso se lo cuentan a los niños de preescolar — Comentó Max— Creo que ya se y demás sobre el tema.

— Excelente, me ahorras mucha explicación, ahora imagina la misma versión pero en un vampiro— Susie estaba ahora sonriendo maliciosamente.

— ¿Vampiro? que tiene que ver con un vampiro — Max empezó a tener curiosidad —

— Tu — Susie señaló a Max

El camino era mas y mas solitario, era una cueva al final de cuentas y la única forma de entrar era en canoa — Este es un lugar algo pintoresco y algo solo — Comento Max con cautela— Así que realmente soy un vampiro, digo no me siento como uno —

Antes que Susie pudiera contestar una tienda, mas en especifico una sala donde rentan películas.

Max no perdió el tiempo y entró entusiasmada buscando a un vampiro como en el videojuego pero para su mala sorpresa no encontró a nadie más que el encargado que tenía una cara tan apacible que transmitía calma, su vestimenta era más juvenil y relajada.

— Bienvenidos — Comentó con poco ánimo el encargado — tardó un par de años más de lo esperado — comentó el vampiro mirando a Max

Max miró incrédula por un momento — Eres un vampiro —

— Asi es chico — El vampiro sacó un pequeño manual empolvado titulado "tus primeros colmillos de leche" — Lo se el nombre es un viejo chiste—

Max aun estaba con esa cara de duda — No te ves como uno, ya sabes el traje elegante, la capa y esas cosas, al menos la cueva combina —

— Si todos los vampiros sufrimos del mismo problema, el tiempo pasa tan rápido que si no te adaptas te pierdes en un abismo anticuado — Explicó el vampiro — Además tratamos de cambiar esa imagen de antaño, es molesto que todo mundo te evita por miedo a perder su sangre o convertirse un esclavo vampiro—

Max estaba tan emocionada que no tenía palabras — Vamos tienes que contarme todo — la emoción se desbordó de golpe.

— Podré volar, me convertiré en neblina, espera dijiste esclavos? — Max quería saber.

— O no, eso de los esclavos ya no se hace, tratamos de cambiar nuestra imagen tu sabes amigo que las nenas te vean con respeto no que sean solo títeres, tu me entiendes — EL vampiro empezó a dar un repaso a su peinado.

— Escúchame chico, la primera regla de un joven vampiro ten amigos, muchos amigos ellos te protegerán un dia de lo peor que se le puede atravesar a un vampiro — El encargado sonreía en forma de burla —

— Los vampiros tienen enemigos, digo amenazas? — A Max le espantó un poco esta afirmación.

El encargado al ver la reacción de Max hablo en un tono serio y macabro — Así es y el peor enemigo de un poderoso e inmortal vampiro es.... —

— Ammm y que es .. — Max creyó que su vida ahora correría peligro de verdad.

— Son ellas, las vampiresas, son monstruos inmortales que solo se dedicaran a devorar tu alma por toda la eternidad — El encargado apenas podía aguantar y soltó una enorme risa.

— Ejem — Susie interrumpió — Max es una chica —

— mmmmm... ok esta fuera de mi liga, Susie ten el libro y enséñale todo lo que debe de saber — Nos vemos en unas semanas para explicarte más sobre ... haaa!! se burlaran de mí todo el año — El vampiro desapareció entre las sombras del lugar.

Susie estaba muerta de risa — Eso te pasa por engreído — Susie no dejaba de reír — Bien vamos de regreso al campamento—

— Pero y que paso con lo que debo de saber sobre ser vampiro — Max tenía dudas.

— Vea la ultima hoja — Ordeno Susie — La nota final habla de vampiros como tu, tendras tu despertar pero de forma pausada y gradual a diferencia de los demás—

— En serio, es asombroso— Max estaba emocionada.

— Solo una advertencia la sociedad de los vampiros es muy estigmatizada, así que mantén esto en un perfil bajo — Advirtió Susie — Notaste lo solitario de la entrada, es miedo y puede que algun dia tengan miedo de ti, por eso los vampiros han decidido cambiar para ofrecer una mejor vida a los nuevos como tu, no malgastes su esfuerzo —

— Entendido — Max ahora estaba tan emocionada que apenas podía contenerse, solo una duda surgió en su mente — Comentaste que tendré pequeños despertares, acaso fue por el videojuego maldito? —

— Ammm, eso, para nada era solo para compensar un poco a Oscar — Comento Susie

— Dime entonces quiero estar preparada para no echarlo a perder — Máx casi rogaba a Susie.

— Solo digamos que estuviste a nada de tener un esclavo a tu lado, son útiles pero son demasiado amorosos y empalagosos se vuelven tus fans y trataran hacer todo por ti — Susie miró con esa sonrisita burlona — Veo por tu expresión que ya entendiste—

— No te preocupes, ya lo tratamos y con suerte estará bien— Susie se masajeó las sienes — Solo trata de no morder a nadie más, queda claro —

— Quieres decir que puedo... a cualquiera, no puede ser digo — Max se preocupó de repente por esta información.

— Ammm no exactamente, ve a la página 57 cuando llegues a tu cabaña — Susie dejó en una de las canchas a Max y esta desapareció entre las nubes.

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En otra parte del campamento Alice estaba con Oscar escuchando con detalle su versión del incidente en cuestión.

— no puede ser — Pensó Alice — desde cuando se pusieron de moda cosas tan —

— Todo está bien Alice — Oscar comentó curioso por la expresión de Alice.

— Si es que no estoy tan acostumbrada — Alice suspiro — Oscar solo se cuidadoso, puede que sea solo un juego para algunos pero es mejor tener precaución y asi nadie sale lastimado.

— Entiendo — Oscar respondió con su habitual optimismo.

— Oscar solo un favor mas — Alice se ceco bastante a Oscar

— Enseñame solo un par de llaves, quiero sorprender a Susie la próxima vez — Alice le encantaban las nuevas posibilidades que ahora se le presentaban.

— bien solo recuerda es para defenderse no para molestar a alguien — Óscar trató de ser claro, pero al final sería en vano.

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Mientras tanto en la cabaña de Max en esa noche, la pobre estaba en un pequeño dilema emocional.

— Esto tiene que ser una de esas ridículas bromas de mal gusto de Susie — Max se quejaba, mientras hunde su cara en la almohada.

Tomó la guía y volvió a repasar el capítulo en cuestión.

"Vampiresa adolecente, Parejas"

A diferencia de la creencia popular, las jóvenes vampiros son extremadamente selectivas con sus posibles parejas, algunos casos pueden tardar años o siglos para decidirse.

Cuando una joven vampiro está interesada en algún posible cónyuge su instinto la orillara a hacer hasta lo imposible para obtener a su pareja.

En caso que no sea un vampiro, está tratará de unir su alma con la potencial pareja de ahí el miedo mal informado que acusa a los vampiros de esclavizar a las personas.

Por lo general se logra compartiendo su vampirismo siempre que la vampiresa lo decida a través de una mordida.

Nota: Morder a alguien por accidente no lo convertirá en vampiro, si la vampiresa no está interesada en el sujeto en cuestión.