Chào các bạn! Vì nhiều lý do từ nay Truyen2U chính thức đổi tên là Truyen247.Pro. Mong các bạn tiếp tục ủng hộ truy cập tên miền mới này nhé! Mãi yêu... ♥

Capítulo 12{Jace y Alec}


Actualizacion doble. El primer capitulo se titula humana.

Si estas aqui, vuelve atras

Capítulo 12

{Jace y Alec}

William

Es raro como el mundo sigue girando. Las persona siguen sus vidas, el sol sigue saliendo.

Y yo estoy varado. Veo a las personas pasar, al mundo girar, al sol salir y esconderse. Pero yo no me muevo.

La semana fue un asco. Papa no había vuelto en lo que restaba de la semana. Mi mama se la pasaba deprimida sin saber qué hacer. Por mi lado cumplí al pie de la letra con los entrenamientos.

Pero sigo desanimado ya que no conseguí trabajo en ningún lado. "Falta de experiencia."

¿Cómo carajo tendré experiencia si no me dan trabajo?

Trato de prestar atención a la clase de matemáticas. Noto que Yull no se apareció por la clase. Hoy vino al colegio, estuvo los primeros módulos. Pero ahora no entro a clases ¿Qué mosca le ha picado? ¿Se habrá sentido mal?

¿A mí que me importa lo que le pase a ella? No debería de preocuparme por ella. Aunque inevitablemente lo hago. Creo que algo no va bien con ella.

Después de nuestra conversación en mi auto. Sentí una necesidad enrome de abrazarla.

¿Me estaré volviendo loco?

Dicen que los genios son los primeros en perder la cordura. Sino miren a Tesla.

— Che — la voz de Javier. Me saca de mis pensamientos. Acerca su trasero de futbolista, al banco vacío de mi lado izquierdo — ¿Hoy vas a mi casa después del colegio?

Lo miro extrañado ¿Para qué iría a su casa?

— ¿Cómo para qué? — le pregunto. Él me pega en el brazo. Acto seguido toca mi bíceps con su mano y me mira abriendo los ojos sorprendido. ¿Qué le pasa al salame?

— ¿Desde cuando tienes más musculo en tus brazos que yo? — pregunta molesto. Haciendo fuerza con su brazo mostrando sus músculos. — definitivamente me equivoque de deporte. Ahora are natación. El futbol no te hace estar anchazo como vos — dice pegándome en la espalda

— Wow, ahora sé que definitivamente estás enamorado de mi — confirmo mirándolo con burla.

— ¿Quién te cree rubio teñido? — Pregunta con molestia fingida. Quiebra su muñeca.

— Un cazador de sobras súper atractivo — respondo.

Javier suelta un carcajada. Atrayendo la atención de algunos alumnos.

— Si tú eres Jace. Yo soy Alec — comenta.

Lo miro enarcando una ceja. — ¿Esperas un Magnus Bane?

— A esta altura lo que venga — suspira melancólico. — Na mentira, siempre para las hembras. Nunca para los machos.

Suelta una risa. ¿Cómo alguien puede decir tantas tonterías juntas? ¿Cómo es que su cerebro no exploto?

— Volviendo al tema... — comento. — ¿Para qué voy a tu casa después del colegio?

El rueda los ojos.

— Para que te pruebes mi ropa. — lo miro confundido. ¿Para qué quiero su ropa? — Idiota ¿Lo olvidaste? — creo que puse la peor cara de desconcierto. Porque frunció su ceño y me miro molesto. — Lo olvídate, maldita rata de laboratorio. La fiesta. — Lo sigo viendo con cara de ¿Qué demonios hablas? — La pachanga, la party... La fiesta que te pedí que vinieras conmigo.

Oh si cierto, me había olvidado de la dichosa fiesta. No tengo ganas de ir. Quiero tirarme en mi cama y pudrirme en mi autocompasión.

— Oh, pero no tengo ganas...

— Pero lo juraste por la garrita — se queja con la voz de un niño pequeño.

— Maldito tú y tu garrita — comento molesto.

— Vamos aún tiene efecto esas palabras en ti.

— Solo iré porque no quiero que le digas nada Keity.

Al ver que Javier no me respondía. Me doy vuelta para mirarlo y se estaba sacando un moco de su recta y puntiaguda nariz.

— ¡Que asqueroso!

Él me acerca su dedo con el moco en él. Me lo pone cerca de los labios. Reprimo una arcada.

— ¿Quieres? Sé que quieres un poco de moco — dice riendo.

Evito vomitar y le pego un manotazo. Vemos como el moco sale volando. Y aterriza sobre el pelo de una compañera.

Quiero vomitar. Enserio quiero vomitar.

Javier empieza a reírse como loco. Esta vez hasta la profesora se da vuelta.

— ¿Que están gracioso?-poniendo sus manos en jarras mirándonos de forma seria a ambos.

— Que me especializo en hacer catapulta de mocos — comento serio Javier.

La profesora palideció. Se disculpó con el curso. Calculo que se fue al baño a vomitar. Yo haría lo mismo.

Los chicos de atrás nuestro nos chocaron los cinco. Ya que les pareció gracioso y por los minutos libres que tenemos. Aquí es así si haces estupideces. Sos felicitado, en el curso nos llevamos todos bien. No da igual quien es raro o lo que sea. Excepto Duck y Zack. Que se creen los reyes del colegio pero basta que alguien les baje los humos para que se calmen . Hablando de ellos en ¿Dónde están? Al igual que Yull no han entrado este módulo al curso.

— Javi ¿Sabes algo de Zack y Duck?

El pelinegro me mira extrañado. Es raro que yo pregunte por ellos. Pero es mucha coincidencia que Yull no aparezca y ellos tampoco. ¿Estarán juntos?

—Esta mañana ene l entrenamiento. Se jactaban de haber comprado porro —comenta sin mucho interés. — Tal vez estén fumando.

El saco su celular de su bolsillo. Entro a Instragram

— ¿Quién se pone orgulloso de fumar por? — pregunto bajo.

— Ellos — murmura. Me enseña el celular. Duck subió una historia de tres manos con un tuvo blanco en ellas. Etiquetando a Zack y a Yull. — Al parecer Yull está con ellos.

Así que ella fuma marihuana.

Nunca lo creí de ella. Primero pensaba una cosa de ella. Luego hable con ella y me di cuenta de que es muy diferente. Y ahora todo lo que creí que pensaba de ella, está más confuso. Esa mujer va a hacer estallar mi cerebro.

Trabaja en una fundación para niños en la tarde. Pero fuma droga en las mañanas. No lo entiendo. ¿Qué necesidad tendría para hacerlo? ¿Llamar la atención? No creo que lo necesite, con solo entrar a un lugar. Captaba toda la atención que necesitaba.

¿Para olvidar algo? Algunos post sobre "No a las drogas". Explican que las personas se drogan para evadir cosas. ¿Ella evadirá algo? La verdad no tengo idea.

¿Puede una persona demostrar algo por fuera y ser distinta por dentro?

Ella por fuera demuestra seguridad, confianza. Una vida perfecta, con su cuerpo perfecto, sus ojos perfectos. Pero dentro de ella ¿Todo es perfecto?

Una vez me dijeron. Que una persona cambia demasiado por dos razones. Aprendiendo demasiado, o sufriendo lo suficiente.

Y no sé, cuál de las razones tiene que ver con ella. Pero eso no debería de ser de mi incumbencia.

***

— Esa remera, te marca los abdominales — comenta Javier. — Ratón con suerte.

— Estoy cansado de que me digas ratón — me queje. Me miro de vuelta en el espejo. La remera blanca lisa, se ajustaba bien a mi torso. Remarcado bien mis abdominales.

— Es que te queda bien ese apodo. Aparte serás un ratón que caza muchas gatas, eh — dice levantando sus cejas de forma perversa.

— No gracias, no me dicen Javier — me burlo.

— Claro, si te dijeran Javier. Cogerías veinticuatro siete. Pero te llamas Will y lo único que conseguirás veinticuatro siete, será ser perseguido por el Perla Negra.

Solté una carcajada. Es un idiota.

— Avecés me pregunto si tienes algo en tu cabeza — comento irónico.

— Y si ratón, tengo pelo.

— Y nada de cerebro — agrego riéndome. El me saca el dedo del medio y me tira con una zapatilla.

— Volviendo a lo importante. Creo que esta remera — dice señalando la remera que tengo puesta. — te queda mucho mejor que las otras. Porque es un poco suelta abajo y arriba se ajusta bien.

Muchos creen que los chicos no nos fijamos en la ropa. Que tomamos algo de nuestro ropero y nos vemos geniales así nomás. Pero no, esto se basa en horas de revisar remeras que nos hagan más anchos de espalda. Y sobre todo que marquen los músculos.

— Entonces iré así. — me miro al espejo. Por suerte mi pantalón color caqui. Combina con la remera.

— Ni en sueños — demanda. — Te prestare un jeans negro y unas zapatillas.

— ¿Pero qué tiene de malo?

A mí me parece que combina.

— Que así uno va aun bautismo. No a una fiesta, tenés que ir bien sexy matador.

Ruedos los ojos, pero no puedo suprimir una risa.

— Bueno, hoy iré como tú quieras. Pero me deberás una.

— Nop — dice como un niño pequeño. — Te devuelvo el favor, haciéndote divertir un rato. Amigo necesitas relajarte más.

— Me gusta relajarme. Viendo películas o leyendo libros. No todo el mundo se relaja de la misma forma.

El chasqueo la lengua.

— Oh gran señor de la sabiduría — grita mirando al cielo. — concédeme el honor de que mi amigo. Crea que las fiestas son divertidas. Hazle ver que el punchi punchi y mover el bote. Es algo asombroso. Amen.

— Ah, vos sos salame tiempo completo — confirme. — Pero, no por qué no me gusten. Estaré con cara de culo, vamos a disfrutar igual.

Javier se tira al suelo exageradamente.

— ¡Gracias espitirus del cielo! Gracias — exclama. Llevando sus manos hacia adelante.

Si lo confirmo, es un salame y un payaso. Todo el santo día. Pero no sé qué sería de mi vida, sin este loco insoportable.

— No exageres.

— Bueno me calmo mejor. — dice levantándose del suelo.

— ¿Vendrá tu novia la fiesta?

— Que no es mi novia. Tatiana es una cita recurrente.

— ¿Cómo una cita recurrente? — pregunto confundido. Pensé que ya eran novios.

— Pasamos el rato, nos besamos. Tenemos sexo, disfrutamos. Pero sin tener algo oficial. No como tú y Hello Kitty.

— Pero no es mejor tener algo serio. Digo, sabes que no va a estar con alguien más.

— Eso a ti no te funciono — dice en tono de burla. — Sé que no significo nada. Pero por las dudas. Es mejor prevenir que lamentar. Es decir prefiero salir con ella de vez en cuando y no enamorarme. A estar siempre con ella y enamorarme.

<< Lamento informarte, que él tiene razón. >> Siempre tan oportuna mi conciencia.

— Tienes razón. Pero yo sé que no lo voy a volver a hacer. Quiero a Keity.

— Te creo hermano. Solo que yo prefiero evitarme tantos dramas.

Él se tira en la cama de forma teatral. Por mi lado me quito la remera, todavía falta tiempo para la fiesta. Me pongo mi camisa celeste y el suéter arriba. Hago lo mismo que Javier.

Ambos mirábamos el techo de su pieza.

— No habías terminado de explicarme. ¿Yull es la sobra del tu entrenador?

— Si, fue una sorpresa para ambos.

— Y claro, todos te tienen como el chico que estudia nomas. Quisiera saber que pensó cuanto te vio.

Sus palabras me dejan pensando. ¿Qué habrá pensado ella? Aunque me dejo en claro que no le había desagrado verme casi desnudo.

— Yo también — confesé. — Aunque dijo algo de que me veía bien así.

— Claro. Es que dejas mucho a la imaginación con la ropa que usas — se burla. — No me mal intérpretes, eres el ratón más sofisticado que eh visto.

— Pero a mí me gusta usar camisas.

— No digo que no las uses — se queja rodando los ojos. — Digo podes darle más estilo. Usar jean negros o de colores cálidos. Como el que tienes puesto. Si fuera un jean y tuvieras la camisa fuera del pantalón. Te verías mejor.

— Tomare tu consejo.

— Hazlo, la verdad puedes verte formal y con estilo. No hace falta que uses los pantalones del abuelo.

— Si no fueras mi amigo. Y a te hubiera golpeado.

— Bien vamos a jugar a la play — ordena después de un rato.

Pusimos un juego de futbol. Nos pasamos lo que quedaba de la tarde jugando.





Javier y Will si que tienen grand el ego. Piensan que son parecidos.

Nos vemos pronto. Espero su voto y algun comentario.

Bạn đang đọc truyện trên: Truyen247.Pro