Después de haber asistido al parque a petición de Ripov no tocaron el tema sobre los hermanos y eso. Simplemente pasaron la tarde como dos amigos, incluso conoció mejor a aquella rubia que se hacía llamar Demurra (o a veces Ternura) Una chica demasiado femenina pero bien que podía ser ruda, siendo esta la causa de llevarse bien con Ripov.
A partir de esa tarde los tres pasaban tiempo juntos y solían tener buenos encuentros.
Pero prometió no decir ni una palabra de esto con Hater, así que nadie sabía a dónde iba éste chico la mayor parte del tiempo después de trabajar.
Una tarde que tenía libre bajó de su cuarto y vio que Sylvia y Wander hablando, aunque ella de repente soltaba risas, inclusive carcajadas.
-¿Qué pasa?-preguntó
-Wander me está mostrando fotografías tuyas de cuando eras más joven-contestó la chica sin quitar la mirada de las dichosas fotos
-Ah... ¡Espera! ¡¿Qué?!-se acercó y vio la foto. Era una vez que había salido en una obra escolar de conejo, a los diez años-¡Wander!-
-¡Un conejito!-eso la hizo reír mucho más
-¡No te burles!-
-Es que... Oh Dios, incluso te pusieron colita esponjada-
-¡Ya basta! Yo no quería aparecer en esa boba obra-
-Te veías muy feliz-
-Pues no lo estaba-
-Ya, ya. Debo admitir que eras y eres muy tierno chico-
-¿Tierno?-
-Sí-fue lo último que dijo para ir a su respectivo cuarto
Peepers observó las escaleras, el camino por el que ella se había ido. Sentía como su temperatura se había elevado. No estaba sonrojado, pero se sentía así. Volteo a ver a su hermano.
-Ya entiendo que te pasa...-
-¡No me pasa nada! ¡Debo ir al baño!-y se fue
-Oh Peepers...la amas-susurró Wander para si mismo
Mientras que Peepers solo se encerró en el baño para que Wander se creyera eso.
-¿Pero qué rayos me pasó allá? ¿Por qué me sentí así?-no sabía, no lograba entenderse
Al salir fue a su cuarto y dejó la puerta entre abierta. Se sentó en una silla frente a un pequeño escritorio y revisó que nadie lo viera. Abrió el cajón y sacó unas figuritas hechas a mano junto con unas acuarelas y pinceles. Era su hobbie, él hacía las figuras y luego las pintaba. Había una que tenía forma de Wander y otra de él. Estaba muy concentrado hasta que escuchó que abrían la puerta.
-¿Qué haces?-preguntó Hater detrás de él
-¡Nada!-contestó nervioso intentando ocultar sus figuritas
-¿Qué estás ocultando?-
-¡¿Ocultando?! ¡No oculto nada!-
-¡Dejame ver!-
-¡No!-
Hater intentó quitarle lo que escondía debajo de su chaqueta pero Peepers era demasiado terco.
Luego Sylvia pasó y vio como ambos peleaban, por así decirlo, y los observó por un rato.
-No voy a preguntar qué rayos están haciendo-dijo y se fue
Después de un rato Hater por fin le quitó las figuras, las miró un rato, un tanto incrédulo.
-Vas a burlarte ¿No es cierto?-fue lo único que pudo salir de la boca de Peepers
-No-
-¿Ah?-
-Yo también hago figuritas-comentó emocionado
-¿En serio?-
-Claro. Yo ya acabé las mías-
-¿Podrías mostrarmelas un día?-
-Por supuesto. ¿Quieres que te ayude con las tuyas?-
-Eh..... Si por favor-
Al fin ambos habían encontrado algo en común, era agradable no esconder lo que les gustaba de vez en cuando.
-Peepers ¿Cómo soportas a Wander?-
-En un principio no lo soportaba. Pero bueno, al final resulto ser mi único amigo-
-Y... ¿Exactamente quién es el adoptado?-
-Ninguno-
-¿Qué?-
-Nosotros nunca salimos de ese orfanato. Hasta que cumplimos la mayoría de edad, para ese entonces ambos ya éramos inseparables. Es por eso que lo considero mi hermano, es mi única familia-
-Ya veo-
-Yo pasé toda mi vida encerrado en aquel orfanato, no conocí a mis padres ni nada. Wander llegó cuando yo tenía doce y él once, así que no sé de dónde consigue las fotografías que le muestra a todo mundo-
-Oh la del conejito-
-Sí, la del conejito-
-Es algo interesante su historia-
-Hater-
-¿Sí?-
-¿Tienes hermanos?-
-Sí. Una hermana-
-¿Cómo se llama?-
-¿Por qué te interesa tanto eso?-
-Curiosidad supongo. Si no quieres hablar de ello lo entiendo-
-Bueno. Debo irme chico. Debo admitir que eres agradable-y se fue
En eso Peepers fue en busca de Wander, necesitaba hablar con él y ya.
-¡Wander!-
-¿Qué pasa Peeps?-
-Es que... Descubrí que Hater tiene una hermana. La conozco, nos hemos visto todas las tardes-
-Con que allí es a donde ibas. Andas de enamorado-
-Wander, ella tiene 17 años-
-Era broma. Además sé que tú quieres con Sylvia-
-¿Qué? ¡No!-
-Era otra broma. En fin, ¿qué tiene lo de la hermana?-
-Debemos saber porque ninguno de los dos habla sobre el otro, y si se puede, ayudarlos-
-Cuenta conmigo en eso hermano-
-Bien. Yo me ocupo de ella y tú de él-