‐¿Por qué comí eso?- Pensó la chica mirando el techo de la habitación de urgencias del hospital. Ella se encontraba en una camilla recostada con un catéter intravenoso en su antebrazo izquierdo el cual mantenía estirado para que esté funcionará y no se saliera.

-¿Qué es eso?- Al escuchar otra voz en la habitación volteó hacía su izquierda y logró ver dos sombras atreves de la cortina verde claro que los separaba.

-Un catéter. -Respondió otra voz, enseguida supo eran dos chicos, seguramente hermanos o algo así.

-¡Wow! ¿Y está pegado? ¿Y si te lo quitas?- Preguntó el de voz más aguda con inocencia.

-Me muero.  -Respondió el otro con sarcasmo logrando que la peli negra sonreirá levemente con su respuesta.

-¡¿De verdad?!-

-No.

Ante la respuesta una leve risa se escapó de los labios de la muchacha de ojos canela pero con el movimiento de la risa en su abdomen le dolió su estómago el cual estaba delicado, se quejó mentalmente del dolor, soltó un suspiro para relajar sus músculos.

Unos segundos después un doctor junto con una enfermera entraron a la habitación, la enfermera fue directamente a la cortina y la corrió logrando que la de cabello negro viera a quien pertenecían aquellas voces.

Lo primero vio fueron unos ojos azules como el cielo y unas pecas en las mejillas en una piel pálida, lo siguiente que vio fue un cabello rubio algo rizado sujetado en una cola de caballo baja.

Con el chico fue algo similar, solo que no había notado la presencia de la chica hasta que corrieron la cortina dejando ver a una muchacha de piel blanca casi como porcelana, ojos canela y largo cabello negro el cual noto tenia la parte interna teñida de rojo.

-Bueno, como ustedes dos se enfermaron de algo similar los revisaré. -Habló el médico mientras se dirigió donde la chica para como iba su hidratación y estómago. -¿Cómo te sientes? -Preguntó tranquilo.

-¿Eh? Ah, algo mejor, pero aún me duele el estómago y me siento débil. -Respondió ella algo tímida mientras el doctor tocaba su estomago para poder verificar. -Auch. -Se quejó.

-Sí, es normal, después de todo lo que vomitaste bastante, logrando que te deshidrataras mucho. -Respondió el doctor quitando su mano, se fijo que el suero ya casi se acababa y la chica no estaba del todo hidratada. -Te pondremos otro suero, todavía no estás bien hidratada. -Ella simplemente asintió y volvió a acomodarse en la camilla.

El doctor fue a revisar al chico que estaba al su lado izquierdo, ella suspiro y cerró sus ojos para poder relajarse, le gustaría tener a alguno de sus hermanos con ella para poder no aburrirse pero su papá estaba afuera con los trámites de rellenar los papeles y esperando que el doctor lo dejara pasar.

-¿Qué le pasó? -Preguntó una voz algo aguda, ella enseguida abrió sus ojos y miró al chico, el cual tenía una cabellera algo larga pelirroja y ojos verdes.

-Comí algo que me cayó mal. -Le respondió con una leve sonrisa. Con su repentina respuesta logró que el chico pelirrojo pegara un leve brincó por el susto ya que no esperaba que ella le contestará.

-¿De verdad? -Preguntó algo avergonzado y tímido.

-Una intoxicación alimenticia ¿No? -Hablo el rubio a lo que ella asintió como respuesta.

-¿Y... Y tú?- Le preguntó nerviosa, no estaba acostumbrada a socializar. -¿Qué te pasó? -El chico la miro de reojo, el doctor revisaba su estomago, lo mismo que hizo con ella.

-Tambien comí algo que me hizo mal. -Respondió calmado.

-¿Intoxicación?- Preguntó ella y el rubio como repuesta negó con su cabeza. -¿Alergia? -Volvió a preguntar y esta vez el asintió.

La enfermera llego con dos bolsas nuevas de suero, uno para cambiar el de la chica, mientras tanto que el doctor hablaba con el de ojos azules el cual simplemente respondió tranquilo y con algo de desinterés.

-Listo, ya esta. ¿Sentiste algo?- Pregunto la mujer.

-¿Mm?- La de cabello negro miro a la enfermera y después su brazo con el catéter. -No, no sentí nada. -Respondió con una pequeña sonrisa.

-Que bueno. -Le dijo la enfermera con una sonrisa para después ir donde el chico y hacer lo mismo; cambiar el suero.

-Bien, parece ya no tener mas dolores fuertes o señales de volver a vomitar así que solamente los volveremos a hidratar y al terminar aquella bolsa, la enfermera volverá para retirarles el catéter y podrán irse. -Hablo el doctor parado frente a los dos adolescentes y un pre-adolescente.

-Gracias Doctor. -Le dijo la chica con una sonrisa a lo que el hombre asintió y junto a la enfermera se retiraron.

-Emmm... ¿Cómo te llamas?- Preguntó el pelirrojo curioso mirando a la muchacha.

-Lilith, me llamo Lilith. - Respondió. -¿Y tú?

-Soy Heavy. -Dijo con una sonrisa, Lilith levanto su mirada al rubio.

-¿Y tú, cual es tú nombre?- Pregunto Lilith.

-Dee.

-Es un gusto, Dee y Heavy. - Les dio una leve sonrisa, en eso bostezo debido a que eran las 8 de la mañana y Lilith estaba ahí desde las 5 de la madrugada siendo atendida. -¿Desde que hora están aquí?- Les pregunto mientas que con su mano libre tallaba su ojo con sueño.

-Desde las 4 de la mañana. -Respondió el rubio.

-¿Y tú?- Le pregunto el pelirrojo.

-Desde las 5.

Dee la miro sorprendido, el era bueno para sentir las presencias de las personas pero en ningún momento sintió la de la chica, ni siquiera cuando llego o la atendieron.

-¿Ocurre algo? -Le pregunto Lilith extrañada por la mirada que el de ojos azules le dio tan de repente.

-Eh, no, nada. -Dijo este desviando su mirada, mientas tanto Heavy miraba a su hermano y a la chica sin entender lo que ocurría.

-¿Cuando vendrán mamá y papá?- Pensó Dee cerrando los ojos para poder relajarse un rato pero esto se vio interrumpido por un quejido, enseguida abrió sus ojos y dirigió su mirada hacia donde estaba la chica de ojos canela, la cual se estaba estirando como podía sin mover su brazo izquierdo.

-¿Papá todavía no esta aquí?- Murmuró mirando la puerta como si en algún momento alguien la abriera.

-¿Tú papá te trago?- La chica se sobresalto levemente al oír la voz del rubio de la nada y volteo a mirarlo, estaba algo sorprendida de verlo aún despierto.

-Eh, si, ¿No dormiste?- Él como respuesta negó. -Eso lo encuentro increíble, yo de vez en cuando tengo alguno que otro episodio de insomnio pero aun así duermo mucho o quizás no tanto, no lo sé, soy algo rara. 

-¿Rara?- Le preguntó curioso por aquella definición que se dio a ella misma.

-Si, muchas personas se dicen que son "únicas" o "especiales" y no me gusta, así que prefiero marcar alguna diferencia y decir que soy, bueno, rara. -Le contesto con una sonrisa nerviosa, Dee logro notar que ahora tenia algo de energía recargada gracias al suero y la pequeña siesta que se dio.

-No esta mal, tú respuesta. -Dijo mientras sus labios formaban una media sonrisa cosa que a la chica le pareció algo atractivo en el y que sus mejillas se tiñeran de un leve color rosa.

-¿Tú crees?

-Si.

Así comenzaron a tener un poco más de confianza logrando hablar de diversos temas y poder conocerse mejor, hasta se dijeron que cuando les quitaran el suero intercambiaran números para así no perder el contacto y poder seguir hablando, bueno, eso fue idea de Lilith la cual le pregunto algo nerviosa por la respuesta que este le daría y para su sorpresa fue un "Esta bien".

Continuara...

Holaaaaaaaaaaaaa

Esta en mi primera historia de Metal Family, la verdad estoy nerviosa por hacerla y a la vez emocionada pero mas que nada nerviosa ya que no se como va a resultar x"D

Pero espero que les guste uwu

bueno, nos vemos en los siguientes capitulos.

Los quiero <3

『Dan-Dan』