Se despertó en un lugar extraño, diferente a lo que conocía o lo que le gustaba, todo era rosa, rojo y vino tinto, habría flores hermosas y una gran cama con forma de corazón, era lo más cursi que habría visto en su vida, incluso habría al su alrededor pétalos de rosa, velas y la noche estaba en su dominio total.

—Soy yo, o estoy en otro de esos sueños donde estoy con Star en un momento romántico—Noto que el lugar olía muy bien, se sentía un aire fresco y pareciera estar un agradable sueño—Porque si lo es espero no despertarme.

Se sentó en la cama por un momento y cuando noto lo cómoda, suave y esponjosa que estaba se hecho de una en ella, cerrando los ojos para así relajarse y sentir todo el ambiente al su alrededor. Pensó en lo bello que seria que ella estuviera allí con ella, y que esto no es un posible sueño, y al pensar en eso se pellizco, no sintió nada, era otro sueño.

—Raven—Esa voz era muy conocida—Raven—Abrió los ojos al reconocer la voz, y hay estaba la joven acercándose volando a la luz de la luna hacia ella. Sus ojos no podrían creer lo que sus ojos veían, pues los sueños tienden a exagerar las cosas.

—Star, ¿Qué llevas puesto? —Llevaba un disfraz muy revelador, la cual era de rayas, con una cola gatuna y orejas felinas, no sabría, pero su rostro ya estaba rojo como la de un tomate, paralizada por la belleza y la sensualidad de la chica que no pudo notar que la estaba muy cerca de ella. —¿Qué...que pasa?

—¿Quiere saber lo que pasa, o lo que puede pasar? —Eso la puso más nerviosa, tensa e incluso sintió miedo en su interior—Esta gatita quiere jugar contigo, y vamos a jugar de una forma sucia.

Empezó a frotar sus labios en el cuello de Raven, con pequeños besos que se intensificaba más y más, sus manos empezaron a explorar cada centímetro de su cuerpo, la excitación y el calor se empezaban a sentir, dejándola con una emoción que antes nunca habría sentido.

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—¿crees que se podrá bien?

Constantine vio de nuevo a la chica y con tal solo ver la cara de boba que tenía y los movimientos que hacia supo que tenía un sueño bastante agradable—Si, pero sería mejor deja que la dejes así.

—Seguro?, es que se golpeó fuerte y...

—¡No! —La detuvo antes de que hiciera algo—Es mejor no despertarla, créeme, nadie quiere que la despierten mientras sueña con... es mejor no despertarla sí.

—Bien—Se preocupaba mucho por ella, no por ser su compañera, sino porque sentía algo muy grande por ella, lo cual oculto por mucho tiempo

—Y bien ¿Para qué me busca una hibrido y una extraterrestre? —Se sentó en su escritorio encendiendo su cigarrillo—y espero que no sea para quitar la mitad demoniaca que tiene dentro porque eso no se puede.

—No, Raven dijo que tú nos podrá ayudar con algo...tal vez con algo de información...—Con un simple movimiento le respondió que continuara, a lo que la joven se sentó en una silla cercana y continuo—Raven no es alguien de lo que le preocupa mucho sobra algo, y menos que le de miedo, pero hace unos días fuimos atacados por una bestia, negra y ferros, mis amigos salieron heridos en ese enfrentamiento, pero Raven fue...ella cayo inconsciente y al desperté dijo que algo sobre su abuelo, me dijo que se hacía llamar lucifer.

Al oír ese nombre, el exorcista tocio como si el nombre lo hubiera ahogado, aunque podría ser su cáncer pulmonar que desde hacía tiempo le molestaba. Se levantó y temo un libro, un gran libro marrón y lo puso en una mesa, la chica por curiosa se levantó y vio el libro a lado de él.

—Dime, ¿cómo crees que se creó este mundo? No me digas, todos están equivocado, pues todas las fe, creencias y religiones que hay en el mundo son mentiras y verdaderas al mismo tiempo. Pero hay algo que mucho coinciden, hay un ser que le gusta ser malo y bueno a la vez, pero que por egocentrismo y una creencia superior al de los mortales cayo en desgracia total, volviéndolo el castigador resentido de los que llamamos pecadores, malas personas y simplemente lo que nacieron para estar en el infierno.

—Lucifer...

—Exacto, el prefirió rebelase ante que vernos como algo más. lucho contra todo lo superior, tanto maligno como divino y perdió, por lo que fue encerrado en el noveno circulo, donde hay un frió total. Si ese hijo de su madre sale hará su universo su perra y a todo o sus juguetes o simplemente nos torturara por placer.... Esa bestia que nombras—Abrió de golpe el libro, revelando una página con otras figuras humanoides negras con letras desconocidas—Pertenece a tres demonios que siempre han buscado una manera de libéralo, representa en sienta medida a los seres vivos en los tiempos, el gran lobo, el nuestro pasado primitivo, el joven cámbiate, el presente desconocido, y la dama ciega, el existente futuro, todo estos solo quieren una cosa y es liberarlo.

—¿y cómo evitamos eso?

—Pues, obviamente con mi ayuda por que como nunca se le ha detenido no se sabe, creo que necesitare unas co....

—ah! Ahh! —John se tapó la cara al oír un gemido, al voltearse vio a la joven durmiente con cara de placer, roja, incluso tenía la lengua afuera.

—Esto no me puede esta pasado... —Y no solo el pasaba pena, pues la chica de pelo rojo también tenía la cara tapada, pero con una risita acompañada. —Espero que tu noviecita termine de una vez para volver a lo serio.

—Ah!!!!!

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—¡Clark¡—Grito Batman al ver a su compañero caer del edificio más alto, herido e inconsciente. No pudo salvarlo, no pudo hacer nada, pues su enemigo, que tenía la apariencia de un simple niño lo venció de tan solo un golpe—¿Crees que me das miedo, pero hasta yo he podido vencerlo? —Lanzo tres batarang que explotaron con solo tocarlo, con un movimiento rápido se escabullo dentro del humo y le lanzo un duro golpe, pero el niño ni se inmutó.

—Veo tus miedos, veo tu alma Bruce y tú no eres nada más que un simple mortal que busca venganza por tus padres. —De repente el chico cambio de forma, lo cual lleno de temor al hombre murciélago de temor total, la figura de su padre estaba al frente de el—todos ustedes son y siempre han sido fácilmente manipulable, nada en este mundo es superior a nosotros—Con un golpe en el estómago lo inmovilizo, la sangre salía de su boca al igual que una expresión de sorpresa y de dolor total. —Ahora, dime ¿dónde está la hija de Zeus y de Hipólita? 0 ¿Prefiere ver como convierto a tu amada cuidad sea consumida por el terror y el miedo?