Elizabeth

Es increíble como de un día a otro las cosas pueden cambiar, un dia te encuentras en un templo y al otro en un lugar totalmente distinto. Ahora que lo pienso el templo no era un lugar tan malo, a veces parecía un internado u hospital psiquiatrico ya que estaba aislado de la cuidad o algun pueblo, además los muros que lo rodeaban eran de rocas muy grandes y contenían algunos grabados y runas en ellas. La seguridad era casi nula, existían estatuas de piedra pero en toda mi estadía en aquel lugar nunca las vi hacer algo asi que supongo que es decoración, la persona que se encargaba de la mayoría de cosas era Caroline, ella era la encargada del lugar. El templo también se parecía a una escuela o algo parecido, ya que nos enseñaban idiomas, geografía, historia, física, matemáticas y otras materias poco comunes como artes marciales o defensa personal, y por supuesto saber controlarnos y mantener el control. Caroline era nuestra maestra en aquel lugar, gracias a ella y mi hermano pude sentir el cariño de una familia.
Mi hermano también estuvo en el templo conmigo, ya que eramos muy inestables y necesitábamos de protección. Gracias a mi entrenamiento en el templo he podido descubrir el potencial de mi loba Sasha y he logrado controlarla. Sasha posiblemente sea un alfa ya que es mas grande que los demás lobos y solo los alfas pueden manejar algun elemento y en su caso  me ayuda manejar el aire y el fuego. Mi hermano también puede manejar los elementos, sus elementos son la tierra y el aire; es difícil tener a dos alfas cuando solo uno sera el alfa de la manada al final.

Volviendo a la realidad, nos encontramos viajando en la moto de mi hermano ya que era lo único que teníamos al alcance; mi padre nos ha dicho que cuando salgamos del templo teníamos que ir a la casa de verano, ya que él no quiere que los reyes del Norte se enteren de nuestra llegada porque querrán hacer una fiesta o algo por el estilo, pero es peligroso ya que hacerle una fiesta a la persona cuyos antepasados te robaron y robaste territorio, es algo complicado. Además de no tener una buena relación con ellos desde la muerte de mi madre, ya que la acusaron de ayudar a las brujas para tener parte del territorio central.

Después de horas de viaje en la moto ya no sentía mis piernas y me está empezando a dará hambre y al parecer no hay ningún lugar donde comer.

— Cris tengo hambre, ya quiero comer. Si seguimos asi puede que me desmaye. —lo dije, ya que estaba cansada y con hambre por el viaje.

—Tranquila nos falta 30 minutos de viaje para llegar a la casa de verano.— fue la respuesta de Cris, el cual estaba muy tranquilo.

Después de más de 30 minutos llegamos a nuestro destino, nos encontramos en la entrada de la casa vacacional de mi padre. Por fuera se veia un potton grande, no se podía ver nada de la casa o lo que habia detras de esa puerta de metal. Antes de bajar de la moto los dos verificamos que solo nos encontrábamos los dos y las siete personas que papá comento que estarían en la casa, despues de verificar que todo estaba bien bajamos la guardia ya que antes de salir del templo y hasta que no ingresemos en la casa no pensábamos volver a la normalidad.

Cuando entramos a la hermosísima casa nos topamos con una de las sirvientas llamada Linda ella dijo que pronto avisaría nuestro padre que ya habíamos llegado así que nos fuimos a dar un baño y cambiarnos para por fin poder comer,que emoción iba a comer.

Cuando ya terminamos de comer se dignó en aparecer nuestro padre y la verdad no sabíamos como saludarlo ya que no nos veíamos hace muchísimo tiempo, hicimos lo más lógico por el momento le dimos una sonrisa, platicamos un rato con él sobre la escuela en la cual estudiaríamos y como nos presentaría ante todos además de que en una semana entrerrianos al instituto Luna Blanca para seguir con nuestros estudios, pero esta vez como reina de las manadas del Sur y mi hermano como beta de la manada del Sur.
Esto sería muy emocionante ya que nadie había visto a los principes del Sur en su vida.